Los peds: ¿enfermos o sinvergüenzas?



Crean juego de mesa que enseña a los niños a identificar abusos sexuales

Publicado el 3 enero, 2017 por La Klave


Se llama Safe Kids y el objetivo de este juego holandés es enseñar a los niños y niñas a decir “no” y a identificar los límites sexuales, para prevenir y detener la ped*filia y la pederastia. Las escuelas holandesas ya lo están utilizando con éxito en sus clases…

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Por Macarena Fernández

Tratar temas delicados como la ped*filia, los abusos sexuales y la por**grafía infantil con niños pequeños no es tarea fácil. Son temas tan complejos, incómodos y violentos que muchas veces a los adultos nos da miedo tratarlos con nuestros niños, por temor a sexualizarlos y/o por miedo a inculcarles la desconfianza e inseguridad en los mayores.

“Son temas de adultos”, es el argumento de muchos padres y educadores para evitar estos temas. Pero no. No son temas de adultos. Son temas que involucran a los niños como víctimas protagonistas, por lo que urge empoderarlos.

Las estadísticas son alarmantes : la Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que uno de cada 5 niños son víctimas de violencia sexual, incluido el abuso sexual, y que esto afecta a niños de todas las edades, razas, clases sociales y religiones. Generalmente se da en entornos cercanos y de confianza, es decir, con tíos, abuelos, primos mayores, profesores, sacerdotes, vecinos o amigos de los padres.

Es horrible, pero cierto. Por ejemplo, en Holanda, este 2016 se registraron el doble de denuncias contra pedófilos y por**grafía infantil en la Policía, en comparación al 2015. Estamos hablando de más de 12.000 denuncias efectivas. Un escándalo. Por esto es que la educadora y trabajadora social holandesa, Petra Duijzer, decidió idear una estrategia para frenar los abusos sexuales, educando a los niños a través del juego. Así fue como nació Safe Kids (Niños a Salvo), un juego de mesa que enseña a los niños a marcar límites y a decir “no” cuando alguien excede los límites sexuales.
“Se trata de que los niños sepan qué tipo de contacto es normal, qué hacer si un extraño te añade a las redes sociales, o si tu entrenador de fútbol te pide que te quites tu ropa interior. Se trata de que lo detecten”, explicó la creadora del juego, Petra Duijzer.

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Las reglas del juego son claras

La especial sensibilidad frente al tema del abuso sexual hacia niños que tiene Petra Duijzer, se debe a que su mejor amiga de la infancia lo sufrió por muchos años. Su abusador era su padrastro y Petra debió mantener el secreto por mucho tiempo, por petición de su amiga. El silencio impuesto por el miedo fue algo que la marcó para siempre, y por esto decidió crear este juego que empodera a los niños a detener, impedir y/o pedir ayuda frente a un abuso sexual.

Como el tema es complejo de abordar, Safe Kids no se vende en cualquier parte, porque está creado para su uso educativo en salas de clase y es necesaria una capacitación previa a los docentes antes de empezar a aplicarlo con los niños. Una escuela holandesa financió el juego para que Petra Duijzer pudiese desarrollarlo, formando además a varios trabajadores sociales para poder impartirlo.

“Hay que saber dirigir la conversación y estar entrenado para ello. Quizás sea necesario usarlo bajo vigilancia“, explica la consejera infantil Erna Polo, que fue entrenada por Duijzer para aprender cómo usar este juego y qué tipo de preguntas son las apropiadas.
Safe Kids consiste en un tablero, tarjetas con preguntas e iconos sobre los límites sexuales, cinco fichas y un dado y se juega por etapas:
  • La primera etapa consiste en construir la confianza con el educador, o sea, preguntas básicas para que el niño se sienta seguro.
  • La segunda etapa es desarrollar la resistencia del niño, concienciarlo acerca de su capacidad de decidir sobre sí mismo, de permitir o rechazar algo.
  • La tercera etapa consiste en dar nociones básicas de educación sexual a los niños.
  • En la cuarta etapa se comienza a apelar a los límites psíquicos del niño, para enseñarle que puede y tiene derecho a parar y a decir “no”, que no debe tener miedo y que estas situaciones hay que comunicárselas a los profesores y a los padres.
El objetivo final es que los pequeños sepan cuándo tocarles es bueno, malo o confuso, y hacerles más normal y fácil hablar de ello con un adulto, rompiendo así las dañinas barreras de prejuicios y tabúes que impiden este tipo de conversaciones, y que en muchos casos, perjudican la comunicación y ayudan al encubrimiento de un abusador, por miedo y/o vergüenza a denunciar.

