yo no puedo ver ese queso desde que de pequeña vi uno con GUSANOS en el sitio de donde es originario, qué trauma¡¡¡¡¡¡¡¡Otra de mis perdiciones, las anchoas en salmuera:
Ver el archivo adjunto 177615
Con cuatro años ya me tiraba a ellas algún domingo que íbamos a la hora del vermut al bar con mi padre.
Y también a ésto:
El cabrales a palo seco: también a partir de los cuatro años.
Con siete u ocho años, si iba a comprar queso, el charcutero: "éste es muy suavecito..." (la típica frase, y más a una niña), pero a mí se me iban los ojos a los fuertes sobre todo, así que era los que compraba.
No son guarradas como tal, pero son alimentos potentes, y con los que no tengo medida.