Infidelidad o engaño qué más da

Estoy de acuerdo, según en que entorno está más normalizado o menos,depende de las creencias.Pienso por otra parte que tiene que conllevar tristeza,porque dos partes que iniciaron un proyecto juntos con mucha ilusión no han sido capaces de llevarlo a cabo,y si hay niños ni te cuento.A no ser que sea una situación muy dramática, maltrato,adicciones....y se viva como una liberación, debe provocar tristeza.
Mi marido y yo hemos hablado en más de una ocasión que no nos volveríamos a casar,en el sentido de la boda por la iglesia,convite con invitados,etc. ....y nos queremos muchísimo,pero con el tiempo ves las cosas de otra forma,te das cuenta de que el boato no añade nada interesante,lo hicimos más por nuestros padres,aunque somos creyentes,a nuestra manera claro.
Cuando una pareja se quiere de verdad no hace falta tanto jaleo para emprender una vida juntos.
 
Pues supongo que dependerá de en qué entorno te muevas y la edad qué tengas. En el mío es algo completamente normalizado, nadie se escandaliza por un divorcio ni he escuchado frases semejantes. Como un fracaso se vive, cierto, pero es que entiendo que es el fracaso de un proyecto, de una vida en común que se inició con ilusión; nadie se casa/empareja pensando que a los x años va a acabar divorciándose, imagino.

Pero nadie que tiene otra pareja está felizmente casado/a, como mucho está resignadamente casado/a.

Pero es que volvemos a lo de siempre, estará o no felizmente casado, eso sólo lo sabrá él/ella, pero en todo caso es su elección seguir en esa situación.
Yo lo que creo es que si alguien es feliz con su esposo/a, no se busca un ligue fuera.
 
Yo lo que creo es que si alguien es feliz con su esposo/a, no se busca un ligue fuera.

Pero es que yo opino que la infidelidad no tiene porque ser siempre consecuencia de no ser feliz en pareja. Los motivos para acostarte con otra persona que no son tu pareja oficial no siempre son que te lleves mal con ella. Hay miles y cada cual tendrá los suyos.

De hecho, si tu matrimonio no funciona, por el motivo que sea, y hablamos de personas adultas, que llevan años casados, probablemente con hijos y una hipoteca en común; lo lógico es hablar de lo que os pasa, tratar de buscar soluciones y luchar por ese matrimonio o bien decirle a tu pareja “hasta aquí hemos llegado”. La alternativa de tirar por la calle del medio y buscarte un escarceo sexual porque “mi mujer/marido no me comprende”, no es de recibo. La responsabilidad de que un matrimonio no funcione es de los dos, pero la decisión de engañar a la otra parte es sólo responsabilidad del que lo hace. Ésa es su decisión y su disfrute y la única víctima ahí es la persona que se queda en casa ignorante de que su mujer/marido se está liando en un hotel una vez por semana con otra persona.
 
Pero es que yo opino que la infidelidad no tiene porque ser siempre consecuencia de no ser feliz en pareja. Los motivos para acostarte con otra persona que no son tu pareja oficial no siempre son que te lleves mal con ella. Hay miles y cada cual tendrá los suyos.

De hecho, si tu matrimonio no funciona, por el motivo que sea, y hablamos de personas adultas, que llevan años casados, probablemente con hijos y una hipoteca en común; lo lógico es hablar de lo que os pasa, tratar de buscar soluciones y luchar por ese matrimonio o bien decirle a tu pareja “hasta aquí hemos llegado”. La alternativa de tirar por la calle del medio y buscarte un escarceo sexual porque “mi mujer/marido no me comprende”, no es de recibo. La responsabilidad de que un matrimonio no funcione es de los dos, pero la decisión de engañar a la otra parte es sólo responsabilidad del que lo hace. Ésa es su decisión y su disfrute y la única víctima ahí es la persona que se queda en casa ignorante de que su mujer/marido se está liando en un hotel una vez por semana con otra persona.
A veces esa relación extra-marital ocurre después de haber tenido esas conversaciones en las que ya se constata que el matrimonio no va bien. No se si en ese caso se puede hablar de infidelidad, pero se da a menudo.
Por otra parte, si un matrimonio es feliz y uno de los dos decide buscar ese escarceo sexual, por curiosidad o por lo que sea, se puede decir que esa felicidad que había se termina en ese momento.
 