Hoy hay 40 profesores enseñando Safe Kids a niños de entre 8 y 12 años en distintos colegios de Holanda, como parte de su sistema educativo para promover la asertividad sexual de sus alumnos, y el Ministerio de Educación lo está estudiando en detalle para ver si lo incluirán en los colegios públicos. ¿Crees que juegos como este se deberían implementar en todos los colegios?..
 
Marshals de EE.UU. recuperan 39 niños desaparecidos y acusan de tráfico sexual a los arrestados
POR MIMI NGUYEN LY
28 de Agosto de 2020

Actualizado: 28 de Agosto de 2020
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El Servicio de Marshals de EE.UU. anunció el jueves que encontró 39 niños perdidos en el estado de Georgia y que ya presentaron cargos por tráfico sexual y otros más a los individuos arrestados como parte de la misión de los niños desaparecidos en peligro llamada “Operación No Olvidados”.
Los oficiales de la ley rescataron a 26 niños, personalmente ubicaron en un lugar seguro a otros 13 niños desaparecidos y detuvieron a nueve involucrados en el marco de una operación de dos semanas de duración realizada en agosto en las ciudades de Atlanta y Macon, en Georgia.
“Los investigadores dieron el visto bueno a 26 órdenes de detención y presentaron cargos adicionales por presuntos delitos relacionados con la trata de personas con fines sexuales, el secuestro parental, las violaciones registradas de los delincuentes sexuales, la posesión de drogas y armas y la injerencia en la custodia”, anunció la agencia federal en un comunicado.
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Los oficiales llevan a cabo la “Operación No Olvidados”, una misión de niños desaparecidos dirigida por los Marshals de Estados Unidos y otros organismos, en Georgia en agosto de 2020. (Shane T. McCoy/US Marshals/CC por 2.0)
“Las 26 órdenes de arresto liberadas incluían 19 órdenes de arresto para un total de nueve individuos detenidos, algunos de los cuales poseían múltiples órdenes de arresto”.
“El mensaje a los niños desaparecidos y a sus familias es que nunca dejaremos de buscarlos”, dijo el director de los Marshals, Donald Washington, según el comunicado.
Los 39 niños que habían desaparecido eran considerados como “algunos de los casos de recuperación de mayor riesgo y dificultad en la zona, sobre la base de indicios de factores de alto riesgo como la victimización de la trata de niños con fines sexuales, la explotación infantil, el abuso sexual, el maltrato físico y las condiciones médicas o de salud mental”, declararon los Marshals.
En una conferencia de prensa anunciando la noticia, Washington declaró a los periodistas que la operación se encuentra entre las misiones de las que los Marshals están “muy orgullosos” pero “que desearíamos no tener”.
“Por muy exitosa que haya sido esta operación, hay una dura realidad aquí, la dura realidad es, ‘caramba, ¿por qué estamos haciendo esto en primer lugar? ¿Por qué tenemos niños desaparecidos y en peligro de extinción?'”, dijo. “Las estadísticas dicen que cada 40 segundos, hay un niño secuestrado en Estados Unidos”.
“Un niño desaparece cada 40 segundos en Estados Unidos. Eso equivale a 765,000 niños al año”, anunció el FBI en 2011.
El fiscal general de Georgia, Chris Carr, escribió en Twitter que “no puede de decir lo suficiente sobre la Operación No Olvidado”.
“39 – Así es como muchas vidas jóvenes tienen un nuevo comienzo, y así es como medimos el éxito”, dijo Carr.

 
Es que es verdad, no sólo los hombres... En tiktok, en los vídeos donde salen adolescentes bailando encuentro cada comentario... Todos de mujeres. En plan... Me da igual que sea menor, si es está bueno está bueno... Tengo 30 y me enamoro de menores...
Pero los hombres como tu si que pueden irse con jovencita pichurrita de plomo? Deja a las mujeres disfrutar
 
https://www.lavanguardia.com/libros/20200915/483480312716/springora-matzneff-consentimiento.html

Vanessa Springora, la novia del ped*filo

Habla la editora que, a los 14 años, cayó en las garras de un pederasta admirado por la intelectualidad francesa

Análisis: Pequeñas manías de grandes genios

Vanessa Springora, la novia del pedófilo

Vanessa Springora, en el 2019 (Frédéric Stucin / PascoAndCo)

XAVI AYÉN, BARCELONA
15/09/2020 06:00 | Actualizado a 15/09/2020 15:43

Hablar con Vanessa Springora (París, 1972) es como entrevistar a Lolita si hubiera podido rehacer su vida tras su historia con Humbert Humbert. Pero hay muchas diferencias: Springora existe, está viva y encima cuenta ella, con su propia voz, lo que sucedió, en ‘El consentimiento’, que ponen mañana a la venta Lumen y Empúries tras el enorme escándalo que el libro causó en Francia cuando apareció a principios de año.

