Yo no lo he vuelto a hacer, se supone que es algo bonito y acaba siendo un despropósito.En mi trabajo se dejó de hacer hará uno o dos años, porque la gente se apuntaba (era voluntario), la organizadora se tiraba todo el mes de diciembre recordando que el día D se entregarían los regalos, y llegaba el día en cuestión y una hora antes de la entrega veías que había compañeros que bajaban corriendo al chino de la esquina a comprar algo de última hora porque se les había olvidado, y te terminaban regalando auténticas mierdas sin ni siquiera envolver porque ya no les daba tiempo.
Yo por mi parte no me puedo quejar, mis regalos solían ser cosas cucas o prácticas, lo que más me gustó fue una vez que me regalaron un estuche de lápices de colores con un libro de colorear mandalas y una cajita de té pijo, me conmovió la atención que le puso la chica que me lo regaló.
Por otro lado, el tema regalos invisibles del colegio, recuerdo una vez una niña de mi colegio que participó por no ser una paria ni quedarse atrás, pero sus padres no tenían dinero y la pobre hizo lo que pudo con los mejores lápices de colores que tenía y que estuvieran en mejor estado, y el chico que los recibió se los tiró a la cara por recibir algo ya usado. Todavía me da mucha pena cuando me acuerdo.