RECETAS DE COCINA

Las mujeres latinoamericanas presentan sus recetas ancestrales


recetario_saludsaberesysabo-680x553.jpg




El recetario 'Salud, saberes y sabores' recoge 23 métodos de elaboración de alimentos autóctonos de 20 países de la zona


Á. LUCAS
Roma. 29 DIC 2018




1545400172_471628_1545401426_album_normal.jpg



Alimentos puros, auténticos, mejorados de generación en generación, nutritivos, cultivados cerca de las cocinas y candelas, y que brotan del suelo de América Latina y el Caribe, de la madre tierra. Maíces, arroces, yucas, pescados, carnes, quinoas y otros tantos productos de la zona y cómo elaborarlos se reflejan en el recetario 'Salud, saberes y sabores. Recuperando el conocimiento culinario tradicional de las mujeres de América Latina y el Caribe para el manejo y enriquecimiento de la biodiversidad alimentaria'. Las mujeres indígenas y de zonas rurales explican en 23 recetas cómo preparar los platos que en sus casas se han cocinado de siempre en esta publicación editada por la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO). En la región, casi uno de cada cuatro adultos es obeso y el sobrepeso afecta a 3,9 millones de niños menores de cinco años. A su vez, el hambre aumenta por tercer año consecutivo y alcanza los 39,3 millones de personas, el 6,1% de la población, según datos de la FAO.SAMANTHA RAMÍREZ FAO


  • 1545400172_471628_1545401421_album_normal.jpg



    Mujeres de México, Cuba, Haití, República Dominicana, Honduras, Ecuador... y hasta 20 países participan en este proyecto. "Para nosotras las recetas tienen un valor cultural, ancestral, y para mi zona mapuche además está vinculado con la espiritualidad ya que trae la fuerza, la energía del 'lafken mapu', es decir el 'newen' (fuerza) del mar", dice Eliana Queupumil, desde la costa de Chile, donde considera que la globalización y la tecnología alimentaria han cambiado el producto. La FAO ha abierto también una convocatoria en Internet en la página http://www.saberesysabores.org para que las mujeres envíen recetas y proyectos de emprendimiento.VANESSA BALDASARRE
    • 1545400172_471628_1545401422_album_normal.jpg



      La gente ha dejado de comer productos tradicionales y opta por los que tienen conservantes, azúcares, grasas o sal. La iniciativa en este escenario surge para rescatar las prácticas culinarias ancentrales y reducir los procesados, que son más económicos y de uso más fácil para la conciliación", declara Israel Ríos-Castillo, oficial de Nutrición de la FAO para Mesoamérica. "Son alimentos de verdad. Ingredientes de la granja a la mesa. Las recetas cumplen el objetivo de volver a la raíz y disfrutar de preparar la comida con la familia y que se pueda compartir, además de su valor nutricional", añade Ríos-Castillo, que destaca también el poder emotivo y curativo de la comida. "Por ejemplo, las carnes rojas o los vegetales verde intenso vienen bien para la anemia", señala. En la imagen, Daisy Bautista, de República Dominicana, muestra el pan de yautía que le enseñó a cocinar su madre y su abuela.ROSA BORG FAO
      • 1545400172_471628_1545401427_album_normal.jpg



      • Pan de yautía amarilla (República Dominicana). "La yautía es una de las plantas cultivadas más antiguas del mundo. Es un alimento muy rico en hidratos de carbono y puede ser preparado de muy diversas formas. Este tubérculo se puede consumir en sopas, cremas, púdines, tortas, hojuelas fritas o asadas, en tanto que sus hojas se pueden consumir hervidas en guisos y ensaladas", se lee en el texto. "Mi abuela nos decía: vengan a mirar para que aprendan, que uno no sabe de lo que va a vivir en el futuro", declara Daisy en el libro.ROSA BORG FAO
        • 1545400172_471628_1545401420_album_normal.jpg



          Pan de yuca o roti de yuca (Granada). 1. Mezclar la harina, la yuca, el polvo de hornear y la sal. 2. Agregar aceite y agua suficiente para hacer una masa suave, no demasiada blanda. Hacer porciones y poner en el tablero enharinado. 3. Extender las porciones con mucha harina. 4. A continuación, agregar tres cucharadas de arvejas partidas en el centro, doblar y dejar de lado. En un sartén con aceite caliente, freír por ambos lados a fuego lento. "Las arvejas, también llamadas guisantes o chícharos, al igual que otras leguminosas, son un excelente alimento para las personas con diabetes, porque poseen un bajo índice glicémico. Su bajo contenido en grasa y alto contenido en fibra, aumentan la saciedad y contribuyen a estabilizar los niveles de azúcar e insulina en la sangre", indica la publicación de la FAO.
          • 1545400172_471628_1545401423_album_normal.jpg