La autora responde a la videollamada de este diario desde la habitación de su hijo de 14 años (se ve algún colorido póster de fondo). Es la misma edad que tenía ella cuando empezó una relación con el escritor Gabriel Matzneff (Neuilly-sur-Seine, 1936), entonces de 50 años y con un amplio historial de paidofilia, una práctica que defendía en entrevistas y en casi toda su producción literaria autobiográfica, donde narra sin pudor sus sucesivas conquistas de niñas.

Amigo del presidente François Mitterrand, que lo invitaba al Elíseo (llevaba siempre una carta personal suya en el bolsillo, que creía le protegería de hipotéticos problemas con la policía), ‘enfant terrible’ de la ‘intelligentsia’ literaria francesa, Matzneff aparece citado simplemente como G en la obra, aunque no existe ninguna duda sobre su identidad.

Springora, actual directora editorial de Julliard, ha visto cómo su primer libro como autora ha tenido una acogida impresionante en todo el mundo, con traducciones a las principales lenguas y una película en marcha, que será rodada el año que viene por Vanessa Filho.

“Todo es absolutamente cierto, no hay ni un gramo de ficción”, explica. “Lo pensé como un libro literario, que no tenga solo el valor testimonial, para que pueda ser leído por mucha gente que no conoce a Matzneff, aquí es simplemente G, un universal, el perverso narcisista, el depredador”.

¿Hoy sería más difícil que sucediera algo así? “Desgraciadamente, sigue pasando en otros sectores, en el deporte, el mundo de las modelos... Tras mi libro, no creo que pudiera darse otro caso en el mundo de la edición, pues todos vigilan mucho, y tampoco nadie publicaría hoy en Francia un libro ped*filo autobiográfico”.

“Esto no tiene nada que ver con ‘Lolita’, Nabokov hace gran literatura, pero este señor escribía unas memorias”

Muy distinto ve el caso de las ficciones, como las de Nabokov, Houellebecq o García Márquez: “’Lolita’ es una novela, escrita por un gran autor que se interesó por el tema por razones que desconocemos, tal vez pulsiones propias, pero que ha tenido el gran mérito de hacer literatura con ello: entra en el espíritu de un ped*filo y lo hace para realizar una crítica monumental, Humbert se confiesa un monstruo y sabe desde el principio que ha hecho daño a la niña, pero no puede detener su pulsión. ¡Nabokov no era ningún ped*filo, por favor! Aquí lo que me interesaba es hacer entrar el punto de vista de Lolita, por una vez: qué le pasa, cómo lo vive”.

Las escenas prostibularias con niños de Houellebecq le parecen “una escritura provocadora, los suyos son personajes que tienen todo el derecho a existir, la literatura debe albergar estos seres monstruosos”. Lo importante, cree, es que “podamos distinguir la obra del artista, cosa que con G se mezclaba totalmente, al tratarse de un testimonio de hechos reales”.

Un pensamiento ingenuo asocia la cultura a lo mejor del espíritu humano. Pero su monstruo es enormemente cultivado, pues “la cultura no protege de la monstruosidad, como ya demostró, por ejemplo, Jonathan Littell en Las benévolas. Alemania, responsable de la barbarie nazi, ocupaba la cumbre de la civilización cultural europea: música clásica, filosofía, literatura... Una cosa no quita la otra”.

La narradora ve, desde niña, el mundo del libro como algo sagrado, luego lo rechaza a consecuencia del trauma y, finalmente, acaba de directora editorial. “Muchas adolescentes sueñan con ser cantantes o actrices, en mi caso quería ser escritora, crecí con una madre editora, rodeada de autores, he tenido cenas de niña en casa con García Márquez o Umberto Eco, me fascinaba la figura del escritor, mi biblioteca estaba a reventar, invadía toda la casa. Ese hombre representaba el súmmum, la perfección, un escritor era para mí el artista total, creador de un universo”.

