Moción de Censura contra Rajoy.

como el titoWyo lo dice mejor que yo, aquí dejo su columna, que no tien desperdicio.

La venganza de los titiriteros

El Gran Wyoming

Publicada 14/06/2017 a las 06:00 Actualizada 13/06/2017 a las 18:51 Corrupción política

¡Ojalá Irene Montero, en su primera intervención, hubiera dicho una sola mentira!


Qué triste realidad aquella en la que uno desea un mundo donde el ponente en sede parlamentaria mienta. Sería un mundo mejor. La realidad expuesta, que se ciñe a lo que hay, es demoledora e indigna de un país que se llame a sí mismo democrático. De nada sirve volver a recordar que fuera de aquí los políticos dimiten por cuestiones nimias comparadas con lo que se expuso en dicha intervención.


Terminada su intervención, el señor Rajoy respondió que Montero no había explicado las razones por las que se ha llevado adelante la moción de censura. Un chorreo de dos horas de fechorías no le parecía suficiente al presidente del Gobierno, no se dio por aludido, creía que ese ruido de fondo que componían la concatenación de fechorías y la interminable ristra de cargos de su partido con problemas con la justicia, era la lluvia sobre los cristales, en una ensoñación fantástica de su infancia en Galicia. Supongo. Le llamaron chorizo de diferentes maneras más de cien veces, pero él seguía con esa mirada que parece que persigue el vuelo de una mosca. La verdad en que, entre eso, y que le ha dado por andar de forma compulsiva, cada vez se parece más a Forrest Gump. Permanece ajeno en el escaño, aunque luego dice que atiende, como lo está en las ruedas de prensa cuando solventa las preguntas complicadas con un: “Bueno eso ya… tal”.


En su respuesta se puso a hablar de otra cosa. Eso sí, sin olvidar citar a Venezuela, o aquello de “ustedes lo ven todo muy negro”, “les gusta que las cosas vayan mal”. Parece que en su grupo siguen abundando en la pobreza necesaria. La pobreza, al parecer, como la corrupción, es inevitable. No va con ellos, pueden convivir insertos en ella, enterrados en ella, en realidad, a costa de ella.

Aceptada banda criminal mafiosa como gobierno legítimo de la nación española, lo demás es superfluo. Todo cabe. Pasó por alto por esta cuestión y se dedicó a otra cosa.

Mientras, escucho en la radio que el señor Rajoy sale a la palestra sin que se le espere, tras la intervención de la diputada de Podemos. De forma espontánea. Como si se hubiera picado. Sin embargo, apareció con un discurso escrito de muchos folios con los que pretendía responder a la intervención de la señora Montero, a su tono y a sus matices. Con un discurso escrito improvisa cualquiera. Más bien, parece que pretendía robar protagonismo a los ponentes, tiene medios a su servicio que le van a dar un diez diga lo que diga, como hicieron sus compañeros de bancada cuando todos en pie estuvieron minutos aplaudiendo antes de que comenzara a hablar. Los que nos subimos al escenario de vez en cuanto sabemos lo bien que se trabaja en esas circunstancias, con el pescado vendido.

También fueron pródigos en el aplauso de despedida cuando terminó su intervención. Ahí era más sentido. Tras las graves acusaciones que le dirigieron a él y a sus compañeros, a las que no respondió, ni se molestó en defenderse de ellas, se sintieron de nuevo juntos, integrados, protegidos en ese todo que todo lo borra, lo obvia y lo olvida. Están a salvo en la madriguera que a todos ampara. Sin fisuras, sin dudas, sin delaciones. Pasar por encima del hecho de que la Justicia les defina como organización criminal para delinquir, les reduce la pena, les diluye sus inquietudes, les atenúa el desasosiego. Todos, en ese seno materno que a todos ampara, se sintieron reconfortados y con la sensación de tener en sus manos un futuro prometedor. Cuando menos, un presente plácido, a pesar de la gravedad de la cuestión.

Llama la atención la sonrisa de idiocia con la que recibían las acusaciones. Fingen que no les afectan. Uno llegaría a creerse que son inmunes a lo que allí se dijo si no fuera por quién se lo dijo. A pesar del disimulo, tuvieron que aguantar un brutal chorreo de unos descamisados que nunca deberían haber entrado en el hemiciclo, si no hubiera sido por la dejación de funciones que hicieron los socialdemócratas ante la crisis y la aprobación de medidas que cambiaron las bases de convivencia de los españoles. No salieron entonces en defensa de la ciudadanía de manera drástica, radical, como la situación reclamaba, planteando medidas de choque que hubieran atenuado las intenciones del Gobierno. Dejaron al personal con el culo al aire en una actitud de impotencia que no se justificaba con la mayoría absoluta del PP. Aquella oposición se mostró incapaz, insuficiente, y dio paso a la irrupción de Podemos que, digan lo que digan, alcanzó una representación espectacular en poco tiempo. Artificial, según algunos, porque capitalizaron el descontento de la ciudadanía. Claro. Alguien tenía que llevar al hemiciclo la voz de los desamparados, que lo estaban.