            Nos importaban los testimonios que contaban cómo traspasaban los conocimientos de conservación y uso de los alimentos", detalla Javiera Suárez, consultora de la oficina de la FAO para América Latina y el Caribe, que resalta la importancia de ponerlo en valor para promover el consumo local y cómo esto revierte en el mantenimiento de los productos ancestrales y cómo las mujeres se convierten en agentes protectores de la biodiversidad. "Tenemos ahora más información sobre cómo consumir alimentos olvidados o infrautilizados, como ocurrió con la quinoa", añade Suárez. En la imagen, la panameña Yanira Velasco, muestra su Sancocho de gallina de patio: "Prácticamente todos los ingredientes para prepararlo son orgánicos: la gallina está en el patio y se alimenta de cosas naturales, el ají, el ñame y la cebolla también los cultivamos nosotros", señala en la publicación.ROSANA MARTÍN FAO
            • 1545400172_471628_1545401424_album_normal.jpg



              Los pech son un pueblo originario de Honduras que aún mantienen vivas sus costumbres, lengua tradiciones y gastronomía. La yuca, el plátano, el maíz y los frijoles son la base de su dieta alimentaria. El Shaa (sasal) y el Tewakó (chilero) son dos platillos que representan la esencia de su gastronomía y que se elaboran con ingredientes que cultivan en los huertos familiares, además de carne de animales menores, como gallinas o cerdos", se lee en la publicación.VANESSA BALDASSARTE FAO
              • 1545400172_471628_1545401425_album_normal.jpg



                Elotascas (El Salvador). Se llama elote a la mazorca de maíz que todavía está en la planta que la produjo (tanto maduras como inmaduras), o bien a la que fue recientemente cosechada y en la cual los granos todavía guardan la humedad natural. Elote proviene de la lengua náhuatl, esta lengua es nativa de México y aproximadamente un millón y medio la hablan en el país. En náhuatl elotl quiere decir mazorca tierna, según recoge el recetario.ALEJANDRA HERNÁNDEZ FAO


                SIGUE ..


 
Última edición por un moderador:
  • 1545400172_471628_1545401428_album_normal.jpg



    Ceviche lafkenche de kollof (Chile). 1. Se lava y remoja el kollof (cochayuyo) por un tiempo mínimo de dos horas. 2. Luego, se enjuaga bien y se coloca en una olla con agua. Se debe cocer hasta que quede blando. Se recomienda ir pinchándolo con un cuchillo. 3. Una vez que esté blando, sacar de la olla y enjuagar nuevamente. 4. Cortar el Kollof en cuadritos pequeños y reservar en una fuente. 5. A continuación, lavar y cortar la cebolla en cuadritos pequeños. También se puede usar cebolla morada. 6. El pimentón también se corta en pequeños trocitos y se pica el cilantro. 7. Finalmente, todos los ingredientes se mezclan en una fuente y se les agrega aceite, jugo de limón y sal al gusto.ELIANA QUEUPUMIL

    • 1545400172_471628_1545413154_album_normal.jpg



      Hongos silvestres comestibles en pepita (México): 1. Primero se limpian y deshebran los hongos. 2. De manera separada, tostar en una sartén la pepita, el cacahuete, el ajonjolí y la chilaca. 3. Moler en un mortero (o metate), las pepitas, los cacahuetes, el ajonjolí, la chilaca, los ajos, un trozo de cebolla, junto al comino, clavos y pimienta. 4. Rebanar los granos de los dos elotes. 5. Calentar el aceite en una cazuela (u olla de greda) para freír un trozo de cebolla y un ajo picado. Se debe esperar a que estos cambien de color. 6. Luego, agregar los hongos silvestres, los elotes y dos ramitas de epazote. 7. Dejar sazonar por 8 minutos. 8. Agregar a la cazuela la mezcla de los ingredientes que fueron previamente molidos en el mortero (metate). 10. Agregar la taza de agua y dejar cocinar de 10 a 15 minutos, sin dejar de revolver. 11. Agregar sal al gusto.LIBER SALTIJERAL


      https://elpais.com/elpais/2018/12/21/album/1545400172_471628.html#foto_gal_10
 
cocinar-pulpo-en-casa.jpg


RECETAS TRUCOS DE COCINA
Cómo cocinar pulpo en casa
Los mejores trucos, consejos y recetas para cocinar pulpo en casa y disfrutarlo como si estuvieras en el corazón de Galicia.

Escrito por Mer Bonilla el 31/12/2018

EN: PULPO
Llamamos marisco a casi todo alimento de origen animal que viene del mar y no es pescado, esto es, crustáceos, como las gambas o las centollas; moluscos, como las almejas o los mejillones y cefalópodos, como el pulpo o los calamares.

Aunque todos estén riquísimos, entre meterle mano a un plato de pulpo o del resto, está claro que no hay comparación. El pulpo no tiene huesos, ni espinas, ni cáscaras y después de una buena ración uno se siente satisfecho. Las cosas como son. Y pienso yo que quizá sea por eso por lo que cada vez se tira más hacia el pulpo en Navidad. Entre eso, y que el pulpo no solo aguanta mejor la congelación que otros mariscos más delicados sino que es algo necesario para que su carne esté en condiciones óptimas de degustación, el pulpo se nos está convirtiendo en el rey de la fiesta.

Comprar pulpo para cocinarlo en casa




El pulpo es un cefalópodo mucho más versátil de lo que estamos acostumbrados a ver, pues como simplemente cocido con un poco de aceite, sal y pimentón -lo que viene siendo el pulpo á feira- está tan rico, la gente no se suele complicar más, pero lo cierto es que da mucho juego y no solo para las fiestas de Navidad.

