Región de Murcia - España

Municipio de Caravaca de la Cruz

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Caravaca de la Cruz es una de las cinco ciudades santas del mundo, junto a Roma, Jerusalén, Santiago de Compostela y Santo Toribio de Liébana.


Caravaca de la Cruz es un municipio de 25.851 habitantes (según el padrón del INE de 2015) perteneciente a la comarca del Noroeste. Limita al norte con el municipio de Moratalla, al este con el de Cehegín, al sur con el de Lorca y con la provincia de Almería, y al oeste con la provincia de Granada.

El paisaje del municipio, donde podemos encontrar una amplia representación de la flora y la fauna del noroeste, se caracteriza por su accidentado relieve y por la especial protección de determinadas áreas bajo la figura de ZEPA y LIC. También habría que destacar, por su singularidad, Las Fuentes del Marqués.


La historia de Caravaca de la Cruz es rica en acontecimientos que despiertan fácilmente el interés de quien la visita. Su pasado islámico y la Reconquista cristiana durante la Edad Media, época en que también llega la Vera Cruz, y los acontecimientos de los siglos XVI al XVIII, con la llegada de las órdenes religiosas y la formación del entramado urbano del casco histórico, son una muestra de ello.


El pasado glorioso del municipio caravaqueño se ve reflejado en la cantidad y la calidad de su patrimonio, que abarca, entre otros, el yacimiento de la Cueva Negra, el santuario íbero romano de la Encarnación, las iglesias del Salvador, de La Soledad, o de la Compañía de Jesús, el Templete y, sobre todo, el Real Alcázar Santuario de la Vera Cruz, recinto donde se guarda y custodia la Santísima Cruz.


Sin lugar a dudas, las fiestas más importantes de Caravaca son las de la Santísima y Vera Cruz, declaradas de Interés Turístico Internacional, que incluyen los desfiles de Moros y Cristianos y las impresionantes carreras de los Caballos del Vino.


Hoy Caravaca de la Cruz es una ciudad moderna, dinámica y emprendedora, unida por la Autovía del Noroeste a la ciudad de Murcia. El turismo ocupa un papel importante en la vida de la ciudad. La concesión de Año Santo Perpetuo supone el mayor reconocimiento a la larga historia de culto a la Cruz de Caravaca y a la importancia de este territorio como lugar de peregrinaje.
 
Murcia, una escena teatral con denominación de origen
Publicado por Nieves Jiménez
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La directora Manuela Burló Moreno en el set de rodaje de Camas. Fotografía: Konx22 (CC).

«En León empecé a amanecer». Con estas palabras esculpió Francisco Umbral su célebre tributo a los orígenes en Las verdades de un mentiroso ilustre. Muchos de los actores que copan los carteles en la Gran Vía madrileña o el prime time televisivo podrían hacer suya la frase, si bien trocando la población. «En Murcia empecé a amanecer». No en vano, esta región, casi inadvertida como un planeta arcaico, y de la que apenas se conoce la chocarrería del qué hermosa eres, se ha convertido en los últimos tiempos en un referente para cineastas y dramaturgos de toda España. En un vivero de artistas donde germinan algunas de las más innovadoras propuestas del cine y el teatro nacionales.

La Escuela Superior de Arte Dramático (ESAD), hoy emplazada en el centro histórico junto a la imponente fachada de la catedral barroca, registra llenos casi a diario, en lo que supone un remedo moderno del trasiego de aldeanos que, en tropel, cruzaban la huerta para asistir a las representaciones. El director y productor teatral Juan Pedro Campoy (Molina de Segura, 1974) cifra precisamente en la ESAD una de las claves del auge de vocaciones en la dramaturgia local. Campoy debutó en el Círculo de Bellas Artes con Amo tu cama rica y es responsable, entre otras producciones, de La vida resuelta, con los guionistas de 7 vidas y Aída David Olivas y Marta Sánchez. Para fuste vocacional, no obstante, el de Daniel Albaladejo (Cartagena, 1971), también formado en la ESAD, y al que el gran público todavía recuerda por su cachazudo guardia jurado de Cámera Café: «Si algo destaco de los años de la ESAD es el trabajo en grupo. Se trabaja para el show, no para el protagonista. Todos a una. Y luego Murcia tiene magia. Magia para crear, para volar, para imaginar, para soñar y luz para guiar, para encontrarte, para seguirla, para enraizarte».