Durante el debate, los señores del PP sonreían a sabiendas de que la impunidad, en mayor o menor medida, les ampara, que la justica se puede doblegar, y que el tiempo borrará las huellas que dejan esas monedas que se les escapan del saco. Siguiendo la enseñanzas de Rajoy, que actúa como un pequeño Buda, “hay que sentarse debajo de una encina a ver como anidan las abubillas. De regreso a la ciudad habrá escampado y el dinosaurio ya no estará allí”.

El señor Rajoy, en su discurso escrito, llevaba comentarios jocosos para ridiculizar las formas de la ponente, aunque el escrito parecía dirigido a Pablo Iglesias. No contestó a nada. Parecía que nadie había hablado antes que él.

A continuación salió Pablo Iglesias que reiteró parte del discurso de su predecesora para dar paso a una intervención política en la que desgranó sus propuestas. Hizo una declaración de principios.

Para sorpresa de los populares tuvo una intervención muy sosegada, mucho más que la de su telonera. Se presentaba con maneras de jefe de Estado. No quería caer en la trampa que les tendieron en el debate de la Comunidad donde los populares se pasaron veinte pueblos con las descalificaciones, utilizando un tono impropio de aquel que se presume inocente, ante las acusaciones, también graves, que se vertieron.

De nuevo, en sus contestaciones sucesivas, el señor Rajoy eludió la cuestión que allí se planteaba. En síntesis, le venían a decir que está deslegitimado para gobernar porque ha tocado fondo, el lodo les cubre por completo, y ya ni siquiera la palabra inaceptable se ajusta a la realidad, se queda corta.

Rajoy siguió vendiendo sus logros sin entrar al trapo. A lo otro, lo del latrocinio generalizado, no hizo alusión. Parece que dan por hecho que es su estado natural. No se molestó ni en negar esa realidad.

No sé cómo calificarán los expertos en la materia este debate. No ha habido vencedores ni vencidos porque hablaban de realidades paralelas. Quedó caro, sin embargo, que hay una España indignada que les contó las verdades que se dicen en la calle y en los medios de comunicación todos los días, que entiende que no se puede gobernar en este estado de cosas, y otra España que sigue viendo la patria como algo de su propiedad y que, en cualquier caso, no les considera representantes legítimos para dirigirse a ellos, para pedir explicaciones. Les falta el consabido: “Usted no sabe con quién está hablando”. No se las van a dar. Siguen actuando como si estos de Podemos fueran unos adolescentes que se han colado en la piscina de su zona residencial. No terminan de creerse ni entender por qué están allí. Ese día comenzarían a tener problemas de conciencia.

Sí, es posible que la moción no fuera oportuna, que la cortesía parlamentaria no se haya cumplido por no haber consultado al PSOE antes de anunciar la medida, si es que querían su apoyo, o hacerlo cuando estaban desintegrados, pero creo que ya ha pasado el tiempo suficiente para escuchar lo que se ha oído hoy en el Parlamento.

Dicho queda y anotado en el cuaderno de sesiones.

Por otra parte, se entiende que el PSOE estuviera molesto con la iniciativa. Se les han adelantado. En realidad, no se ha dicho una sola palabra de la que ellos renieguen salvo, claro está, la cosa del referéndum de Cataluña que les podría provocar una hemorragia de votos. Problema que no tienen los de Podemos que amplían con ello su espacio democrático, espacio, por cierto, que en su día defendía el mismísimo Felipe González cuando se hablaba, término que ha recordado hoy Rajoy y que no se emplea porque suena muy mal, de “autodeterminación”. Entonces, a aquel socialismo de pana, le daba votos, hoy se los quita y se elimina. Razón por la que Podemos les barre en Cataluña y el País Vasco.

Callados, se han quedado de testigos. Situación incómoda en la que no se permitían, ni siquiera, aplaudir lo evidente. Son las normas: nadie aplaude al otro. Los nacionalistas lo han hecho, sin embargo, en varias ocasiones. El PNV, no, lógicamente. Todavía está digiriendo el talón que les soltaron a cambio de aprobar los presupuestos y que les supone un bozal durante una temporada.

Son cosas que el PSOE debió decir y se las han robado. Ese y no otro era su terreno cuando eran los chulazos de la oposición. Ahora hay una competencia seria. Se tienen que poner las pilas. Como en los amores de verano, ha llegado un veraneante nuevo, con más morro, ha soltado eso que el enamorado en la sombra llevaba tiempo mascullando, y se ha levantado a la chica.

Han tenido la desvergüenza de actuar sin pedir permiso.

Los españoles, que no entienden de estrategias ni de cortesía parlamentaria, han visto a un solo grupo enfrentándose a los villanos a cara descubierta.

Oportuno o no, efectivo o no, ya era hora de que alguien les cantara la gallina de esta manera y les tuviera callados tantas horas escuchando una verdad grande. Como decía, ¡ojalá no lo fuera!

Se han ido con un rapapolvo de los buenos. Se lo merecen.

La verdad, hubiera sido más cómodo para el PSOE no haber llegado a este punto, pero ahora que las cartas están sobre la mesa se verán obligados, otra vez, a pasar por el bochorno de la abstención ante esta banda, que lo es, y que sigue practicando la omertá y aquello de Gürtel somos todos. Y lo son.
 
De verdad te parece un paripé toda la corrupción que ha salido, y quizás lo peor este oculto??? Es también un paripé que unos jueces se atrevan hablar de organización criminal para delinquir??? Seguro que esta moción la hace otro partido, otro nombre que no sea el de Pablo Iglesias y seguro que seria diferente para algunos.Es tan evidente que asusta hasta donde puede llegar el odio en este país,que sobrepasa todo lo razonable.
No estoy hablando de la corrupción de PP sino de Pablo Iglesias presentándose como candidato alternativo en una moción de censura que solo era para figurar.
 
En una moción de censura no es tan importante ser buen orador como decir las verdades del barquero, e Irene lo hizo. Sin tibiezas, sin quebrársele la voz, con toda la valentía y firmeza que requería el momento. Más de dos horas hablando de lo que muchos españoles quisiéramos decir al gobierno. Y millones de ciudadanos se lo agradecemos.
Como puede ser posible que un presidente de gobierno tras las graves acusaciones que le dirigieron a él y a sus compañeros, a las que no respondió, ni se molestó en defenderse de ellas. ¿Por qué toman a los ciudadanos? Les hemos expoliado de casi todos sus derechos y sus bienes y nos siguen votando se dicen los Sres. PPSOE
 
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como el titoWyo lo dice mejor que yo, aquí dejo su columna, que no tien desperdicio.

La venganza de los titiriteros

El Gran Wyoming

Publicada 14/06/2017 a las 06:00 Actualizada 13/06/2017 a las 18:51 Corrupción política

¡Ojalá Irene Montero, en su primera intervención, hubiera dicho una sola mentira!


Qué triste realidad aquella en la que uno desea un mundo donde el ponente en sede parlamentaria mienta. Sería un mundo mejor. La realidad expuesta, que se ciñe a lo que hay, es demoledora e indigna de un país que se llame a sí mismo democrático. De nada sirve volver a recordar que fuera de aquí los políticos dimiten por cuestiones nimias comparadas con lo que se expuso en dicha intervención.


Terminada su intervención, el señor Rajoy respondió que Montero no había explicado las razones por las que se ha llevado adelante la moción de censura. Un chorreo de dos horas de fechorías no le parecía suficiente al presidente del Gobierno, no se dio por aludido, creía que ese ruido de fondo que componían la concatenación de fechorías y la interminable ristra de cargos de su partido con problemas con la justicia, era la lluvia sobre los cristales, en una ensoñación fantástica de su infancia en Galicia. Supongo. Le llamaron chorizo de diferentes maneras más de cien veces, pero él seguía con esa mirada que parece que persigue el vuelo de una mosca. La verdad en que, entre eso, y que le ha dado por andar de forma compulsiva, cada vez se parece más a Forrest Gump. Permanece ajeno en el escaño, aunque luego dice que atiende, como lo está en las ruedas de prensa cuando solventa las preguntas complicadas con un: “Bueno eso ya… tal”.


En su respuesta se puso a hablar de otra cosa. Eso sí, sin olvidar citar a Venezuela, o aquello de “ustedes lo ven todo muy negro”, “les gusta que las cosas vayan mal”. Parece que en su grupo siguen abundando en la pobreza necesaria. La pobreza, al parecer, como la corrupción, es inevitable. No va con ellos, pueden convivir insertos en ella, enterrados en ella, en realidad, a costa de ella.

Aceptada banda criminal mafiosa como gobierno legítimo de la nación española, lo demás es superfluo. Todo cabe. Pasó por alto por esta cuestión y se dedicó a otra cosa.

Mientras, escucho en la radio que el señor Rajoy sale a la palestra sin que se le espere, tras la intervención de la diputada de Podemos. De forma espontánea. Como si se hubiera picado. Sin embargo, apareció con un discurso escrito de muchos folios con los que pretendía responder a la intervención de la señora Montero, a su tono y a sus matices. Con un discurso escrito improvisa cualquiera. Más bien, parece que pretendía robar protagonismo a los ponentes, tiene medios a su servicio que le van a dar un diez diga lo que diga, como hicieron sus compañeros de bancada cuando todos en pie estuvieron minutos aplaudiendo antes de que comenzara a hablar. Los que nos subimos al escenario de vez en cuanto sabemos lo bien que se trabaja en esas circunstancias, con el pescado vendido.

