Hola primis,
Ya llevaba un tiempo queriendo escribir. Siento que , lo que me pasa, no puedo contarlo a mi gente más próxima a riesgo de que me critiquen por pensar así—y no hacer nada—o no darle importancia. Los conozco, y sé por donde irían los tiros.
Os cuento, a ver qué pensáis... Quizá estoy exagerándolo todo, haciendo una montaña de un grano de arena...
Llevo tres años de relación con un chico, no vivimos juntos, ya que yo estoy en el último año de universidad y no trabajo. Él si lleva muchos años trabajando, pero vive con sus padres. (Es el único de su círculo de amigos en esta situación)
Vivimos en diferentes ciudades, pero cada fin de semana lo paso en su casa. Él tiene una cama más grande, sus amigos están allí, etc. Ahora con el confinamiento perimetral nos hemos ido viendo más poco a poco, pero eso no nos supone ningún problema.
Con él tengo un cúmulo de sentimientos... es muy buena persona, cariñoso, atento y de eso no me quejo. Lo que me pasa, y quizá os suene a capricho de niña pequeña, es que yo quiero un perro, es la ilusión de mi vida. Me encantan los animales, bicho que veo, me embobo. Si, esta “tontería” es lo que me produce cacao mental. Para que me entendáis; él nunca ha vivido con animales, su madre por más decir les tiene fobia. Él dice que no quiere tener esa responsabilidad , que es una carga y que limita mucho la vida de una persona. Yo no lo veo así, en absoluto. He tenido perros toda mi vida, y actualmente vivo con uno (aunque es de mi madre) y él lo acepta y le gusta, pero repito; no para tener uno él.
Siempre que sacamos el tema se lo toma a pitorreo, no creo que entienda la ilusión que yo tengo. Y creedme si os digo que se lo he argumentado mil veces y Otras veces, cuando estamos rodeados de sus amigos (todos tienen un perro... es lo triste de la situación) a veces le sacan el tema y le preguntan el porqué no quiere uno si yo voy loca. Su respuesta es bromear, no darle importancia. Este verano tuvimos una pequeña riña por esto... estábamos con dos parejas comiendo, salió el tema, y él se cabreó. Yo al verlo así, mi primera reacción fue levantarme y decir que tenía que hacer una llamada. Salí del restaurante y empecé a llorar de la ansiedad.
En fin... Tengo miedo que el día de mañana, cuando vivamos juntos, se imponga y me diga que no. Yo soy de fácil convencer y me conozco y sé que acabaré resignándome y aceptar su decisión. Aunque luego a la que pasen los días vuelva a mi la idea del perro.
Mi madre, ella muy sabia cuando quiere (también muy interesada y un poco mala), me dice que acabaré siendo una desgraciada. No la malinterpretéis, como ya he dicho antes; adoro a los animales... Si por mi fuera me iría a vivir a las afueras de la ciudad con tres perros, cinco gatos, gallinas, un caballo, lo que fuese. Y así yo soy feliz, en serio.
Pienso incluso de coger el perro ya, así después si vivimos juntos tiene que aceptarlo si o si. No le quedaría otra. (Tengo una gatita desde antes de conocerlo y sabe que ella y yo somos un pack). Pero claro... luego está el tema de que el fin de semana tendría que quedarse en mi casa—una faena para mi madre—, ya que su madre tiene FOBIA y no es cuestión de hacérselo pasar mal.
No sé qué hacer. No sé si es una tontería todo lo que siento, o realmente tengo que tomar una decisión... No lo sé.
Y otro “problemilla”, diferente del perro;
Estoy estudiando enfermería, he hecho prácticas este año en un hospital, sé como están de saturados con el tema del coronavirus. Mi padre es médico, y además, lo cogió y estuvo dos semanas en casa encerrado. Aún ahora acarrea secuelas respiratorias, se cansa muy rápido si hace algún esfuerzo. Con todo esto.... estoy en una encrucijada; mi novio quiere celebrar la nochevieja en casa de unos amigos—somos 9 o 10—aunque siempre los hemos ido viendo desde lo del covid. El plan sería cenar y tomar las uvas con sus padres y luego, antes del toque de queda, irnos a su casa. Yo al principio de contármelo me lo tomé a broma, no creía que lo dijese en serio. Me pareció súper irresponsable y egoísta. Ayer mismo tuvimos una discusión sobre esto y me soltó, en un momento dado, que si no quería ir que me quedase en casa. Me argumenta que no está actuando mal porque con sus amigos se ve cada día, y no va a contagiar a nadie. Yo no voy por ese camino, yo solo quiero que vea que lo que hace no es “moral”, con todo lo que está pasando, y pidiéndonos el gobierno que nos quedemos en casa y no nos reunamos con más de dos burbujas diferentes....
Sé que las relaciones no son perfectas, pero poniendo los pros y contras en una balanza a veces ganan los contras y me da un poco de mal rollo.
En fin, siento el tocho que os he puesto. Y siento también si me he expresado mal en algún momento.
¡Feliz año a tod@s!
