D
Dubrovnik
Guest
otra cosa, es posible que en la veintena las parejas sean más pesadas y empalagosas que más adelante?
Follow along with the video below to see how to install our site as a web app on your home screen.
Se debe tener en cuenta: This feature may not be available in some browsers.
otra cosa, es posible que en la veintena las parejas sean más pesadas y empalagosas que más adelante?
Es que veo a mis padres de 55 años que no tienen amigos casi. .. Y salen con alguno cada mil años. Yo este aislamiento no lo entiendoSi te refieres a que están más en plan "adolescente hormonado", puede ser, pero a partir de la treintena pasa algo peor, que es que muchos desarrollan una dependencia y un aislamiento que daría para un manual de psicología.
Cuesta mantener amistades de los 20 años en los 55 años porque se viven circunstancias muy diferentes y la gente cambia.Es que veo a mis padres de 55 años que no tienen amigos casi. .. Y salen con alguno cada mil años. Yo este aislamiento no lo entiendo
Cuesta mantener amistades de los 20 años en los 55 años porque se viven circunstancias muy diferentes y la gente cambia.
Y cuesta hacer amigos a partir de los 50 años,porque a veces la vida se vuelve rutinaria porque el tiempo material no da para más,trabajo,casa,familia,tareas domésticas, si además tienes padres mayores...
También las prioridades son otras.
A veces la distancia es un que.Las circunstancias no son las mismas y la gente, evidentemente, cambia, pero eso no es justificación para encerrarse en núcleos herméticos. Yo todavía recuerdo el grupo de amistades de mis padres: trabajaban todos de sol a sol (la mayoría con más de un empleo) y cada fin de semana hacían planes juntos. Algo tan sencillo como un paseo, una cena, un día de campo... Salvo casos muy incompatibles, la gente no se ve porque no quiere hacer el esfuerzo.
Y tantoAprovecho el reflote de la prima Monroe para contar algo que me ha pasado recientemente:
Ayer quedé con los amigos para cenar en la casa de una pareja. Ya hemos ido otras veces y la verdad es que son muy educados y nos tratan genial. El problema es que, como ella se aburra o le entre sueño (algo que suele pasar), de repente se levanta y empieza a recoger. El novio detrás con cara de fastidio recogiendo rápido y sin decir ni mu. Y claro nos corta el rollo a todos, que tenemos que pegar un salto de la silla y ayudar a recoger para irnos lo antes posible.
A veces, mi amigo tiene ganas de tomar la última copa en petit comité con los que quedamos (no lo dice, pero se nota) y no lo hace porque me imagino que a ella le molesta. Es una dinámica que no entiendo. Qué más da que ella se vaya a dormir antes y que él vaya a la cama una hora más tarde como mucho? Total, están en la misma casa.
Supongo que él se ha acostumbrado a vivir así, pero no me parece sano tener que ir en pack continuamente. Pienso que una pareja puede compartir amistades, pero evidentemente no pueden funcionar como un único ser. Cada uno tiene sus necesidades y al final va a terminar perdiendo siempre uno, el dominado o la dominada.
Qué pensáis? Algún caso parecido en vuestro entorno?
Acabo de descubrir este hilo. No se como expresarlo sin que me crujan a cruces. No puedo entender que la gente que empieza con una pareja este tan 'abducida' e ilusionada que todo su tiempo quiera compartirlo con su pareja, y cuando digo todo es todo, 24/7. Y cuando pasa el primer momento no tiene tiempo ni de responder a un mensaje de WhatsApp, o una conversación telefónica,... Nada. Es que necesitas pedir trámite de audiencia para saber de su existencia.
Uno del grupo estuvo desaparecido un tiempo largo (como dos o tres años) cuando empezó su primera relación seria, aparecía sólo cuando le iba mal para pedirnos consejo sobre su relación. Era un poco molesto porque se notaba que éramos los secundarios, no hace falta hablar todo el día ni quedar todas las veces pero la última vez que quedamos con él fue en 2017 (y ya empezaba a estar desaparecido) y después no lo volvimos a ver hasta finales de 2019. Estaba en el grupo como miembro fantasma casi...
Al parecer se dio cuenta de que esto de estar 24 horas sólo relacionándote con tu pareja es un rollo y después del reencuentro se pasa todo el santo día hablando por el grupo, proponiendo planes y diciendo que nos echa de menos. Como cosa buena muchas veces se apunta su pareja que lejos de incordiar nos cae muy bien a todos.