El descuartizador de Pioz

Bueno, prisión permanente, me alegro mucho, la verdad. Le tendría que caer 4 prisiones de esas.
Que se esta diciendo que era gay? pero no estaba enamorado de su tia o algo sí?
Me va a recordar a la historia de " a sangre fria" de truman capote.
 
Si, yo sí que me he equivocado, en España sólo se está juzgando al asesino, no al amigo. Pero creí que el amigo estaba en el juicio también, no sé si como testigo o como imputado por encubrimiento. Debería estar, si no lo está tenéis razón, dónde anda este menda, y porqué la Justicia española no le ha reclamado como imputado por callarse y encubrir.

Declaró por videoconferencia.
 
En telecinco están diciendo que ya está la sentencia del jurado, culpable, que serian 20 años por cada adulto y permanente revisable por cada niño, que consideran que el defecto neurológico no le impide distinguir el bien del mal.

Han comentado que ya se puso en contacto con el amigo de camino a la casa, que ya sabia de sus intenciones y que si hubiera avisado hasta se podían haber evitado todas las muertes, que horrible todo, el tío está indignado con que el amigo esté libre en Brasil, que en Brasil hay impunidad dice que da las gracias a la justicia española.

Creo entender que Marvin, el amigo en Brasil, era menor entonces. La policía no creo que le hiciera mucho caso, me refiero en Brasil.
 
https://www.elespanol.com/espana/20161107/168983654_0.html
El padre de Marvin, cómplice del descuartizador de Pioz: "Cometió el error de preguntar cómo fue"
En entrevista con EL ESPAÑOL, Percival pide perdón a la familia de los fallecidos pero cree que su hijo no debería estar en prisión. "Él no es el asesino".
8 noviembre, 2016 00:34
  1. PIOZ
  2. GUADALAJARA (PROVINCIA)
  3. ASESINATOS
  4. SUCESOS Y ACONTECIMIENTOS
  5. CÁRCELES
Brais Cedeira @BraisCedeira
Mucho tiempo antes del 17 de agosto de este mismo año, Patrick Nogueira Gouveia y Marvin Henriques Correia se iban juntos de fiesta por Joao Pessoa, cerca del mar. Fue así como se conocieron. Desde entonces se convirtieron en amigos inseparables. Patrick iba a menudo a su casa y Marvin a la suya. “Era un chico educado y atento aunque también callado. Me costaba mucho esfuerzo hacerle reír”, explica Percival Henriques, padre de Marvin, desde Brasil en una conversación telefónica con EL ESPAÑOL. No imaginaba que meses después de marchar a España, de lanzarse a la aventura en el mundo del fútbol, el mejor amigo de su hijo se iba a convertir en un asesino.

“Yo lo veía como un chico de 19 años. Ya estaba en la facultad de Derecho, en un instituto estatal, sin vicios. Nada reprobable cuando yo lo conocí”, describe Henriques. Eran tiempos tranquilos para ambos jóvenes. Hablaban de las chicas que les gustaban, de los coches que querían conducir, de las carreras que querían estudiar. Dos chicos tranquilos con una vida apacible. “Patrick quería aprender a cocinar para su chica. Le enseñé. Hicimos risotto, camarones y otros platos que incluso colgué en mi Instagram”, recuerda.




Según su padre, Marvin era un chico tranquilo, familiar, amoroso. Le gustaba hacer amigos, era un chico popular. “Siempre ayudaba, desde pequeño. Amaba los animales, los cachorros, sobre todo los gatos”, añade. Un dato que contrasta con el perfil de Facebook del joven antes de cerrarlo. En su muro se podían leer publicaciones de contenido escabroso: maltrato animal, palizas… Los tiempos han cambiado mucho desde entonces. Ambos amigos se encuentran ahora en la cárcel, unidos como siempre, pero esta vez con un crimen de por medio.

¿Por qué no llamó a la policía la noche del crimen?
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Foto de Marvin durmiendo, cedida por el padre del joven

Durante la noche del crimen, Marvin y Patrick intercambiaron mensajes en tiempo real, la mayoría de ellos después de que Patrick asesinase a su tía Janaína y a sus sobrinos de uno y tres años. También después de que asesinase a su tío Marcos. Un hecho llama la atención, y es que en ningún momento su cómplice mostró disposición de avisar a las autoridades. Ni antes, ni durante ni después del crimen. ¿Por qué fue así? El padre del joven atribuye esta actitud al miedo, a la tensión del momento y, en parte, a la lealtad hacia su amigo. “Creo que más de la mitad de la población tendría dificultad para llamar a la policía y hablar acerca de un crimen en el cual estuviese envuelto una persona próxima. Marvin es un joven inmaduro, que acaba de cumplir los 18 años”.

