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Con esas historias me recuerdas... Un amigo de siempre de mis suegros, un autético vividor follador estuvo desplazado en su momento en Perú por gran empresa hispánica, si con las condiciones de los 90 era el rey del mambo aquí.allí vivía como un auténtico sultán y tenía cola esperando para pillar. Hasta que se echó una novieta, hija de buena familia allá, recalco, familia relativamente bien aunque no la alta burguesía limeña y estudios universitarios , en aquella época, una rareza. Cero coma en preñarse, fue parpadear y ya le apareció con el predictor en la mano. Han tenido una tormentosa historia durante veinte años hasta separarse, el hijo, odia al padre espoleado por la madre que en cuanto lo agarró, le faltó tiempo para dimitir de su trabajo y no ver una nómina nunca máis.Viví unos años en el Caribe y las nativas estaban obsesionadas por pillar europeo. O estadounidense/canadiense. Igual que aquí nos educan diciéndonos que estudiemos allí me decían que las madres las animan a estar siempre bonitas y a pescar extranjero. Eso, chicas que venían de familias con dinero y que tenían una carrera. En ese momento yo llevaba unos 10 años con mi novio pero no estaba casada y me decían mucho que nos casáramos y que tuviera hijos que así se les amarraba. Muy triste. Las que yo conocí eran culebrones andantes, no sabían lo que era tener una relación sana con un hombre.
Exactamente el mismo modus operandi de un compañero de postdoctorado francés de mi costillo en su época mexicana. Se echa novieta, la preñó en un mes, UN MES. Mismo modus operandi, familia de pasta, carrera, no ha trabajado ni un día en su vida, y eso que han tenido épocas apuradas porque se les va el dinero de las manos.
A mí, la verdad, estos casos me dejan bien convencida de que les pinchan los condones o se marcan un Boris Becker porque no son nada raros y no puede ser que haya tanto idiota previamente cuidadoso con eso suelto