Infidelidad o engaño qué más da

@guesswho yo opino como tú,no se puede amar a dos personas a la vez,vamos,yo no podría,puede que de alguien te gusten sus conversaciones,o su buen sentido del humor,o su determinación en la vida....pero amar a dos personas a la vez de la misma forma...yo no lo veo.
Es cierto que hay tantas situaciones como personas y lo respeto aunque no lo entienda.
Yo pienso que la mayoría de los que tienen un amante es básicamente por el s*x*,quizá les aburra por su pareja,y les pone esa situación de relación clandestina sin rutinas,solo para los buenos ratos.
A mí es que el s*x* por el s*x*,por probar cosas nuevas,por diversión,.... no me va,no me va con alguien que apenas conozca,yo necesito confianza y complicidady esas dos cosas solo se consiguen con el tiempo.
Yo no creo en las medias tintas,si quieres probar cosas nuevas hazlo,pero se honesto con la otra parte,si acepta esa relación abierta adelante,pero si decides probar cosas nuevas sin que la otra parte lo sepa....me ahorro el apelativo que me viene a la cabeza.
Es de ser muy muy egoista querer tenerlo todo,no es posible tenerlo todo,pero es ley de vida,se acepta y punto,pero tenerlo todo a base de engaño no,no es ético,es egoista.
 
Bombilla, te voy a decir una cosa que a lo mejor te produce un cortocircuíto mental:

Hay personas que son felices en sus matrimonios...como lo oyes!!!

Alucinante, verdad?
Si lees todos los posts que están relacionados, a lo mejor entiendes este último....o te da un cortocircuito.
 
@guesswho yo opino como tú,no se puede amar a dos personas a la vez,vamos,yo no podría,puede que de alguien te gusten sus conversaciones,o su buen sentido del humor,o su determinación en la vida....pero amar a dos personas a la vez de la misma forma...yo no lo veo.
Es cierto que hay tantas situaciones como personas y lo respeto aunque no lo entienda.
Yo pienso que la mayoría de los que tienen un amante es básicamente por el s*x*,quizá les aburra por su pareja,y les pone esa situación de relación clandestina sin rutinas,solo para los buenos ratos.
A mí es que el s*x* por el s*x*,por probar cosas nuevas,por diversión,.... no me va,no me va con alguien que apenas conozca,yo necesito confianza y complicidady esas dos cosas solo se consiguen con el tiempo.
Yo no creo en las medias tintas,si quieres probar cosas nuevas hazlo,pero se honesto con la otra parte,si acepta esa relación abierta adelante,pero si decides probar cosas nuevas sin que la otra parte lo sepa....me ahorro el apelativo que me viene a la cabeza.
Es de ser muy muy egoista querer tenerlo todo,no es posible tenerlo todo,pero es ley de vida,se acepta y punto,pero tenerlo todo a base de engaño no,no es ético,es egoista.

Fíjate en lo que resalto en negrita: "es ser muy egoísta querer tenerlo todo". Es que yo creo que ahí está el problema, en querer tenerlo todo. La pareja tiene que ser el amante, el mejor amigo, el hombro sobre el que llorar, la persona con la que reír, el confidente, el que te aconseja, el que está contigo en los buenos momentos, en los malos, el padre de tus hijos, tu compañero de juegos, de risas... eso es IMPOSIBLE, no se puede exigir de una persona que lo sea todo. Por poner un ejemplo que sonará frívolo pero que expresa muy bien lo que quiero decir, es como si al dentista le exiges que sea tu masajista, tu fisioterapeuta, tu psicólogo, tu cardiólogo... imposible, para cada dolencia vas a un profesional distinto. Con las parejas pasa lo mismo: no pueden ejercer todos los roles a la perfección.

