Diferencias de clase

Pues sí, por eso tampoco podemos echarles a los demonios por hacer uso de aquellas oportunidades que la vida les puede brindar. Tengo claro que si yo fuese de clase alta, pues haría lo mismo y ni me plantearía si a mí me ha costado menos que a los demás, porque también está la cosa de que ellos y ellas van a determinados colegios en los que se juntan con gente de su misma clase social, entonces tampoco están expuestos/as a la realidad de la clase media. Por suerte, conozco gente con mucha pasta que no es así, pero tampoco es lo común, porque el común de los mortales no es demasiado profundo y no se pone a filosofar en general.
Luego están los que encima son imbéciles y se piensan que los de clase media no tienen lo que ellos/as porque "no se esfuerzan". Esos son para echarles de comer aparte y sí soy de echar pestes de ellos/as.

Es que de esos hay muchos, muchísimos, los que opinan que el que no ha triunfado en la vida es porque no se ha esforzado lo suficiente, y entiéndase por triunfar por ganar mucho dinero y tener una profesión de esas consideradas prestigiosas.

No sé, yo seré una envidiosa inadaptada social, pero entiendo perfectamente que alguien en un momento dado se sienta “mal” viendo que no va tenido las oportunidades que otros sí han tenido. No es que sea peor ni mejor, pero es obvio que no es lo mismo aprender un idioma de adulto pagándote tu la estancia en un país extranjero trabajando de limpiadora de habitaciones en un hotel, mientras otros hablan tres idiomas porque con diez años los enviaban los veranos a Irlanda.
 
La comprensión lectora va bien. ¿Los hijos de funcionarios cuándo han sido considerados ricos? Bueno, si tu padre es juez... Ser funcionario tiene sus ventajas, pero normalmente no es el pelotazo económico que pegas. No se las condiciones exactas de la prima pero no todo el que quiere trabajar puede o encuentra trabajo.
De toda la vida los funcionarios incluso los de ayuntamiento han tenido muy buena vida, no ricos, pero si buena vida, pero cuando la crisis estalló se fue todo a la mierda. Yo vengo de familias pobres y que encadenando hipotecas mis padres han conseguido una buena posicion economica, pero claro, el esfuerzo no existe en el capitalismo, es todo mentira.
 
De toda la vida los funcionarios incluso los de ayuntamiento han tenido muy buena vida, no ricos, pero si buena vida, pero cuando la crisis estalló se fue todo a la mierda. Yo vengo de familias pobres y que encadenando hipotecas mis padres han conseguido una buena posicion economica, pero claro, el esfuerzo no existe en el capitalismo, es todo mentira.
Nadie ha negado que exista el esfuerzo. Lo que digo es que el esfuerzo en el capitalismo no es garantía de nada.

Yo provengo de clase media-baja y me crié en un barrio obrero. Yo fui una empollona monumental y me he matado a trabajar toda la vida, me ha ido bien, pero lo habría conseguido igual con infinito menos esfuerzo si hubiera venido de otra familia y, además, mucha otra gente que viene de dónde yo también lo ha hecho y han seguido donde estaban. Las excepciones de ascensor social no somos la norma, somos la excepción.
 
Nadie ha negado que exista el esfuerzo. Lo que digo es que el esfuerzo en el capitalismo no es garantía de nada.

Yo provengo de clase media-baja y me crié en un barrio obrero. Yo fui una empollona monumental y me he matado a trabajar toda la vida, me ha ido bien, pero lo habría conseguido igual con infinito menos esfuerzo si hubiera venido de otra familia y, además, mucha otra gente que viene de dónde yo también lo ha hecho y han seguido donde estaban. Las excepciones de ascensor social no somos la norma, somos la excepción.
Me siento muy identificada contigo
 
De toda la vida los funcionarios incluso los de ayuntamiento han tenido muy buena vida, no ricos, pero si buena vida, pero cuando la crisis estalló se fue todo a la mierda. Yo vengo de familias pobres y que encadenando hipotecas mis padres han conseguido una buena posicion economica, pero claro, el esfuerzo no existe en el capitalismo, es todo mentira.
Te leo y aquí veo que se olvida mucho,o se quiere olvidar que, independientemente de las crisis periódicas BREVES, los 60-80 fueron un tiempo en el que era muy fácil prosperar, las exigencias de formación mínimas, los trabajos para toda la vida y la vivienda en general, muy barata. Si, ya se, hipotecas al 11,al 15 %... En montantes de un millón,dos o tres, no los treinta millones que es un piso cutre de hoy en día. Que mis suegros pagaron a principios de los 80 x, cuatro chavos por un pisazo de los que ya no se construyen en tamaño y calidades, nosotros 25x, pero creo que los sueldos no se han multiplicado x25 desde el 83, y los impuestos han subido maravillosamente, en cambio.
Las historiadoras como @Vieya pueden hacer una preciosa lista de causas y consecuencias, pero fue caer el muro y la cosa empezar a ponerse fea en los 90 en cuanto a derechos y sueldos miserables al dejar de ajustarse a inflación.
Los que entraron a trabajar a partir del 2000, y sobre todo post 2008 se (nos) han (hemos) encontrado un percal alucinante. El ascensor social está roto rotísimo , el esfuerzo existe, que se vean los resultados es otra cosa
 