Lo más importante siempre es elegir bien el pulpo que vamos a comprar, especialmente para saber lo que podemos esperar de él y para que no nos timen. Me explico, podemos usar unos rejos de potón para hacer un guiso riquísimo y serán una compra redonda si por ellos no pagamos más de 5 euros/kg, pero tampoco debemos dejarnos timar y que nos intenten colar potón o pulpo africano y nos lo hagan pagar a precio de gallego.

Cómo cocinar pulpo en casa




Cualquier receta que vayamos a preparar con pulpo pasa por cocerlo antes. Y es importante reseñar que tradicionalmente el pulpo se cuece en agua sola, sin sal, ni especias, ni laurel, ni nada. En algún sitio podéis leer de cocer el pulpo con una cebolla entera, pero no le aporta nada. Otra manera es cocer el pulpo sin añadir agua para que se cueza en sus jugos.

Cocinar pulpo por el método tradicional
  1. Ponemos a hervir agua en una olla grande.
  2. Cuando hierva el agua, sujetamos el pulpo por la cabeza de manera que cuelguen los tentáculos, sumergimos el pulpo en el agua hirviendo con cuidado de no quemarnos y lo sacamos tres veces seguidas. Haciendo esto, el pulpo quedará terso y evitaremos que se despelleje al cocerlo y quedará mucho más vistoso al servirlo.
  3. Cuando hierva de nuevo el agua, echamos de nuevo el pulpo y lo dejamos cocer en la olla destapada unos 17-18 minutos por cada kilo de pulpo, es decir, si es un pulpo de unos 2 kg tendremos que dejarlo unos 35 minutos.
  4. Pasado este tiempo comprobamos si el pulpo está listo clavando un palillo en la zoma de unión de alguno de los tentáculos y si no opone resistencia es que está listo.
  5. Finalizado el tiempo de cocción, apartamos la olla del fuego y lo dejamos reposar en el agua durante 15-20 minutos.
Cocinar pulpo sin agua
  1. Necesitamos una olla de fondo grueso con una tapa que cierre bien y no deje escapar vapor, como puede ser una cocotte.
  2. Ponemos la olla al fuego sin agua para que se caliente.
  3. Cuando la olla esté bien caliente metemos dentro el pulpo entero y ponemos la tapa.
  4. Bajamos el fuego hasta un término medio y dejamos cocer el mismo tiempo que en el método tradicional, es decir, 17-18 minutos por kg de pulpo, teniendo cuidado de no destapar la olla hasta el final para que no escape el vapor.
  5. Si al terminar el tiempo de cocción y comprobar si está tierno pinchando con el palillo, vemos que está aún un poco duro, tapamos de nuevo y lo dejamos cocer 5 minutos más, si no, lo sacamos y servimos.
El pulpo como mejor se corta es con unas tijeras, mucho mejor que con cuchillo sobre una tabla.

Algunas recetas con pulpo
Aparte del pulpo cocido aliñado con sal gorda, pimentón y aceite de oliva virgen extra -pulpo á feira- y este mismo acompañado de patatas cocidas -pulpo a la gallega-, os proponemos algunas otras recetas que harán las delicias de todos los que tengan la suerte de catarlas.

RECETAS CON PULPO :

https://cocinillas.elespanol.com/2018/12/cocinar-pulpo-en-casa/
 
1538482675_504666_1538482971_media_normal.jpg
Los puntitos son semillas de vainilla. MIREIA FONT

GAMBAS TAHITIANAS CON VAINILLA Y COCO


La vainilla tahitiana es la más preciada en el mundo; una variedad rara y única de sabor afrutado que podemos disfrutar no solo en plastos dulces, sino también salados. Como muestra, estas exóticas gambas con coco.


Según una leyenda de los totonacas, indios mesoamericanos de la costa este mexicana, el príncipe Zkatan-Oxga secuestró a la princesa Tzacopontziza por amor. En su huida, fueron capturados y decapitados por unos sacerdotes. De la sangre del joven, nació un macizo arbusto y de la de ella, una preciosa y delicada orquídea: la vainilla. Según la historia oficial, fue Hernán Cortés quien allá por el 1520 introdujo el fruto de dicha planta mexicana en Europa. Los botánicos europeos se volvieron locos intentando cultivar la orquídea en el viejo continente... y no lo consiguieron.

Los colonizadores franceses se propusieron, más tarde, plantarla en las islas Mauricio y Reunión, pero tampoco tuvieron éxito. En 1841, un esclavo reunionés de 12 años llamado Edmund Albius descubrió la manera de polinizar la orquídea de la vainilla con un palo y un simple movimiento de pulgar, método que se sigue usando en la actualidad. Su logro viajó hasta Madagascar, Seychelles, Comoras y la Polinesia Francesa, y convirtió a los franceses en uno de los principales comerciantes mundiales de vainilla. Edmund, por cierto, murió 40 años después de su hallazgo en la pobreza más absoluta.