Piedra angular de esa escuela fue Paco Rabal, actor fetiche de Buñuel, y que, en su fructífera carrera (más de trescientas películas) puso su voz arrugada también al servicio de Camus, Saura, Almodóvar, Visconti, Chabrol, Tanner… Como lo fue Margarita Lozano, la fiel criada Ramona en Viridiana y musa de Pasolini, los Taviani, Moretti… Ambos, Rabal y Lozano, se cuentan como precursores de la labor que, en los sesenta y setenta llevaría a cabo el teatro universitario de Murcia, cuyo aliento animaría la labor de la primera compañía profesional, Julián Romea, dirigida por César Oliva, o La Bella Aurelia, dirigida por Antonio Morales y Tespis; de Lorenzo Píriz-Carbonell, sin sospechar siquiera la senda que se abría en una provincia donde ser actor era poco menos que una epopeya.

Tal como explica César Oliva, catedrático de Teoría y Práctica del Teatro en la Universidad de Murcia, fundador del Teatro Universitario de Murcia (TEU), primer director del Festival de Almagro y actualmente asesor artístico del Teatro Romea y Teatro Circo de Murcia, «es posible que la casualidad del nacimiento de Julián Romea en Murcia sea una excelente metáfora para entender la relación tan especial que tiene esta región con la escena». Hijo de aragonés y valenciana, Romea vio la luz en la ciudad del Segura por circunstancias de trabajo del padre. Y volvió a Murcia con su familia (salvo el padre, liberal huido a Portugal) para iniciarse en el teatro. De padre forastero y madre cartagenera, Isidoro Máiquez, también nacido en la Región, «se impregnó de su coloración, ambiente e idiosincrasia, y tanto él como Romea no solo marcaron una época, sino que dejaron por escrito su visión de la escena, lo cual les hace traspasar fronteras y tiempos», añade Oliva, quien evoca, asimismo, aFernando Díaz de Mendoza (Murcia, 1862) cuyo linaje nobiliario no fue óbice para que, después de contraer matrimonio con María Guerrero, se dedicara al teatro. O Concha Segura, hija de cómicos valencianos que nació en Yecla por avatares de la vida, y que grabó su nombre en la Zarzuela de Madrid. También azaroso fue que «Narciso Ibáñez Menta naciera en esta provincia, aunque su iniciación en la interpretación se produjera en Buenos Aires».

Los pasos de Salzillo

Para el director de escena y miembro fundador de la Academia de las Artes Escénicas de España Mariano de Paco (Murcia, 1972), el hervor teatral de la provincia hunde sus raíces en el fervor de la Semana Santa local. Desde la segunda mitad del siglo XVIII, la ciudad es en la mañana del Viernes Santo el escenario de una de más excelsas representaciones religiosas de cuantas se derraman por España, con los magníficos pasos del escultor Francisco Salzillo como protagonistas destacados. «El teatro en estado puro se ha paseado secularmente por las calles y plazas de nuestra ciudad y la ha dejado envuelta en ritos coloristas, mágicos».

Parada inevitable de la escena local es el TEU, que bebe de la tradición pedagógica y divulgadora de La Barraca de García Lorca. Silvia Montesinos, ayudante de dirección y directora residente del musical La Familia Addams, donde junto a Esteve Ferrer, su director, ha realizado también las adaptaciones de las letras y que se representa en el Teatro Calderón de Madrid, desgrana la importancia de este cantera actoral: «El TEU nos permitió aprender la profesión en todas sus facetas, y nos brindó la oportunidad de poner en pie grandes títulos, salir de gira internacional… En cierto modo, la guerra que algunos estamos dando ahora, ya sea en teatro, cine o televisión, es un reverberación de todo lo que vivimos allí». Por su parte, Antonio Saura, director de la compañía Alquibla y veterano dinamizador de la escena en la Región, considera que el compromiso con el teatro alcanza también al público: «Los murcianos, más que “ver” teatro, somos hacedores de experiencias escénicas».

