Hola primxs.
Me parece que es la primera vez que abro un tema, pero es que necesito algo de consejo ya que ayer percibí una cierta actitud "tóxica" en mi pareja.
Desde hace muchos años, él y sus amigos tienen la tradición de hacer una escapadita de 3-4 días durante Semana Santa, aprovechando los días festivos en común (cosa totalmente comprensible).
Yo, en estos 3 últimos años, nunca he puesto objeción a ello, es más, siempre lo he tomado como 3-4 días para escaparme al pueblo con mis abuelos, padres y hermanos y pasar esos días en familia (vivo en otra ciudad). Pero este año ha pasado algo un poco distinto. El pasado septiembre teníamos un viaje organizado por nuestro aniversario (el destino que más ilusión me ha hecho siempre, todo sea dicho) cuyo vuelo fue cancelado en el último momento. Desafortunadamente yo únicamente tengo vacaciones todo el mes de agosto (¬¬) por lo que el siguiente periodo de tiempo que hacía posible el viaje era Semana Santa, en alguna ocasión desde ese momento lo dejé caer y en ningún momento él se cerró a ello. Además, por trabajo, este año mayo y junio los voy a pasar en otro pais, pasaremos una pequeña temporadita separados, por lo que no se me hacía descabellado hacer esa escapadita romántica en Semana Santa.
Ayer me comentó que ya tienen destino para su viaje tradicional (cuando hasta hace nada decía que estaba muy en el aire y que con toda probabilidad no sería porque uno de ellos va a ser papi antes de verano y otro está organizando su boda), a lo que se me escapó que parecía que teníamos nuestro superviaje gafado. Cuando quiso saber a qué me refería le dije que tenía la ilusión de aprovechar esos días para irnos juntos y que era mejor que lo dejáramos estar porque no veía que se fuera a hacer (soy defensora de la idea de que lo que se va dejando... al final no se hace).
No sé cómo se dio la conversación que acabó diciéndome cosas así:
- Eres una radical, ¿si no es cuando tú quieres ya no se hace? (Realmente la situación es que yo no puedo cogerme días para hacer escapaditas, mis vacaciones son íntegras en agosto, por lo que fuera de ahí he de aprovechar los festivos, como Semana Santa)
- ¿Me vas a quitar de hacer este viaje que es una tradición? (Yo no dije nada de eso. Simplemente dije que parecía que teníamos el viaje gafado (tercera vez que se nos cae) y que era una lástima porque veía esos días ideales para hacerlo por fin. En cualquier caso - y esto no lo dije, es un pensamiento - este año vamos a por nuestras cuartas Pascuas juntos y no he celebrado ninguna con él por mantener esta tradición, incluso en el caso de haber hecho nuestro viaje no me parecía para tanto.
Cuando le pregunto que, si esto es una tradición, siempre va a ser así, para saber qué esperar futuros años (recuerdo que por el momento en 4 años no he pasado ni unas Pascuas con mi chico): ahora te pones dramática.
Cuando además le explico que no le veo mucho sentido a hacer un viaje de aniversario en agosto como me propone (11 meses después de dicho aniversario): ¿esto qué es, una rabieta? qué perra con tener que hacerlo sí o sí en abril, ¿acaso se va a acabar el mundo? espabila.
Finalmente, y ya por no querer "discutir" más, le digo: "por favor, para otra ocasión sé más claro y franco, me dices que esos días están bloqueadísimos por el viaje y paso de mirar cosas e ilusionarme", su respuesta: ahora me llamas mentiroso.
En fin, que en un principio estaba algo triste porque tenía la ilusión de finalmente hacer este viaje en abril. No me importa que se vaya como cada año con sus amigos (al cual estoy invitada, por cierto), porque realmente su vida está muy cerrada a su trabajo y a mí y siempre soy la prioridad, y comprendo que es la única ocasión en el año en el que 4 personas se pueden coordinar y pasar tiempo juntos. Aunque hubiese agradecido que por un año "cediera" por darme el gusto, la verdad. Ni una Pascua en 4 años hemos pasado juntos. Ahora estoy hecha polvo por todos esos comentarios que me confunden. No sé si en realidad he sido tan mala persona o que él es un listo de cuidao...
¿Verdaderamente era algo tan alocado, viendo que su viaje estaba en el aire y eran los únicos días que yo podía, yendome además dos semanas después dos meses fuera de España, ilusionarme con hacer nuestro viaje? ¿Es tan ruin "creer" que quizá por un año podía cancelar el suyo para hacer el de pareja? Porque ya no sé qué pensar. Me ha hecho sentir una novia horrible.
