La gente tiene momentos de bajón. Se le pueden pasar por la cabeza mil cosas. Ya mismo saldrán en la tele los súper psicólogos, analizando en las tertulias su lenguaje no verbal para rellenar horas.Es casualidad que la camiseta la encuentren el padre y su pareja. La actitud de la madre tampoco me deja tranquilo. No me parece que llore en ningún momento; más bien hace como si llora. Pero lo que me resulta más extraño es que se refiera al muchacho en pasado: "Tenía muchas cosas que hacer en esta vida". Extraña frase en una madre a sólo 48 horas de la desaparición.