Lo que los franceses no se podían imaginar cuando empezaron a cultivar la planta mexicana en Tahití es que allí nacería la reina de las vainillas, la más preciada en el mundo; una variedad rara y única de sabor afrutado con notas florales y anisadas. A pesar de no ser una planta autóctona polinesia, pronto se convirtió en un ingrediente básico de su gastronomía y empezó a usarse en la elaboración de tés, rones, aceites, vinagres y salsas; platos de pollo, pescado, marisco y postres. A principios del siglo XX, Tahití producía 200 toneladas de vainilla al año; ahora, no llega a las 10 (el 0,07% de la producción mundial), un número insignificante al lado del que produce Indonesia, por ejemplo. Debido al trabajo manual que implica la producción de la vainilla natural, es la segunda especia más cara del mundo después del azafrán. Por eso, el 97% de la vainilla que consumimos como saborizante es, de hecho, sintética.

En nuestras tierras, la vainilla la usamos principalmente en comidas dulces, pero si tenemos en cuenta el drama de Zkatan-Oxga y Tzacopontziza, la frustración de los botánicos de las cortes europeas y la injusticia de Edmund Albius, deberíamos empezar a usarla también en platos de sabor umami, como estas gambas con leche de coco y ron.

Dificultad

Tan fácil como cerrar los ojos e imaginarte en una playa tahitiana

Ingredientes

Para 2 personas

  • 500 g de gambas medianas enteras
  • 1 vaina de vainilla
  • 250 ml de leche de coco
  • 125 ml de ron añejo
  • 60 ml de caldo de pollo
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • Una pizca de cilantro
  • Mezcla de 3 pimientas al gusto
  • Sal al gusto
Preparación

  1. Lavar las gambas. Separar los cuerpos de las cabezas. Pelar los cuerpos, hacerles un corte transversal y quitarles los hilos negros (intestinos). Calentar el aceite en una sartén y añadir las cabezas. Aplastarlas con una cuchara de madera para que suelten todo su jugo y retirarlas cuando el aceite coja color. Añadimos las gambas y las salteamos a fuego medio menos de un minuto o hasta que estén ligeramente doradas. Las reservamos en un plato.
  2. Con un cuchillo, abrir la vaina de la vainilla por la mitad y raspar las semillas. En la misma sartén que hemos usado antes, colocar la vaina, las semillas y el ron. Remover y cocer unos cinco minutos a fuego medio o hasta que el líquido se haya reducido a unas tres cucharadas.
  3. Agregar la leche de coco, el caldo y sal, y remover de vez en cuando con la cuchara de madera. Pasados unos 15 minutos -o una vez la salsa se haya espesado y reducido a la mitad-, retirar la sartén del fuego, quitar la vaina y reservar la salsa.
  4. Echar unas gotas de aceite en la sartén, añadir las gambas y calentarlas ligeramente durante unos segundos.
  5. Emplatar las gambas, ponerles la salsa por encima, un poco de cilantro picado, la pimienta y, si es necesario, un poco más de sal. Servir inmediatamente.

https://elcomidista.elpais.com/elcomidista/2018/10/02/receta/1538482675_504666.html
 
Trucos básicos de cocina: cómo ablandar garbanzos o pelar uvas
Apaños gastronómicos para pasar por un experto entre fogones
garbanzos-kPCG--620x349@abc.jpg


resizer.php
Paloma Santamaría
@palomasantamari
Seguir
Actualizado:05/01/2019 01:36h
0

A la hora de preparar una rica comida o cena es necesario unos buenos ingredientes y la mano experta del cocinero. Para aquellos que no siempre obtienen un diez en sus elaboraciones estos son algunos trucos básicos que ayudarán a triunfar en la mesa.

resizer.php

Quitar el sabor excesivo de la cebolla
Para quitar el sabor excesivamente fuerte a la cebolla hay que sumergirla en un recipiente con agua durante algunos minutos. Si el sabor fuerte persiste tras cortarla en tiras finas puede volver a introducirse en agua fría durante otros diez minutos.

Las ensaladas, nunca en recipientes metálicos
Las ensaladas son un clásico en todas las mesas ya sea como primer plato a como guarnición de una carne o un pescado. Son muchas las recetas e ingredientes que puede llevar una buena ensalada pero existe un consejo que vale para todas ellas, nunca preparar este plato en recipientes metálicos. La explicación es sencilla, el metal ocasiona que las verduras o legumbres se oxiden más rápidamente. Para triunfar con estas recetas además es necesario aliñarlos en un orden: Primero la sal, luego el vinagre y finalmente el aceite.

Cocinar carnes a la plancha


Muchas veces comemos carnes a la plancha y cuesta masticarlo porque se ha quedado demasiado seca. Para evitar este problema hay que sacarla de la nevera media hora antes de ser cocinada así tendrá menor temperatura y se cocinará manteniendo sus jugos, evitando que se seque.

resizer.php

Ablandar garbanzos
Uno de los pasos previos para hacer un cocido es meter los garbanzos en remojo la noche anterior. En ocasiones se olvida hacer este paso y tenemos un problema. Un truco para ablandarlos es utilizar una cucharadita en el agua de la cocción de bicarbonato de sodio junto con los garbanzos y cocinarlos normalmente.