A veces esa relación extra-marital ocurre después de haber tenido esas conversaciones en las que ya se constata que el matrimonio no va bien. No se si en ese caso se puede hablar de infidelidad, pero se da a menudo.
Por otra parte, si un matrimonio es feliz y uno de los dos decide buscar ese escarceo sexual, por curiosidad o por lo que sea, se puede decir que esa felicidad que había se termina en ese momento.

Yo no lo veo así. Se da por hecho que, en las infidelidades, se busca un sustituto de lo que falta en casa pero, en muchas ocasiones, es un complemento.
 
Yo no lo veo así. Se da por hecho que, en las infidelidades, se busca un sustituto de lo que falta en casa pero, en muchas ocasiones, es un complemento.
Ese complemento, ¿significa que la otra parte lo acepta, que ambos cónyuges aceptan el complemento del otro? ¿o es un complemento que se mantiene a escondidas procurando que el otro/a no se entere?
En ese caso, cuando uno/a está con su complemento ¿le dice a su cónyuge "Estoy trabajando.......estoy en el taller del coche......tengo una reunión" o le dice "Esta noche voy a estar con un complemento; verás que contento/a voy a venir y qué felices vamos a ser"?
 
Lo de que una persona no se mete en una relación y la rompe si antes no estaba rota no es cierto. Yo he conocido parejas que estaban la mar de bien, y uno de los dos conoce a otro, empieza el tonteo gilipollesco y zasca, cuernos y/o ruptura de pareja.

Porque cuando llevas años con alguien, por muy bien que estés con esa persona, muchos se pierden por tener a una persona más joven detrás diciéndole lo super guapo/a, simpático/a y listísimo/a que es. Ya he contado que en mi ambiente, catedráticos felizmente casados que al llegar a los 50 años se les pone tontona la doctoranda de 25 a decirles lo guapos y maravillosos que son y adiós matrimonio. Casos de estos lo menos dos por departamento y en todas las universidades que he estado. Una plaga, vamos. Un día me comentó mi marido que un catedrático que se jubila este año le contó que si que es cierto, que cuando llegue a los 45-50 se le pondrá la situación delante, vamos, que se prepare porque se le iban a poner alumnas y doctorandas a tiro. El hombre le dijo muy sabiamente que si estaba bien con su pareja, que no merecía la pena liarse con eso. Además de advertirle de la posibilidad de denuncias y cosas por el estilo, porque ha habido casos. Por suerte mi pareja me cuenta todas estas cosas, quizá porque estamos en el mismo ambiente y los dos sabemos lo que hay. Bueno, compartiendo despacho (sin que los alumnos suyos sepan que soy su mujer) he llegado a ver como tonteaban con el. A veces me pregunto porqué no me preoucpa todo esto, y mira que se que se va a congresos y que podría ser infiel si quisiera, pero no termino de imaginar.

Lo malo es que es un mundo aún machista, y a las mujeres catedráticas no les salen doctorandos de 25 años a tiro. Mas que nada porque hay pocas ,que estoy convencida de que cuando la cosa se equilibre al 50% empezará a haber los mismos casos.

Y otra cosa: que razón tenéis cuando decís que las personas infieles suelen ser super celosas. Todos los tíos que he conocido celosos, son unos infieles del copón. Y creo que es porque tanto el ser celoso como ser infiel está muy ligado con la inseguridad en uno mismo.
 
