ESAS COSAS COTIDIANAS QUE NOS PONEN DE MALA LECHE

He caido también en una cosa que no soporto, la gente que se le atraganta reconocer un error... Pero no me refiero a meter la pata y no disculparse (eso sería otro tema). Digo errores o fallos tontos, que no precisan pedir perdón. Gente que se las da de experta o profesional de cualquier ambito y si se equivocan y alguien se lo dice sin ninguna importancia, buscan mil y una justificaciones, en vez de decir algo tan simple como: "ay es verdad que me he confundido".
Desgraciadamente el 80% de la población. Cada vez que oigo a alguien decir "Huy, perdón, me equivoqué" casi se me saltan las lágrimas, es una frase que se escucha poquísimo. Falta muchísima humildad y el suficiente carácter para reconocer que eres humano/a y que no pasa nada por equivocarte.
Y venimos de una generación de padres que rara vez pedían perdón porque sus padres tampoco lo hacían (y los suyos tampoco y así ad infinitum).
 
Una cosa que me saca de quicio: la gente cabezona/porfiona (me acabo de inventar un palabro). Por ejemplo, cuando estás en un grupo de gente hablando sobre X tema, entonces Maricarmen dice que A, pero José Manuel dice que B. Y Maricarmen responde que no, que es A por esto y por lo otro, y José Manuel erre que erre con que es B. Y entonces empiezan jugar al ping pong con sus opiniones, cada uno bateando de un lado. Y ninguno se baja de la burra a pesar de que cada uno tiene su opinión y está claro que no la va a cambiar y que por mucho que disputen nunca se van a poner de acuerdo. Y los demás mientras viendo el partido de ping pong, aburridos y cansados y con ganas de cambiar de tema.

Me pasa muchísimo en reuniones de trabajo y es en esos momentos cuando comienzo a disociar y hago una especie de viaje astral para largarme de ahí porque no lo aguanto. O directamente saco el móvil y empiezo a mirar cosas hasta que José Manuel y Maricarmen por fin se cansan de ser dos pesados y de copar la conversación.

No seáis como José Manuel y Maricarmen, por favor. Elegid vuestras batallas, que a veces la mejor victoria es una retirada a tiempo.
 
Una cosa que me saca de quicio: la gente cabezona/porfiona (me acabo de inventar un palabro). Por ejemplo, cuando estás en un grupo de gente hablando sobre X tema, entonces Maricarmen dice que A, pero José Manuel dice que B. Y Maricarmen responde que no, que es A por esto y por lo otro, y José Manuel erre que erre con que es B. Y entonces empiezan jugar al ping pong con sus opiniones, cada uno bateando de un lado. Y ninguno se baja de la burra a pesar de que cada uno tiene su opinión y está claro que no la va a cambiar y que por mucho que disputen nunca se van a poner de acuerdo. Y los demás mientras viendo el partido de ping pong, aburridos y cansados y con ganas de cambiar de tema.

Me pasa muchísimo en reuniones de trabajo y es en esos momentos cuando comienzo a disociar y hago una especie de viaje astral para largarme de ahí porque no lo aguanto. O directamente saco el móvil y empiezo a mirar cosas hasta que José Manuel y Maricarmen por fin se cansan de ser dos pesados y de copar la conversación.

No seáis como José Manuel y Maricarmen, por favor. Elegid vuestras batallas, que a veces la mejor victoria es una retirada a tiempo.
Así tenía un amigo y, que cansinez de persona. Te porfiaba por todo.
 
En realidad daba un poco igual, porque lo malo eran las partículas fecales que dejaban flotando en el aire, que bajan las defensas. Así que para el caso...
Ains, esa gente de culo prieto!!!.

Estos, al igual que los que mean fuera de casa, tienen(no todos pero, una inmensa mayoría) un serio defecto...
El repelús que le tienen a tirar o pulsar de la cisterna!!!.
 
Pero tu visión es buena o a lo Rompetechos?

Yo por la noche si hago un camino sin gafas y en dirección contraria a la habitual casi seguro me pierdo


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Peor yo que escucho mejor cuando me las pongo!
Debe ser psicológico. Como veo turbio pienso que escucho mal de los nervios!
Porque insólito es bastante!
 
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