Yo también soy de aprovechar bien la comida, por eso intento comerla pronto para que no se me ponga mala. Creo que lo usaba de excusa porque era más dejadez que otra cosa... Se le pudría la comida y luego le daba asquete tirarla, así que la dejaba de adorno en el frigo y nosotras a jodernos.Prima, estas cosas son sobre las que pienso que además, de cochinos, les falta dos veranos a esta peña:
1. Lo de que le da pena tirar la comida. Vale, a mí también, e intento no tirar nada, pero si algo se me pone malo, lo tiro. ¿De qué sirve tenerlo ahí de reliquia, si ya está malo y no te lo vas a comer?. ¿Por si la palmas antes de tirarlo que herede el piso o qué?
2. Lo de lloriquear por llamarla ladrona. Era para que os hubieseis puesto de acuerdo las otras tres y haberle dicho, “no, mira, te estoy llamando ladrona, cerda, guarra, mala compañera....”
3. Lo de peña durmiendo en tu cuarto... puagggg, ¿no se te ocurrió hablar con la casera para poner un candado o algo así?
4. ¿Y el amigo, de que iba? Vale que ella te pusiera verde con los amigos, (de forma injusta, pero vamos, a saber que tenía en la cabeza), ¿pero a quién se le ocurre llegar y preguntar que quién es la rarita que se guarda las cosas?. Es como si tú hubieses hablado de ella a una amiga, esa amiga llega a la casa y le dice, ¿a, tu eres la cerda que no limpia ni aunque la maten y roba aceite y cosas de higiene a mi amiga? Por favor....
Lo del amigo creo que fue un despiste, pensaba que era la otra chica la que lo hacía y lo soltó sin pensar. Yo no dije nada, pero pasé mal rato.
Tan solo hablaba del tema con una compañera. Estábamos hartas de encontrar guarrerías por el piso, pero ella estaba más hecha a estas movidas de pisos de estudiantes y le interesaba estar en ese piso, porque se fue de Erasmus el siguiente curso y los caseros le guardaban el sitio cuando volviera.
A mi no me interesó quedarme, me sentía su limpiadora... Hasta me llegó a decir que me daba 5 euros si le limpiaba su habitación. Tenía mucha cara ? Luego, cuando se enteró de que no seguía con ellas el curso siguiente me preguntó el porqué muchas veces. Al principio le decía que era por el dinero, que me interesaba más ir y venir, pero como insistió tanto se lo dije, que tenía un gran problema con la higiene y la limpieza, no me dio tiempo a decirle ladrona porque volvió a llorar y a montar el pollo. "Me estás llamando guarraaaa?" Pues sí, hija, lo eres xD