Pelar las uvas y desgrasar tu plato
Para pelar bien las uvas hay que colocar el racimo durante 30 segundo en agua hirviendo. Mientras que si lo que queremos es quitarle grasa a tu plato un truco es añadir piña tanto en fruta como en zumo.

Papel de cocina transparente
Si eres de los que usar a diario el papel de cocina transparente y tienes la sensación de no saber muy bien cómo manipularlo para que no se pegue, un secreto que guardan los chefs es meterlo en la nevera para que con el frío se pueda manejar fácilmente.
https://www.abc.es/viajar/gastronom...banzos-o-pelar-uvas-201901050136_noticia.html
 
cordero-al-curry-00.jpg



Cordero al curry con guarnición de basmati y lentejas
Aprende cómo hacer un delicioso guiso de cordero al curry en la Crock-Pot y olla de cocción lenta acompañado de una guarnición de escándalo.

Escrito por Cristina López el 4/01/2019



El cordero es una carne llena de sabor. Se presta especialmente bien para ollas de cocción lenta, ya que la carne queda deshilachada al tacto del tenedor. Nuestra receta de hoy es muy similar a la de un tajín tradicional de cordero. El tajín de cordero es un plato célebre de la gastronomía en los países del norte de África. En especial, se asocia a países como Marruecos, Túnez y Argelia.

Ingredientes para Cordero al curry en olla lenta
Para el cordero al curry:

  • Cordero cortado a trozos, 700 g
  • Caldo de carne, 200 ml
  • Ciruelas pasas, 200 g
  • Almendras crudas, 100 g
  • Cebolla, 1/2
  • Ajo, 1 diente
  • Ras el hanout, 1 cdta
  • Canela, 1 cdta
  • Curry, 1 cdta
  • Cúrcuma, 1 cdta
  • Jengibre fresco rallado, 1 cda
  • Cilantro fresco, 1 ramita
  • Harina
  • Aceite de oliva
  • Sal
  • Pimienta negra
Para el arroz basmati:

  • Arroz basmati, 1 vaso
  • Agua, 1 vaso + 1/3 del mismo vaso con el que hemos medido el arroz
  • Crdamomo, 2 semillas
  • Clavos de olor, 3
  • Cúrcuma, 1 cdta
  • Sal, al gusto
Para las lentejas salteadas:

  • Lentejas cocidas, 250 g
  • Ajo, 1/2 diente
  • Pimentón ahumado, 1 cdta
  • Sal, al gusto
  • Pimienta negra, al gusto
Cómo preparar el cordero al curry
1: Salpimentar y enharinar





Cortamos la carne en trozos similares a los que usaríamos para carne guisada. Podemos pedírselo al charcutero para trabaje la pieza a nuestro gusto. A continuación, colocamos el cordero en un recipiente plano y salpimentamos por ambos lados. Acto seguido, pasamos la carne salpimentada por harina. Manchamos y “empolvamos” cuidadosamente para que se reparta de forma homogénea.

2: Marcar cordero, pochar cebolla y reservar







Calentamos una sartén o cazuela con un poco de aceite de oliva. Cuando esté bien caliente, doramos la carne por ambas caras. No tenemos que cocinarlo, solo marcarlo por ambos lados hasta que tenga un color pardo. Reservamos el cordero cuando esté listo. Seguidamente, pochamos la cebolla en el mismo aceite que hemos usado para dorar la carne. De este modo, aprovechamos los jugos segregados por el cordero. Añadimos también el ajo y el jengibre picados hasta que todos los ingredientes saquen sus colores.


3: Mezclar todo en la olla de cocción lenta





Colocamos a mano todo lo que hem
os ido reservando. Preparamos la olla de cocción lenta y agregamos la cebolla, el ajo y el jengibre. En segundo lugar, apilamos todas las piezas de cordero y vertemos todas las especias. Añadimos un chorrito de caldo hasta que cubra. Este caldo puede ser de verduras o de pollo, según gustos. Por último, agregamos las ciruelas y removemos todo hasta que todos los ingredientes se hayan abrazado a los jugos, sabores y colores. Cuando lo tengamos todo bien mezclado, tapamos la olla y lo dejamos en temperatura baja 8 horas.






Cómo hacer arroz basmati


1: Mezclar en un cazo, hervir y reservar





En el vasto reino de los arroces, la clave son siempre las medidas. Pura matemática. Según el tipo de arroz, tendréis que mirar en el paquete qué tipo de cocción se recomienda. Para este arroz basmati, nuestras medidas son un vaso de arroz, luego echaremos ese mismo vaso lleno de agua, + 1/3 del mismo vaso.

En esta receta, hemos echado primero el arroz en crudo en el cazo y hemos añadido el carcamomo, los clavos, la cúrcuma y la sal. Acto seguido, añadimos las cantidades recomendadas de agua, removemos todo bien y tapamos el cazo. Es muy importante que lo dejemos cocer durante tres minutos a alta temperatura, para luego bajarlo a media-baja durante 12. ¡No podemos quitar la tapa en todo este proceso! De lo contrario, fastidiaremos la cocción.

Pasado este tiempo, retiramos la tapa y nos dejamos embriagar por ese primer golpe de vapor con especias.


