Yo conocí a una pareja hace mil años que creo que han sido los más tacaños (tanto con ellos como con el resto de la gente) que he conocido en mi vida. Así como curiosidades, le echaban agua a la leche para gastar menos, el arroz blanco hasta en la paella para ahorrarse el colorante o azafrán, ropa la misma durante años aunque engordasen o adelgazasen y si se rompía pues la cosían una y otra vez hasta que era inutilizable y entonces para trapos.
Una vez, organizaron una merienda en su casa y hasta las galletas estaban contadas, yo que era una cría fui a coger otra y me la quitaron de las manos para guardarla porque ya me había comido una.
Por no gastar, no gastaban ni en nombres porque a todos los gatos y perros que tuvieron durante sus vidas, les ponían los mismos nombres.
Y no era por falta de dinero porque tener, tenían (y más si no gastaban) y no eran mala gente por eso me dio pena que al morir sin tener descendencia, la herencia se la repartieron los familiares más cercanos que tenían, lo cual me habría parecido bien de no ser porque a la mínima, los escuchabas despotricar sobre ellos diciendo las ganas que tenían de que la palmasen para quedarse con el dinero.
Una vez, organizaron una merienda en su casa y hasta las galletas estaban contadas, yo que era una cría fui a coger otra y me la quitaron de las manos para guardarla porque ya me había comido una.
Por no gastar, no gastaban ni en nombres porque a todos los gatos y perros que tuvieron durante sus vidas, les ponían los mismos nombres.
Y no era por falta de dinero porque tener, tenían (y más si no gastaban) y no eran mala gente por eso me dio pena que al morir sin tener descendencia, la herencia se la repartieron los familiares más cercanos que tenían, lo cual me habría parecido bien de no ser porque a la mínima, los escuchabas despotricar sobre ellos diciendo las ganas que tenían de que la palmasen para quedarse con el dinero.