A mí tampoco me gustaba y creo que ha hecho que no me guste el deporte ya adulta. Aparte de que en mi época pocas chicas hacían deporte de extraescolares, no recuerdo que ninguna de mis amigas lo hicieramos. En el instituto, era voley un trimestre y se me daba mal. Sin embargo en las pruebas no iba del todo mal. En velocidad tipo 100m, 400m y cosas así, era de las mejores de la clase, lo recuerdo porque se me daba bien y me hacía ilusión, pero nunca me sentí valorada, ni con motivación para mejorar. Recuerdo que me caí de las espalderas varias veces y en vez de animarme, me agobiaba y todavía hoy me acuerdo. Años más tarde, me dijeron en una prueba que me hice, que tenía poca fuerza en las manos....