Henriques habla también del miedo. El temor creció en el interior de su hijo. Si lo contaba, y el asesino se enteraba de todo, no solo habría traicionado a su amigo, sino que seguramente su vida correría peligro. “Está también el miedo de que el amigo le molestase después si lo contaba. Son sentimientos que coexisten en un momento como ese va desde no creer lo que está sucediendo hasta la repugnancia y el distanciamiento de la realidad. El mensaje que publicó en Twitter tras los hechos revela un poco ese dilema entre denunciar o no denunciar al amigo".

Creo que más de la mitad de la población tendría dificultad para llamar a la policía y hablar acerca de un crimen en el cual estuviese envuelto una persona próxima.

Marvin se guardó el secreto para él mismo. Días después de lo ocurrido, el joven y supuesto cómplice estuvo varios días sin ir al colegio. Sus notas bajaron. Su padre le notaba más cariñoso, "como si estuviese falto de cariño”.

¿Es Marvin culpable?
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Marvin, en el momento de su detención en Joao Pessoa.

“No falles, buena suerte”; “sal por la mañana, por delante, como si fueras a dar un paseo”. Estas son dos de las frases que Marvin le escribió a Patrick el día 17 de agosto cuando estaba en la escena del crimen. En aquel momento, dice su padre, la confusión se apropió de su mente. Quizá fue eso, intuye su padre, lo que le llevó a callar durante más de un mes. “Mi hijo falló, cometió un error, el de tener curiosidad de preguntar cómo fue. El de no tener la madurez suficiente para saber que aquello era algo bárbaro. El de no haberme contado a mí o a la policía. Falló desde el punto de vista moral. Tenía miedo del asesino”.

Sin embargo, el padre del joven cómplice insiste a lo largo de la conversación con este periódico en un detalle, en que su hijo no es el asesino. “Su conducta no puede ser en ningún momento igualada a la de Patrick. Él fue inconsecuente, no el criminal. Ese barullo que se ha generado en torno a la conducta de Marvin está creando una cortina de humo para quitar del foco al verdadero criminal”.

Mi hijo falló, cometió un error, el de tener curiosidad de preguntar cómo fue. El de no tener la madurez suficiente para saber que aquello era algo bárbaro.

El ánimo de Percival no es el mejor en estos días aciagos para su familia. Durante la última semana, distintos miembros de la familia de los asesinado le escriben mensajes en su muro de Facebook para recordarle el acto en el que su hijo estuvo implicado. Y eso le hace sentir el peso de la responsabilidad. “Como padre me siento obligado, aunque siempre creí en la autonomía de nuestros hijos”.

Marvin sigue en la cárcel
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Marvin Henriques Correia, el cómplice del descuartizador de Pioz

Al contrario de lo que se dijo hace unos días, Marvin sigue en la cárcel PB1 de Joao Pessoa, un centro de máxima seguridad en el que se encuentra aislado bajo una férrea vigilancia. Se encuentra confuso, avergonzado y arrepentido. “Pero también muestra esperanza en salir y retomar su vida porque sabe que no es el asesino”, defiende su padre.

A lo largo de la hora y media de conversación, Percival Henriques no ceja en su empeño de defender a su hijo. “Si usted lee el diálogo, observa que Marvin intentaba imaginar a su amigo en el papel del asesino, como si todavía no creyese que las fotos que veía fuesen reales. Imagine que una persona que usted conoce, de una hora para otra aparece en el papel de un personaje como Hannibal o Jack el Destripador. La reacción puede ser cualquiera”.

¿Tiene dudas?

Me sigo preguntando dónde fallé, en qué momento mi hijo perdió la noción del límite entre el mundo virtual y el real. En qué momento esa deshumanización que asola la sociedad de la información llegó hasta mi casa”, detalla Percival.

¿Qué le espera ahora a su hijo?

Mi hijo necesita corregir su conducta, pero la prisión no es el camino. No puedo dejar que las organizaciones criminales lo ‘orienten’ dentro de un presidio. El camino es la educación.

