Pienso que los padres lo hacen todo con la mejor intención, pero proteger tanto a los hijos no favorece la autoestima. Uno tiene más autoestima cuando se ve más capaz de autogestionarse y de ser independiente, aunque a veces de equivoque. Estamos hartos de oír que se aprende de los errores pero es que no se deja a los hijos que se equivoquen y eso después genera mucha ansiedad, miedo a tomar decisiones, miedo a cambiar, miedo a no ser capaz. No se les hace ningún favor.