También fueron pródigos en el aplauso de despedida cuando terminó su intervención. Ahí era más sentido. Tras las graves acusaciones que le dirigieron a él y a sus compañeros, a las que no respondió, ni se molestó en defenderse de ellas, se sintieron de nuevo juntos, integrados, protegidos en ese todo que todo lo borra, lo obvia y lo olvida. Están a salvo en la madriguera que a todos ampara. Sin fisuras, sin dudas, sin delaciones. Pasar por encima del hecho de que la Justicia les defina como organización criminal para delinquir, les reduce la pena, les diluye sus inquietudes, les atenúa el desasosiego. Todos, en ese seno materno que a todos ampara, se sintieron reconfortados y con la sensación de tener en sus manos un futuro prometedor. Cuando menos, un presente plácido, a pesar de la gravedad de la cuestión.

Llama la atención la sonrisa de idiocia con la que recibían las acusaciones. Fingen que no les afectan. Uno llegaría a creerse que son inmunes a lo que allí se dijo si no fuera por quién se lo dijo. A pesar del disimulo, tuvieron que aguantar un brutal chorreo de unos descamisados que nunca deberían haber entrado en el hemiciclo, si no hubiera sido por la dejación de funciones que hicieron los socialdemócratas ante la crisis y la aprobación de medidas que cambiaron las bases de convivencia de los españoles. No salieron entonces en defensa de la ciudadanía de manera drástica, radical, como la situación reclamaba, planteando medidas de choque que hubieran atenuado las intenciones del Gobierno. Dejaron al personal con el culo al aire en una actitud de impotencia que no se justificaba con la mayoría absoluta del PP. Aquella oposición se mostró incapaz, insuficiente, y dio paso a la irrupción de Podemos que, digan lo que digan, alcanzó una representación espectacular en poco tiempo. Artificial, según algunos, porque capitalizaron el descontento de la ciudadanía. Claro. Alguien tenía que llevar al hemiciclo la voz de los desamparados, que lo estaban.

Durante el debate, los señores del PP sonreían a sabiendas de que la impunidad, en mayor o menor medida, les ampara, que la justica se puede doblegar, y que el tiempo borrará las huellas que dejan esas monedas que se les escapan del saco. Siguiendo la enseñanzas de Rajoy, que actúa como un pequeño Buda, “hay que sentarse debajo de una encina a ver como anidan las abubillas. De regreso a la ciudad habrá escampado y el dinosaurio ya no estará allí”.

El señor Rajoy, en su discurso escrito, llevaba comentarios jocosos para ridiculizar las formas de la ponente, aunque el escrito parecía dirigido a Pablo Iglesias. No contestó a nada. Parecía que nadie había hablado antes que él.

A continuación salió Pablo Iglesias que reiteró parte del discurso de su predecesora para dar paso a una intervención política en la que desgranó sus propuestas. Hizo una declaración de principios.

Para sorpresa de los populares tuvo una intervención muy sosegada, mucho más que la de su telonera. Se presentaba con maneras de jefe de Estado. No quería caer en la trampa que les tendieron en el debate de la Comunidad donde los populares se pasaron veinte pueblos con las descalificaciones, utilizando un tono impropio de aquel que se presume inocente, ante las acusaciones, también graves, que se vertieron.

De nuevo, en sus contestaciones sucesivas, el señor Rajoy eludió la cuestión que allí se planteaba. En síntesis, le venían a decir que está deslegitimado para gobernar porque ha tocado fondo, el lodo les cubre por completo, y ya ni siquiera la palabra inaceptable se ajusta a la realidad, se queda corta.

Rajoy siguió vendiendo sus logros sin entrar al trapo. A lo otro, lo del latrocinio generalizado, no hizo alusión. Parece que dan por hecho que es su estado natural. No se molestó ni en negar esa realidad.

No sé cómo calificarán los expertos en la materia este debate. No ha habido vencedores ni vencidos porque hablaban de realidades paralelas. Quedó caro, sin embargo, que hay una España indignada que les contó las verdades que se dicen en la calle y en los medios de comunicación todos los días, que entiende que no se puede gobernar en este estado de cosas, y otra España que sigue viendo la patria como algo de su propiedad y que, en cualquier caso, no les considera representantes legítimos para dirigirse a ellos, para pedir explicaciones. Les falta el consabido: “Usted no sabe con quién está hablando”. No se las van a dar. Siguen actuando como si estos de Podemos fueran unos adolescentes que se han colado en la piscina de su zona residencial. No terminan de creerse ni entender por qué están allí. Ese día comenzarían a tener problemas de conciencia.