Gracias
Me parece que es la primera vez que abro un tema, pero es que necesito algo de consejo ya que ayer percibí una cierta actitud "tóxica" en mi pareja.
Desde hace muchos años, él y sus amigos tienen la tradición de hacer una escapadita de 3-4 días durante Semana Santa, aprovechando los días festivos en común (cosa totalmente comprensible).
Yo, en estos 3 últimos años, nunca he puesto objeción a ello, es más, siempre lo he tomado como 3-4 días para escaparme al pueblo con mis abuelos, padres y hermanos y pasar esos días en familia (vivo en otra ciudad). Pero este año ha pasado algo un poco distinto. El pasado septiembre teníamos un viaje organizado por nuestro aniversario (el destino que más ilusión me ha hecho siempre, todo sea dicho) cuyo vuelo fue cancelado en el último momento. Desafortunadamente yo únicamente tengo vacaciones todo el mes de agosto (¬¬) por lo que el siguiente periodo de tiempo que hacía posible el viaje era Semana Santa, en alguna ocasión desde ese momento lo dejé caer y en ningún momento él se cerró a ello. Además, por trabajo, este año mayo y junio los voy a pasar en otro pais, pasaremos una pequeña temporadita separados, por lo que no se me hacía descabellado hacer esa escapadita romántica en Semana Santa.
Ayer me comentó que ya tienen destino para su viaje tradicional (cuando hasta hace nada decía que estaba muy en el aire y que con toda probabilidad no sería porque uno de ellos va a ser papi antes de verano y otro está organizando su boda), a lo que se me escapó que parecía que teníamos nuestro superviaje gafado. Cuando quiso saber a qué me refería le dije que tenía la ilusión de aprovechar esos días para irnos juntos y que era mejor que lo dejáramos estar porque no veía que se fuera a hacer (soy defensora de la idea de que lo que se va dejando... al final no se hace).
No sé cómo se dio la conversación que acabó diciéndome cosas así:
- Eres una radical, ¿si no es cuando tú quieres ya no se hace? (Realmente la situación es que yo no puedo cogerme días para hacer escapaditas, mis vacaciones son íntegras en agosto, por lo que fuera de ahí he de aprovechar los festivos, como Semana Santa)
- ¿Me vas a quitar de hacer este viaje que es una tradición? (Yo no dije nada de eso. Simplemente dije que parecía que teníamos el viaje gafado (tercera vez que se nos cae) y que era una lástima porque veía esos días ideales para hacerlo por fin. En cualquier caso - y esto no lo dije, es un pensamiento - este año vamos a por nuestras cuartas Pascuas juntos y no he celebrado ninguna con él por mantener esta tradición, incluso en el caso de haber hecho nuestro viaje no me parecía para tanto.
Cuando le pregunto que, si esto es una tradición, siempre va a ser así, para saber qué esperar futuros años (recuerdo que por el momento en 4 años no he pasado ni unas Pascuas con mi chico): ahora te pones dramática.
Cuando además le explico que no le veo mucho sentido a hacer un viaje de aniversario en agosto como me propone (11 meses después de dicho aniversario): ¿esto qué es, una rabieta? qué perra con tener que hacerlo sí o sí en abril, ¿acaso se va a acabar el mundo? espabila.
Finalmente, y ya por no querer "discutir" más, le digo: "por favor, para otra ocasión sé más claro y franco, me dices que esos días están bloqueadísimos por el viaje y paso de mirar cosas e ilusionarme", su respuesta: ahora me llamas mentiroso.
En fin, que en un principio estaba algo triste porque tenía la ilusión de finalmente hacer este viaje en abril. No me importa que se vaya como cada año con sus amigos (al cual estoy invitada, por cierto), porque realmente su vida está muy cerrada a su trabajo y a mí y siempre soy la prioridad, y comprendo que es la única ocasión en el año en el que 4 personas se pueden coordinar y pasar tiempo juntos. Aunque hubiese agradecido que por un año "cediera" por darme el gusto, la verdad. Ni una Pascua en 4 años hemos pasado juntos. Ahora estoy hecha polvo por todos esos comentarios que me confunden. No sé si en realidad he sido tan mala persona o que él es un listo de cuidao...
¿Verdaderamente era algo tan alocado, viendo que su viaje estaba en el aire y eran los únicos días que yo podía, yendome además dos semanas después dos meses fuera de España, ilusionarme con hacer nuestro viaje? ¿Es tan ruin "creer" que quizá por un año podía cancelar el suyo para hacer el de pareja? Porque ya no sé qué pensar. Me ha hecho sentir una novia horrible.
Gracias
Última edición: