Javier López Madrid, íntimo de los Reyes, Tarjetas Black Caja Madrid. Denuncia de la Doctora Pinto.

¿Cómo demuestras que eso lo ha escrito un niño? ¿Pides sus libretas en el colegio? porque una cosa así me parece muy grave.
Voy más allá ¿Cómo se te ocurre en primer lugar que puede haberlo escrito un niño? Tiene un marido y no sé si algún miembro más de su familia.
A mí me parece que es una amenaza hacía el niño, implicándolo o qué se yo...
 
Creer que una mujer culta,una doctora que parece que es muy buena y reputada en su profesión,se embarque en una aventura de denunciar a una persona, con mucho poder e influencias al más alto nivel de la oligarquía de este país.donde la justicia según a quien hay que aplicarla no se ejecuta donde las fuerzas de seguridad están para lo que manden sus amos y fuera mentira,yo no lo creo.Lo que si creo en en eso de,calumnia, calumnia, que algo queda.Que la gente empiece a pensar,a lo mejor....quizás ella también...se trata de crear confusión y enredar, para que la victima se empiece a ver con cierto recelo,y algunos digan"vete tu a saber lo que hay de verdad en lo de esa doctora".Yo, con estos HDP me creo hasta las mayores aberraciones,como que hasta intenten sobornar a los abogados defensores.Es una vergüenza,pero para ellos,si la tuvieran,que dudo de sus principios y me dan un asco tremendo.
 
Esa pobre mujer tiene que haber vivido y todavia estara viviendo un calvario. Que necesidad tiene una mujer profesional con una carrera prestigiosa de inventar semejante situacion? O que un crio de 11 años que presencia como su madre es apuñalada vaya a agredir, insultar y humillarla en mensajes escritos de su puño y letra? Quien puede creer esto? Como pueden implicar a un niño en un caso tan sordido?
 
El amigo del rey borró sus contactos con comisarios de la Policía durante la investigación de las amenazas a la doctora Pinto

Javier López Madrid contrató al comisario Villarejo a través del ex dirigente del PP Francisco Granados y después pidió ayuda al comisario Enrique García Castaño, encargado de cuestiones técnicas en la Policía; y a José Luis Conde, jefe de los investigadores del caso.





Javier López Madrid.- EFE

PATRICIA LÓPEZ
@patricialopezl

Javier López Madrid, consejero delegado de OHL e imputado por unas presuntas amenazas a la doctora Elisa Pinto y a su familia, echó mano de sus contactos para resolver los problemas que le generaba la doctora de la clínica Quirón con la media docena de denuncias que presentó por amenazas y acoso contra él en la madrileña comisaría de Chamartín. Esta semana se ha levantado el secreto de uno de los sumarios en los que consta la investigación de la causa, que aún sigue abierta y para la que hay declaraciones señaladas el 25 de enero.

Según recogen los sumarios de los dos juzgados de instrucción madrileños 26 y 39 que investigan la causa –en uno está imputado él por acoso y amenazas y en otro ella por los mismos motivos-, el yerno del ex ministro franquista Juan Miguel Villar Mir contó en su declaración que contrató a una de las empresas del comisario José Manuel Villarejo Pérez, adscrito al número dos de la Policía, después de comentarle al ex secretario general de PP de Madrid, Francisco Granados, que este comisario podía ayudarle en sus asuntos.

El segundo paso fue pedir ayuda a su amigo Enrique García Castaño, según ha reconocido a Público el propio jefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO), quien le aconsejó que pusiera una denuncia. García Castaño también fue el policía que puso en contacto al ex presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, con el comisario José Villarejo para que el ‘agente encubierto’ le solucionara los problemas que le estaba dando la supuesta investigación abierta por el ático de Estepona.




El consejero delegado de OHL habló después con el jefe de la Brigada de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, José Luis Conde, responsable de la investigación sobre las presuntas amenazas cruzadas entre el amigo del rey Felipe VI y la doctora Elisa Pinto. Por último, Javier López Madrid intentó borrar el rastro que su teléfono móvil guardaba de esas comunicaciones con altos mandos de la Policía encargados de su caso.

Pero la Guardia Civil consiguió recuperar esas huellas. Según recogen los sumarios de ambos juzgados de instrucción, el 2 de marzo el juzgado número 29 solicitó un volcado del Iphone 5S de Javier López Madrid, que fue entregado al Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil. En este informe se ponen de manifiesto “contactos (llamadas realizadas y recibidas) con funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía como es el comisario José Luis Conde. De igual manera se indica en el informe de la Guardia Civil el contacto con otro funcionario del cuerpo y del área de Información como es el comisario Enrique García Castaño, llamadas que según informe obrante fueron eliminadas”. López Madrid también borró “en la libreta de contactos ciertos contactos con números de terminales de las personas arriba referidas”, es decir, los comisarios Conde y García Castaño.

Estos hechos están recogidos por la Guardia Civil en uno de los procedimientos, también aparecen en la contestación que la Sección de Secuestros y Extorsiones hace a petición de la jueza del juzgado de instrucción número 26, el pasado mes de junio después de que se le notificara que la doctora Elisa Pinto había interpuesto una denuncia sobre las relaciones de Javier López Madrid y la cúpula de la Policía ante la Secretaría de Estado de Interior.

Preguntas sin respuesta
A pesar de que la jueza pregunta expresamente a la Policía que “del estudio de las llamadas efectuadas por el denunciante se desprende que ha mantenido conversaciones con miembros del CNP” y solicita que “se realicen las gestiones necesarias para la investigación de los hechos denunciados”, la respuesta de la Sección de Secuestros y extorsiones de la Comisaría General de Policía Judicial no indaga sobre estos hechos pero presenta dos informes, uno de la propia sección y otro de la Unidad de Análisis de Conducta de la Policía, en los que se concluye que la doctora Pinto podría ser la autora de las amenazas a ella misma, a su familia, a López Madrid y a su entorno.

Según ha confirmado a Público el propio comisario Enrique García Castaño, Javier López Madrid le llamó porque se conocían "desde hace mucho tiempo", le contó el problema que tenía y este le aconsejó “que fuera con su abogado a denunciar a la Policía Judicial”. El jefe de esa Policía Judicial es el comisario José Luis Conde. “Resulta importante que se investigue -explican las diferentes fuentes consultadas conocedoras del caso-, por qué mientras la doctora Pinto puso más de media docena de denuncias en la comisaría de Chamartín sin que la hicieran mucho caso, Javier López Madrid sólo puso una contra ella y directamente en el Grupo V de Homicidios, dependientes del comisario Conde, sin pasar por ninguna comisaría. Es un trato de favor evidente que podría suponer un tráfico de influencias”.

De hecho, en las conclusiones de la Sección de Secuestros y Extorsiones, a pesar de que la pregunta de la juez versaba sobre las relaciones con la Policía que había mantenido López Madrid durante la Investigación, la única alusión que hay a este asunto en el informe es la sugerencia de pedirle explicaciones a López Madrid sobre el borrado de su teléfono, pero ni se plantean tomarles declaración a los comisarios sobre el contenido de las conversaciones.

Red de amigos
Para los conocedores de ambas investigaciones peguntados por Público, hay varios datos que “no suenan bien en la investigación”. El responsable de las denuncias de la doctora Pinto, el ex comisario de Chamartín Jaime Barrado, ya se había topado con el comisario José Villarejo y sus actividades privadas en diferentes investigaciones: el caso de los espías de la Comunidad de Madrid, donde Francisco Granados mandó investigar al entonces consejero Alfredo Prada y la operación Prima, relacionada con una mafia india que entre otras cosas estaba relacionada con el negocio de los locutorios y tarjetas prepago.

Precisamente, uno de los testigos clave en contra de la doctora según la Policía, un indio con una tienda en la calle Marqués de Zafra de Madrid que presuntamente le vendió a Elisa Pinto una tarjeta a nombre de Javier López Madrid desde las que se autorealizó ella las amenazas, había sido citado a declarar como testigo en la operación Prima este mes de julio pero finalmente se suspendió la declaración. “Es curioso que un mes después de que la policía investigue esta tienda y a este ciudadano y él de un testimonio favorable a la conspiración de López Madrid y del comisario Villarejo se suspenda su declaración en la Operación Prima con la que también está relacionado Villarejo e investiga la Policía, porque quizá podía haber acabado como imputado aunque acudiera de testigo”.

Además, achaca en su informe la Policía que las llamadas amenazantes hechas a la doctora Pinto con esa tarjeta de teléfono de la tienda de Marqués de Zafra y con otra adquirida con un DNI falso de una joven que nada tiene que ver con el caso, en la tienda de un paquistaní en la calle Francisco Silvela, fueron realizadas en realidad por la propia dermatóloga. Argumentan que los repetidores utilizados están al lado de casa de la madre de la doctora y de su trabajo, pero fuentes de las investigaciones aseguran a Público que “de esos repetidores también dependen las tiendas en las que fueron adquiridas las tarjetas fraudulentas puesto que están al lado de casa de la madre y el trabajo de la doctora. Ella mantiene que no conoce esas tiendas ni a las personas que supuestamente la vendieron las tarjetas”.

http://www.publico.es/politica/amigo-del-rey-borro-contactos.html
 
El amigo del rey borró sus contactos con comisarios de la Policía durante la investigación de las amenazas a la doctora Pinto

Javier López Madrid contrató al comisario Villarejo a través del ex dirigente del PP Francisco Granados y después pidió ayuda al comisario Enrique García Castaño, encargado de cuestiones técnicas en la Policía; y a José Luis Conde, jefe de los investigadores del caso.





Javier López Madrid.- EFE

PATRICIA LÓPEZ
@patricialopezl

Javier López Madrid, consejero delegado de OHL e imputado por unas presuntas amenazas a la doctora Elisa Pinto y a su familia, echó mano de sus contactos para resolver los problemas que le generaba la doctora de la clínica Quirón con la media docena de denuncias que presentó por amenazas y acoso contra él en la madrileña comisaría de Chamartín. Esta semana se ha levantado el secreto de uno de los sumarios en los que consta la investigación de la causa, que aún sigue abierta y para la que hay declaraciones señaladas el 25 de enero.

Según recogen los sumarios de los dos juzgados de instrucción madrileños 26 y 39 que investigan la causa –en uno está imputado él por acoso y amenazas y en otro ella por los mismos motivos-, el yerno del ex ministro franquista Juan Miguel Villar Mir contó en su declaración que contrató a una de las empresas del comisario José Manuel Villarejo Pérez, adscrito al número dos de la Policía, después de comentarle al ex secretario general de PP de Madrid, Francisco Granados, que este comisario podía ayudarle en sus asuntos.

El segundo paso fue pedir ayuda a su amigo Enrique García Castaño, según ha reconocido a Público el propio jefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO), quien le aconsejó que pusiera una denuncia. García Castaño también fue el policía que puso en contacto al ex presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, con el comisario José Villarejo para que el ‘agente encubierto’ le solucionara los problemas que le estaba dando la supuesta investigación abierta por el ático de Estepona.




El consejero delegado de OHL habló después con el jefe de la Brigada de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, José Luis Conde, responsable de la investigación sobre las presuntas amenazas cruzadas entre el amigo del rey Felipe VI y la doctora Elisa Pinto. Por último, Javier López Madrid intentó borrar el rastro que su teléfono móvil guardaba de esas comunicaciones con altos mandos de la Policía encargados de su caso.

Pero la Guardia Civil consiguió recuperar esas huellas. Según recogen los sumarios de ambos juzgados de instrucción, el 2 de marzo el juzgado número 29 solicitó un volcado del Iphone 5S de Javier López Madrid, que fue entregado al Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil. En este informe se ponen de manifiesto “contactos (llamadas realizadas y recibidas) con funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía como es el comisario José Luis Conde. De igual manera se indica en el informe de la Guardia Civil el contacto con otro funcionario del cuerpo y del área de Información como es el comisario Enrique García Castaño, llamadas que según informe obrante fueron eliminadas”. López Madrid también borró “en la libreta de contactos ciertos contactos con números de terminales de las personas arriba referidas”, es decir, los comisarios Conde y García Castaño.

Estos hechos están recogidos por la Guardia Civil en uno de los procedimientos, también aparecen en la contestación que la Sección de Secuestros y Extorsiones hace a petición de la jueza del juzgado de instrucción número 26, el pasado mes de junio después de que se le notificara que la doctora Elisa Pinto había interpuesto una denuncia sobre las relaciones de Javier López Madrid y la cúpula de la Policía ante la Secretaría de Estado de Interior.

Preguntas sin respuesta
A pesar de que la jueza pregunta expresamente a la Policía que “del estudio de las llamadas efectuadas por el denunciante se desprende que ha mantenido conversaciones con miembros del CNP” y solicita que “se realicen las gestiones necesarias para la investigación de los hechos denunciados”, la respuesta de la Sección de Secuestros y extorsiones de la Comisaría General de Policía Judicial no indaga sobre estos hechos pero presenta dos informes, uno de la propia sección y otro de la Unidad de Análisis de Conducta de la Policía, en los que se concluye que la doctora Pinto podría ser la autora de las amenazas a ella misma, a su familia, a López Madrid y a su entorno.

Según ha confirmado a Público el propio comisario Enrique García Castaño, Javier López Madrid le llamó porque se conocían "desde hace mucho tiempo", le contó el problema que tenía y este le aconsejó “que fuera con su abogado a denunciar a la Policía Judicial”. El jefe de esa Policía Judicial es el comisario José Luis Conde. “Resulta importante que se investigue -explican las diferentes fuentes consultadas conocedoras del caso-, por qué mientras la doctora Pinto puso más de media docena de denuncias en la comisaría de Chamartín sin que la hicieran mucho caso, Javier López Madrid sólo puso una contra ella y directamente en el Grupo V de Homicidios, dependientes del comisario Conde, sin pasar por ninguna comisaría. Es un trato de favor evidente que podría suponer un tráfico de influencias”.

De hecho, en las conclusiones de la Sección de Secuestros y Extorsiones, a pesar de que la pregunta de la juez versaba sobre las relaciones con la Policía que había mantenido López Madrid durante la Investigación, la única alusión que hay a este asunto en el informe es la sugerencia de pedirle explicaciones a López Madrid sobre el borrado de su teléfono, pero ni se plantean tomarles declaración a los comisarios sobre el contenido de las conversaciones.

Red de amigos
Para los conocedores de ambas investigaciones peguntados por Público, hay varios datos que “no suenan bien en la investigación”. El responsable de las denuncias de la doctora Pinto, el ex comisario de Chamartín Jaime Barrado, ya se había topado con el comisario José Villarejo y sus actividades privadas en diferentes investigaciones: el caso de los espías de la Comunidad de Madrid, donde Francisco Granados mandó investigar al entonces consejero Alfredo Prada y la operación Prima, relacionada con una mafia india que entre otras cosas estaba relacionada con el negocio de los locutorios y tarjetas prepago.

Precisamente, uno de los testigos clave en contra de la doctora según la Policía, un indio con una tienda en la calle Marqués de Zafra de Madrid que presuntamente le vendió a Elisa Pinto una tarjeta a nombre de Javier López Madrid desde las que se autorealizó ella las amenazas, había sido citado a declarar como testigo en la operación Prima este mes de julio pero finalmente se suspendió la declaración. “Es curioso que un mes después de que la policía investigue esta tienda y a este ciudadano y él de un testimonio favorable a la conspiración de López Madrid y del comisario Villarejo se suspenda su declaración en la Operación Prima con la que también está relacionado Villarejo e investiga la Policía, porque quizá podía haber acabado como imputado aunque acudiera de testigo”.

Además, achaca en su informe la Policía que las llamadas amenazantes hechas a la doctora Pinto con esa tarjeta de teléfono de la tienda de Marqués de Zafra y con otra adquirida con un DNI falso de una joven que nada tiene que ver con el caso, en la tienda de un paquistaní en la calle Francisco Silvela, fueron realizadas en realidad por la propia dermatóloga. Argumentan que los repetidores utilizados están al lado de casa de la madre de la doctora y de su trabajo, pero fuentes de las investigaciones aseguran a Público que “de esos repetidores también dependen las tiendas en las que fueron adquiridas las tarjetas fraudulentas puesto que están al lado de casa de la madre y el trabajo de la doctora. Ella mantiene que no conoce esas tiendas ni a las personas que supuestamente la vendieron las tarjetas”.

http://www.publico.es/politica/amigo-del-rey-borro-contactos.html
No se pq me da que se confirma el nivel de corrupcion e impunidad en q vive esta gente. Espero q la gente sepa lo q vota hoy.
 
En manos de quien estamos, dan miedo, actúan al mejor estilo de la camorra.
No se va a ir de rositas por mucho dinero y amigos influyentes que tenga para, presuntamente, tapar bocas. ojos y comprar voluntades.
 
La doctora de López Madrid, una "psicópata de manual" según un nuevo informe policial

Un nuevo capítulo del culebrón más escabroso que sacude de puntillas a la 'jet set' empresarial del país. Ahora, Elisa Pinto es una mente delictiva de libro. Desvelamos el contenido del último informe

la-doctora-de-lopez-madrid-una-psicopata-de-manual-segun-un-nuevo-informe-policial.jpg


Elisa Pinto, la dermatóloga de Javier López Madrid, el esposo de Silvia Villar Mir, “es una psicópata de manual” según un informe de la Unidad Central de Inteligencia Criminal de la Secretaría General de la Policía Judicial al que ha tenido acceso esta publicación. El pasado 11 de diciembre, la investigación realizada por la Policía Nacional para aclarar el presunto acoso que habría sufrido la doctora Elisa Pinto por parte del yernode Villar Mir concluyó que no solo no hay ningún indicio de que existiera algún tipo de coacción, sino que además la dermatóloga habría fabricado todas las pruebas que aportó en comisaría para tratar de incriminar a su presunto agresor. (Le recordamos quién es quién es este caso).

Pruebas fabricadas por su hijo de diez años


Del resultado de estas investigaciones realizadas por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV), adelantadas en exclusiva por El Confidencial,se concluyó que el autor material de las cartas, que fueron la prueba principal que sirvió de base para imponer una orden de alejamiento a López Madrid, que forma parte del círculo cercano a Felipe VI, fue su hijo de 10 años, después de examinar la caligrafía del niño con textos remitidos por su centro educativo. Los agentes que investigan el caso también determinaron que la propia doctora adquirió diversas tarjetas telefónicas para remitir a López Madrid mensajes con alta carga sexual y para acusarle de haberla acosado durante casi dos años. Uno de los mensajes aportados a los tribunales, por ejemplo, es una nota de voz enviada a través de WhatsApp en la que se susurra: “Quiero oír tus gemidos, doctora”. Asimismo, en otra nota de voz, la doctora asegura que el consejero delegado del Grupo Villar Mir le dice: “Me estoy tocando para ti desde hace media hora”.

También el informe de la Policía echaba por tierra uno de los puntos más escabrosos del caso López Madrid: la supuesta agresión con arma blanca a la propia doctora dentro de su coche. Ella misma acusó al comisario José Manuel Villarejo, al que vincula con el yerno de Villar Mir; dice que son amigos. Los expertos de la UDEV acudieron al lugar en el que la doctora declaró haber sufrido el ataque y comprobaron que cerca había un edificio con cámaras de videovigilancia, por lo que procedieron a solicitar las imágenes. Aseguran que después de visionarlas "no hay rastro de la agresión".

"Psicópata de manual"

Y con estas conclusiones policiales sobre la mesa (y mientras el proceso judicial sigue su curso en el Juzgado de Instrucción número 26 de Madrid), ahora hayun nuevo informe policial. Esta vez de la Unidad Central de Inteligencia Criminal, del Servicio de Análisis de la Conducta, que tomando como base lo anterior tilda a Doña Elisa Pinto de “psicópata de manual”. Esta unidad basa su metodología en las unidades de especialistas del FBI y trabaja en coordinación con la Interpol. Colaboran con el Instituto de Ciencias forenses y Seguridad del Instituto de Ciencias Forenses de la Universidad Autónoma de Madrid.


El nuevo informe ahonda más y concluye que Elisa Pinto presenta evidentes rasgos de personalidad psicópata criminal y así es considerada por la Policía tras la investigación a fondo realizada sobre su actividad en los últimos años. Y añade: “Los psicópatas criminales son multidelictivos, muy versátiles, capaces de cometer todo tipo de acciones penadas. Elisa Pinto ha extorsionado, falsificado, robado, amenazado, como muestran todas las evidencias acumuladas contra ella”.


“La última puñalada la hubieras disfrutado”

Según el texto, "Elisa Pinto desarrolló un sistemático acoso contra su mentor, el doctor Soto Melo, como ya contamos en Vanitatis, a quien extorsionó con amenazas de hacer pública su relación sentimental y a quien despojó de buena parte de su fortuna y de su clientela profesional y acto seguido buscó una nueva víctima con la que continuar su conducta psicopática. Con Javier López Madrid perfeccionó sus rasgos psicopáticos”, asegura el texto después de desgranar el contenido de los mensajes que supuestamente ella misma se mandaba. En el mismo informe se reproducen algunos de los mensajes que supuestamente enviaba un sicario contratado por López Madrid para agredir a la doctora: “La última puñalada la hubieras disfrutado. En la tripa y diez centímetros. Su hijo estaba chillando y ella sangraba como una cerda y pidiéndole que no saliese del coche. La policía lleva a su hijo a casa mientras una UVI la lleva al Marañón”. Aquí esta unidad policial se pregunta cómo es posible si el agresor se dio a la fuga que conociese “a qué hospital fue llevada y el estado del hijo”.

Rédito mediático

Las acusaciones del texto son frontales para Elisa Pinto. “Ha hecho creer a todo el mundo que era la pobre acosada cuando era la acosadora sistemática y criminal. Elisa Pinto ha acudido a estudios de televisión, ha concedido entrevistas y se ha paseado por los juzgados con una historia inventada, generando sentimientos de complicidad y de solidaridad perfectamente calculados, premeditados y ensayados; todo ello en una gran ceremonia de falsedad y manipulación. Elisa Pinto destaca en esto, como se ha evidenciado en la investigación policial, con casi una década de calculada extorsión con el doctor Soto Melo y luego con López Madrid, inventando pruebas, mandándose ella misma anónimos, utilizando su propio teléfono para llamarse a sí misma con amenazas, con un sistemático plan de acoso a parientes y allegados de su víctima para mantener un clima de tensión insoportable y con la frialdad criminal de ser capaz de llamar todos los días a su víctima con amenazas, insultos y acusaciones”. Eso sí, de la lectura del informe se desvela que la doctora “no tiene ningún ánimo de lucro”y solo ahonda en destruir la imagen de López Madrid.

‘Picha brava’

El informe incide también en la cantidad de mensajes con carga sexual y tono despectivo: “Eres un loco y tus perversiones te pasarán factura”, “Picha brava sin escrúpulos”, “Te recordarán como un loco que quiere matarla” o “put* judíala llamas tú”. Y en los que apuntan que López Madrid echará mano de las altas esferas para salir indemne: “Por denunciar de la mano de tus amigos la investigación no te va a ser fácil”, “Te damos más amigos tuyos que nos van a dar juego” o “Yerno de… amigo de”. El caso sigue en manos de la Justicia.

A Silvia Villar Mir sus amigos la consideran la gran “víctima” de este escándalo. La única hija de Juan Miguel Villar Mir, vocal en la empresa de su padre, ha tratado de permanecer siempre en un discreto segundo plano. Amiga íntima de la infanta Cristina, acudió a su boda en Barcelona junto a su marido. Es ella la que, en estos momentos, se ha erigido como la fuerte del matrimonio. “Ahora que su marido está devastado, se encarga de gestionar esta crisis familiar”, explicaron a Vanitatis personas cercanas al matrimonio cuando explotó el caso la pasada primavera.

Esta publicación ha intentado, sin éxito, ponerse en contacto con Elisa Pinto.

http://www.vanitatis.elconfidencial...ier-lopez-madrid-psicopata-de-manual_1125798/
 

Temas Similares

53 54 55
Respuestas
659
Visitas
30K
Back