Situaciones incómodas, anécdotas de “Tierra trágame” e historietas varias.

Tenéis pinta tú y tu Naranjito de haber hecho "cosas" por ahí en público...¡cuéntanos!

Hablando del tema, cuando se hacen "cosas" :sneaky: con los novios o maridos (o maromos casuales) por ahí, digamos que no en una casa ni cama ni lugar a cubierto, ¿nunca os ha pasado nada de pasar vergüenza?.

A mi una vez, y no fue en público, si no en la casa de los padres de mi ex, me dio tal susto que os lo juro que me puse a gritar como una gilipollas. Mi ex ya vivía en piso propio, pero mira, que nos dio el apasionamiento carnal ahí mismo, en la casa de sus padres, que por cierto no estaban sino que andaban de boda (fuimos a darle de comer a los peces y a regar las plantas). En mitad de la lujuria se oye la puerta y el pollo que monté pensando que era el hermano, que todavía vivía con los padres, no os lo podéis imaginar.
Mi ex: ¿pero qué haces, si no ha entrado nadie?.

Era el vecino, típico portal en el que se oye todo, y la puerta era del piso de al lado. De imaginarme al que fue mi cuñado, viéndome en pelota picada en esa situación, contándoselo a los amigos, siendo la comidilla...pues fue el puto vecino con su puñetera puerta. El mongolo de mi ex cuñado se había ido por lo visto al pueblo y a mi nadie me dijo nada.
Aysss.... amiga.... han sido unas cuantas.... Naranjo va de tio serio pero en el fondo es como yo, un puto salido! Semos animales, algo leidos, pero animales. Estoy con cena, baño y preparamiento de mochila pal cole. Si puedo luego escribo.
 
Cuando trabajé en el call center a mí una vez una señora francesa me hizo llorar hablándome de la manera más educada, de modo que no podía ni alterarme ni defenderme, porque no me estaba faltando al respeto de manera directa (pero sí indirectamente). Nunca me había sentido tan insultada y humillada de una manera tan velada, fue una experiencia horrible. Hubiera preferido que me hubiese insultado porque en ese caso habría tenido el derecho de colgarle el teléfono en las narices (si no nos penalizaban, no lo teníamos permitido salvo en casos de estos). A raíz de ese trabajo y de unas vacaciones en París les cogí un poco de tirria a los franceses.
prima, en que consistió básicamente lo que te dijo la franchute?
 
Bueno, yo contaré lo que le pasó a «la prima de una amiga»... resulta que salía de clases de idiomas por la noche, de hecho era la última clase del día, se monta en su coche y se va a su casa. Al llegar se da cuenta de que no tiene su teléfono celular, se pone a buscarlo por todos lados y nada... de repente le viene la idea de que lo dejó sobre la mesa del aula y toma camino hacia el campus, que para colmo estaba en las afueras de la ciudad por aquella época. Llega a la caseta de vigilancia y los vigilantes extrañados la miran sorprendidos porque era poco común que una estudiante llegara a esa hora al campus. Les explica la situación y aceptan acompañarla hasta el aula a buscar el teléfono, buscan por todos lados y nada... se van al baño pensando que talvez lo dejó ahí... como no lo encuentran, uno de los vigilantes le pide el número telefónico para llamarle y que sea más fácil localizarlo... comienza a sonar el teléfono y oh sorpresa! Lo traía ella en el escote de la blusa junto al sujetador...
 
prima, en que consistió básicamente lo que te dijo la franchute?
Primero insultó a la empresa, que me daba igual, pero luego digamos que empezó a sugerir que yo fuera una inepta incapaz de hacer bien mi trabajo, que qué lástima que yo estuviese ocupando una silla habiendo gente "válida" en el paro, etc. Lo de que comenzara un ataque personal hacia mí no me sentó nada bien.
 
Bueno, yo contaré lo que le pasó a «la prima de una amiga»... resulta que salía de clases de idiomas por la noche, de hecho era la última clase del día, se monta en su coche y se va a su casa. Al llegar se da cuenta de que no tiene su teléfono celular, se pone a buscarlo por todos lados y nada... de repente le viene la idea de que lo dejó sobre la mesa del aula y toma camino hacia el campus, que para colmo estaba en las afueras de la ciudad por aquella época. Llega a la caseta de vigilancia y los vigilantes extrañados la miran sorprendidos porque era poco común que una estudiante llegara a esa hora al campus. Les explica la situación y aceptan acompañarla hasta el aula a buscar el teléfono, buscan por todos lados y nada... se van al baño pensando que talvez lo dejó ahí... como no lo encuentran, uno de los vigilantes le pide el número telefónico para llamarle y que sea más fácil localizarlo... comienza a sonar el teléfono y oh sorpresa! Lo traía ella en el escote de la blusa junto al sujetador...
Bueno, yo a veces no encuentro las gafas y las llevo puestas, así que lo entiendo perfectamente. :ROFLMAO:
 
Cuando trabajé en el call center a mí una vez una señora francesa me hizo llorar hablándome de la manera más educada, de modo que no podía ni alterarme ni defenderme, porque no me estaba faltando al respeto de manera directa (pero sí indirectamente). Nunca me había sentido tan insultada y humillada de una manera tan velada, fue una experiencia horrible. Hubiera preferido que me hubiese insultado porque en ese caso habría tenido el derecho de colgarle el teléfono en las narices (si no nos penalizaban, no lo teníamos permitido salvo en casos de estos). A raíz de ese trabajo y de unas vacaciones en París les cogí un poco de tirria a los franceses.
UN POCO DE TIRRIA NO LLEGA
MUCHA TIRRIA
MUCHA
HE DICHO
RECUERDA, UN GABACHO NUNCA ES SUFICIENTEMENTE ODIADO
 

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