Vanessa Springora, fotografiada ayer en París

Vanessa Springora, fotografiada ayer en París (JULIEN DE ROSA / EFE)

Argumenta que el consentimiento no puede ser el único criterio para determinar si hay abuso sexual. “Se usa eso contra las víctimas: ‘ella quería’, ‘consintió’... Me detengo en la riqueza semántica del concepto, porque hay mucha filosofía detrás. Hubo mi consentimiento, cierto, pero también el de la sociedad. En el caso de menores, hace falta añadir la desigualdad entre esas personas. Yo no fui forzada, pero no era nada igual al adulto de 50 años, que ostentaba una posición moral de ascendencia, que utilizó para romper las restricciones naturales. El adulto representa la ley, encarna la protección del menor, no podía imaginarme que me haría daño”.

Pero se lo hizo. Somatizó el trauma, con ingresos hospitalarios, sufrió depresiones, crisis de ansiedad... secuelas que le han acompañado durante muchos años, de un modo que nadie puede dudar que sea una víctima. “He tardado yo misma años en aceptarlo, recurrí al psicoanálisis. Rechazaba mi condición de víctima a causa de mi consentimiento, me consideraba cómplice de un ped*filo, tenía ganas de suicidarme, me sentía yo sucia por lo que él le hacía a los niños prostituidos en Manila”. Al final, entendió que “se trataba no de cuestionar mi deseo, sino el suyo”.

G es un Pigmalión muy especial, que le hace leer la Biblia pero la mantiene en una burbuja para que no sepa ni quiénes son The Cure. “Era muy posesivo, él tenía muchas amantes simultáneas, pero no soportaba que nosotras tuviéramos siquiera una relación de amistad con un chico. No quería que tuviéramos contacto con el exterior, si yo quedaba con gente para un concierto, hubiera podido ver lo que es la vida real. Y mi vida giraba en torno a nuestros encuentros amorosos y nuestra actividad sexual, que era nuestra principal actividad. Aunque también me hacía descubrir libros, me llevaba al teatro, me hacía escuchar ciertos discos... Lo encontraba agradable porque me hacía sentir interesante”.

“Bernard Pivot y toda la sociedad de la época creían que un artista podía expresar su sexualidad libremente, no entendían lo que estaba pasando”

Impacta ver la larga lista de intelectuales que en 1977 firmaron un manifiesto en ‘Le Monde’ –Sartre, Simone de Beauvoir, Gilles Deleuze, Louis Aragon, Roland Barthes, Jack Lang...– en favor de la ped*filia. En realidad, fue un texto redactado por el mismo G. “Llama mucho la atención. No quiero usarlo para decir que las ideas de mayo del 68 fueran nefastas, porque fue importante para el feminismo, la liberación de las costumbres, la contracepción, el derecho al aborto... Junto a esas cosas importantes, hubo excesos como la defensa de la ped*filia. Entonces, la homosexualidad se consideraba un crimen, un delito, y se luchaba para que la edad de consentimiento sexual bajara de 21 a 18 años. Para mucha gente, era todo la misma lucha, era un período de gran confusión: se decía que la ped*filia era una orientación sexual, como la homosexualidad. Simone de Beauvoir defendía el derecho de las chicas a tener s*x* mientras eran menores. Nadie entendió que ese redactado era la obra de un ped*filo. La mayoría de firmantes se han excusado, con los años. Se firmaban muchos manifiestos sin leer...”

Quedan retratados personajes como el periodista Bernard Pivot –que invitó a Matzneff varias veces a su programa ‘Apostrophes’, donde le reían las gracias– y sobre todo el filósofo Emil Cioran, que recibe a la niña en su casa en un momento de grave crisis y, sabiéndolo todo, le recomienda sumisión y que ayude y apoye a G, que es un gran artista.

“El vídeo de ‘Apostrophes’ –cuenta– se sigue viendo en youtube, es interesante mirarlo, porque G defiende la ped*filia, y entre todos los invitados solo -¡solo, en 1990!– hay una mujer en el plató, la canadiense Denise Bombardier que se le opone, es como si hubiéramos enviado a una mujer del 2020 a un programa de los años 80 o 90. Nadie la entiende en ese plató, los demás sostienen que un artista puede expresarse libremente sobre su sexualidad. No es solo un problema de Pivot, al que señalan hoy, sino que era el conjunto de la sociedad francesa y la intelectualidad”.

