Buenos días primas, se viene tocho, lo siento. Esto es para "denunciar" de alguna manera la vergüenza de seguridad social que tenemos, que nos la venden como la mejor y se la están cargando todos estos chupa tintas de arriba.
Resulta que mi marido acude a urgencias el día 27 de noviembre con hematuria y dolor lumbar. Tras analítica, radiografía (normales) y 5 horas de espera nos vamos a casa con un diagnóstico de cólico nefrítico derecho y tratamiento analgesico. Hasta ahí, todo ok. El diagnóstico cuadra con la sintomatología y la edad.
El 8 de diciembre, volvemos a urgencias esta vez sin dolor, solo con hematuria y franca. Analítica y radiografía normales. Según el residente de turno, no había indicaciones de llamar al urólogo pero nos recalcaron que no era normal que un tío de 36 años expulse coágulos en la orina (¿Hola? Derivarme a Urología o algo). Nos vamos con un diagnóstico de infección de orina, tratamiento antibiótico y que nuestro médico de cabecera nos derive al urólogo.
Al día siguiente acudimos al médico de cabecera y después de pelearme con el de admisión porque dice que una derivación al especialista no es urgente (no lo será para el, las urgencias son subjetivas, yo decido lo que es urgente para mí) consigo cita para el médico. Una vez dentro me dice que no puede derivar sin un cultivo de orina, que se realiza después de 4 días de antibiótico. Ya me diréis lo que va a salir ahí.
Día 12 de diciembre acudimos al urólogo privado (155€) con un diagnóstico de tumor vesical (que se vio en una simple ecografía). Nos recomienda extirparlo. Volvemos a acudir al médico de cabecera para acelerar la derivación (después de otra discusión con el de admisión) y nos deriva. Nos dan la cita con Urología el ¡1 de febrero de 2023! con un diagnóstico de tumor vesical, casi 2 meses después!
Al final previo pago de la operación, se lo han quitado hoy mismo y mandado a analizar pero tiene coj*nes que pagando una seguridad social que pago religiosamente, sucedan estas cosas. Y esto es liviano comparado con algunos otros tumores que se escapan por ahí.
Siento el tocho primas.
Resulta que mi marido acude a urgencias el día 27 de noviembre con hematuria y dolor lumbar. Tras analítica, radiografía (normales) y 5 horas de espera nos vamos a casa con un diagnóstico de cólico nefrítico derecho y tratamiento analgesico. Hasta ahí, todo ok. El diagnóstico cuadra con la sintomatología y la edad.
El 8 de diciembre, volvemos a urgencias esta vez sin dolor, solo con hematuria y franca. Analítica y radiografía normales. Según el residente de turno, no había indicaciones de llamar al urólogo pero nos recalcaron que no era normal que un tío de 36 años expulse coágulos en la orina (¿Hola? Derivarme a Urología o algo). Nos vamos con un diagnóstico de infección de orina, tratamiento antibiótico y que nuestro médico de cabecera nos derive al urólogo.
Al día siguiente acudimos al médico de cabecera y después de pelearme con el de admisión porque dice que una derivación al especialista no es urgente (no lo será para el, las urgencias son subjetivas, yo decido lo que es urgente para mí) consigo cita para el médico. Una vez dentro me dice que no puede derivar sin un cultivo de orina, que se realiza después de 4 días de antibiótico. Ya me diréis lo que va a salir ahí.
Día 12 de diciembre acudimos al urólogo privado (155€) con un diagnóstico de tumor vesical (que se vio en una simple ecografía). Nos recomienda extirparlo. Volvemos a acudir al médico de cabecera para acelerar la derivación (después de otra discusión con el de admisión) y nos deriva. Nos dan la cita con Urología el ¡1 de febrero de 2023! con un diagnóstico de tumor vesical, casi 2 meses después!
Al final previo pago de la operación, se lo han quitado hoy mismo y mandado a analizar pero tiene coj*nes que pagando una seguridad social que pago religiosamente, sucedan estas cosas. Y esto es liviano comparado con algunos otros tumores que se escapan por ahí.
Siento el tocho primas.