Te leo y aquí veo que se olvida mucho,o se quiere olvidar que, independientemente de las crisis periódicas BREVES, los 60-80 fueron un tiempo en el que era muy fácil prosperar, las exigencias de formación mínimas, los trabajos para toda la vida y la vivienda en general, muy barata. Si, ya se, hipotecas al 11,al 15 %... En montantes de un millón,dos o tres, no los treinta millones que es un piso cutre de hoy en día. Que mis suegros pagaron a principios de los 80 x, cuatro chavos por un pisazo de los que ya no se construyen en tamaño y calidades, nosotros 25x, pero creo que los sueldos no se han multiplicado x25 desde el 83, y los impuestos han subido maravillosamente, en cambio.
Las historiadoras como @Vieya pueden hacer una preciosa lista de causas y consecuencias, pero fue caer el muro y la cosa empezar a ponerse fea en los 90 en cuanto a derechos y sueldos miserables al dejar de ajustarse a inflación.
Si te suben el sueldo un 3,7% y la inflación un 5,7%, no hay otra forma, pierdes poder adquisitivo. Otra cosa que pasaba en los 80 y se heredó el problema es que no se puede tener en una fábrica a un pavo pulsando un botón por 2500 pavos al mes. Y eso multiplicarlos por 10.000 con trabajadores+ profesionales+ingenieros+puestos de mando+etc. Porque eso se traduce en pensiones máximas, especiales=no hay quien lo pague. Eso se aplica a empresas estatales y demás rollos.
Y ahora nos enfrentamos a una redifinición de clase y un país que no se sostiene porque no se gana como para cubrir ni siquiera el gasto estatal.
Los que entraron a trabajar a partir del 2000, y sobre todo post 2008 se (nos) han (hemos) encontrado un percal alucinante. El ascensor social está roto rotísimo , el esfuerzo existe, que se vean los resultados es otra cosa
Vamos atpc. El ascensor social tiene muchos matices. En el capitalismo el esfuerzo no existe, en eso le doy la razón a @Olivilla
 
Entiendo la frustración de la prima, los que hemos estudiado en entorno de pijos sin serlo, hemos visto que lo de la igualdad en muchos ámbitos es papel mojado.
Personalmente no me puedo quejar, vengo de una familia acomodada, pero no he tenido las oportunidades de la mayoría de mis compañeros de universidad (intercambios de idiomas todos los veranos, colegio bilingüe, Erasmus a gastos pagados, lluvia de ofertas laborales al terminar la carrera solo por contactos de los padres, independizarse en la casa de soltero de tu padre/madre...). No les critico, si mis padres tuvieran tantísimo dinero también me hubieran dado lo mismo, pero no partimos de la misma situación ni de broma.
 