Sí, es posible que la moción no fuera oportuna, que la cortesía parlamentaria no se haya cumplido por no haber consultado al PSOE antes de anunciar la medida, si es que querían su apoyo, o hacerlo cuando estaban desintegrados, pero creo que ya ha pasado el tiempo suficiente para escuchar lo que se ha oído hoy en el Parlamento.

Dicho queda y anotado en el cuaderno de sesiones.

Por otra parte, se entiende que el PSOE estuviera molesto con la iniciativa. Se les han adelantado. En realidad, no se ha dicho una sola palabra de la que ellos renieguen salvo, claro está, la cosa del referéndum de Cataluña que les podría provocar una hemorragia de votos. Problema que no tienen los de Podemos que amplían con ello su espacio democrático, espacio, por cierto, que en su día defendía el mismísimo Felipe González cuando se hablaba, término que ha recordado hoy Rajoy y que no se emplea porque suena muy mal, de “autodeterminación”. Entonces, a aquel socialismo de pana, le daba votos, hoy se los quita y se elimina. Razón por la que Podemos les barre en Cataluña y el País Vasco.

Callados, se han quedado de testigos. Situación incómoda en la que no se permitían, ni siquiera, aplaudir lo evidente. Son las normas: nadie aplaude al otro. Los nacionalistas lo han hecho, sin embargo, en varias ocasiones. El PNV, no, lógicamente. Todavía está digiriendo el talón que les soltaron a cambio de aprobar los presupuestos y que les supone un bozal durante una temporada.

Son cosas que el PSOE debió decir y se las han robado. Ese y no otro era su terreno cuando eran los chulazos de la oposición. Ahora hay una competencia seria. Se tienen que poner las pilas. Como en los amores de verano, ha llegado un veraneante nuevo, con más morro, ha soltado eso que el enamorado en la sombra llevaba tiempo mascullando, y se ha levantado a la chica.

Han tenido la desvergüenza de actuar sin pedir permiso.

Los españoles, que no entienden de estrategias ni de cortesía parlamentaria, han visto a un solo grupo enfrentándose a los villanos a cara descubierta.

Oportuno o no, efectivo o no, ya era hora de que alguien les cantara la gallina de esta manera y les tuviera callados tantas horas escuchando una verdad grande. Como decía, ¡ojalá no lo fuera!

Se han ido con un rapapolvo de los buenos. Se lo merecen.

La verdad, hubiera sido más cómodo para el PSOE no haber llegado a este punto, pero ahora que las cartas están sobre la mesa se verán obligados, otra vez, a pasar por el bochorno de la abstención ante esta banda, que lo es, y que sigue practicando la omertá y aquello de Gürtel somos todos. Y lo son.

Wyoming, siempre tan lúcido y brillante.
 
No estoy hablando de la corrupción de PP sino de Pablo Iglesias presentándose como candidato alternativo en una moción de censura que solo era para figurar.
No era para figurar,era tan importante la vergüenza que el pueblo español está pasando con estos fangos,que alguien lo tenía que hacer.Ya dijo Iglesias que lo hiciera el PSOE que él se retiraba,de la misma manera que apoyo la moción de PSOE en Murcia sin que tuvieran que consultarle,se tenía que hacer y apoyó. A veces el árbol impide ver el bosque,pero eso ya se trata de prejuicios personales.
 
Como puede ser posible que un presidente de gobierno tras las graves acusaciones que le dirigieron a él y a sus compañeros, a las que no respondió, ni se molestó en defenderse de ellas. ¿Por qué toman a los ciudadanos? Les hemos expoliado de casi todos sus derechos y sus bienes y no siguen votando se dicen los Sres. PPSOE

No se defiende de las acusaciones porque no se reconoce en ellas, además de porque no tiene argumento alguno para hacerlo. El señor presidente vive en su propio mundo de luz y fantasía... "España es un gran país y está llena de españoles". ¿Qué puede esperarse de alguien que dice cosas tan profundas?

Pues eso. ¿Llueve? Ya escampará. Es su filosofía.
 
No estoy hablando de la corrupción de PP sino de Pablo Iglesias presentándose como candidato alternativo en una moción de censura que solo era para figurar.

No serás votante del PP, como tú dices, pero tampoco sé si serás muy consciente de que con tus prejuicios personales hacia Pablo Iglesias, incidiendo una y otra vez (sin más análisis) en que sólo quiere figurar, haces el juego clamorosamente a los de la gaviota (pobre animalito).

Creo que es otra la visión que ha de darse a la moción de censura, por encima de ideologías, fobias y filias. España tiene una situación muy grave que solamente los necios se niegan a admitir (y no te lo estoy llamando a ti). Es muy necesario alzar la voz en el Parlamento, porque de continuar así, vamos a la quiebra total. ¿Lees prensa internacional? Se te ponen los pelos de punta cuando lees lo que aquí esconden.