Hoy, entre los mascarones de proa de la efervescente cultura murciana, figuran cineastas como José Manuel Carrasco y Manuela Burló Moreno; dramaturgos y directores de escena como César Oliva, Mariano de Paco, Juan Pedro Campoy, Silvia Montesinos, Andrés Alemán y Diana de Paco. Profesores como Fulgencio M. Lax. Actores como Ginés García Millán, Daniel Albaladejo, Carlos Santos (último premio Goya Actor Revelación por El hombre de las mil caras, donde encarnaba a Luis Roldán), Juan Meseguer, Esperanza Clares, José Hervás, Manuel Navarro, Marta Nieto, Manuel Menárguez (Acacias 38 en televisión o El cerco de Numancia en el Festival de Teatro Clásico de Mérida), Pepa Aniorte, Morgan Blasco, Alejandro Sigüenza(Amar en tiempos revueltos, Velvet), Carlos Seguí, Celia Nadal, Cristina Alcázar (Cuéntame cómo pasó), Antonio Villa, Antón Valén y Pablo Gomis en el Circo del Sol. Iluminadores como Pedro Yagüe (que atesora dos premios Max). Y el compositor Roque Baños, tres premios Goya y que en esta próxima edición opta a conseguir su cuarta estatuilla con la ópera prima de Adolfo Martínez Pérez, Zona Hostil, en la que interpreta el rap del mismo nombre.

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Ginés García Millán en Herederos. Imagen: TVE.

A Ginés García Millán (Puerto Lumbreras, 1964), uno de los rostros más conocidos para el gran público por su labor en la exitosa Periodistas, o por haber dado vida al primer presidente de la democracia, Adolfo Suárez, lo veremos próximamente en la miniserie La catedral del mar, basada en la novela homónima de Ildefonso Falcones, o en Félix, de Cesc Gay. Ahora rueda la serie de Diagonal TV para Atresmedia Televisión Matadero, «una comedia negra con tintes de thriller en la que interpreto a un murciano…». Cuando rodó su primera película en clave murciana, El infierno prometido, con Chumilla-Carbajosa, y en la que participaron Margarita Lozano, Rafael Álvarez el Brujo y Cristina Marcos, había empezado ya a acariciar el sueño de vivir otras vidas, un anhelo inoculado, en parte, por el escenario en que le tocó en suerte crecer, el hotel Salas de Puerto Lumbreras, del que sus padres eran propietarios: «Desde niño he convivido con gente diferente, de todas las partes del mundo, gentes que me contaban historias maravillosas que despertaron mi curiosidad por otras formas de ser, otros países, otros oficios… Me encantaban las tertulias del bar, las historias de los mayores y las noches de verano en la terraza, hablar, reír, soñar…». Y entonces ocurrió. Una serie, su primera, con Benito Rabal. «Imagínate esas charlas con Paco Rabal. Qué gran contador, qué gran juglar era Paco Rabal».

Irse a Madrid

Pepa Aniorte, (Orihuela, 1972) la desenvuelta Choni de Los Serrano, la Catalina de Águila Roja, se asoma a la pequeña pantalla en Servir y proteger, en TVE, y en El incidente, en Antena 3, donde también exhibe sus tablas en Tu cara me suena. Cuando de niña se arrancaba a cantar flamenco en familia poco imaginaba su abuelo que aquellos primeros aplausos no eran los primeros que recogería: «Recorrí España cantando con orquestas hasta que me di cuenta de que me apetecía andar, vestirme e interpretar un personaje en un teatro». Y en eso llegóLeón de Aranoa con Princesas, y Jaime de Armiñán le dio en Camarón el papel de la prima Pepa, y Luis San Narciso la eligió para el elenco de Volver, y la llamaron para Los Serrano…