A mí, siempre que alguien me dice que el s*x* fuera del matrimonio está mal, le pregunto por qué. Nadie me lo ha sabido justificar todavía. Sólo un tío fue sincero y me dijo "supongo que estoy condicionado por la educación recibida y por la sociedad, la verdad es que no sabría decirte por qué está mal". Yo siempre digo lo mismo y hay gente que se ha incluso ofendido: ¿Por qué se considera infidelidad el s*x* y no un masaje no terapéutico? Por no terapéutico me refiero a que no hay ninguna dolencia, simplemente una persona se va a dar un masaje relajante porque le apetece. ¿No se supone que algo tan íntimo lo tendría que hacer la pareja? Pero no, eso no se considera motivo de ruptura. En el fondo, es un tema cultural: hay países en los que una mujer y un hombre que no estén casados no pueden ni tomar un café porque las leyes lo consideran adulterio. ¿Quién dice lo que está bien y lo que está mal?

Antes, cuando no existían los anticonceptivos, el s*x* tenía una función reproductiva y entiendo que el s*x* fuera de la pareja implicaba problemas de patrimonio. En el fondo, la monogamia supongo que apareció cuando apareció la propiedad privada: lo tuyo es tuyo y lo mío es mío. Pero hoy en día, con los métodos anticonceptivos que hay, no le veo ninguna función evolutiva a la exclusividad sexual. Que, como dice mi adorada Esther Perel, el concepto de monogamia también ha cambiado: antes se era monógamo de por vida y ahora se es monógamo con la pareja de turno. "La monogamia antes era una sola pareja sexual para toda la vida y ahora es una sola pareja sexual cada vez".
 
¿Pero esas parejas saben que su pareja tiene un amante?
Yo creo que muchas lo intuyen pero miran hacia otro lado porque es más cómodo engañarse.
Entonces no se puede decir que sean felices en su matrimonio.

Yo creo que no lo son. A no ser que tengas una relación abierta, si tu escala de valores dice que el s*x* fuera del matrimonio está mal y es motivo de finiquitar una relación y, sin embargo, miras para otro lado sabiendo que tu pareja te está engañando, no puede ser feliz. Otra cosa es que te compense mantener esa relación por X motivos: económicos, de dependencia emocional o de miedo a la soledad. Ya he dicho muchas veces que he conocido un par de casos así: consentidores que miran para otro lado porque prefieren pasar por el calvario de saber que les están engañando a separarse y quedarse solos. Buf, antes se pegan un tiro que dejan a la parienta.
 
https://www.lavozdegalicia.es/notic...oles-vez-infieles/00031304094985298728744.htm

Los españoles, cada vez más infieles
Cerca de la mitad de la población ha tenido una aventura al margen de la pareja.

COLPISA
29/04/2011 20:44 H

Razones hay miles: no damos con la horma de nuestro zapato, comer toda la vida lo mismo es muy aburrido, hay necesidad de sentirse joven y deseado, ganas de salir de la rutina y por supuesto dar rienda suelta a una fantasía sexual o a un calentón.

El caso es que los españoles cada vez son más infieles. Lejos quedan ya los tiempos en que sólo los hombres tenían derecho a tener querida y por lo que dicen los expertos, en la actualidad, el número de varones que echan una canita al aire de vez en cuando es casi similar al de mujeres. «Estamos ya casi a la altura», afirma Anna R. Alós, autora de El discreto encanto de la infidelidad(Esencia). Según Alós, el 52% de los hombres frente al 48% de las féminas han tenido alguna aventura al margen de la pareja o el matrimonio. «Nosotras llegamos a la infidelidad por las neuronas y ellos por las partes bajas», añade.


Alicia Gallotti, escritora experta en temas de sexualidad y portavoz del portal VictoriaMilan.es, la primera página de citas online especialmente creada para gente casada o con pareja, cree que la sociedad española es cada vez más abierta de mente, lo que ha favorecido la equiparación entre sexos. Y matiza en algo los datos aportados por Alós. «Recientes estudios demuestran que el 50% de las mujeres casadas o con pareja estable reconocen haber sido infieles alguna vez o desearían serlo, cuando en el caso de los hombres el porcentaje alcanza el 45%», señala. Eso sí, aclara que en este caso el dato responde a infidelidades consumadas.