Yo voy a hablar de mi caso particular para arrojar un poco de luz sobre las pocas oportunidades que tienes si naces en un hogar de clase trabajadora y con poco (o nulo) apoyo económico.
Creo que todos os centráis demasiado en el dinero y en lo importante que es tenerlo, pero creo que algo que pesa mucho es la forma en la que críes a tus hijos. Yo he nacido en una casa donde nunca se han valorado los estudios universitarios. Siempre he sido una persona muy inteligente, pero poco estudiosa porque a mi familia le daba igual las notas que sacara, eso es así. Lo que me ha "salvado" bastante es que siempre he sido bastante curiosa y he tenido ganas de aprender. Hice una FP cuando acabé la ESO porque mi orientadora me dijo que con lo mediocres que eran mis notas, no podría acabar el bachillerato e ir a la universidad. Cuando le dije a mi orientadora que quería ser escritora porque mi pasión era escribir (con dieciséis años tenía un montón de relatos cortos e incluso una "novela" todo escrito por mi cuenta y por diversión en un ambiente en el que no se me animaba de ninguna manera), se descojonó en mi cara y me dijo que me fuera a hacer una FP, que con mis notas poco iba a conseguir.
Me saqué dos FP y cuando tuve veintidós años años, animada por mi pareja, decidí hacer las PAU para entrar a la universidad, costeada íntegramente por mí y por mi pareja que quería ayudarme. Decidí asistir a una universidad concertada para sumar puntos en cuanto a conseguir contactos para, más adelante, entrar en una buena empresa porque por aquél entonces ya empezaba a intuir cómo funcionaba el mundo. Conseguí sacarme las PAU sin problemas e ilusionada, pagué el pastizal del primer semestre (hice y deshice números durante meses para montármelo y poder pagar los cuatro años y para incluso optar a alguna beca). Desgraciadamente y a pesar de que ya empezaba a intuir cómo funcionaba el mundo, no sabía que me iba a encontrar de cara con un mundo que desconocía completamente.
Yo para aquel entonces ya tenía veintitrés años, estaba independizada con mi pareja y trabajaba no solo para pagarme los estudios, si no para poder vivir. Me encontré en clase con aproximadamente 60 chavales de 18 años que en su vida habían trabajado ni para costearse sus caprichos, mucho menos para pagarse la universidad o estudiar. Al principio no entendí por qué no había gente de mi edad o más mayor, aunque poco después se me hizo evidente. Literalmente era la única que tenía un trabajo "serio" en un aula de 60 personas. En la universidad había dos turnos, turno de mañana y de tarde. Como tuve la suerte de ser de las primeras en matricularme, pude coger el turno de mañana, ya que trabajaba en horario de tarde.
Para mí fue un año que pasó un poco en un suspiro en el que me di la hostia del siglo. Cuando salía de la universidad, tenía veinte minutos para comer antes de entrar a trabajar, y hasta las diez de la noche no llegaba a casa. Después de las diez de la noche, tenía que montármelo para poder cenar, hacer trabajos y estudiar, y cumplía a rajatabla con cada trabajo y cada examen porque no tenía ningún margen para descolgarme. Todos mis compañeros salían de fiesta y se podían permitir sacar notas más mediocres. Yo estaba a la espera de una beca ínfima que llegó a final de curso, aunque ese año me di dos hostias fuertes que me obligaron a dejar esa universidad a pesar de que acabé el año con muy buenas notas: primero, a los profesores les daba igual que estuviésemos en turno de mañana. Ponían exámenes parciales, seminarios obligatorios y presentaciones por las tardes, fuera del horario de clase. Yo evidentemente no solo me quejé, si no que intenté juntar a un grupete de personas para que nos quejásemos varios, no logré ni que mis amigas se quejasen conmigo. Lo único que me dijeron es que podría recuperar en septiembre o que podía pedir cambios en mi horario laboral. En mi trabajo tampoco me ayudaron, claro, pude coger un par de días de fiesta para hacer exámenes, y ni aun así. También, casi acabando el curso nos informaron de que para el curso siguiente, la matrícula subía unos 700€ ya que iban a proporcionarnos un ordenador a cada uno. Yo ese mismo día fui a hablar con la directora para contarle mi caso (porque evidentemente nadie se quejó) para no tener ese ordenador y poder tener el precio normal, y me dijo que no, que era obligatorio.
Agotada y sin poder trabajar más horas porque tenía que ir a la universidad, ese fue mi primer y último año en esa facultad. Al año siguiente me pasé a la universidad a distancia de la que me he graduado este año, cambié a un trabajo normalito de jornada completa y, a pesar de la impotencia, también me di cuenta de que no podía hacer nada y continué con mi vida.
Como conclusión solo puedo decir que las clases y los estratos sociales es algo difícil de salvar para personas que nos encontramos en estratos inferiores, casi igual de complicado que lo es para un rico que ha nacido en una buena familia, dejar de ser de buena familia,
Actualmente no tengo muchas expectativas en cuanto a mi trabajo, porque soy muy consciente de dónde vengo y las oportunidades que tengo y tendré en un futuro. Afortunadamente soy feliz con mi ahora marido y mi hija, y espero en un futuro poder darle a mi hija las herramientas y el apoyo necesarios que yo no he tenido para acceder a oportunidades mejores, a pesar de que ella tampoco ha nacido en un lecho de plumas.

