Hola a todxs!
Hace justo un año mi pareja terminaba nuestra relación, dejándome muy hecha polvo. Y con grandes problemas de autoestima (Básicamente: su anterior relación había sido muy tóxica, de maltrato, con muchos baches y crisis... y ahí aguantó hasta casi 4 años. Nuestra relación, 3 años después, sí había sido bastante idílica, siendo yo quien le sacó del pozo en el que se encontraba, y en cuanto "se le fue la emoción" tras 4 años, quiso terminar. Nunca entendí esta "injusticia", y desde entonces me he sentido muy pequeña y poco valiosa)
En julio conocí a un chico por IG (llegué de casualidad a un perfil "de" un perrito precioso, el suyo. Le puse algunos likes y me comenzó a hablar). Estuvimos hablando todo el verano con muchísima sintonía y buen rollo hasta que acabando septiembre decidimos "conocernos en persona". Todo fluía estupendamente y en el mes de octubre nos vimos otras 3 veces. Un ritmo bastante bueno teniendo en cuenta que el chico trabaja y oposita. Justamente tras esa 3a ó 4a cita (sin que hubiese pasado nada en lo romántico/sexual) yo me di cuenta de que el chico me llamaba la atención y atraía. En noviembre y diciembre estuve fuera de España por trabajo y una noche, no recuerdo bien cómo, acabamos hablando de relaciones. Me acabó dando a entender que si no había pasado nada entre nosotros era porque yo le había cerrado esa puerta. Vi normal que se sintiera así. Como he dicho, la ruptura me dejó muy insegura, sintiéndome muy poco digna de ser amada o deseada por lo que nunca le di una señal para que se lanzara, ni yo aventurarme a hacerlo. Directamente suponía que yo no le interesaba nada de nada (aunque debo reconocer que al mismo tiempo no entendía tener tanto trato sin que hubiera un interés más allá). En esa conversación yo le acabé confesando que sí me atraía pero que el miedo al rechazo quizá me había hecho parecer hermética y distante.
Desde ese día todo mejoró mucho, hemos estado hablando muy asiduamente y conectando mucho a nivel emocional (hablado de problemas familiares, incluso enseñándonos fotos de la familia, hablando de preocupaciones e ilusiones para el futuro (hijos, trabajo)... ), y lo he notado mucho más interesado en mí (siempre iniciando él la conversación, de vez en cuando algún piropo o cumplido - y no físicos, sino acerca de mi humor, mi intelecto, etc- diciéndome que tal día se había acordado de mí porque había visto o hecho esto o aquello, etc).
No pudimos vernos en enero porque él tuvo coronavirus y luego estuvo estudiando a tope para su examen, que fue hace justo dos semanas y, entonces, me pidió una cita que tuvimos ayer.
Y en la cual estuvimos a gustísimo, en la que percibí cómo se acordaba de muchos detalles de conversaciones en estos 7 meses, me decía que estaba guapísima, tratando de buscar contacto físico: acercándose a mí, rozándome la mano, la rodilla, etc. Efectivamente acabó besándome y la cosa subió rápidamente de tono, a lo que me dijo que no me esperaba tan apasionada. Le dije que es que tenía muchas ganas y le recordé lo que le había dicho meses atrás (que me atraía pero que no me había atrevido). Me dijo... "si lo hubieras hecho... las cosas habrían sido muy distintas". No tengo claro lo que quiso decir con eso.
Nos quedamos más tiempo en el pub para cenar y tomar algo más y al ir al coche la cosa volvió a subir de tono y me propuso ir a su casa. Le dije que quería pero que me sabía mal, que estaba en "esos días", a lo que me contestó que no tenía por qué pasar nada, que simplemente le apetecía pasar la noche conmigo. Aunque una vez allí el roce hizo que finalmente pasaran cosas... dos veces jaja. La verdad es que el chico fue muy entregado y cariñoso (me decía cosas bonitas, besaba mi nariz y frente, tenía sus ojos clavados en los míos, etc) e incluso nos reímos mucho. Yo noté mucha confianza para ser nuestra primera vez. Incluso el hecho de haberlo hecho con la regla (él nunca lo había hecho) me hizo sentir que no era una cualquiera para él (opino que para hacerlo así debe haber un mínimo de confianza y/o afecto).