Cómo hacer las lentejas salteadas


1: Sofreír ajos y echar lentejas





Esta parte ocupa lo mismo que su título: fácil y sin complicaciones. Calentamos una sartén con un poco de aceite de oliva. A fuego medi,o salteamos el ajo picado. Nada más tengan color tostado, añadimos las lentejas cocidas de bote y el pimentón. Salpimentamos. Rehogamos durante 2 minutos y reservamos.


3: Servir





Ponemos el arroz, las lentejas y la olla de cocción lenta a mano. Servimos en el plato todas las partes. Una abundante ración de cordero, el arroz a un lado y las lentejas en el espacio que nos queda. Nosotros le hemos puesto unas hojas de cilantro fresco por encima y unas almendras tostadas para empacar bien todos los sabores.

Notas


El tajín o tajine es el nombre del recipiente de barro cocido en el que se cocina y presenta la comida. Este curioso recipiente está formado por un plato y una tapa de forma cónica para conservar el calor. En esta ocasión, hemos sustituido el tajín por la olla de cocción lenta o slow cooker y hemos añadido como acompañamiento arroz basmati y lentejas rehogadas.

El cordero es una de las carnes de animal domesticado más antiguas que se conocen. Los hallazgos de consumo ovino en el Medio Oriente se remontan hasta 9.000 años a.C. En todas las culturas habidas y por haber, el cordero tiene una connotación positiva, relacionada en muchos casos con la pureza o lo divino. Es un producto que destaca por la potencia de su sabor, su consistencia y sus posibilidades gastronómicas: admite un rango de preparados muy generoso, así como especiados.

Esta receta se dona con especial facilidad a la cocción lenta. Podemos preparar la mezcla de cordero una noche, antes de acostarnos. Dejamos la olla trabajando silenciosamente mientras dormimos. Por la mañana, apagamos la olla de cocción lenta y dejamos que los sabores reposen. Cuando queramos comer, basta con calentarlo 15 minutos antes en modo “alto”. La combinación de leguminosas, arroz basmati y la salsa que ha filtrado al cordero ofrecen un abanico de sabores espectacular. Una manera sencilla de imitar el tajín de cordero y disfrutar de todo el sabor que ofrece esta carne milenaria.

https://cocinillas.elespanol.com/2019/01/cordero-al-curry-olla-crock-pot/
 
Lomos de rodaballo con salsa de espinacas y huevas

Hoy preparamos una receta de lujo para uno de los pescados blancos más sabrosos que podemos encontrar en el mercado. No te defraudará


video-receta-lomos-de-rodaballo-con-salsa-de-espinacas-y-huevas.jpg

Rodaballo en salsa de espinacas. (Snaps Fotografía)


El rodaballo es un pescado blanco semigraso, especialmente sabroso, cuya textura y fácil digestión lo hacen ideal para personas con estómago delicado. Se considera el más exquisito de los peces planos. Es rico en vitamina B9 y potasio y su contenido en grasas es algo superior al resto de pescados de su categoría, lo que le confiere un sabor untuoso y delicado.

Se suele preparar al horno, en caldeirada o guisado con algún alcohol como sidra o txakoli. Hoy lo elaboramos en filetes marcados rápidamente en una sartén a fuego vivo. Preparamos una guarnición de hortalizas, en este caso puerros de sabor suave, que lo acompañen sin enmascarar el sabor fino del pescado. El punto salado y de color lo añadimos al final con unas huevas rojas y negras que alegren tanto la vista como las papilas.


Tiempo de preparación: 20 minutos Dificultad: Fácil Coste: Medio Comensales: 2

Ingredientes
  • 1 rodaballo en filetes
  • 1 puerro
  • 1 cebolla
  • 200 de espinacas tiernas
  • 125 g queso crema
  • 20 g de huevas de salmón


rodaballo-con-salsa-de-espinacas.jpg

Foto: Snaps Fotografía.



Elaboración
  1. Pide al pescadero que saque los lomos del pescado.
  2. Vierte una cucharada sopera de aceite en una sartén a fuego vivo.
  3. Marca el pescado un par de minutos por cada lado. Añade sal y pimienta. Reserva al calor.
  4. Añade una cucharada de aceite a la sartén. Añade los puerros en rodajas y una cebolla picada.
  5. Rehoga a fuego medio hasta que se pochen. Incorpora las hojas de espinaca fresca y deja que reduzcan un par de minutos. Cuando se hayan hecho añade el queso crema.
  6. Sirve el pescado con la salsa como guarnición y decora con unas huevas de salmón.
El truco final
Haz el pescado entero al horno a 180º durante 20 minutos por kilo de peso en lugar de marcar los filetes en la sartén.

VIDEO: https://www.alimente.elconfidencial.com/recetas/2019-01-06/lomos-rodaballo-salsa-espinacas_1607912/


 
Alimentos que no debes comer en ayunas

Volver a Nutrición

Silvia García Herráez

Martes, 06 de Marzo de 2018 - 16:05

alimentos-ayunas.jpg
Hay alimentos que fomentan el tejido adiposo, y pueden ser causa de obesidad y enfermedades cardiovasculares.
El desayuno es la comida más importante del día. Los alimentos que consumamos por la mañana temprano determinan cuanta energía tendremos para consumir a lo largo del día. Yogur, café, zumo de naranja o una pieza de fruta y tostadas; es como creemos que es el desayuno perfecto, pero lo que la mayoría de gente no sabe es que existen alimentos que no se recomiendan consumir en ayunas. Ascensión Marcos, presidenta de la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (Fesnad), apunta que “todo alimento que contenga grasa saturada en exceso, ya sea bollería industrial o la procedente de los cárnicos procesados, así como la repostería con alta cantidad de azúcar añadida no son beneficiosos para consumir a primera hora del día”.