Y una cosa quería añadir:

La idea de que los hombres son más infieles que las mujeres a mi me parece que no es cierta. Esa sensación, es debida a que ser hombre infiel se considera un "mira que listo, que bien se lo monta" y que una mujer lo sea se resume en "mira que put*", y eso hace que las mujeres infieles no lo cuenten y lo oculten hasta a sus mejores amigas, mientras que los hombres no lo esconden tanto a sus amistades.

Tengo amigas que han puesto los cuernos y que han jurado y perjurado que no lo habían hecho. Para después, a toro pasado, reconocer que si había pasado. En cambio he tenido amigos que no lo iban contando por ahí, pero que no les importaba que se sospechara que eran infieles.
 
Os comento mi opinión.

Os he leído detenidamente para saber qué opinabais. Me atrevo ahora a dar mi opinión. Yo he sido infiel y si a mí me dicen hace unos años lo que yo iba a hacer, no me lo hubiera creído. Jamás pensé que sería capaz. Pensaba en mí como alguien que lleva una vida recta sin nada con sombras

Empezaré diciendo que yo debería haber sido más valiente y cuando hace años me dí cuenta de que mi matrimonio estaba destruido, debería haberme divorciado. Tendría que haberme querido a mi misma más y haber dado ese paso. Pero continué por motivos como por no destruir el modo de vida de una familia y porque yo creía que para dar una infancia feliz a mis hijos tenían que tener padres en la misma casa.
También porque pensé que igual podía sobrellevar vivir con alguien que solo estaba casado con su trabajo y con sus intereses... porque al fin y al cabo no teníamos escenas dramáticas entre nosotros: solo desidia y soledad. De modo que la vida, si yo no me planteaba nada más era perfecta: posición económica buena, entorno social adecuado, niños sanos... pero en mi interior tenía un vacío grande: no podía entender por qué si yo no le daba problemas y encima le solucionaba todo mi marido no me ha querido en absoluto. A ver si me explico: creo que él quería lo que yo representaba pero no me quería a mí: cambié fisicamente hasta convertirme en alguien atractiva con una edad en la que ya parece que si tienes hijos te tienes que dejar llevar, visto con estilo, socialmente brillante, buen trabajo y buen sueldo, alguien que le resolvía todos sus problemas de casa y con los niños o de mí misma sin que el tuviera que hacer nada, con amigos superfieles y divertidos.... pero en el tú a tú él no se interesó jamás por mí ni por si necesitaba algo o si era feliz. Yo podía ser la versión mejorada de mí misma, pero aún así yo nunca fui suficiente para atraer su atención más que sus cosas (sobre todo trabajo)

Al principio pude sobrellevar la soledad durante años pero llegó un momento en el que el no sentirme amada y yo no querer ya a mi marido me generaba una tristeza infinita. Pero transcurridos unos años, poco a poco me fui refugiando en un amigo común de mi marido y mío. En realidad los años que fuimos hablando entre nosotros no hablábamos de nada personal... De política, de música, de actualidad... Eran charlas tan blancas que la plataforma de mensajería que usábamos estaba en la tablet y en el móvil y podía consultarse sin más... Por eso mi marido jamás sospechó... de hecho él usaba la tablet y me decía te ha escrito X.... Yo pensaba que lo que hacíamos era inofensivo porque jamás eran charlas personales o de contenido afectivo. Lo cierto era que lo que no era el contenido sino la frecuencia con la que hablábamos. Nos fuimos haciendo dependientes el uno del otro... Al principio era una vez a la semana para quedar todos juntos a cenar con los niños.... pero luego se fue incrementando hasta que al final (fueron 3 años) hablábamos varias horas al día... Por supuesto mi marido no se enteraba de nada porque él nunca estaba en casa o si estaba, estaba estudiando o repasando sus cosas jamás conmigo... He estado hablando con quien fue mi amante con mi marido a 1 metro durante horas y mi marido obviarlo totalmente.