La cineasta Manuela Burló Moreno (Cieza, 1978), cuenta cómo la ESAD, donde estudió dirección de actores, fijó el relato de esta carrera de fondo, que ya ha dado dos películas (Rumbos y Cómo sobrevivir a una despedida), seis cortos y una nominación a los Goya (en 2014, por Pipas). A semejanza de García Millán, Burló encontró en su Cieza natal una de sus fuentes de inspiración primordiales: «Hice mi máster particular detrás del mostrador de la tienda de mis padres. Respiraba continuamente conversaciones y vidas de vecinos, sus sufrimientos, sus alegrías. Fue muy inspirador para mi cine, que es muy costumbrista. La Rita de Rumbos, interpretada por Fanny de Castro, era una señora mayor de mi pueblo, con ese desparpajo natural de todas las mujeres que pasaron ante mis ojos».

Luis López Carrasco (Murcia, 1981) marchó a Madrid con dieciocho años a estudiar comunicación audiovisual en la Universidad Complutense y finalmente se diplomó en dirección cinematográfica por la ECAM. Cofundador del colectivo artístico Los Hijos, con su filme El Futuro ha conseguido numerosos premios internacionales —Locarno, BAFICI, seleccionado para la Berlinale Talents— y acaba de estrenar Aliens, seleccionada para el festival de Locarno, retrato de la musa de la Movida Tesa Arranz, del grupo Zombies. López no escatima críticas al sector. «Creo que vivimos un momento dulce cuando el IBAFF —Festival Internacional de Cine de Murcia— disponía de medios y Javier Fuentes dirigía el CENDEAC —Centro de Documentación y Estudios Avanzados de Arte Contemporáneo—. Murcia se podría haber convertido en un foco importante para la cultura y el pensamiento contemporáneo; lamentablemente, no ha habido voluntad institucional para hacer propuestas duraderas».

El director de escena Juan Pedro Campoy es de la misma opinión: «Murcia es una comunidad que no apuesta especialmente por crear una industria de artes escénicas o de audiovisuales. A pesar de tener una televisión autonómica pública, no se hace producción propia y el mercado de trabajo es muy limitado, por lo que prácticamente resulta imposible vivir de esto. De ahí que los artistas tengan que irse a Madrid». García Millán remacha el diagnóstico: «Si los responsables de cultura de nuestra comunidad hicieran un verdadero esfuerzo para apoyar los proyectos de teatro que existen en nuestra región, en unos años se vería un mejor resultado. Hay mucho talento y formación y los jóvenes necesitan desarrollarlo».

El horizonte que dibuja García Millán no debe de distar en demasía del pasado que evoca el profesor de Dirección e Interpretación en la ECAM José Manuel Carrasco (Padam, Life on Mars, Sinécdoque. Una historia de amour fou), y que ha quedado fijado como una suerte de territorio virginal, vibrante, cuajado de riesgos y recompensas. «La Escuela de Arte Dramático que yo viví era un espacio libre de creación y el teatro estaba vivo, los creadores arriesgaban, el público asistía a las representaciones. Se hacía arte, brillaba el talento… Y lo más importante: había alegría, creábamos desde la alegría, desprejuiciados y con una sana ambición. Hace muchos años que me fui y me gusta pensar que sigue ese espíritu… A Madrid siguen llegando creadores murcianos o formados en Murcia y hay algo en su mirada, es su forma de ver el arte que los identifica. Algo orgánico, corporal… casi primitivo».
http://www.jotdown.es/2018/02/murcia-una-escena-teatral-con-denominacion-de-origen/
 
Municipio de Cartagena

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Cartagena es el segundo municipio de mayor número de habitantes de la Región, con 216.301 habitantes (según el padrón del INE de 2015). Pertenece a la comarca del Campo de Cartagena. Limita al norte con los términos municipales de Torre Pacheco y Los Alcázares, al sur con La Unión (municipio al que envuelve totalmente) y el Mar Mediterráneo, por el oeste con los municipios de Mazarrón y Fuente Álamo, y por el este con el Mar Menor. El territorio de Cartagena contiene una amplia diversidad de naturaleza a pesar de la gran actividad minera, industrial y turística a la que se ha visto expuesta a lo largo de su historia.