Para Gallotti, la clave está en la «pasión», que se va desgastando poco a poco al entrar en la rutina diaria. «Con la infidelidad buscamos lo que nos falta, a veces simplemente nos basta con que nos escuchen», señala. Pero, ¿qué entendemos por ser un adúltero/a? Alós lo aclara: «Infidelidad es una cosa y la traición otra». La diferencia, según la escritora, está en la cercanía. «Cuando te la pegan con la vecina, tu hermana, tu prima o tu amiga eso es traición», afirma. El deseo mental y la fantasía, en cambio, no tienen nada que ver con los cuernos, apunta Gallotti.

Y la pregunta del millón, ¿si hemos sido infieles, debemos contárselo a la pareja? Ambas contestan rotundamente que no. Es más, aconsejan no hacerlo. «Sería maravilloso poder contarlo, pero aún no estamos preparados como sociedad», remata Alicia. «El perdón no existe. En todo caso se aprende a convivir con ello», concluye Alós.

 
Yo creo que no lo son. A no ser que tengas una relación abierta, si tu escala de valores dice que el s*x* fuera del matrimonio está mal y es motivo de finiquitar una relación y, sin embargo, miras para otro lado sabiendo que tu pareja te está engañando, no puede ser feliz. Otra cosa es que te compense mantener esa relación por X motivos: económicos, de dependencia emocional o de miedo a la soledad. Ya he dicho muchas veces que he conocido un par de casos así: consentidores que miran para otro lado porque prefieren pasar por el calvario de saber que les están engañando a separarse y quedarse solos. Buf, antes se pegan un tiro que dejan a la parienta.
O al pariente, que mira que hay mujeres que se agarran a uno como a un clavo ardiente.
 
Los españoles, los más infieles de Europa.

https://www.vanitatis.elconfidencia...dulterio-tinder-ashley-madison-happn_1321527/

Cuatro pistas para saber por qué los españoles somos los más infieles de Europa

No es una cuestión de s*x*: tanto ellos como ellas sucumben a los deslices. ¿Las excusas? Como siempre, variopintas. Aquí, la explicación de por qué renunciamos a la monogamia
cuatro-pistas-para-saber-por-que-los-espanoles-somos-los-mas-infieles-de-europa.jpg

España es el quinto país más infiel por detrás de Estados Unidos, Canadá, Australia y Brasil ('Mad Men'/AMC)


El portal Ashley Madison, una especie de Tinder para casados, lo tiene claro: "España es el país más infiel de Europa". Y no solo es una cuestión de esta región del viejo continente. A nivel mundial, también ocupamos un lugar destacado: el quinto. Un puesto que nos sitúa por detrás de Estados Unidos, Canadá, Australia y Brasil. Así que tanto si has pecado como si has sido víctima de una infidelidad, consuélate y piensa que no estás solo.

Curiosamente, la infidelidad también varía dependiendo del lugar en el que vivas. En las capitales de provincia resulta más fácil escabullirse de la cama propia y colarse en la ajena, por lo que Madrid (con el 12,9% de usuarios del portal) y Barcelona (8,5%) aglutinan buena parte de la cornamenta patria, seguidas de Valencia (5,4%), Sevilla (5,1%) y Palma de Mallorca (3,8%). Y hablamos únicamente de infieles convictos y confesos que han buscado echar una canita al aire en un portal especializado en estos menesteres; a esos deberíamos sumarles los que, sin planificarlo, han escondido alguna vez su anillo de compromiso. Según una encuesta del instituto Ipsos, el 30% ha caído alguna vez en la tentación y, pese a que las mujeres se están subiendo al carro (26%), los hombres siguen ganando por goleada (35%).

Radiografía de un/una infiel
Las mujeres se ponen a ello antes que los hombres, el perfil de la fémina que olvida su compromiso suele rondar los 34 años. La mayoría están casadas y las principales profesiones que ejercen no pueden ser más heterodoxas: amas de casa, administrativas, maestras y ejecutivas. Los hombres, en cambio, esperan a los 40 para conocer otros lechos. La edad del infiel, al hilo de los datos aportados por Ashley Madison, se sitúa en torno a los 43 años y las profesiones más proclives son las de empresario, directivo, médico o abogado. La cantidad de aventuras también varía dependiendo del s*x*. Ellos ostentan un promedio anual de 2,4 y ellas de 1,3.