Llegó un momento que sí que se hizo evidente que había muchísima atracción entre nosotros y que nosotros no solo estábamos enamorados sino que nos queríamos. Nosotros nos conocíamos ya de antes porque con los niños cenábamos todos los fines de semana pero además charlando los dos solos nos podíamos conocer la vida del uno y del otro al dedillo. Cuando mis amigas se enteraron de nuestra historia me decían... cómo puedes conocer a este hombre mejor que a tu marido... Conozco cualquier cosa por nimia que sea, como él conoce de mí. ... Sé El número de calzado, como se hizo las cicatrices que tiene en su cara en su infancia, cual ha sido el momento más doloroso de su vida, a qué es alérgico o si íbamos a una cafetería yo sabía que siempre que tomaba al menos dos cafés y que tipo de café iba a pedir (siempre los pedía distintos), o quien era su pintor favorito o que alimentos le gustan o no y como, o que fracturas ha sufrido. Hablar tantísimo hace que vayas cayendo poco a poco en una red de cotidianidad .. Yo sabía que él era mío y que yo era suya antes de ni siquiera besarnos por primera vez. Esa es la seguridad que yo tenía en él. Antes de declarar lo que sentíamos el uno por el otro, sabía que si yo tenía un problema por nimio que fuera, este hombre me iba a buscar para ayudarme como fuera (porque ya había pasado). Ni siquiera me hubiera molestado en llamar a mi marido porque lo había hecho alguna vez y jamás me ayudó: o lo postergaba o me enviaba a mí a solucionarlo o directamente ni contestaba.

Mi amante y yo nos fuimos uniendo en unas circunstancias en las que nos sentíamos como náufragos. Cuando empezamos nuestra relación jamás pensé que mi amante fuera el sustituto de mi marido. No quería que fuera así. Ambos nos queríamos y probablemente ese amor había nacido porque nos habíamos buscado por soledad... pero no quería que sustituyera a mi ex de ningún modo. Porque mi amante no era mi marido: a diferencia de él, me escuchaba y hacía cosas por mí solo por agradarme, no por obligación. Tampoco nos hicimos amantes por s*x*... Muchas veces nos hemos visto para estar juntos sin mediar cama ni poder ni tocarnos porque estábamos en público... porque nos encantaba hablar y dialogar. Y no porque no tuviéramos oportunidad de cama sino porque esta relación no se basaba solo en el s*x*.... que por cierto... os diré que no me faltaba en casa (quisiera yo o no). Yo siempre le dije lo mismo: Que él eligiera venir a mí entre todas las personas del mundo para poder sentirse bien (a nivel físico y afectivo) me hacía más feliz que nada en esta vida.... Yo no quería un amante que tuviera que fichar: de estos de es martes y toca... Solo quería que viniera en libertad a mí si él quería. Y cuando lo gestionas así, aún engancha más a tí y a él y une más.. Nosotros llegamos a vernos todos los días y repito sin necesidad de cama. En estas historias, no solo hay s*x* en muchas ocasiones.

Es mi opinión siento si os ofendo porque yo doy una visión totalmente distinta. Ya veis que no es una historia superficial sino una historia de soledad, de cobardía y de refugio y de haberme sentido escuchada y querida durante años. No me arrepiento de haber sido infiel. He descubierto una fuerza en mí gracias a eso que no la hubiera conseguido. Damos lo mejor de nosotros cuando nos sentimos queridos. Solo me arrepiento de no haberme protegido más habiéndome divorciado de alguien que no me quería y al que yo no quería. De hecho os diré que finalmente yo me divorcié y lo hice, no para seguir con mi amante sino para estar sola. Crei que había que terminar independientemente de todo porque todo estaba destruido antes de empezar nada con mi amante.

Pero la historia con mi amante eso es para otro hilo de por qué no seguimos juntos. Sé que él es el hombre de mi vida. Lo sé como que ahora es de día pero a veces aunque te quieras a morir no siempre se puede estar juntos aunque técnicamente sea posible... Como dice García Marquez: el que alguien no te ame como tú deseas, no significa que no te quiera con toda el alma.