Qué importa si Pablo Iglesias nos cae mejor o peor, si tiene novia o no la tiene, si miró de aquella manera o de la otra, si... por favor, basta de simplismos, que no son tiempos.
 
En español, para que todos lo entiendan.

Carta abierta al bolsillo de los españoles: España está en quiebra
25/03/2017 (postmodernia.com)
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A continuación publicamos las conclusiones alcanzadas por los economistas Roberto Centeno, Juan Laborda, Juan Carlos Barba y Juan Carlos Bermejo, tras analizar detenidamente las Cuentas Nacionales de España. Estas hablan por si mismas y no son nada halagüeñas. Puedes descargar la carta original dirigida a Dr Jens Weidmann, Presidente De Deutsch Bundesbank y los anexos pulsando aquí.

Estimados amigos:

Los abajo firmantes, un grupo de profesores y economistas independientes españoles, hemos realizado recientemente una revisión independiente de las Cuentas Nacionales de España.

Desde el pasado mes de junio de 2016 hemos ido presentando las conclusiones preliminares de nuestro trabajo al Vicepresidente de la CE, Valdis Dombrovskis, al Comisario de la Comisión Europea Pierre Moscovici, y al Presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz. En los últimos tiempos, también hemos incluido en esta correspondencia al Presidente del Eurogrupo Jeroen Dijsselbloem.

Debido a la importancia del asunto, nos gustaría compartir con vosotros los resultados finales de la mencionada revisión.

En nuestra anterior correspondencia con los citados representantes de la UE, mostramos nuestra certeza absoluta acerca de la manipulación que se está llevando a cabo de las Cuentas Nacionales de España. Nuestros hallazgos iniciales utilizando el método de indicadores de actividad han revelado una diferencia de un 18,6% entre las cifras oficiales y las reales de PIB: nuestras conclusiones finales muestran una desviación del 17,2%. Utilizando el método del ingreso (remuneraciones pagadas), hemos visto una discrepancia del 18%. Por último, pero no menos importante, el método de gasto ha mostrado una desviación del 17,2%. Los 3 anexos adjuntos a esta carta presentan nuestras conclusiones detalladamente.

En resumen, los tres métodos utilizados llegan a una conclusión similar: la diferencia entre el PIB real español y el dato oficial del PIB reportado a la Unión Europea oscila entre el 17 y el 18%. En cifras absolutas, esto significa que la riqueza de España asciende a 894.000 millones de euros, y no es de 1.090 millones de euros. Según las cifras publicadas por el mismo Banco de España, la deuda total de nuestro país (deuda de Excessive Deficit Procedure (EDP) de 1.100 millones de euros + otra deuda) fue de 1.530 millones de euros en junio de 2016. En el actual contexto de manipulación de las Cuentas Nacionales españolas, una deuda total de esa magnitud representa… un 171% del PIB español.

Somos conscientes de que tal vez vosotros os preguntéis cómo es posible que ningún otro economista español esté denunciando dicha manipulación. La respuesta a esta preocupación es muy simple: nosotros somos analistas independientes que no están vinculados a ningún partido político español y por lo tanto ninguna institución podría ejercer cualquier tipo de presión sobre nosotros. Nuestro trabajo académico en varias universidades españolas ha dado lugar a numerosas publicaciones y manuales de economía, y además ha predicho repetidamente con exactitud la evolución de la economía española. Las grabaciones de medios de comunicación están disponibles para comprobar esta declaración, como por ejemplo cuando denunciamos la inexactitud de las cifras de PIB de 2012 y 2013 comunicadas a la UE (y finalmente corregidas 4 años más tarde por el Instituto Nacional de Estadística INE: la evolución del PIB del 2012 desde un -1,37% a un -2,6%, y en el caso del PIB del año 2013, de un -1,2% a un -1,7%).

Las consecuencias de nuestros hallazgos no pueden seguir siendo ignoradas. El Gobierno español informa que en 2016 España crecerá un 3,1% tras un crecimiento del 0,8% en el primer trimestre de 2016, un 0,7% en el segundo trimestre de 2016 y un 0,7% en el T3 2016. En resumen, un nivel de crecimiento similar al que fue reportado en 2015.