“Me habría gustado que comprendiera el sufrimiento que ha ocasionado a todas esas niñas con las que se acostaba... pero no”

G explicó en sus libros la historia con Vanessa, pero del revés, como si él hubiera sido su salvador frente a malas compañías, y no el desencadenante de que cayera en ellas. “Los enfermos mentales son fetichistas, y él quería exhibir un trofeo en cada libro, y salir victorioso, porque recordemos que jamás ha ido a la cárcel, nunca la policía le ha puesto en serios problemas, jamás ha sido juzgado”.

En ‘El consentimiento’, aparecen otras chicas. Springora las representa a todas. “Fui la primera en conseguir publicar un libro, Francesca Gee reveló que ella había escrito hace 15 o 20 años otro manuscrito, pero se lo rechazaban todas las editoriales. dice mucho que, ante tamaña colección de jóvenes que él exhibe en sus libros, ninguna le haya replicado”.

Y ¿cómo es hoy la vida de G? “No me hago esa pregunta. Es un señor muy mayor, enfermo. Pero nunca es tarde para asumir la responsabilidad, me habría gustado que comprendiera el sufrimiento que ha ocasionado a todas esas niñas con las que se acostaba. Un periodista le entrevistó hace poco y él dijo, sobre la prostit*ción infantil en Manila: ‘En la época no hablábamos de crimen por eso’. Sigue en negación y lo estará siempre, me temo, es una lástima. No puede comprender que violar a un niño es algo horrible. No hay que intentar convencerle a él, sino al público”.

Springora empieza narrando su infancia y la separación de sus padres. “Vengo de una familia monoparental, fui criada por una mujer muy joven, mi madre, que no tenía la madurez para educarme. G cuenta él mismo en sus libros que buscaba sus presas en ese tipo de familias desunidas porque las madres solas le parecían más maleables que dos padres juntos”.

¿La ha leído su hijo de 14 años, el dueño de la habitación desde la que nos habla? “Creo que no –responde–, se lo he desaconsejado al menos, no tanto por el tema sino porque es su madre la que aparece”.
 
Para mi que señores de 50 , 60 años se vayan con jovencitas de 18 , 20 , o tengan 30 años más que ellas no es pederastia pero también me parece un abuso ,hay muchas parejas asi dentro del mundo del famoseo .
 
Para mi que señores de 50 , 60 años se vayan con jovencitas de 18 , 20 , o tengan 30 años más que ellas no es pederastia pero también me parece un abuso ,hay muchas parejas asi dentro del mundo del famoseo .
Un tio de 50 con una de 18 es asqueroso. No es tanto la diferencia de edad,porque una de 30 no me parece asqueroso con uno de 60. El problema es que con 18 , 19 eres aun manipulable para cualquier depredador, en cambio con 30 tu personalidad esta definida
 
Este verano estaba con mi chico en una terraza comiendo y en otra mesa un grupito donde había una pareja con una niña de unos 3 años. Bien, pues la niña se manchó el vestido y la desnudaron por completo, niña con el **** al aire, la sentaron encima de la mesa con el poto en la mesa mientras el padre se iba al coche a por ropa para cambiarla. La niña de aquí pa allá ...yo me quedé muerta, con la de depravados que hay, pueden estar en cualquier lado, que cada vez hay más, que no sabes si alguno le puede estar haciendo una foto... Es como lo de bañar a los niños en la playa desnudos, irán muy cómodos pero qué quieres que te diga..
 
Os dejo dos enlaces en italiano relacionados con el tema del hilo. Lo siento si no los traduzco, pero son bastante largos.
Sin embargo, creo que siendo el italiano y el español similares, al menos pueden entenderse, como me pasa con los artículos de los periódicos españoles.

Primer enlace "Vladimir Putin << Occidente está controlado por pedófilos satánicos >>"


El resumen es: Vladimir Putin habló con franqueza sobre las redes de pedófilos que han tomado el control de Occidente, la normalización de la ped*filia, el vertiginoso descenso de los estándares normales de decencia, la continua pérdida de moral y la descomposición del tejido social Oeste.

Segundo enlace "La esencia del mal: el s*x* con niñ@s se ha convertido en un gran negocio en Estados Unidos".