Los síntomas
Según varios estudios, la cita con el o la amante se prepara, aproximadamente, con una semana de antelación para poder preparar la coartada. Y las excusas no han variado mucho en las últimas décadas: reuniones de trabajo, cenas con amigos, tardes de compras y recados e, incluso, viajes laborales. Si la historia se alarga en el tiempo, es habitual notar algunos cambios físicos en la pareja: va más al gimnasio, compra ropa nueva, hace dieta o, incluso, se hace algún arreglo estético. También se gasta más dinero, nada resulta gratis en esta vida: entre las citas y algún que otro regalo el presupuesto se dispara. Los teléfonos móviles son los encargados de la comunicación entre los amantes. Los más 'profesionales' en el tema llegan a tener un segundo teléfono para comunicarse con su amada o amado ocasional.

Por qué engañan ellos
El psicoterapeuta estadounidense Robert Weiss recogió en el libro 'Todo sobre la infidelidad masculina' las razones que llevan a un hombre a engañar a su mujer. Suelen ser personas que realmente nunca creyeron en la monogamia, aunque es probable que le hicieran creer que sí a su pareja. En general, se sienten inseguros, ya sea por su físico o su situación social, y atraer a una nueva persona es un modo de vencer ese sentimiento. En general, no son conscientes de las repercusiones de sus acciones, creen que si su pareja no se entera, no están haciendo ningún mal a su relación.


Pueden estar atormentados por conflictos emocionales en su infancia. Suelen tener una idea equivocada del amor: cuando no experimentan la pasión del principio, han de buscarla en otro lugar y pueden sentir que su vida, en los demás aspectos, es aburrida. En algunas ocasiones, puede que quieran acabar con la relación que tienen y no se atrevan a hacerlo, por lo que buscan una escapatoria para no afrontar el problema.

Por qué engañan ellas
La psicóloga alemana Gisela Runte entrevistó a mujeres de entre 28 y 56 años para llegar a discernir el móvil del engaño. Una de las razones principales es la insatisfacción sexual y sentir que no despiertan el deseo de su pareja. La infidelidad también es usada como un castigopor algún comportamiento del hombre que no es el deseado (desde que no se implique en las tareas del hogar hasta que no se tome en serio sus problemas).


Los viajes, según descubrió la investigadora, son también un momento en que las mujeres se sienten más liberadas y más tentadas. Al igual que los hombres, también pueden desear el fin de la relación y no encontrar la forma de darle carpetazo. Y en concordancia con el s*x* opuesto, el miedo al compromiso puede ser otra razón de peso.

 
Última edición por un moderador:
Fíjate en lo que resalto en negrita: "es ser muy egoísta querer tenerlo todo". Es que yo creo que ahí está el problema, en querer tenerlo todo. La pareja tiene que ser el amante, el mejor amigo, el hombro sobre el que llorar, la persona con la que reír, el confidente, el que te aconseja, el que está contigo en los buenos momentos, en los malos, el padre de tus hijos, tu compañero de juegos, de risas... eso es IMPOSIBLE, no se puede exigir de una persona que lo sea todo. Por poner un ejemplo que sonará frívolo pero que expresa muy bien lo que quiero decir, es como si al dentista le exiges que sea tu masajista, tu fisioterapeuta, tu psicólogo, tu cardiólogo... imposible, para cada dolencia vas a un profesional distinto. Con las parejas pasa lo mismo: no pueden ejercer todos los roles a la perfección.

A mí, siempre que alguien me dice que el s*x* fuera del matrimonio está mal, le pregunto por qué. Nadie me lo ha sabido justificar todavía. Sólo un tío fue sincero y me dijo "supongo que estoy condicionado por la educación recibida y por la sociedad, la verdad es que no sabría decirte por qué está mal". Yo siempre digo lo mismo y hay gente que se ha incluso ofendido: ¿Por qué se considera infidelidad el s*x* y no un masaje no terapéutico? Por no terapéutico me refiero a que no hay ninguna dolencia, simplemente una persona se va a dar un masaje relajante porque le apetece. ¿No se supone que algo tan íntimo lo tendría que hacer la pareja? Pero no, eso no se considera motivo de ruptura. En el fondo, es un tema cultural: hay países en los que una mujer y un hombre que no estén casados no pueden ni tomar un café porque las leyes lo consideran adulterio. ¿Quién dice lo que está bien y lo que está mal?