El origen de la ciudad se remonta al año 230-229 a.C. con la llegada de los primeros europeos. Cartagena es el puerto de las mil culturas, por donde han llegado diversas civilizaciones, culturas y religiones aprovechando su ventajoso emplazamiento geográfico. El general cartaginés Asdrúbal fundó la ciudad, posteriormente Plubio Cornelio Escipión la conquistó y le puso el nombre de Carthago Nova, logrando uno de los momentos de mayor brillantez de su historia. Más tarde, los árabes la llamaron Qartayannat al-Halfa, hasta que en el siglo XIII los cristianos la reconquistaron.


En la actualidad, su historia conforma una amplia oferta turística gracias a la conservación y reconstrucción de su patrimonio, como el Teatro Romano y la Catedral Antigua de Santa María, además de las muchas excavaciones subterráneas que se pueden observar paseando por la ciudad. Además ofrece otros monumentos como el Submarino Peral, inventado por el cartagenero Isaac Peral, o el dedicado a los Héroes de Cavite. En lo cultural, reúne en varios museos mucha de su riqueza ancestral como el Museo Nacional de Arqueología Subacuática (ARQUA), el Museo Naval, el Museo Arqueológico Municipal y el Museo Carmen Conde-Antonio Oliver.


La economía de Cartagena se sustenta de un amplio abanico de labores. La tierra se aprovecha para el uso agrícola, dada la gran tradición comarcal que ha tenido siempre en este sector. El mar es empleado para la pesca, ubicándose fundamentalmente en el barrio de Santa Lucía. El Arsenal, creado en el S.XVIII, le otorga una gran presencia militar. El sector más espectacular por su grandeza y crecimiento es el de la energía, que concentra su producción y transformación en un extenso terreno del Valle de Escombreras, con la refinería más grande de España. Además, el turismo es otro de los sectores que más riqueza aporta a la ciudad, gracias a la llegada de cruceros y al crecimiento poblacional que sufren sus costas en los meses estivales.



Las fiestas de la ciudad portuaria cuentan con un reconocido prestigio. La Semana Santa, declarada de Interés Turístico Internacional, se caracteriza por su orden y espectacularidad en los tronos. Los Carthagineses y Romanos, reconocidas de Interés Turístico Nacional, conmemoran a finales de septiembre la conquista de la antigua ciudad de Qart Hadasht por los romanos. El Carnaval de Cartagena está declarado de Interés Turístico Regional. Además celebra cada año el Festival de La Mar de Músicas, en julio, el Festival Internacional del Jazz, en noviembre.
 
Municipio de Cehegín


Cehegín es un municipio de 15.794 habitantes (según el padrón del INE de 2015) situado en el centro de la Comarca del Noroeste. Limita al Este con los municipios de Mula y Bullas, al Sur con el de Lorca, al Oeste con Caravaca de la Cruz y al Norte con Calasparra y Moratalla. Está enclavado sobre una zona montañosa, con grandes áreas boscosas en las que predomina el pino. Destacan el Coto Real de la Marina, la Sierra de la Lavia, la Sierra de Burete, la Sierra de la Puerta y la Sierra de Gilico y Cambrones.


De la época neolítica ya encontramos restos del paso del hombre por la zona como las cuevas de la Peña Rubia. Los orígenes de la ciudad hay que situarlos en la antigua Begastri, poblada desde la época íbera y sede episcopal de la antigua Deitania, y de los obispos de Cartagena en tiempos de inseguridad costera. Su esplendor decae en la época de Abderramán II y comienza la población en la actual Cehegín. En 1266 Alfonso X otorgó la comarca de Cehegín a la Orden del Temple. Cuando desapareció ésta, pasó a la de Santiago. En 1344 Alfonso XI declaró a Cehegín independiente de Caravaca.