Ya llevaba un tiempo queriendo escribir. Siento que , lo que me pasa, no puedo contarlo a mi gente más próxima a riesgo de que me critiquen por pensar así—y no hacer nada—o no darle importancia. Los conozco, y sé por donde irían los tiros.
Os cuento, a ver qué pensáis... Quizá estoy exagerándolo todo, haciendo una montaña de un grano de arena...
Llevo tres años de relación con un chico, no vivimos juntos, ya que yo estoy en el último año de universidad y no trabajo. Él si lleva muchos años trabajando, pero vive con sus padres. (Es el único de su círculo de amigos en esta situación)
Vivimos en diferentes ciudades, pero cada fin de semana lo paso en su casa. Él tiene una cama más grande, sus amigos están allí, etc. Ahora con el confinamiento perimetral nos hemos ido viendo más poco a poco, pero eso no nos supone ningún problema.
Con él tengo un cúmulo de sentimientos... es muy buena persona, cariñoso, atento y de eso no me quejo. Lo que me pasa, y quizá os suene a capricho de niña pequeña, es que yo quiero un perro, es la ilusión de mi vida. Me encantan los animales, bicho que veo, me embobo. Si, esta “tontería” es lo que me produce cacao mental. Para que me entendáis; él nunca ha vivido con animales, su madre por más decir les tiene fobia. Él dice que no quiere tener esa responsabilidad , que es una carga y que limita mucho la vida de una persona. Yo no lo veo así, en absoluto. He tenido perros toda mi vida, y actualmente vivo con uno (aunque es de mi madre) y él lo acepta y le gusta, pero repito; no para tener uno él.
Siempre que sacamos el tema se lo toma a pitorreo, no creo que entienda la ilusión que yo tengo. Y creedme si os digo que se lo he argumentado mil veces y Otras veces, cuando estamos rodeados de sus amigos (todos tienen un perro... es lo triste de la situación) a veces le sacan el tema y le preguntan el porqué no quiere uno si yo voy loca. Su respuesta es bromear, no darle importancia. Este verano tuvimos una pequeña riña por esto... estábamos con dos parejas comiendo, salió el tema, y él se cabreó. Yo al verlo así, mi primera reacción fue levantarme y decir que tenía que hacer una llamada. Salí del restaurante y empecé a llorar de la ansiedad.
En fin... Tengo miedo que el día de mañana, cuando vivamos juntos, se imponga y me diga que no. Yo soy de fácil convencer y me conozco y sé que acabaré resignándome y aceptar su decisión. Aunque luego a la que pasen los días vuelva a mi la idea del perro.
Mi madre, ella muy sabia cuando quiere (también muy interesada y un poco mala), me dice que acabaré siendo una desgraciada. No la malinterpretéis, como ya he dicho antes; adoro a los animales... Si por mi fuera me iría a vivir a las afueras de la ciudad con tres perros, cinco gatos, gallinas, un caballo, lo que fuese. Y así yo soy feliz, en serio.
Pienso incluso de coger el perro ya, así después si vivimos juntos tiene que aceptarlo si o si. No le quedaría otra. (Tengo una gatita desde antes de conocerlo y sabe que ella y yo somos un pack). Pero claro... luego está el tema de que el fin de semana tendría que quedarse en mi casa—una faena para mi madre—, ya que su madre tiene FOBIA y no es cuestión de hacérselo pasar mal.
No sé qué hacer. No sé si es una tontería todo lo que siento, o realmente tengo que tomar una decisión... No lo sé.
Y otro “problemilla”, diferente del perro;
Estoy estudiando enfermería, he hecho prácticas este año en un hospital, sé como están de saturados con el tema del coronavirus. Mi padre es médico, y además, lo cogió y estuvo dos semanas en casa encerrado. Aún ahora acarrea secuelas respiratorias, se cansa muy rápido si hace algún esfuerzo. Con todo esto.... estoy en una encrucijada; mi novio quiere celebrar la nochevieja en casa de unos amigos—somos 9 o 10—aunque siempre los hemos ido viendo desde lo del covid. El plan sería cenar y tomar las uvas con sus padres y luego, antes del toque de queda, irnos a su casa. Yo al principio de contármelo me lo tomé a broma, no creía que lo dijese en serio. Me pareció súper irresponsable y egoísta. Ayer mismo tuvimos una discusión sobre esto y me soltó, en un momento dado, que si no quería ir que me quedase en casa. Me argumenta que no está actuando mal porque con sus amigos se ve cada día, y no va a contagiar a nadie. Yo no voy por ese camino, yo solo quiero que vea que lo que hace no es “moral”, con todo lo que está pasando, y pidiéndonos el gobierno que nos quedemos en casa y no nos reunamos con más de dos burbujas diferentes....
Sé que las relaciones no son perfectas, pero poniendo los pros y contras en una balanza a veces ganan los contras y me da un poco de mal rollo.
En fin, siento el tocho que os he puesto. Y siento también si me he expresado mal en algún momento.
¡Feliz año a tod@s!