El carácter español es muy ególatra.
Da vergüenza ajena ,sobretodo en el extranjero,ver al españolito/a de turno vociferando en cualquier sitio público y tratando mal a la gente que se dedica al sector servicios.Y creyendose gracioso porque todo el mundo le mira , en lugar de pensar que molesta.
Me saca de quicio la gente que no puede parar de hablar de sí misma. Que si he estado en x, que me he comprado z, que tengo y .... como si no hubieran temas de conversación más allá de uno mismo.
Las redes sociales como se ha dicho,han potenciado una lacra de narcisistas que se creen la ostia y que se ponen pusilánimes cuando reciben un ataque de realidad.
Necesitan su público y los que sabemos escuchar somos sus debilidad.
Da vergüenza ajena ,sobretodo en el extranjero,ver al españolito/a de turno vociferando en cualquier sitio público y tratando mal a la gente que se dedica al sector servicios.Y creyendose gracioso porque todo el mundo le mira , en lugar de pensar que molesta.
Me saca de quicio la gente que no puede parar de hablar de sí misma. Que si he estado en x, que me he comprado z, que tengo y .... como si no hubieran temas de conversación más allá de uno mismo.
Las redes sociales como se ha dicho,han potenciado una lacra de narcisistas que se creen la ostia y que se ponen pusilánimes cuando reciben un ataque de realidad.
Aprende a protegerte de estos vampiros energéticos.Yo creo que la gente que quizás se nos da mejor escuchar o somos más empáticos o emocionales, somos carne de cañón para este tipo de personas.
Necesitan su público y los que sabemos escuchar somos sus debilidad.