Es un artículo impactante, que se me ha quedado grabado en el corazón y en la cabeza, en el que el autor habla sobre cómo funciona este negocio y cuestiona las razones del increíble aumento de esta perversión.
El autor los encuentra en la creciente hipersexualización de las niñas, llevada a cabo sobre todo por la televisión.

No soy socióloga ni psicóloga, pero creo que gran parte de este problema radica en el hecho de que las mujeres han abdicado de su función principal, que es mantener la salud de la sociedad, proteger el futuro de la sociedad, mantener cuidado con los hombres sin que ellos se den cuenta y sean uno de los dos pilares que mantienen a la familia en pie.
Los hombres hacen la guerra, pero las mujeres protegen la vida.
Ahora hay confusión de roles y cuando hay confusión hay grietas en las que se infiltra el mal (sí, uso esta palabra con conciencia).

Y la pregunta que me hago es: ¿las mujeres tienen hijos pero son madres?
 
Acabo de leer el hilo, me he quedado muerta con el tema juguetes, nunca se me habría pasado por la cabeza que un juguete pueda llegar a los canales de venta con esas características, sin que nadie haya dado la voz de alarma... En cuanto a la normalización, hace mucho que está ocurriendo, se justifica que hombres de 50-60 años estén con chicas de 18 años recién cumplidos culpándolas a ellas y ensalzándolos a ellos, lo mismo en el caso mujer mayor con chico joven o en parejas homosexuales, pero lo que más vemos es ese patrón que denominan "sugar daddy" en donde él es un Dios por estar con una jovencita y hace bien en aprovecharse de ella, porque ella es una p...ta que está con él por el dinero. Desde el momento en que estas situaciones se normalizan y se crea una necesidad en jóvenes de tener de todo y hacer cualquier cosa por conseguirlo, está empezando la normalización, porque de los 18 años podemos bajar a los 17, que ya casi tienen 18, y podemos bajar a los 15 y oiremos lo de con 15 saben más que muchas de 30, y eso lo oimos y leemos de boca de hombres y mujeres, y poco a poco ira bajando la edad de normalización. Cada vez se está hipersexualizando más a los menores, sobre todo a través de redes sociales, por ejemplo tick tock, yo no utilizo esa red social, pero si que me aparecen vídeos en instagram, donde veo niños y niñas de 12, 13 años haciendo bailes unos bailes que madre mía, pero también veo niños pequeños de 3, 4, 5 ... años con bailes que pueden parecernos graciosos, pero que están exponiendo a estos niños y convirtiéndolos en objetos de pedófilos.
Hace poco leí este artículo, y ver lo que sale en tick tock simplemente con poner en el buscador niñas, pone los pelos de punta. Poco a poco se va normalizando esta hipersexualización, hasta que llegue un momento donde el comentario será "l@s niñ@s de 10 años saben más que los de 30" y esta frase que ahora nos parece horrorosa será algo tan común como leer ahora la misma frase cambiando 10 años por 15 o 16.
En mi pueblo, hace cosa de unos 7 años se detuvo a un energúmeno de 50 y pico años, fueron a buscarlo al trabajo, era compañero de mi padre, nadie sabía que había pasado. Un hombre bueno, con dos hijos, casado, que siempre ayudaba en lo que necesitabas, que se ocupaba de sus suegros... De esas personas que parece que ni una multa pueden tener. Pues habían seguido su pista desde la comandancia de Sevilla hasta Galicia, el energúmeno se hacía pasar por su hijo de 16-17 años para conseguir que menores se desnudasen ante la cámara o le enviasen vídeos de contenido sexual, para luego chantajearlas con eso y coseguir más contenido, llevaba años haciéndolo, actuaba en diferentes redes sociales y foros. Cuando lo fueron a detener todavía quería culpar a su hijo (era menor) pero había ciertas pistas que aseguraban que el ped*filo era él. Estuvo detenido, pero unos días, no llegó a entrar en prisión, está libre y viviendo con su mujer y uno de sus hijos que lo defendieron a muerte, porque él no era un ped*filo, la culpa era de esas chicas, de hecho en muchas de las noticias que salieron en periódicos del tema, aparecía como ciberacosador, ni siquiera como ped*filo. Y ahí tenéis el mejor ejemplo de como se ha normalizado esta conducta, como hemos pasado de un hombre que tendría que estar en prisión, que tendría que ser un paria, al que su familia no tendría que dirigirle la palabra... está disfrutando de su vida normal y corriente, y quien sabe si continúa haciendo lo mismo que antes.
 
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