Miedos creo que los hemos tenido todas. Yo he sido una loca el Peral que hasta que no vio que se le estaba quemando el arroz no se decidió. Coincidió con una etapa personal muy mala, enfermedad de mi madre. Se me metió en la cabeza que cuando me quedara embarazada se moriría (mi abuela murió estando ella embarazada de mi) y ni modo, psiquiatra, meditación, de todo...Todo lo más un embarazo psicológico en Septiembre pasado. Un mes después de enterrar a mi madre tenía el positivo y 45 años. Y aún siendo ya bien añosa hay días que pienso en fiestas y viajes que me voy a perder (y que de hecho ya me he perdido) pero hoy al ver a la niña de diez días de mi compi de Pilates he dicho; Nausi pava, la verdadera vida está ahí. De hecho sin ella no existiriamos. Y que conste que olé las primas que no quieran embarazarse porque esto se quiere o no se quiere y para hacerlo por convencionalismos pues no lo hagas porque el bebé es una persona en potencia y esa persona se merece que intentemos propiciarle los cimientos para una buena vida. Y dejo los sermones. Un abrazo a todas las primas