La rica historia ceheginera le hace poseer un importante patrimonio. En su Casco Antiguo, declarado Conjunto Histórico Artístico en 1982, abundan muestras de arquitectura popular de los siglos XII al XIX, casas señoriales de diferente estilo y en las que predomina el renacentista, el barroco murciano, el rococó y el neoclásico entre las que destacan el Palacio Villar de Felices, el Palacio de Jaspe, la Casa del Conde de Campillos, entre muchas otras, fechadas entre los siglos XVI y XIX. También merecen ser citadas las Iglesias de Santa María Magdalena, la de la Soledad o la Iglesia de la Concepción.


Entre sus fiestas locales, destacan la Hoguera de San Sebastián, el 20 de enero; la Semana Santa, con solemnes procesiones donde se pueden admirar bellos pasos, como el de la Virgen de las Angustias, de Roque López; o las fiestas patronales en honor a la Virgen de las Maravillas, Patrona de Cehegín, que se celebran del 8 al 14 de septiembre.




El Pero de Cehegín o de Alcuza, al igual que el resto de manzanas, pertenece a la familia de las Rosáceas y es una variedad de las denominadas de Otoño. Para evitar su desaparición el Ayuntamiento de Cehegín propuso en 2006 a la Consejería de Agricultura de la Región de Murcia un proyecto encargado de promover un estudio con la finalidad de poner en valor esta variedad e intentar desarrollar una industria local diferenciada. En 2008 se pasará a una nueva fase de este proyecto con el injerto y preparación de 3.000 árboles para distribuirlos entre los agricultores de Cehegín con el objetivo de alcanzar una producción mínima de calidad y permitir comercializar el producto con posibilidad de abastecer al mercado. A través de una agricultura limpia y respetuosa con el medio ambiente se pretende llegar a la cifra de 1.000 toneladas anuales. El futuro del Pero de Cehegín o de Alcuza, es la solicitud de la Denominación de Origen
 
Municipio de Cieza


Cieza es un municipio de 35.115 habitantes (según el padrón del INE de 2015) perteneciente a la comarca de la Vega Alta del Segura. Limita al norte con el municipio de Jumilla, al noroeste con la provincia de Albacete, al este con el término municipal de Abarán, al sur sigue limitando con Abarán y con Ricote y Mula, y al oeste con Calasparra. Su paisaje se vertebra en torno al río Segura, destacando parajes tan bellos como el Cañón de Almadenes.


El privilegiado emplazamiento geográfico y la benignidad climática del territorio ciezano han atraído a diversos pueblos y civilizaciones desde tiempos prehistóricos. Las pinturas rupestres de la Sima de la Serreta o el Abrigo Grande del Barranco de los Grajos, o el asentamiento de Bolvax, atestiguan la presencia del hombre en el municipio desde el Paleolítico. En época musulmana alcanza un importante desarrollo cuando Medina Siyâsa se instala en el monte de El Castillo.


El patrimonio ciezano guarda grandes tesoros históricos, en forma de yacimientos arqueológicos y pinturas rupestres, como los ya mencionados de la Sima de la Serreta, el Abrigo Grande del Barranco de los Grajos, y Medina Siyâsa. Gran parte de las piezas encontradas en estas excavaciones se encuentran en el Museo Siyâsa de la ciudad. En el casco cabe destacar varios edificios de interés, como la Iglesia y Convento de San Joaquín, que data del siglo XVII, el Monasterio de la Inmaculada Concepción del siglo XVIII, y la Basílica de Nuestra Señora de la Asunción del siglo XVIII.


La celebración de la Semana Santa de Cieza, declarada de Interés Turístico Regional, y una de las de mayor raigambre en la Región, con más de 450 años de antigüedad, y la Feria y fiestas en honor a San Bartolomé, a finales de agosto, son las festividades de mayor popularidad entre los ciezanos.


