Yo es que tengo mucha facilidad para mandar a pastar a la gente, sobre todo la que toca las narices. Los Aries tenemos poco aguante...A esto que dices me gustaria añadir que, aunque no seas Tauro, la misma vida te va curtiendo. Yo de jovencita era muy de dar segundas oportunidades a la gente, porque pensaba "si yo puedo cambiar, los demas tambien", y NO. La mayoria de la gente no cambia, pueden modificar conductas si, pero lo que es la esencia no cambia.
Ahora con el paso de los años y los palos, he desarrollado mucho mi caracter y tengo poca paciencia para las tonterias.