Para mí el problema de los regalos es vincularlos a: te portas bien, recibirás muchos regalos, a las amenazas y los chantajes, pero porque yo no creo que haya que educar así a los niños no ese día ni los 364 del resto del año. Pero por lo demás es una noche mágica, inherente al pensamiento mágico de los niños y forma parte de su desarrollo y hay muchas formas de vivirlo, que no necesariamente tiene que pasar por abrumarlos con regalos. Además dura muy poquito, apenas unos años desde que son conscientes y lo viven, hasta que descubren la verdad. Y supongo que será una opinión impopular, pero me parece absurdo que haya niños “mayorcitos” que supuestamente todavía crean en los RRMM. Creo que para casi todo hay una edad.