Pero ahora mismo estoy preocupada. Me da miedo que ahora que nos hemos acostado, se aleje. En mayo estuve conociendo a un chico con el que me acosté en la tercera cita, y desde ese día solamente me buscaba para la "fiesta". En cuanto le paré un poquito los pies dejó de hablarme.
Quiero pensar que con este chico va a ser distinto porque hemos tenido 7 meses de forjar una "amistad" (aunque estuviera esa atracción latente o escondida), en la que hemos compartido, como he dicho, muchas cosas personales y hablamos de temas diversos con mucha fluidez. Siempre hace mención a lo mucho que se ríe y aprende conmigo. Y porque, en definitiva, tengo la sensación de que cualquier otro hombre, tras un par de meses viendo que no iba a haber tema me habría dejado de hablar.
Me gusta haber roto esta barrera y sentir que además de ser "amigos" (aunque creo que realmente nunca lo hemos sido de una manera pura (no nos conocemos de tanto tiempo), simplemente nos hemos estado conociendo como personas y esperando al momento adecuado para dar un paso más) podemos ser "amantes", que no solamente existe ese feeling emocional, sino también sexual. En cualquier caso es un "avance" en la relación con él. Pero me preocupa que ahora, una vez conseguido ese "objetivo", se aleje. O que ahora cualquier encuentro tenga fines sexuales (como pasó con ese muchacho en mayo), y ser una especie de "follamiga". Tengo 32 años y no es el tipo de relación que busco. No sé realmente qué pensar. Y siento tristeza en un día en que debería estar feliz porque me doy cuenta de que continúo sin tener la confianza suficiente en mí misma de que un hombre se quedará a mi lado y no se irá de un día para otro, como me hizo mi ex. Quiero decir, si lo hizo él después de 4 años y una vida en común, ¿qué no hará este chico al que conozco 7 meses y he visto 5 veces contadas? Aunque me niego a creer que haya sido capaz de alargar su estratagema para llevarme a la cama 7 meses.
Tampoco sé cómo tratarle a partir de este momento. Si buscarle yo o dejarme buscar. PD: mañana vuelvo a partir un mes fuera de España por trabajo.
No sé muy bien qué pretendo con este rollazo (perdón y gracias a quién lo lea), quizá desahogarme, quizá recabar alguna palabra de ánimo, quizá abrir los ojos.
Hace justo un año mi pareja terminaba nuestra relación, dejándome muy hecha polvo. Y con grandes problemas de autoestima (Básicamente: su anterior relación había sido muy tóxica, de maltrato, con muchos baches y crisis... y ahí aguantó hasta casi 4 años. Nuestra relación, 3 años después, sí había sido bastante idílica, siendo yo quien le sacó del pozo en el que se encontraba, y en cuanto "se le fue la emoción" tras 4 años, quiso terminar. Nunca entendí esta "injusticia", y desde entonces me he sentido muy pequeña y poco valiosa)
En julio conocí a un chico por IG (llegué de casualidad a un perfil "de" un perrito precioso, el suyo. Le puse algunos likes y me comenzó a hablar). Estuvimos hablando todo el verano con muchísima sintonía y buen rollo hasta que acabando septiembre decidimos "conocernos en persona". Todo fluía estupendamente y en el mes de octubre nos vimos otras 3 veces. Un ritmo bastante bueno teniendo en cuenta que el chico trabaja y oposita. Justamente tras esa 3a ó 4a cita (sin que hubiese pasado nada en lo romántico/sexual) yo me di cuenta de que el chico me llamaba la atención y atraía. En noviembre y diciembre estuve fuera de España por trabajo y una noche, no recuerdo bien cómo, acabamos hablando de relaciones. Me acabó dando a entender que si no había pasado nada entre nosotros era porque yo le había cerrado esa puerta. Vi normal que se sintiera así. Como he dicho, la ruptura me dejó muy insegura, sintiéndome muy poco digna de ser amada o deseada por lo que nunca le di una señal para que se lanzara, ni yo aventurarme a hacerlo. Directamente suponía que yo no le interesaba nada de nada (aunque debo reconocer que al mismo tiempo no entendía tener tanto trato sin que hubiera un interés más allá). En esa conversación yo le acabé confesando que sí me atraía pero que el miedo al rechazo quizá me había hecho parecer hermética y distante.
