Yo me leí "Melocotones helados", que el título era sugerente, pero la novela plana-plana-plana. Dos años antes de la crisis, me leí "Mileuristas", donde hablaba de una nueva generación superpreparada (como ella), que preferían trabajar menos y viajar que consagrar una carrera. Como visionaria no tiene precio: nunco se molestó en pensar por qué cuando todo el mundo se estaba forrando, había una generación de trabajadores preparados que no cobraban más de mil euros. Es lo que tiene "no ser política", quere ser "de centro". Que te engañan. Que te crees las tonterías de que vivíamos "por encima de nuestras posibilidades". Evidentemente, algo pasaba cuando todos los mediocres se forraban, pero las condiciones laborales eran precarias. España, por supuesto, iba bien.