Una de las cosas de la fe es que puedes pedir por otras personas, no sólo por ti, al contrario, es un acto de generosidad, en estos tiempos en que hay personas (no lo digo por vosotras) que se creen que un santo es un cajero automático.
Yo creo que es mejor no mezclar peticiones porque, cuando se ora, es muy importante el sentimiento que uno pone en la oración. Pienso que rezar no es como escribirle la carta a los Reyes Magos, que uno pide y se desentiende. El deseo y la fuerza interior que se pone en ello es básico. Es mejor que pongas toda tu intención y fuerza emocional en una de tus peticiones y, después, te concentres en la otra.
Es que la novena a los Santos no es una fórmula mágica.
Da paz allá donde se le necesite
🕯