Gracias por escucharme.
 
¿Opinión, dices? @guesswho , que va; esto trasluce mucho más que eso.
Te admiro por tu valentía, por haber expuesto una situación que en la vida cotidiana se dará, por desgracia a menudo, pero son muy poc@s los que manifiestan: una historia de estabilidad económica, apariencias sociales vacías de contenido, aún con mucho "continente". Testimonio desgarrador de unos silencios, de un querer y no poder, de predicar en el desierto, de avisos señalando caminos no escuchados para salvar tu matrimonio.
Lo has dado todo, por una salvación, de un reencuentro con tu pareja, pero él que va...estaba a otros menesteres insustanciales e inanes y sin un gramo de pasta sentimental ni de la "materia de la que están hechos los sueños" para relanzar un futuro, ya muerto, con él.
Como la vida misma alguien te escuchó, alguien te mimó, alguien se dejó ver.
Tu lo viste con otro prisma, te sorprendió verlo así...pero así ocurren las cosas en nuestra existencia terrenal.
Salta la magia, todo se recompone de nuevo, merece la pena intentarlo y la vida cambia a colores ---todos los del arco iris---.
Valiente, estoy contigo.
Desde ya, grande,
Tu viaje, tu confesión en definitiva....ha valido muy mucho la pena escucharlo, para no caer "dos veces en la misma piedra".
Me quito el sombrero, no he podido aguantarme.
Te felicito de todo corazón,
Heroína luchadora sin mirar atrás,
Mirada al frente, puños apretados...hay futuro y luces para personas de tu integridad moral.
Impresionante.
Mis saludos, y mis respetos.
Serendi,
 
Os comento mi opinión.

Os he leído detenidamente para saber qué opinabais. Me atrevo ahora a dar mi opinión. Yo he sido infiel y si a mí me dicen hace unos años lo que yo iba a hacer, no me lo hubiera creído. Jamás pensé que sería capaz. Pensaba en mí como alguien que lleva una vida recta sin nada con sombras

Empezaré diciendo que yo debería haber sido más valiente y cuando hace años me dí cuenta de que mi matrimonio estaba destruido, debería haberme divorciado. Tendría que haberme querido a mi misma más y haber dado ese paso. Pero continué por motivos como por no destruir el modo de vida de una familia y porque yo creía que para dar una infancia feliz a mis hijos tenían que tener padres en la misma casa.
También porque pensé que igual podía sobrellevar vivir con alguien que solo estaba casado con su trabajo y con sus intereses... porque al fin y al cabo no teníamos escenas dramáticas entre nosotros: solo desidia y soledad. De modo que la vida, si yo no me planteaba nada más era perfecta: posición económica buena, entorno social adecuado, niños sanos... pero en mi interior tenía un vacío grande: no podía entender por qué si yo no le daba problemas y encima le solucionaba todo mi marido no me ha querido en absoluto. A ver si me explico: creo que él quería lo que yo representaba pero no me quería a mí: cambié fisicamente hasta convertirme en alguien atractiva con una edad en la que ya parece que si tienes hijos te tienes que dejar llevar, visto con estilo, socialmente brillante, buen trabajo y buen sueldo, alguien que le resolvía todos sus problemas de casa y con los niños o de mí misma sin que el tuviera que hacer nada, con amigos superfieles y divertidos.... pero en el tú a tú él no se interesó jamás por mí ni por si necesitaba algo o si era feliz. Yo podía ser la versión mejorada de mí misma, pero aún así yo nunca fui suficiente para atraer su atención más que sus cosas (sobre todo trabajo)

