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Buenas primas,
No suelo hablar mucho de mis temas privados aquí, pero acudo a la sabiduría del foro buscando algo de consuelo o consejos... Hace ya unos 10 años mi hermano se marchó a vivir fuera y allí estableció su vida.
Le echo mucho de menos pero había asumido que él allí está feliz y progresando más de lo que lo hubiera hecho en España, consiguiendo sus sueños y metas laborales.
El problema ha venido cuando he sido tía. Mi sobrino nació hace año y medio y soy incapaz de gestionar las despedidas. Se me parte el alma no poder verle, jugar con él, leerle un cuento... Como hacen las tias "normales".
Supongo que tambien me pesa que como aún es casi un bebé no entiende lo que pasa, y que sienta que de un momento a otro la tata no está o "le abandona".
Intento ir a verle cada 2 meses aproximadamente y siempre se me caen las lágrimas un rato antes de ir hacia el aeropuerto, pero esta vez está siendo terrible...
Han pasado 15 días en España y hemos estado todos juntos en casa. Mañana se van y ya desde ayer de madrugada no puedo dejar de llorar a ratos. Le veo la carita, viene con un juguete o dice mi nombre y se me encoge el corazón.
No sé muy bien el objetivo de escribir esto, supongo que me ayudará escuchar como lo gestionais emocionalmente otras primas en situación similar.
PD. Perdón por la parrafada, próximamente versión audiolibro.
No suelo hablar mucho de mis temas privados aquí, pero acudo a la sabiduría del foro buscando algo de consuelo o consejos... Hace ya unos 10 años mi hermano se marchó a vivir fuera y allí estableció su vida.
Le echo mucho de menos pero había asumido que él allí está feliz y progresando más de lo que lo hubiera hecho en España, consiguiendo sus sueños y metas laborales.
El problema ha venido cuando he sido tía. Mi sobrino nació hace año y medio y soy incapaz de gestionar las despedidas. Se me parte el alma no poder verle, jugar con él, leerle un cuento... Como hacen las tias "normales".
Supongo que tambien me pesa que como aún es casi un bebé no entiende lo que pasa, y que sienta que de un momento a otro la tata no está o "le abandona".
Intento ir a verle cada 2 meses aproximadamente y siempre se me caen las lágrimas un rato antes de ir hacia el aeropuerto, pero esta vez está siendo terrible...
Han pasado 15 días en España y hemos estado todos juntos en casa. Mañana se van y ya desde ayer de madrugada no puedo dejar de llorar a ratos. Le veo la carita, viene con un juguete o dice mi nombre y se me encoge el corazón.
No sé muy bien el objetivo de escribir esto, supongo que me ayudará escuchar como lo gestionais emocionalmente otras primas en situación similar.
PD. Perdón por la parrafada, próximamente versión audiolibro.
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