Yo recuerdo que de pequeño era muy malo a la hora de comer ciertas comidas.Bueno yo es que creo que tampoco pasa nada porque en días puntuales no se coma algo que no apetezca y tampoco creo que lo terminen cogiendo de costumbre.
Mismamente yo hoy voy a hacer costillas guisadas que se le han antojado a mi chico, me apetecen cero (aunque me gustan mucho) asik a lo mejor me hago otra cosa rápida y me lo como mañana que seguro que me apetecen más.
Creo que al igual que los adultos podemos elegir los niños también deberían (si hablamos de días puntuales y no de costumbre)
Recuerdo que mi madre me llevó al pediatra...
Para ver que podía hacer para comer, que comía muy mal...
Recuerdo que el pediatra, le dijo a mi madre varios trucos...
- tomar el típico calcio para fortalecer el cuerpo...
- que si un día no quería comer algo y, por ejemplo, me apetecía un helado que no pasaba nada por sustituirlo por la comida un día...
- presentar la comida de forma distinta a la habitual, escondiendo en el plato lo que no me gustaba y potenciando a la vista lo que si...
- diluir una cucharadita de mantequilla en los platos con caldo. Por ejemplo, lentejas...
Y, la cosa funcionó. Empecé a comer casi de todo y, cosas que no me gustaban mucho entonces pues, por lo menos las probaba y me las comía aunque no terminara el plato pero, por lo menos, ya no le hacía ascos de primeras a ningún plato sin probarlo...