Arancha: "No me arrepiento de haber dado todo por amor, me arrepiento de haberle dado el control de lo que tenía".
Estamos acostumbrados a que las famosillas se contradigan de una entrevista a otra. O de una pregunta a otra. Pero contradecirse en una misma frase es otro mundo, un nivel superior.
Estamos acostumbrados a que las famosillas se contradigan de una entrevista a otra. O de una pregunta a otra. Pero contradecirse en una misma frase es otro mundo, un nivel superior.