¿De qué manera influirían negativamente en la salud? Depende de la persona le afectará de una manera u otra. Algunos individuos refieren sintomatología de dolor estomacal o acidez cuando ingieren determinados alimentos en ayunas. Cecilia Almuiña, directora del Instituto Médico Internacional de Vithas Internacional, afirma que “esto ocurre debido a que estos alimentos pueden empeorar los síntomas de reflujo o gastritis en personas con patología previa o predisposición a la misma. Un ejemplo de ello es el café, debido a su alto contenido en cafeína”. En el ritual del desayuno, en caso de querer consumir cafeína, es mejor que la mezclemos con algo más. Igualmente ocurre con los cítricos, pueden incrementar los síntomas de acidez. Si se quiere consumir zumos siempre se ha de optar por los de frutas y verduras naturales en vez de los procesados.

Asimismo, las bebidas carbonatadas también pueden dañar la mucosa gástrica. “En este caso, no solo debemos evitarlas en ayunas, sino que tenemos que limitar su consumo en general, ya que está directamente relacionado con la obesidad”, afirma Almuiña. Respecto a las personas que padecen flatulencia o meteorismo, que se debe, en la mayoría de los casos, a tragar aire inconscientemente o a cantidades exageradas de gas en el abdomen, padecen un aumento de sensación de distensión abdominal con la ingesta en ayunas de azúcar. Del mismo modo, Marcos recalca que “hay alimentos que fomentan el tejido adiposo, y pueden ser causa de obesidad y enfermedades cardiovasculares”.

Por el contrario, la mejor manera de romper el ayuno en las primeras horas de la mañana es optando por un desayuno equilibrado. Marcos señala que hay tres alimentos en particular que deben estar incluidos que son la fruta, los lácteos y los cereales sin azúcar. “La grasa saturada de la leche y los lácteos es muy saludable, ya que a través de las micelas que contiene, se absorben mejor los micronutrientes (vitaminas y minerales). Hoy en día, hay déficit de calcio debido al alto consumo de bebidas vegetales (mal llamadas leches) que no aportan micronutrientes prácticamente. Dentro de los cereales, una rebanada de pan con aceite virgen es la mejor opción”, incide Marcos.

Por su parte, Almuiña señala que también se puede optar por “una pequeña ración (entre 30 y 50 gramos) de jamón serrano, cocido, pavo, pollo, huevo o media lata de atún al natural. Así como un tazón de avena u otro tipo de cereal integral”. Además, no podemos olvidar los frutos secos, que a pesar de su aporte calórico por su alto contenido de ácidos grasos poliinsaturados, aportan micronutrientes y fibra. “Lo ideal sería dentro de la ración del día un puñado. Ahora, hay que aclarar que dentro de los frutos secos no se incluyen los cacahuetes”, concluye Marcos.
https://cuidateplus.marca.com/alime...s-debes-comer-ayunas-161961.html?cid=SIN00101
 
LASAÑA LIGERA DE ESPINACAS


1333429200_133342_1333429200_noticia_normal.jpg



MIKEL LÓPEZ ITURRIAGA


Aun a riesgo de que la parroquia italianófila se me ponga en pie de guerra, diré que las lasañas no me ponen en exceso. No sé si es porque me llenan al tercer bocado, o porque casi siempre que las he tomado en restaurantes han sido una masa blandurria con kilos de queso y bechamel, pero es un plato que no me apetece pedir nunca. Y eso siendo un fans furibundo de la pasta y de la cocina italiana en general. Quizá suceda como con la tortilla de patata o las croquetas, que es tan difícil comerlas buenas fuera de casa que uno ya desiste.

Sin embargo, tras años de alejamiento el uno del otro, la lasaña y yo nos reencontramos en casa de una amiga el otro día, durante el encuentro semanal para ver a nuestros muy añorados tróspidos. Ella (la lasaña, no mi amiga) iba un poco en plan vegetariana, sin un gramo de carne y exuberante de espinacas, pasas y queso fresco. No se parecía en nada al plato denso y empalagoso que había conocido, por lo que la devoré con enorme deleite. Fue una reconciliación maravillosa que me llevó a quererla otra vez, y a desear compartir su receta con vosotros.

El secreto para triunfar con esta lasaña consiste en usar espinacas frescas, soltarse con las pasas y, sobre todo, que la bechamel que usemos sea ligerita. Es decir, con una proporción alta de leche por cantidad de roux (mezcla de mantequilla y harina). Por si a alguien se le pasa por la cabeza comprar bechamel de bote, informo de que cada vez que alguien la usa Dios mata un gatito enharinándolo y friéndolo en grasas hidrogenadas.

Dificultad

Para informáticos y vírgenes.

