Yo no tengo hijos pero, si me aceptas el consejo, permite a tus hijos saber lo que pasa con naturalidad y despedirse de su abuelo con amor. Morirse es una putada, pero poder despedirnos de todas las personas a las que queremos y expresarles todo lo que pensamos y, además, morir acompañados, sabiendo que nos han querido, que dejamos un legado bonito en forma de familia que nos quiere... debe ser un gran consuelo.