Antes, cuando no existían los anticonceptivos, el s*x* tenía una función reproductiva y entiendo que el s*x* fuera de la pareja implicaba problemas de patrimonio. En el fondo, la monogamia supongo que apareció cuando apareció la propiedad privada: lo tuyo es tuyo y lo mío es mío. Pero hoy en día, con los métodos anticonceptivos que hay, no le veo ninguna función evolutiva a la exclusividad sexual. Que, como dice mi adorada Esther Perel, el concepto de monogamia también ha cambiado: antes se era monógamo de por vida y ahora se es monógamo con la pareja de turno. "La monogamia antes era una sola pareja sexual para toda la vida y ahora es una sola pareja sexual cada vez".


Yo te voy a responder segun mi punto de vista.

Para mi el s*x* fuera del matrimonio/o de la pareja es motivo de ruptura o de divorcio... porque yo no lo hago con cualquiera porque no quiero, porque no me pone, porque no me apetece, porque para mi es especial y si me comprometo con mi pareja, ese s*x* que tenemos para mi es diferente, mentalmente y fisicamente es imposible para mi tener esa intimidad con otro. Y para el tambien. O por lo menos, eso hemos acordado. Si me viene de frente, al principio de conocernos y me dice "oye, que para mi el s*x* es como tomarme una cerveza, puedo el cualquier bar"...pues probablemente ni hubiera salido con el, ni me hubiera casado con el. Ni esperaria fidelidad de el.

Darme un masaje terapeutico? Pues mira, me tumbo en una camilla, pago por un servicio, me dan un masaje, doy las gracias, me llevo la factura. Y la masajista o el masajista...no me despierta nada, ni siento una conexion con el, ni le quiero, ni me quieren, ni me que digo " es que quiero despertame contigo todos los dias de mi vida."

Que hay gente que para ellos el s*x* no es eso? Perfecto. Hay tienes a Sartre y Beauvoir que la conexion era intelectural..y el s*x* era meramente un intercambio de fluidos y ejercicio y cambiaban de amante como de camisa.

Pero para mi...el s*x* es algo con lo que me uno a mi pareja...y la actividad intelectual...esa prefiero tenerla con mis companeros de trabajo, por ejemplo.
 
Fíjate en lo que resalto en negrita: "es ser muy egoísta querer tenerlo todo". Es que yo creo que ahí está el problema, en querer tenerlo todo. La pareja tiene que ser el amante, el mejor amigo, el hombro sobre el que llorar, la persona con la que reír, el confidente, el que te aconseja, el que está contigo en los buenos momentos, en los malos, el padre de tus hijos, tu compañero de juegos, de risas... eso es IMPOSIBLE, no se puede exigir de una persona que lo sea todo. Por poner un ejemplo que sonará frívolo pero que expresa muy bien lo que quiero decir, es como si al dentista le exiges que sea tu masajista, tu fisioterapeuta, tu psicólogo, tu cardiólogo... imposible, para cada dolencia vas a un profesional distinto. Con las parejas pasa lo mismo: no pueden ejercer todos los roles a la perfección.

A mí, siempre que alguien me dice que el s*x* fuera del matrimonio está mal, le pregunto por qué. Nadie me lo ha sabido justificar todavía. Sólo un tío fue sincero y me dijo "supongo que estoy condicionado por la educación recibida y por la sociedad, la verdad es que no sabría decirte por qué está mal". Yo siempre digo lo mismo y hay gente que se ha incluso ofendido: ¿Por qué se considera infidelidad el s*x* y no un masaje no terapéutico? Por no terapéutico me refiero a que no hay ninguna dolencia, simplemente una persona se va a dar un masaje relajante porque le apetece. ¿No se supone que algo tan íntimo lo tendría que hacer la pareja? Pero no, eso no se considera motivo de ruptura. En el fondo, es un tema cultural: hay países en los que una mujer y un hombre que no estén casados no pueden ni tomar un café porque las leyes lo consideran adulterio. ¿Quién dice lo que está bien y lo que está mal?