Percival ve la historia que ha envuelto a su familia como una secuencia de “infelicidades, de desgracias”. Ya nada se puede cambiar, el reloj echó a andar y no se puede detener. Solo les queda el perdón. “Lo lamento todo. Sobre todo por las muertes. Lamento por los familiares. Lamento que mi familia esté de alguna forma próxima a esta atrocidad. Pido disculpas a todos”
 
sobre todo los gatos
..

muy interesante, gracias.

***
Hablaban de las chicas que les gustaban

Patrick quería aprender a cocinar para su chica

Ambos amigos se encuentran ahora en la cárcel

Marvin es un joven inmaduro, que acaba de cumplir los 18 años

Marvin se guardó el secreto para él mismo. Días después de lo ocurrido, el joven y supuesto cómplice estuvo varios días sin ir al colegio. Sus notas bajaron. Su padre le notaba más cariñoso, "como si estuviese falto de cariño”

Marvin sigue en la cárcel PB1 de Joao Pessoa, un centro de máxima seguridad en el que se encuentra aislado bajo una férrea vigilancia.
 
Última edición:
https://www.elespanol.com/espana/20161107/168983654_0.html
El padre de Marvin, cómplice del descuartizador de Pioz: "Cometió el error de preguntar cómo fue"
En entrevista con EL ESPAÑOL, Percival pide perdón a la familia de los fallecidos pero cree que su hijo no debería estar en prisión. "Él no es el asesino".
8 noviembre, 2016 00:34
  1. PIOZ
  2. GUADALAJARA (PROVINCIA)
  3. ASESINATOS
  4. SUCESOS Y ACONTECIMIENTOS
  5. CÁRCELES
Brais Cedeira @BraisCedeira
Mucho tiempo antes del 17 de agosto de este mismo año, Patrick Nogueira Gouveia y Marvin Henriques Correia se iban juntos de fiesta por Joao Pessoa, cerca del mar. Fue así como se conocieron. Desde entonces se convirtieron en amigos inseparables. Patrick iba a menudo a su casa y Marvin a la suya. “Era un chico educado y atento aunque también callado. Me costaba mucho esfuerzo hacerle reír”, explica Percival Henriques, padre de Marvin, desde Brasil en una conversación telefónica con EL ESPAÑOL. No imaginaba que meses después de marchar a España, de lanzarse a la aventura en el mundo del fútbol, el mejor amigo de su hijo se iba a convertir en un asesino.

“Yo lo veía como un chico de 19 años. Ya estaba en la facultad de Derecho, en un instituto estatal, sin vicios. Nada reprobable cuando yo lo conocí”, describe Henriques. Eran tiempos tranquilos para ambos jóvenes. Hablaban de las chicas que les gustaban, de los coches que querían conducir, de las carreras que querían estudiar. Dos chicos tranquilos con una vida apacible. “Patrick quería aprender a cocinar para su chica. Le enseñé. Hicimos risotto, camarones y otros platos que incluso colgué en mi Instagram”, recuerda.




Según su padre, Marvin era un chico tranquilo, familiar, amoroso. Le gustaba hacer amigos, era un chico popular. “Siempre ayudaba, desde pequeño. Amaba los animales, los cachorros, sobre todo los gatos”, añade. Un dato que contrasta con el perfil de Facebook del joven antes de cerrarlo. En su muro se podían leer publicaciones de contenido escabroso: maltrato animal, palizas… Los tiempos han cambiado mucho desde entonces. Ambos amigos se encuentran ahora en la cárcel, unidos como siempre, pero esta vez con un crimen de por medio.

¿Por qué no llamó a la policía la noche del crimen?
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Foto de Marvin durmiendo, cedida por el padre del joven

Durante la noche del crimen, Marvin y Patrick intercambiaron mensajes en tiempo real, la mayoría de ellos después de que Patrick asesinase a su tía Janaína y a sus sobrinos de uno y tres años. También después de que asesinase a su tío Marcos. Un hecho llama la atención, y es que en ningún momento su cómplice mostró disposición de avisar a las autoridades. Ni antes, ni durante ni después del crimen. ¿Por qué fue así? El padre del joven atribuye esta actitud al miedo, a la tensión del momento y, en parte, a la lealtad hacia su amigo. “Creo que más de la mitad de la población tendría dificultad para llamar a la policía y hablar acerca de un crimen en el cual estuviese envuelto una persona próxima. Marvin es un joven inmaduro, que acaba de cumplir los 18 años”.