Al principio pude sobrellevar la soledad durante años pero llegó un momento en el que el no sentirme amada y yo no querer ya a mi marido me generaba una tristeza infinita. Pero transcurridos unos años, poco a poco me fui refugiando en un amigo común de mi marido y mío. En realidad los años que fuimos hablando entre nosotros no hablábamos de nada personal... De política, de música, de actualidad... Eran charlas tan blancas que la plataforma de mensajería que usábamos estaba en la tablet y en el móvil y podía consultarse sin más... Por eso mi marido jamás sospechó... de hecho él usaba la tablet y me decía te ha escrito X.... Yo pensaba que lo que hacíamos era inofensivo porque jamás eran charlas personales o de contenido afectivo. Lo cierto era que lo que no era el contenido sino la frecuencia con la que hablábamos. Nos fuimos haciendo dependientes el uno del otro... Al principio era una vez a la semana para quedar todos juntos a cenar con los niños.... pero luego se fue incrementando hasta que al final (fueron 3 años) hablábamos varias horas al día... Por supuesto mi marido no se enteraba de nada porque él nunca estaba en casa o si estaba, estaba estudiando o repasando sus cosas jamás conmigo... He estado hablando con quien fue mi amante con mi marido a 1 metro durante horas y mi marido obviarlo totalmente.

Llegó un momento que sí que se hizo evidente que había muchísima atracción entre nosotros y que nosotros no solo estábamos enamorados sino que nos queríamos. Nosotros nos conocíamos ya de antes porque con los niños cenábamos todos los fines de semana pero además charlando los dos solos nos podíamos conocer la vida del uno y del otro al dedillo. Cuando mis amigas se enteraron de nuestra historia me decían... cómo puedes conocer a este hombre mejor que a tu marido... Conozco cualquier cosa por nimia que sea, como él conoce de mí. ... Sé El número de calzado, como se hizo las cicatrices que tiene en su cara en su infancia, cual ha sido el momento más doloroso de su vida, a qué es alérgico o si íbamos a una cafetería yo sabía que siempre que tomaba al menos dos cafés y que tipo de café iba a pedir (siempre los pedía distintos), o quien era su pintor favorito o que alimentos le gustan o no y como, o que fracturas ha sufrido. Hablar tantísimo hace que vayas cayendo poco a poco en una red de cotidianidad .. Yo sabía que él era mío y que yo era suya antes de ni siquiera besarnos por primera vez. Esa es la seguridad que yo tenía en él. Antes de declarar lo que sentíamos el uno por el otro, sabía que si yo tenía un problema por nimio que fuera, este hombre me iba a buscar para ayudarme como fuera (porque ya había pasado). Ni siquiera me hubiera molestado en llamar a mi marido porque lo había hecho alguna vez y jamás me ayudó: o lo postergaba o me enviaba a mí a solucionarlo o directamente ni contestaba.

Mi amante y yo nos fuimos uniendo en unas circunstancias en las que nos sentíamos como náufragos. Cuando empezamos nuestra relación jamás pensé que mi amante fuera el sustituto de mi marido. No quería que fuera así. Ambos nos queríamos y probablemente ese amor había nacido porque nos habíamos buscado por soledad... pero no quería que sustituyera a mi ex de ningún modo. Porque mi amante no era mi marido: a diferencia de él, me escuchaba y hacía cosas por mí solo por agradarme, no por obligación. Tampoco nos hicimos amantes por s*x*... Muchas veces nos hemos visto para estar juntos sin mediar cama ni poder ni tocarnos porque estábamos en público... porque nos encantaba hablar y dialogar. Y no porque no tuviéramos oportunidad de cama sino porque esta relación no se basaba solo en el s*x*.... que por cierto... os diré que no me faltaba en casa (quisiera yo o no). Yo siempre le dije lo mismo: Que él eligiera venir a mí entre todas las personas del mundo para poder sentirse bien (a nivel físico y afectivo) me hacía más feliz que nada en esta vida.... Yo no quería un amante que tuviera que fichar: de estos de es martes y toca... Solo quería que viniera en libertad a mí si él quería. Y cuando lo gestionas así, aún engancha más a tí y a él y une más.. Nosotros llegamos a vernos todos los días y repito sin necesidad de cama. En estas historias, no solo hay s*x* en muchas ocasiones.

