Haciendo esta tarde planes de “quedadas” y demás para cuando esté en la playa este verano he mensajeado a un amigo de nombre Ramiro y he caído en que, aunque yo lo tenga totalmente “asumido” es un nombre que se las trae, sobre todo si tenemos en cuenta de que su madre le sigue llamando Ramirín aun siendo cuarentón.
He contado mi shock por aquí cuando en cierta ocasión en un barrio pijo a morir veo correteando a un crío super Borja así con el peinado ricitos estilo pijo ( que llevan todos igual) y la madre salta "Ramiro no corras". De esto no hace mucho tiempo, así que por ahí andara ese crío llamado como el vecino jubilado que te da la vez en la cola para el pan.