Henriques habla también del miedo. El temor creció en el interior de su hijo. Si lo contaba, y el asesino se enteraba de todo, no solo habría traicionado a su amigo, sino que seguramente su vida correría peligro. “Está también el miedo de que el amigo le molestase después si lo contaba. Son sentimientos que coexisten en un momento como ese va desde no creer lo que está sucediendo hasta la repugnancia y el distanciamiento de la realidad. El mensaje que publicó en Twitter tras los hechos revela un poco ese dilema entre denunciar o no denunciar al amigo".

Creo que más de la mitad de la población tendría dificultad para llamar a la policía y hablar acerca de un crimen en el cual estuviese envuelto una persona próxima.

Marvin se guardó el secreto para él mismo. Días después de lo ocurrido, el joven y supuesto cómplice estuvo varios días sin ir al colegio. Sus notas bajaron. Su padre le notaba más cariñoso, "como si estuviese falto de cariño”.

¿Es Marvin culpable?
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Marvin, en el momento de su detención en Joao Pessoa.

“No falles, buena suerte”; “sal por la mañana, por delante, como si fueras a dar un paseo”. Estas son dos de las frases que Marvin le escribió a Patrick el día 17 de agosto cuando estaba en la escena del crimen. En aquel momento, dice su padre, la confusión se apropió de su mente. Quizá fue eso, intuye su padre, lo que le llevó a callar durante más de un mes. “Mi hijo falló, cometió un error, el de tener curiosidad de preguntar cómo fue. El de no tener la madurez suficiente para saber que aquello era algo bárbaro. El de no haberme contado a mí o a la policía. Falló desde el punto de vista moral. Tenía miedo del asesino”.

Sin embargo, el padre del joven cómplice insiste a lo largo de la conversación con este periódico en un detalle, en que su hijo no es el asesino. “Su conducta no puede ser en ningún momento igualada a la de Patrick. Él fue inconsecuente, no el criminal. Ese barullo que se ha generado en torno a la conducta de Marvin está creando una cortina de humo para quitar del foco al verdadero criminal”.

Mi hijo falló, cometió un error, el de tener curiosidad de preguntar cómo fue. El de no tener la madurez suficiente para saber que aquello era algo bárbaro.

El ánimo de Percival no es el mejor en estos días aciagos para su familia. Durante la última semana, distintos miembros de la familia de los asesinado le escriben mensajes en su muro de Facebook para recordarle el acto en el que su hijo estuvo implicado. Y eso le hace sentir el peso de la responsabilidad. “Como padre me siento obligado, aunque siempre creí en la autonomía de nuestros hijos”.

Marvin sigue en la cárcel
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Marvin Henriques Correia, el cómplice del descuartizador de Pioz

Al contrario de lo que se dijo hace unos días, Marvin sigue en la cárcel PB1 de Joao Pessoa, un centro de máxima seguridad en el que se encuentra aislado bajo una férrea vigilancia. Se encuentra confuso, avergonzado y arrepentido. “Pero también muestra esperanza en salir y retomar su vida porque sabe que no es el asesino”, defiende su padre.

A lo largo de la hora y media de conversación, Percival Henriques no ceja en su empeño de defender a su hijo. “Si usted lee el diálogo, observa que Marvin intentaba imaginar a su amigo en el papel del asesino, como si todavía no creyese que las fotos que veía fuesen reales. Imagine que una persona que usted conoce, de una hora para otra aparece en el papel de un personaje como Hannibal o Jack el Destripador. La reacción puede ser cualquiera”.

¿Tiene dudas?

Me sigo preguntando dónde fallé, en qué momento mi hijo perdió la noción del límite entre el mundo virtual y el real. En qué momento esa deshumanización que asola la sociedad de la información llegó hasta mi casa”, detalla Percival.

¿Qué le espera ahora a su hijo?

Mi hijo necesita corregir su conducta, pero la prisión no es el camino. No puedo dejar que las organizaciones criminales lo ‘orienten’ dentro de un presidio. El camino es la educación.

Percival ve la historia que ha envuelto a su familia como una secuencia de “infelicidades, de desgracias”. Ya nada se puede cambiar, el reloj echó a andar y no se puede detener. Solo les queda el perdón. “Lo lamento todo. Sobre todo por las muertes. Lamento por los familiares. Lamento que mi familia esté de alguna forma próxima a esta atrocidad. Pido disculpas a todos”
Que caras tienen esos dos, parecen muñecos de cera...
 