Ah, y sigo escribiendo :)
 
Si te suben el sueldo un 3,7% y la inflación un 5,7%, no hay otra forma, pierdes poder adquisitivo. Otra cosa que pasaba en los 80 y se heredó el problema es que no se puede tener en una fábrica a un pavo pulsando un botón por 2500 pavos al mes. Y eso multiplicarlos por 10.000 con trabajadores+ profesionales+ingenieros+puestos de mando+etc. Porque eso se traduce en pensiones máximas, especiales=no hay quien lo pague. Eso se aplica a empresas estatales y demás rollos.
Y ahora nos enfrentamos a una redifinición de clase y un país que no se sostiene porque no se gana como para cubrir ni siquiera el gasto estatal.
El elefante en la habitación es la especulación salvaje con la vivienda a nivel mundial. Todo el ahorro que se ha ido acumulando a lo largo de los años con tecnología, alimentos, ropa, viajes más baratos se ha ido a pagar vivienda y cada vez más tasas e impuestos. Cómo dije, casa de mis suegros X, mi casa,25x, sin haber subido 25 veces los sueldos en esas tres décadas ni de bromas.
Incluso ganando estupendísimamente, mis suegros no hubieran podido comprarse su piso hoy Y pegarse la vidorra que han pegado ni de coña marinera, directamente, no lo podrían ni empezar a pagar Mis padres, ya te digo yo que hoy no son capaces de pagar su casa no en bromas. Pero espíritu crítico y reconocer que vivieron,para su fortuna, una época tranquila más o menos y bastante próspera,ya tal.
Vamos atpc. El ascensor social tiene muchos matices. En el capitalismo el esfuerzo no existe, en eso le doy la razón a @Olivilla
Fíjate que entendí exactamente lo contrario. Intentar lo puedes intentar, otra cosa es que salgas adelante.
 
Yo voy a hablar de mi caso particular para arrojar un poco de luz sobre las pocas oportunidades que tienes si naces en un hogar de clase trabajadora y con poco (o nulo) apoyo económico.
Creo que todos os centráis demasiado en el dinero y en lo importante que es tenerlo, pero creo que algo que pesa mucho es la forma en la que críes a tus hijos. Yo he nacido en una casa donde nunca se han valorado los estudios universitarios. Siempre he sido una persona muy inteligente, pero poco estudiosa porque a mi familia le daba igual las notas que sacara, eso es así. Lo que me ha "salvado" bastante es que siempre he sido bastante curiosa y he tenido ganas de aprender. Hice una FP cuando acabé la ESO porque mi orientadora me dijo que con lo mediocres que eran mis notas, no podría acabar el bachillerato e ir a la universidad. Cuando le dije a mi orientadora que quería ser escritora porque mi pasión era escribir (con dieciséis años tenía un montón de relatos cortos e incluso una "novela" todo escrito por mi cuenta y por diversión en un ambiente en el que no se me animaba de ninguna manera), se descojonó en mi cara y me dijo que me fuera a hacer una FP, que con mis notas poco iba a conseguir.
Me saqué dos FP y cuando tuve veintidós años años, animada por mi pareja, decidí hacer las PAU para entrar a la universidad, costeada íntegramente por mí y por mi pareja que quería ayudarme. Decidí asistir a una universidad concertada para sumar puntos en cuanto a conseguir contactos para, más adelante, entrar en una buena empresa porque por aquél entonces ya empezaba a intuir cómo funcionaba el mundo. Conseguí sacarme las PAU sin problemas e ilusionada, pagué el pastizal del primer semestre (hice y deshice números durante meses para montármelo y poder pagar los cuatro años y para incluso optar a alguna beca). Desgraciadamente y a pesar de que ya empezaba a intuir cómo funcionaba el mundo, no sabía que me iba a encontrar de cara con un mundo que desconocía completamente.
Yo para aquel entonces ya tenía veintitrés años, estaba independizada con mi pareja y trabajaba no solo para pagarme los estudios, si no para poder vivir. Me encontré en clase con aproximadamente 60 chavales de 18 años que en su vida habían trabajado ni para costearse sus caprichos, mucho menos para pagarse la universidad o estudiar. Al principio no entendí por qué no había gente de mi edad o más mayor, aunque poco después se me hizo evidente. Literalmente era la única que tenía un trabajo "serio" en un aula de 60 personas. En la universidad había dos turnos, turno de mañana y de tarde. Como tuve la suerte de ser de las primeras en matricularme, pude coger el turno de mañana, ya que trabajaba en horario de tarde.
Para mí fue un año que pasó un poco en un suspiro en el que me di la hostia del siglo. Cuando salía de la universidad, tenía veinte minutos para comer antes de entrar a trabajar, y hasta las diez de la noche no llegaba a casa. Después de las diez de la noche, tenía que montármelo para poder cenar, hacer trabajos y estudiar, y cumplía a rajatabla con cada trabajo y cada examen porque no tenía ningún margen para descolgarme. Todos mis compañeros salían de fiesta y se podían permitir sacar notas más mediocres. Yo estaba a la espera de una beca ínfima que llegó a final de curso, aunque ese año me di dos hostias fuertes que me obligaron a dejar esa universidad a pesar de que acabé el año con muy buenas notas: primero, a los profesores les daba igual que estuviésemos en turno de mañana. Ponían exámenes parciales, seminarios obligatorios y presentaciones por las tardes, fuera del horario de clase. Yo evidentemente no solo me quejé, si no que intenté juntar a un grupete de personas para que nos quejásemos varios, no logré ni que mis amigas se quejasen conmigo. Lo único que me dijeron es que podría recuperar en septiembre o que podía pedir cambios en mi horario laboral. En mi trabajo tampoco me ayudaron, claro, pude coger un par de días de fiesta para hacer exámenes, y ni aun así. También, casi acabando el curso nos informaron de que para el curso siguiente, la matrícula subía unos 700€ ya que iban a proporcionarnos un ordenador a cada uno. Yo ese mismo día fui a hablar con la directora para contarle mi caso (porque evidentemente nadie se quejó) para no tener ese ordenador y poder tener el precio normal, y me dijo que no, que era obligatorio.
Agotada y sin poder trabajar más horas porque tenía que ir a la universidad, ese fue mi primer y último año en esa facultad. Al año siguiente me pasé a la universidad a distancia de la que me he graduado este año, cambié a un trabajo normalito de jornada completa y, a pesar de la impotencia, también me di cuenta de que no podía hacer nada y continué con mi vida.
Como conclusión solo puedo decir que las clases y los estratos sociales es algo difícil de salvar para personas que nos encontramos en estratos inferiores, casi igual de complicado que lo es para un rico que ha nacido en una buena familia, dejar de ser de buena familia,
Actualmente no tengo muchas expectativas en cuanto a mi trabajo, porque soy muy consciente de dónde vengo y las oportunidades que tengo y tendré en un futuro. Afortunadamente soy feliz con mi ahora marido y mi hija, y espero en un futuro poder darle a mi hija las herramientas y el apoyo necesarios que yo no he tenido para acceder a oportunidades mejores, a pesar de que ella tampoco ha nacido en un lecho de plumas.