Antes, cuando no existían los anticonceptivos, el s*x* tenía una función reproductiva y entiendo que el s*x* fuera de la pareja implicaba problemas de patrimonio. En el fondo, la monogamia supongo que apareció cuando apareció la propiedad privada: lo tuyo es tuyo y lo mío es mío. Pero hoy en día, con los métodos anticonceptivos que hay, no le veo ninguna función evolutiva a la exclusividad sexual. Que, como dice mi adorada Esther Perel, el concepto de monogamia también ha cambiado: antes se era monógamo de por vida y ahora se es monógamo con la pareja de turno. "La monogamia antes era una sola pareja sexual para toda la vida y ahora es una sola pareja sexual cada vez".

Hay una cosa con la que no estoy deacuerdo contigo, en lo que una pareja no puedo serlo todo, yo antes lo pensaba, tenía mis parejas y bueno para algunas cosas bien para otras peor,pero jamás he sentido esa sensación de que una persona era TODO hasta ahora, y no es que lleve un año con mi chico y este enchochada no, llevo ya 9 años y cada dia vamos a mejor. es mi mejor amigo,mi amante, la persona que mas me entiende, nos reímos muchísimo juntos, y a todas horas, no nos falta el tema de conversacion, que tambien discutimos, pero tenemos la norma de jamás acostarnos enfadados y de que si en una discusión uno se rie por lo que sea ya a tomar por culo la pelea.

y ahora entiendo la monogamia, jamas habia comprendido lo de tener una sola pareja sexual, me parecía antinatural, por desgracia a mis antiguas parejas si les fui infiel, cosa que me arrepiento muchisimo, pero ahora no me apetece acostarme con nadie que no sea mi chico, veo a otros tios y se que estan muy buenos y tal pero no me apetece acostarme con ellos.

Creo que yo ahora he descubierto el amor, yo que era la persona más independiente y pasota del mundo, ahora sí por lo que sea no veo a mi chico un dia tengo la sensación de que me falta algo. No se si ese amor durará para siempre, ojala, pero si algun dia nos dejamos de querer, espero encontrar a otra persona que me haga sentir igual
 
@Ana.s

Es que yo creo que puede existir, por supuesto, pero no creo que sea lo común, ya por un simple tema de probabilidad estadística: el mundo es muy grande y hay muchísima gente en él, hay lugares y personas que no conoceremos jamás, y allí o entre ellos podría estar esa media naranja, pero claro, es difícil que los caminos se crucen. Entonces, ¿qué hacemos? Lo que dice Esther Perel en su libro: "Aparearnos en cautiverio". De lo que tienes cerca, eliges lo que más se adapta a ti. Ya digo que es maravilloso que hayas encontrado a esta persona, pero sigo pensando que que una persona lo sea TODO es incluso peligroso.
 
@Ana.s

Es que yo creo que puede existir, por supuesto, pero no creo que sea lo común, ya por un simple tema de probabilidad estadística: el mundo es muy grande y hay muchísima gente en él, hay lugares y personas que no conoceremos jamás, y allí o entre ellos podría estar esa media naranja, pero claro, es difícil que los caminos se crucen. Entonces, ¿qué hacemos? Lo que dice Esther Perel en su libro: "Aparearnos en cautiverio". De lo que tienes cerca, eliges lo que más se adapta a ti. Ya digo que es maravilloso que hayas encontrado a esta persona, pero sigo pensando que que una persona lo sea TODO es incluso peligroso.

Yo entiendo muy bien a esas personas que se casaron con 20 años y 10 años después lo han perdido todo, tienen hijos y una vida en común, pero nada mas. veo muy normal que no quieran vivir así, y que busquen el amor. Mantener una relación por los niños es al final lo peor para ellos. Pero eso no justifica el engaño... y si una relación no va bien los dos se dan cuenta y seguro que dejar esa relación es lo mejor para todos. Yo he vivido en una casa donde mis padres se odiaban pero seguian juntos por los hijos y ya hos digo que es lo peor, los niños son felices donde hay amor, cariño y felicidad. No se puede prometer amor eterno porque eso no lo controlamos nosotros, pero mientras que dure sea lo mejor posible si.
 
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