Hola! Yo también pasé por una depresión post parto.
Mi embarazo fue muy deseado y fue maravilloso. Ningún susto ni nada, todo perfecto. Pero la dar a luz sufrí de una perforación en una meninge al ponerme la epidural y tuve que estar unos 15 días en reposo, tumbada sin poderme mover.
Ese fue el desencadenante que me llevó a sufrir una depresión post parto.
Yo tampoco le pude dar pecho (aunque reconozco que la LA siempre planeó en mi cabeza) pero lo q peor llevaba era no poder mecerle, por ejemplo. Ese tipo de cosas que estamos deseando de hacer y en mi caso se sustituyó por estar en una habitación a oscuras tumbada y sola.
Llegué a tener muchísimo rechazo por el bebé, a día de hoy se me llenan los ojos de lágrimas al acordarme.
En seguida me puse en manos de especialistas, primero fui a terapias pero se me quedaron cortas, ya que tenía mil recaídas; y, finalmente,me pusieron un tratamiento que me fue genial y a día de hoy puedo decir que es lo que me ha salvado. De hecho lo sigo tomando.
Así que yo te acompaño en tus emociones, no estás sola, sé perfectamente lo que sientes y la cantidad de sentimientos encontrados que tienes.
Te animo a que lo comentes a algún especialista, no tengas miedo a la medicación, en mi caso fue altamente necesaria, y me ha librado de una depresión mayor.
Y, por último, gracias por crear este tema y visibilizar esta enfermedad que sigue siendo tabú en nuestra sociedad.
Mi embarazo fue muy deseado y fue maravilloso. Ningún susto ni nada, todo perfecto. Pero la dar a luz sufrí de una perforación en una meninge al ponerme la epidural y tuve que estar unos 15 días en reposo, tumbada sin poderme mover.
Ese fue el desencadenante que me llevó a sufrir una depresión post parto.
Yo tampoco le pude dar pecho (aunque reconozco que la LA siempre planeó en mi cabeza) pero lo q peor llevaba era no poder mecerle, por ejemplo. Ese tipo de cosas que estamos deseando de hacer y en mi caso se sustituyó por estar en una habitación a oscuras tumbada y sola.
Llegué a tener muchísimo rechazo por el bebé, a día de hoy se me llenan los ojos de lágrimas al acordarme.
En seguida me puse en manos de especialistas, primero fui a terapias pero se me quedaron cortas, ya que tenía mil recaídas; y, finalmente,me pusieron un tratamiento que me fue genial y a día de hoy puedo decir que es lo que me ha salvado. De hecho lo sigo tomando.
Así que yo te acompaño en tus emociones, no estás sola, sé perfectamente lo que sientes y la cantidad de sentimientos encontrados que tienes.
Te animo a que lo comentes a algún especialista, no tengas miedo a la medicación, en mi caso fue altamente necesaria, y me ha librado de una depresión mayor.
Y, por último, gracias por crear este tema y visibilizar esta enfermedad que sigue siendo tabú en nuestra sociedad.