Es que lo del amigo no tiene explicación alguna. Puedes pensar que no creería que fuera real lo que le iban contando por wasap, pero es que vio hasta las fotos de los cuerpos ensangrentados. No sé hasta qué punto uno puede pensar que los sucesos virtuales no son reales. La verdad es que lo tienen muy difícil los que lo vayan a juzgar en Brasil, porque no creo que haya ningún precedente de éste tipo.
Una de dos, o el chico es un insensible y deshumanizado, o realmente pensaba que todo lo que estaba ocurriendo no era real y le estaba siguiendo la corriente a su amigo pensando como si fuera un videojuego o algo parecido a los sims.
Él no ganaba nada con ésos asesinatos, ni siquiera conocía a las víctimas, no tenía nada contra ellos, y es imposible que no sintiera piedad aunque sólo fuera por los dos niños.
En fin, algo muy extraño...
 
Según mi modesta opinión esta es la consecuencia de una tolerancia durante su niñez. Dos niños de familias bien a los que hubiera venido muy algún cachete a tiempo.

Patrick ya agredió a un profesor a los 16 años con una navaja. Doy por supuesto que tenía un cierto manejo de ella.
En fin, desconozco cómo es la sociedad brasileña, pero si es normal que los adolescentes usan navajas no me parece nada envidiable.

Muchas de las traducciones pudieran tener otro significado en portuguęs que el de la traducción, no sé si es correcto que lo interpretemos al pie de la letra.

En cuanto a si va a estar bien en la carcel, pienso que cuando se de de bruces con la realidad no va a ser muy feliz. En chico de 22 años de familia pudiente y con un buen futuro ante sí ha deshecho su vida y la de su familia.

En otro orden de cosas, me sorprende mucho que se traten de justificar estás barbaridades por los libros que alguien ha podido leer. Yo he leído libros que nadie de mi entorno lo ha podido hacer. Por supuesto no me han inducido a matar a nadie, y he separado perfectamente la ficción de la realidad.
 
Según mi modesta opinión esta es la consecuencia de una tolerancia durante su niñez. Dos niños de familias bien a los que hubiera venido muy algún cachete a tiempo.

Patrick ya agredió a un profesor a los 16 años con una navaja. Doy por supuesto que tenía un cierto manejo de ella.
En fin, desconozco cómo es la sociedad brasileña, pero si es normal que los adolescentes usan navajas no me parece nada envidiable.

Muchas de las traducciones pudieran tener otro significado en portuguęs que el de la traducción, no sé si es correcto que lo interpretemos al pie de la letra.

En cuanto a si va a estar bien en la carcel, pienso que cuando se de de bruces con la realidad no va a ser muy feliz. En chico de 22 años de familia pudiente y con un buen futuro ante sí ha deshecho su vida y la de su familia.

En otro orden de cosas, me sorprende mucho que se traten de justificar estás barbaridades por los libros que alguien ha podido leer. Yo he leído libros que nadie de mi entorno lo ha podido hacer. Por supuesto no me han inducido a matar a nadie, y he separado perfectamente la ficción de la realidad.
Eso es, los padre, sabían perfectamente que es agresivo, lo normal no es apuñalar a nadie, y si es una familia con poder adquisitivo no entiendo que no pusieran al asesino este en manos de buenos especialistas... Hay cosas de las que cuenta el tío del asesino que no comprendo... Sin culpar para nada a la familia, pero este hacia lo que le daba la gana... Con dinero no se puede tapar todo...
 
Eso es, los padre, sabían perfectamente que es agresivo, lo normal no es apuñalar a nadie, y si es una familia con poder adquisitivo no entiendo que no pusieran al asesino este en manos de buenos especialistas... Hay cosas de las que cuenta el tío del asesino que no comprendo... Sin culpar para nada a la familia, pero este hacia lo que le daba la gana... Con dinero no se puede tapar todo...
Los que tenían un alto poder adquisitivo era la familia paterna de Patrick: su padre un reputado médico y con familiares políticos. La familia materna es humilde. A Patrick lo mandaron a España, para quitarlo de en medio después de apuñalar a su profesor, con su tío Marcos a cambio de una mensualidad porque su tío estaba regular de dinero.
 
Los que tenían un alto poder adquisitivo era la familia paterna de Patrick: su padre un reputado médico y con familiares políticos. La familia materna es humilde. A Patrick lo mandaron a España, para quitarlo de en medio después de apuñalar a su profesor, con su tío Marcos a cambio de una mensualidad porque su tío estaba regular de dinero.
Él padre de este asesino siendo médico, podría ver que por cambiar de país a su hijo, no cambia nada de su maldad...
 
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