Desde ese día todo mejoró mucho, hemos estado hablando muy asiduamente y conectando mucho a nivel emocional (hablado de problemas familiares, incluso enseñándonos fotos de la familia, hablando de preocupaciones e ilusiones para el futuro (hijos, trabajo)... ), y lo he notado mucho más interesado en mí (siempre iniciando él la conversación, de vez en cuando algún piropo o cumplido - y no físicos, sino acerca de mi humor, mi intelecto, etc- diciéndome que tal día se había acordado de mí porque había visto o hecho esto o aquello, etc).
No pudimos vernos en enero porque él tuvo coronavirus y luego estuvo estudiando a tope para su examen, que fue hace justo dos semanas y, entonces, me pidió una cita que tuvimos ayer.
Y en la cual estuvimos a gustísimo, en la que percibí cómo se acordaba de muchos detalles de conversaciones en estos 7 meses, me decía que estaba guapísima, tratando de buscar contacto físico: acercándose a mí, rozándome la mano, la rodilla, etc. Efectivamente acabó besándome y la cosa subió rápidamente de tono, a lo que me dijo que no me esperaba tan apasionada. Le dije que es que tenía muchas ganas y le recordé lo que le había dicho meses atrás (que me atraía pero que no me había atrevido). Me dijo... "si lo hubieras hecho... las cosas habrían sido muy distintas". No tengo claro lo que quiso decir con eso.
Nos quedamos más tiempo en el pub para cenar y tomar algo más y al ir al coche la cosa volvió a subir de tono y me propuso ir a su casa. Le dije que quería pero que me sabía mal, que estaba en "esos días", a lo que me contestó que no tenía por qué pasar nada, que simplemente le apetecía pasar la noche conmigo. Aunque una vez allí el roce hizo que finalmente pasaran cosas... dos veces jaja. La verdad es que el chico fue muy entregado y cariñoso (me decía cosas bonitas, besaba mi nariz y frente, tenía sus ojos clavados en los míos, etc) e incluso nos reímos mucho. Yo noté mucha confianza para ser nuestra primera vez. Incluso el hecho de haberlo hecho con la regla (él nunca lo había hecho) me hizo sentir que no era una cualquiera para él (opino que para hacerlo así debe haber un mínimo de confianza y/o afecto).
Pero ahora mismo estoy preocupada. Me da miedo que ahora que nos hemos acostado, se aleje. En mayo estuve conociendo a un chico con el que me acosté en la tercera cita, y desde ese día solamente me buscaba para la "fiesta". En cuanto le paré un poquito los pies dejó de hablarme.
Quiero pensar que con este chico va a ser distinto porque hemos tenido 7 meses de forjar una "amistad" (aunque estuviera esa atracción latente o escondida), en la que hemos compartido, como he dicho, muchas cosas personales y hablamos de temas diversos con mucha fluidez. Siempre hace mención a lo mucho que se ríe y aprende conmigo. Y porque, en definitiva, tengo la sensación de que cualquier otro hombre, tras un par de meses viendo que no iba a haber tema me habría dejado de hablar.
Me gusta haber roto esta barrera y sentir que además de ser "amigos" (aunque creo que realmente nunca lo hemos sido de una manera pura (no nos conocemos de tanto tiempo), simplemente nos hemos estado conociendo como personas y esperando al momento adecuado para dar un paso más) podemos ser "amantes", que no solamente existe ese feeling emocional, sino también sexual. En cualquier caso es un "avance" en la relación con él. Pero me preocupa que ahora, una vez conseguido ese "objetivo", se aleje. O que ahora cualquier encuentro tenga fines sexuales (como pasó con ese muchacho en mayo), y ser una especie de "follamiga". Tengo 32 años y no es el tipo de relación que busco. No sé realmente qué pensar. Y siento tristeza en un día en que debería estar feliz porque me doy cuenta de que continúo sin tener la confianza suficiente en mí misma de que un hombre se quedará a mi lado y no se irá de un día para otro, como me hizo mi ex. Quiero decir, si lo hizo él después de 4 años y una vida en común, ¿qué no hará este chico al que conozco 7 meses y he visto 5 veces contadas? Aunque me niego a creer que haya sido capaz de alargar su estratagema para llevarme a la cama 7 meses.
Tampoco sé cómo tratarle a partir de este momento. Si buscarle yo o dejarme buscar. PD: mañana vuelvo a partir un mes fuera de España por trabajo.
No sé muy bien qué pretendo con este rollazo (perdón y gracias a quién lo lea), quizá desahogarme, quizá recabar alguna palabra de ánimo, quizá abrir los ojos.
porque, lo que tenga que ser, será.