Ingredientes

  • 1 paquete de 20 placas de lasaña precocida
  • 1 kg de espinacas frescas
  • 1 cebolla grande
  • 100 g de pasas sin semilla
  • 300 g de queso fresco
  • 100 g de queso emmental rallado
  • 750 ml de leche entera
  • 40 g de harina
  • 40 g de mantequilla
  • Nuez moscada
  • Aceite de oliva
  • Pimienta
  • Sal
Preparación

1. Precalentar el horno a 180 grados.

2. Saltear las espinacas en dos tandas en una sartén con un poco de aceite de oliva hasta que pierdan volumen. Retirar del fuego, añadir las pasas y el queso fresco desmigado y reservar.

3. Picar la cebolla fina y poner a calentar la leche en un cazo.

4. En una cazuela mediana, pochar la cebolla con la mantequilla y un chorrito de aceite a fuego suave unos 10 minutos, hasta que esté translúcida. Añadir la harina, remover y dejar que se haga a fuego muy lento otros 10 minutos. Incorporar la leche bien caliente removiendo con una cuchara de madera hasta obtener una bechamel ligera. Salpimentar y sazonar con nuez moscada rallada al gusto.

5. Untar la base de una fuente de horno mediana con un poco de bechamel. Poner la primera capa de pasta y encima la mezcla de espinacas. Cubrir con bechamel, poner la segunda capa de pasta y repetir la operación terminando con pasta.

6. Espolvorear con el queso emmental y un poco de pimienta y hornear unos 25-30 minutos. Cuando esté dorado y la pasta blanda, sacar y servir.

https://www.cotilleando.com/threads/recetas-de-cocina.15367/page-68
 
1545145703_072349_1547119688_media_normal.jpg



ALCACHOFAS BRASEADAS CON VINAGRETA DE ANCHOA, CHILE Y PEREJIL


En El Comidista no desperdiciamos ninguna oportunidad de cocinar con la hortaliza que nos presta su imagen. En esta ocasión, las preparamos con un braseado sencillo y una potente vinagreta.


MÒNICA ESCUDERO


Alcachofa, deliciosa alcachofa, logo comidista y manjar que nos alegra la temporada de invierno, ¿quedará alguna manera en la que no te hayamos cocinado? Posiblemente no, pero eso no hará que dejemos de dar la turra de todas las maneras posibles con una de nuestras hortalizas de hoja favoritas.

Como venimos de días de virguería culinaria y digestiones complicaditas, hoy las prepararemos de una manera tan sencilla como sabrosa, usando la técnica del braseado. Al sacarlas del fuego, las aliñaremos con una vinagreta fresquita con el toque umami de las anchoas y ya podemos proceder a comérnoslas (calientes o frías, si las queremos en plan ensalada) Podemos añadirles alcaparras o pepinillos picados, o aromatizar el aceite y el limón con un diente de ajo espachurrado durante media hora y posteriormente retirado. Si queréis evitar los animales pero no el umami, podéis usar un poco de miso en la vinagreta en lugar de las anchoas.

Si sois de buen saque aunque aún tengáis el capón de Navidad incrustado en al paladar y lo queréis convertir en un plato completo, podéis servirlo sobre un lecho de arroz -mejor integral-, garbanzos, judías o lentejas cocidas o pasta, caliente o frío en plan ensalada (en este caso mejor añadir alguna hoja verde, como rúcula o brotes de espinacas). En estos casos es conveniente alargar un poco más la vinagreta, para que los platos no queden secos. ¿Demasiada complicación? Sírvelo sobre una rebanada de pan tostado, en plan bruschetta: seguro que tampoco hay queja.

Dificultad

La p con la a, pa.


Ingredientes

Para 4 personas


  • 8 alcachofas (o 12, dependiendo del tamaño y el hambre)
  • Un limón o tallos de perejil
  • 4 filetes de anchoa
  • 2 cucharadas colmadas de perejil picado
  • 2 cucharadas de zumo de limón (o al gusto)
  • 3 cucharadas de aceite de oliva
  • Chile fresco al gusto
  • Sal
Preparación


  1. Pelar las alcachofas quitando las hojas externas hasta que se vea del todo la parte amarilla, cortar la base del tallo y quitar las capas externas del mismo con un pelador o una puntilla. Ponerlas en un bol con agua con limón o tallos de perejil -para que no se oxiden- y cortarlas en láminas.
  2. Rehogar un par de dientes de ajo enteros en aceite de oliva. Incorporar las alcachofas y dorar un par de minutos. Salar, añadir tres cucharadas de agua y tapar con una sartén que encaje para que se cocinen al vapor.
  3. Mientras, hacer una vinagreta con las anchoas picadas, el perejil, el zumo de limón, el aceite, el vinagre, el chile en rodajas o daditos y sal (hay que tener en cuenta que las anchoas ya son saladas).
  4. Dejar dos minutos y medio y repetir la operación, si después de la segunda cocción siguen demasiado duras, hacerlo una tercera vez. Emplatar y servir con la vinagreta por encima, bien mezclado para que se empape de sabor.

https://elcomidista.elpais.com/elcomidista/2018/12/18/receta/1545145703_072349.html








 
Back