Actualmente, la economía del municipio se basa, principalmente,en la agricultura, sobre todo, en el cultivo del melocotón y la aceituna, tras un período de auge de la industria del esparto a mediados del siglo XX.


Entre los ciezanos más ilustres, habría que destacar al bibliófilo Antonio Pérez Gómez, al pintor Manuel Avellaneda, al futbolista y entrenador José Antonio Camacho, al dramaturgo Fernando Martín Iniesta, o al ciclista Mariano Rojas, fallecido en accidente de tráfico cuando comenzaba una prometedora carrera.
 
Municipio de Jumilla

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Jumilla es un municipio de 25.0484 habitantes (según el padrón del INE de 2015) perteneciente a la comarca del Altiplano. Limita al Norte con los términos municipales de Fuente Álamo y Monte Alegre del Castillo; al Sur con Abarán, Cieza y Fortuna; al Este con Abanilla, Pinoso y Yecla; y al Oeste con Ontur, Albatana y Hellín. El medio natural del municipio está condicionado por la acción del hombre, que lo ha transformado para su uso y aprovechamiento, y por el clima, que varía ostensiblemente entre una zona u otra. Esto hace que su paisaje, flora y fauna sea muy heterogéneo, con un gran contraste entre las zonas agrícolas y las de montaña. En sus límites destaca el Parque Regional de la Sierra de El Carche y el de la Sierra de La Pila.


La historia de Jumilla está marcada por ser cruce de caminos y culturas, y por el esfuerzo de sus habitantes por convertirla en la ciudad que hoy es. Los distintos yacimientos arqueológicos esparcidos por el municipio nos hablan de una historia larga e intensa que comenzó hace 450.000 años. Los jumillanos han sido testigos privilegiados y partícipes, en algunos casos, de las guerras entre cartagineses y romanos; de las luchas entre musulmanes y cristianos; de los enfrentamientos durante el marquesado de la Casa de Villena; de la contienda por la independencia de España; o de las batallas entre hermanos durante la Guerra Civil.


El patrimonio del municipio es un fiel reflejo de su historia. Amplio y variado. Su Casco Antiguo, declarado Conjunto Histórico Artístico en 1981, nos sorprende, de vez en cuando, con una iglesia, una casa solariega, una bella reja o un escudo nobiliario, como la Iglesia de Santiago Apóstol, Monumento Nacional; el Casón, construcción funeraria de la época romana y Bien de Interés Cultural; el Palacio del Antiguo Concejo; o el Teatro Vico, entre otros muchos. También destacan, con la misma o mayor importancia, las pinturas rupestres del Abrigo del Buen Aire, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1998; el yacimiento de Coimbra del Barranco Ancho, Bien de Interés Cultural; o su Castillo, en cuyo asentamiento ya había fortificaciones en la Edad del Bronce.


La economía jumillana está basada en la agricultura y en la industria alimentaria y de servicios derivada de ésta. El viñedo es el principal cultivo y sus vinos, con Denominación de Origen propia, han alcanzado fama internacional.


Las fiestas del municipio tienen gran arraigo entre la población jumillana. Las más importantes son la Semana Santa y la Feria. La Semana Santa, declarada de Interés Turístico Nacional, es de las más antiguas de la Región y participan más de tres mil nazarenos. La Feria, que se desarrolla en la semana que se celebra la Virgen de la Asunción (15 de agosto) incluye los Moros y Cristianos y las Fiestas de la Vendimia, más recientes y también declaradas de Interés Turístico Nacional
 
Municipio de La Unión

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La Unión es un municipio de 19.752 habitantes (según el padrón del INE de 2015) perteneciente a la comarca del Campo de Cartagena. Está situado al Sureste de Murcia y enclavado dentro del término municipal de Cartagena, con el que limita al Norte, Este y Oeste; al Sur se encuentra el Mar Mediterráneo. Los parajes de la Sierra Minera áridos y rocosos, son un lugar de interés para visitarlos. En particular, el recorrido hacia la bahía de Portmán, un impresionante mosaico de colores y paisajes sorprendentes. Merece especial mención la Peña del Águila, Espacio Natural Protegido, que se incluye dentro del Parque Regional de Calblanque, Monte de las Cenizas y Peña del Águila.