Es mi opinión siento si os ofendo porque yo doy una visión totalmente distinta. Ya veis que no es una historia superficial sino una historia de soledad, de cobardía y de refugio y de haberme sentido escuchada y querida durante años. No me arrepiento de haber sido infiel. He descubierto una fuerza en mí gracias a eso que no la hubiera conseguido. Damos lo mejor de nosotros cuando nos sentimos queridos. Solo me arrepiento de no haberme protegido más habiéndome divorciado de alguien que no me quería y al que yo no quería. De hecho os diré que finalmente yo me divorcié y lo hice, no para seguir con mi amante sino para estar sola. Crei que había que terminar independientemente de todo porque todo estaba destruido antes de empezar nada con mi amante.

Pero la historia con mi amante eso es para otro hilo de por qué no seguimos juntos. Sé que él es el hombre de mi vida. Lo sé como que ahora es de día pero a veces aunque te quieras a morir no siempre se puede estar juntos aunque técnicamente sea posible... Como dice García Marquez: el que alguien no te ame como tú deseas, no significa que no te quiera con toda el alma.



Gracias por escucharme.

Muchas gracias por contar tu experiencia. Además tan bien explicada. No creo que nadie vaya a sentirse ofendido por lo que cuentas. Es algo que pasa habitualmente y, como tu dices, hay que tener mucha valentía para afrontarlo. Sólo faltaría que por casarse con alguien ya te tuvieras que sentenciar de por vida y fuera imposible enamorarse de otra persona.

Yo es que a lo que explicas no lo considero infidelidad. Tu marido no pensaría lo mismo, y me imagino que yo si mi marido me hace eso tampoco. Pero seamos objetivos, el estar con una persona en una relación estable no te "protege" de enamorarte de otra persona. Eso es así. Y cuando estas en una relación y te enamoras de otro, la cosa no funciona de forma radical: me enamoro, al mes siguiente dejo a mi pareja y comienzo una nueva. Es un periodo de muchísimas dudas y jodido de coj*nes, hablando en plata.

Yo tengo una amiga que estuvo liada con su jefe (casado y con hijos) durante casi 4 años. Ya conté que la historia acabó muy mal, con denuncias de acoso y ella teniéndose que cambiar de ciudad. Cuando ella me justificaba la situación (la de el) con que le hacía chantaje su mujer con los niños, con que no podía dejarla porque estaba loca (las tipicas excusas de libro de tío jetas), yo le intentaba explicar que enamorarse de alguien estando en pareja es inevitable, no tiene nada de malo. Pero una vez que sucede y van pasando los meses, ahí se diferencia la gente que disfruta con el engaño a su pareja, o la persona que no, que se siente mal y lo considera injusto. Los primeros no quieren cambiar la situación, porque es esa situación (pareja en casa, amante fuera) la que les pone, mientras que los segundos se separan y continúan o no con la otra relación. Yo, cuando hablo de infidelidad, me refiero a la primera opción. La segunda es la pura realidad, porque creerte que por estar casado con alguien o por tener una relación estable os váis a querer toda la vida y siempre estaréis juntos....es muy disney.

Pero si te enamoras de otro hay que ser justo contigo mismo y con los demás. Y afrontar que ser infiel, como situación estable y cómoda de vida, no es correcto.
 
Muchas gracias @Serendi y @gg por vuestra sensibilidad!

Hace días que quería escribir y no me atrevía. Quería que se comprendiera qué motivos tuve y la evolución de algo que me pareció natural: querer a alguien que simplemente te quiere y lo demuestra aunque no me lo hubiera declarado jamás con palabras. Con él aprendí que los mejores besos se dan siempre con la mirada. No necesitaba ni tocarlo.
 

Temas Similares

Respuestas
8
Visitas
533
Back