Me imagino que la familia de esa amiga tuya acabaría mal, como casi todos los constructores de esa época.Recuerdo una amiga del cole que cuando íbamos a su casa nos enseñaba fajos de billetes que tenían repartidos por los distintos cajones (padre constructor), y lo que más recuerdo fue la caída, ver de repente mucha gente rebuscando en los contenedores...