La historia de La Unión está íntimamente ligada al aprovechamiento de las minas del plomo, de la plata, del cinc y del hierro. En la Antigüedad, íberos, fenicios, cartagineses y romanos ya aprovecharon su riqueza mineral. Tras un período en que prácticamente se abandonó su explotación y se quedó casi despoblada, en 1840 se convirtió en la "California española" y atrajo inmigración, sobre todo andaluza. Combinando épocas de mucha bonanza con crisis del sector, la minería se mantuvo hasta que en 1991 se cerraron definitivamente las explotaciones por su falta de rentabilidad y el agotamiento de los recursos.


Entre los elementos patrimoniales del municipio destacan la villa romana de Paturro, del siglo I-III d.C.; el Antiguo Mercado Público, construido en 1907 durante los años de apogeo de la minería, en el que se celebra en la actualidad el Festival del Cante de las Minas; la Casa del Piñón, de 1899; o la Casa Zapata, de 1913.


La fiesta más importante del municipio es el Festival Internacional del Cante de las Minas, que se celebra en agosto desde 1961. En él se dan cita numerosos artistas, que ofrecen un abundante repertorio de cante flamenco y coplas recitadas, convirtiéndolo en la cita flamenca anual más importante del mundo. Fue declarado de Interés Turístico Internacional en 2006.
http://www.regmurcia.com/servlet/s.Sl?sit=a,59
 
Municipio de Campos del Río

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Las primeras alusiones a Campos del Río datan de 1257, cuando un privilegio otorgado por Alfonso X el Sabio en Alpera cedía Campos como aldea a Mula. Sin embargo, los hallazgos de restos de cerámica musulmana encontrados en el parque natural, nos permiten suponer que la zona estaba ya habitada en los siglos XI y XII.


Desde el punto de vista patrimonial los principales puntos de interés del municipio son la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista, que tiene una imagen de Roque López, discípulo de Salzillo, el edificio de la Torre del Reloj y el Mirador del Castillo, desde donde se divisan unas impresinantes vistas. También destaca por su interés la calle del Rosario formada casi en su totalidad por casas señoriales de principios del siglo XX.


El paisaje más característico de Campos del Río es el compuesto por una red de Badlands o "paisaje lunar", que ejerce un fuerte contraste con el valle del Río Mula, a lo largo del cual brota una huerta esplendorosa, que resalta por su verdor frente a la escasa vegetación que presentan los barrancos.


Buena parte de la población de Campos del Río (2.083 habitantes), está dedicada al trabajo de la conserva, estando ubicada en la localidad una de las principales fábricas del sector en la Región, cuyas exportaciones llegan a países como Alemania, Estados Unidos o Inglaterra.


Las fiestas de referencia en el municipio son San Antón, el 17 de enero, fecha en la que se sale al campo a comer, las fiestas en honor a San José en la pedanía de Los Rodeos, el 19 de marzo, la Mona de Pascua, el Domingo de Resurrección, las fiestas patronales en honor a San Juan, el 24 de junio y la gran fiesta del deporte "Campos Joven", en el mes de septiembre

http://www.regmurcia.com/servlet/s.Sl?sit=a,73
 
Bandas de Música de la Región de Murcia

En la Región de Murcia, al igual que en toda España, las bandas de música son algo más que una arraigada tradición. Desempeñan un papel fundamental en las fiestas locales, en las procesiones de Semana Santa, y en todo tipo de celebraciones.

Ilustres murcianos formaron parte de estas agrupaciones musicales, compuestas principalmente por instrumentos de viento y de percusión, como Acisclo Díaz, fundador de la Banda de la Misericordia y director de la Banda del Teatro Romea, cuyo hijo dirigió la Banda de Águilas, o David Templado, director durante cuatro décadas de la Banda Municipal de Abarán.

 
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