Ah, y sigo escribiendo :)
Mi total solidaridad, supongo que pillaste Bolonia, con las clases y seminarios estratégicamente distribuídos durante todo el día para imposibilitar cualquier intento de trabajo a tiempo parcial. De lo cabestros que son los profesores y las NULAS facilidades que dan, pues qué decir. A un compañero de clase le murió la madre tras "una larga enfermedad" en enero y los catedráticos se negaron en redondo a retrasarle los exámenes del primer semestre, lo mandaron a septiembre con todo, humanidad, ya tal. Huérfano de padre y estudiando a 700 km, por cierto.
Has considerado la universidad a distancia?
 
El elefante en la habitación es la especulación salvaje con la vivienda a nivel mundial. Todo el ahorro que se ha ido acumulando a lo largo de los años con tecnología, alimentos, ropa, viajes más baratos se ha ido a pagar vivienda y cada vez más tasas e impuestos. Cómo dije, casa de mis suegros X, mi casa,25x, sin haber subido 25 veces los sueldos en esas tres décadas ni de bromas.
Incluso ganando estupendísimamente, mis suegros no hubieran podido comprarse su piso hoy Y pegarse la vidorra que han pegado ni de coña marinera, directamente, no lo podrían ni empezar a pagar Mis padres, ya te digo yo que hoy no son capaces de pagar su casa no en bromas. Pero espíritu crítico y reconocer que vivieron,para su fortuna, una época tranquila más o menos y bastante próspera,ya tal.
A día de hoy heredas o te toca la lotería. Pero eh, luego tu con tus bienes haces lo que quieres, especular y sangrar inquilinos, seas pequeño propietario o fondo buitre.
Los langosta jamás reconocerán la suerte que han tenido.
Fíjate que entendí exactamente lo contrario. Intentar lo puedes intentar, otra cosa es que salgas adelante.
A ver, todo el mundo lo intenta...pero no funciona. Hay que esforzarse en posicionarse, en tener contactos e intentar estar en el lugar y momento adecuado. Claro que tienes que ser bueno, sino ni te tendrán en cuenta, pero la red social es la clave
 

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