Entonces, ¿cómo es posible que todos los indicadores de actividad y demanda se colapsen? Nos gustaría llamar amablemente su atención a las siguientes cifras:

Indicadores de actividad 2015 1S2016 3T2016
Adjusted energy consumption¹ +1.6% 0.0% 0.0%
Índice de la Producción Industrial +3.4% +2.0% (julio y agosto) +1.9%
Consumo de cemento +5.7% -2.3% -4.0%
Indicador de Confianza Industrial -0.3% -2.5% -3.8%


Indicadores de la demanda 2015 1S2016 3T2016
Disponibilidad de Bienes Básicos +6.8% +4.2% (julio y agosto) -0.4%
Ventas de grandes empresas +5.0% +2.5% (julio y agosto) +1.6%
Matriculaciones vehículos +20.9% +11.0% +9.7%
Matriculaciones vehículos de carga² +35.9% +14.7% +10.6%
Índice de confianza del consumidor +0.3% -3.3% -6.1%
Exportaciones +4.3% +2.4% (julio y agosto) -1.8%

1. una correlación del 90% en el crecimiento del PIB.
2. casi perfecta correlación matemática con GFCF (formación bruta de capital fijo)

Las tablas anteriores demuestran claramente que la economía española está desacelerándose y que el crecimiento real de España es inferior a la mitad del dato oficial. ¿Estarían dispuestos los dirigentes de la UE en obtener una explicación acerca de esas discrepancias con las cifras comunicadas por las autoridades españolas?

No estamos seguros de si la UE actuaría respecto a la revisión anterior, ya que seguimos atestiguando cómo la gigantesca burbuja de deuda española sigue creciendo y cómo nadie se sonrojó cuando el Gobierno español informó a la UE que el déficit español para 2016 sería de un 2,8% (una cifra que consideramos simplemente surrealista y lo mostramos en nuestros artículos en los medios de comunicación españoles, que está disponible para su lectura).

Pocos meses después, el Gobierno español pidió un nuevo objetivo de déficit del 3,6%: la Comisión Europea terminó ofreciendo un 4,6% al final del día. En los primeros 7 meses de este año, el déficit ya ha alcanzado el 3,27%. ¿Podría alguien creerse hoy día que a finales del 2016 el déficit se mantendrá en el 4,6%? Moody’s acaba de informar que tal objetivo es imposible de lograr…

Como habitualmente, el Gobierno español sigue haciendo promesas que parecen sólidas en papel simplemente pronosticando unas tasas de crecimiento poco realistas que finalmente podrían generar más ingresos fiscales.

A estas alturas, estamos seguros de que vosotros os habéis dado cuenta de las nuevas pruebas que hacen imposible que España logre los ajustes de déficit exigidos por la Comisión Europea: un 4.6% del PIB español en 2016, un 3.1% en 2017 y un 2.2% en 2018.

En 2016:
  • Retirada de 20.136 millones de euros del Fondo Público de Pensiones, un importe equivalente al 1,8% del PIB (y un 50% superior a la cantidad retirada en 2015). Esta medida resultará en un déficit en el ámbito de la Seguridad Social más alto que el inicialmente previsto.
  • El colapso de la mayoría de los indicadores de demanda y actividad (con un 50% superior en comparación con 2015), y además de los ingresos fiscales. Según la Agencia Tributaria española, los ingresos fiscales crecieron con un 1,9% hasta octubre de 2016 (frente a un 4,5% en 2015), el impuesto sobre la renta descendió con un 0,7% y el IVA y los Impuestos Especiales crecieron el doble que en 2015.
  • En conclusión (y tras incorporar las últimas previsiones de déficit presupuestario), podemos anticipar que el déficit llegará al 5% del PIB español, un 0,4% por encima del compromiso del Gobierno español. Sin embargo, es un hecho que las autoridades son perfectamente conscientes de que no cumplir los compromisos con la Unión Europea no implica sanción alguna.
  • Además, cabe señalar que la denominada Autoridad Fiscal Independiente de España (AIREF) está funcionando bastante mal, ya que parece actuar como una institución gubernamental más que como un organismo independiente. En diciembre de 2016 la AIREF mantenía su postura que el déficit de la Seguridad Social en España alcanzaría el 1,6% en 2016, cuando sólo la retirada de fondos del Fondo de Pensiones público llegó hasta el 1,8% del PIB español.
En 2017:
  • El crecimiento del PIB se está desacelerando más rápido que el comunicado oficial a la Unión Europea. El aumento de los impuestos de sociedades y las nuevas medidas adoptadas (como el cese de los aplazamientos de pagos por el impuesto de sociedades y el IVA) contribuirán negativamente a las PYMEs y, por consiguiente, afectarán al empleo y a la inversión.
  • La incertidumbre derivada de las nuevas medidas tributarias mencionadas anteriormente desanimará la inversión internacional en un futuro próximo.
  • El recientemente nombrado Secretario de Estado de Presupuestos y Gastos Públicos, Sr. Nadal, ha admitido abiertamente que el Fondo de Pensiones se vaciará a finales de 2017 y ha pedido la emisión de más deuda pública (5.000 millones de euros en 2017, que necesitaría ser aumentada hasta 20.000 millones de euros en 2018).
Lamentablemente, somos conscientes de que las Cuentas Nacionales presentadas a la Unión Europea son una mera ciencia ficción. Como consecuencia, estamos seguros de que en la próxima primavera la Comisión Europea recibirá una nueva solicitud por parte del Gobierno español para ampliar los objetivos de déficit presupuestario.

