A mi me pillo muy desprevenida, lo reconozco. Pero especialmente porque era una universidad pública donde ese perfil no abundaba (luego me di cuenta de que había un departamento entero de catedráticos metidos en el Opus). Pero al principio parecían chicas normales, nunca se habló de religión, salían y bebían de fiesta, tonteaban con chicos… verdaderamente nunca entendí si yo no quería ver…Se me pone mal cuerpo de leerte. Que mal rollo me da el Opus Dei y sus métodos.
Hay un hilo de este tipo de grupos "religiosos" y las experiencias que se cuentan son bestiales. Una de las cosas que me dejó perpleja al leer a varias foreras con experiencias similares a la tuya, fue la de cómo abundan por las universidades captando a la gente.
El mismo método: planes geniales de escapadas a X sitio, y no cuentan que el plan contiene una visita a una casa grande del lugar donde hacen reuniones y misas.
Te pintan todo genial y te comen la oreja con grandes oportunidades si te vas con ellos. Imagino que cuando los rechazas la cosa cambia mucho, prefiero no saberlo y tener a esa gente lejísimos.
Si ya es flipar con la típica alcahueta de parroquia que va acechando y manipulando al personal para sus luchas de poder en la iglesia del barrio, no quiero ni pensarlo a esos niveles de sectas chungas.
Porque en las iglesias normales y corrientes, y no hablo de Opus ni nada por el estilo, está ese típico personaje, normalmente mujer (es lo que he visto), que va al acecho de otra persona, para sus causas personales dentro del grupo de gente con el que se mueve, y como esa persona sea joven, ya puede andarse con cuidado.
Lo más raro que me pasó a mí fue cuando unas monjas de una congregación se entusiasmaron al ver que yo preguntaba por su grupo. Creo que se equivocaron con mi reacción (intenté ser educada y sentí curiosidad), y ya empezó la que mandaba "tenemos el piso aquí, ven, no se qué". Aclaro que ahí había monjas y las llamadas "vírgenes seglares", que son monjas consagradas personalmente, sin vivir en conventos ni llevan hábito, hacen vida normal pero llevan vida de mi ja y pertenecen a un grupo.
Y he visto auténticas movidas con la típica maruja de iglesia que va mangoneando a otras personas, haciéndose la graciosa con eso de "yo aquí soy muy conocida, soy de la hermandad, hazme caso" que ha generado muchos problemas metiéndose donde no la llaman, solo por intentar comerle la cabeza a alguien más joven. Me lo hizo una y a esa le puse la cruz.
Van al acecho, van de simpáticas, de guays, y te quieren usar para un fin concreto, empleando muchas argucias.
Las iglesias son caldos se cultivo donde abundan este tipo de personas al acecho de otras, para el fin que sea, aprovechando que es un lugar donde se supone que hay "bondad". Pues menudos hdlgp me he topado yo en una simple parroquia de barrio.