Yo por suerte no he visto eso de encadenar relaciones tóxicas. Con uno hemos aprendido.Tengo amigas que encadenan relaciones tóxicas, un poco al estilo de la prima. Se desahogan, analizan infinito todo lo que hacen sus parejas, sufren como descosidas y después de tenerte cien años aconsejándolas, llega un momento en que te das cuenta, con algo de pena eso sí, que en el fondo están en este tipo de relaciones porque no soportarían una relación sin subidas y bajadas. Se enfrentarían con sus vacíos y sus aburrimientos vitales y es más entretenido estar metidas en todos esos dramas. Así que a la prima, como a mis amigas, les digo que con todo mi cariño y respeto, vivan lo que tengan que vivir hasta que se harten. Esos procesos al final tienen sus ciclos naturales y nadie con los años le aguanta la salud para esos vaivenes absurdos.
Me planteo que la anterior pareja de la prima no lo fuera. Pudo ser un simple gelipoller cuyos fallos se encargó de magnificar el tarado este para poder ir en plan Salvador, uno de sus roles favoritos.
Cosa que NUNCA hubiese pasado aplicando la regla número uno de ser mujer: Ningún tío te hace TODO el caso del mundo desde el momento en que te vé si no es para follxx.
Sólo por eso es un NO definitivo en el trabajo.
Y luego está la regla número uno del trabajo: NO se cuentan intimidades a los compañeros NUNCA.
Otra cosa es que, con el paso de los años consolides una amistad, entonces sí.