En nuestra opinión, ha llegado el momento de llevar a cabo una profunda auditoría independiente, dirigida por la UE, de las cuentas nacionales españolas. Ignorar las constantes violaciones de los objetivos de déficit y la ausencia de reformas estructurales, y además proteger la prima de riesgo de España una y otra vez, llevaría a la ruina a generaciones de españoles. El futuro de España y el de la Eurozona están en juego.

No hace falta decir que estamos a su entera disposición para presentarle de una manera detallada los hallazgos de nuestro estudio.

Atentamente,

Prof. Dr. Roberto Centeno
Head of Economics Department
School of Mining Engineering
Technical University of Madrid

Juan Laborda
Doctor in Economics

Juan Carlos Barba
Economics Journalist

Juan Carlos Bermejo
Entrepreneur, Engineer & MBA
 
¡Pero cuidado, el problema es Pablo Iglesias! Dan ganas de llorar.

EL problema para PPSOE llámese Juan o Pablo o Nemesio es el pánico que hay a que al llegar el gobierno se descubra toda la "merdee" que se llevan tapando durante 40 años de bipartidismo y que se pueda demostrar que otra política es posible, políticas que favorezcan a los ciudadanos y no a las grandes corporaciones.

P??E tiene una deuda de mas 56 millones con los bancos el PP no se sabe estos partidos tienen un compromiso con los bancos que no les dejan actuar libremente
 
Al Gobierno no le preocupan las "piruetas" de Iglesias para tapar su fracaso
Méndez de Vigo no cree que el PSOE apoyará otra moción de censura y sí confía en que apoye el objetivo de déficit del Estado para 2018

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Al Gobierno no le preocupan las "piruetas" de Iglesias para tapar su fracaso
GABRIEL SANZ

16.06.2017 - 13:40

Al Gobierno "no le preocupan" las "piruetas" de Pablo Iglesias para disimular su fracaso en la reciente moción de censura con otra supuesta moción antes de Navidad porque estaría igualmente condenada al fracaso.Así lo ha dicho este mediodía el Ministro portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.El Ejecutivo cree que el portavoz del Grupo Socialista, José Luis Ábalos, ya dejó claro durante su réplica a Iglesias, el miércoles pasado, que los socialistas no están dispuestos a embarcarse en una mayoría de Gobierno con ERC; solo participarían si Podemos y Ciudadanos no se vetaran mutuamente.Y eso, dijo esta tarde Méndez de Vigo, es realmente difícil después de las duras descalificaciones personales que se dirigieron Iglesias y Albert Rivera.El portavoz reconoce al líder de Podemos "habilidades dialécticas" pero el suspenso que logró en la moción -solo la apoyaron 84 de los 350 diputados- debería hacerle reflexionar.Habla de otra moción antes de Navidad "para que no se hable de su suspenso pero en esto las matemáticas mandan".Por contra, el Gobierno confía en retomar el diálogo institucional con Pedro Sánchez una vez pase el 39 Congreso del PSOE este fin de semana; de hecho, está mañana Ábalos ha reconocido que su partido está dispuesto a dialogar sobre el objetivo de déficit para el Presupuesto 2018 aunque no apruebe finalmente las cuentas públicas del año que viene.Íñigo Méndez de Vigo no ha querido concretar pero cree que más pronto que tarde habrá un diálogo entre Mariano Rajoy y Sánchez para preservar los canales de diálogo entre ambas formaciones.

http://www.vozpopuli.com/politica/Gobierno-Iglesias_0_1036096951.html

Bueno, veremos que dialogan los líderes del PP y PsoE es decir, Rajoy y Pedro Sanchez.

Pueden hablar todo lo que quieran pero si llegan a un acuerdo para firmar los cuentas del 2018 ya veremos como lo consideran sus militantes y votantes. Lo digo porque habrá mas de lo mismo o mas recortes, ¡vete a saber!

El tiempo pasa muy deprisa y en el 2020 habrá elecciones generales.
 
En una moción de censura no es tan importante ser buen orador como decir las verdades del barquero, e Irene lo hizo. Sin tibiezas, sin quebrársele la voz, con toda la valentía y firmeza que requería el momento. Más de dos horas hablando de lo que muchos españoles quisiéramos decir al gobierno. Y millones de ciudadanos se lo agradecemos.
Pues yo me alegro, pero sigue siendo una petarda de manual sin ninguna formación intelectual. Por aquí se le ha llamado "gran oradora", y yo me parto la caja porque conozco la historia parlamentaria española y, en general, la oratoria.
 
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