Tras el escándalo de Corinna, las regatas del Rey Juan Carlos no tambalean
CASA REAL
Emérito reaparecerá en Sanxenxo
El Rey Emérito en la regata Príncipe de Asturias, en 2016. GTRES
Los Wittgenstein desmontan el mito de Corinna como princesa
El Rey Juan Carlos se encuentra "desaparecido del mapa" en una semana en la que se ha producido una "tormenta" por la publicación (por parte de El Español y OK Diario) de unas cintas donde Corinna, su antes amiga "entrañable", le acusa en 2015 ante el comisario Villarejo, actualmente en la cárcel por delito de organización criminal, de utilizarla como testaferro, y de tener cuentas en Suiza a nombre de un primo, entre otras imputaciones.
Pero no parece que la ausencia pública del Emérito tenga relación con este escándalo, ya que desde el 7 de junio (en que acudió a un acto de la fundación Cotec), no ha vuelto a la agenda institucional y tampoco está previsto que lo haga pronto. Algo que, según su entorno, se debe a que la recuperación de su operación de rodilla el pasado 7 de abril se está dilatando más de lo previsto.
Pese a ello, el 23 de junio regateó en Sanxenxo y una semana después, viajó a La Haya, para apoyar al equipo español en la Volvo Ocean Race. No se descarta que, a pesar de la que está cayendo, este fin de semana Don Juan Carlos se deje ver en Sanxenxo, según aseguró este viernes a LOC una fuente del Comité de Regatas 6m, clase en la que compite: "Su Majestad tiene previsto participar en la regata social que se celebra este sábado 14 y el domingo, 15 de julio, en aguas pontevedresas". Se trata de una prueba importante para el Bribón, que patronea Don Juan Carlos, pues servirá como entrenamiento de cara al importante compromiso que le espera dentro de dos semanas en Palma, en la Copa del Rey de Vela.
Este 2018 en que Zarzuela programó rendir homenaje al Emérito y a Doña Sofía por su 80 cumpleaños, uno de los platos fuertes era ver de nuevo a padre e hijo compitiendo en dicha regata, que se celebra del 30 de julio al 4 de agosto en aguas de Palma. Don Felipe, a la caña del velero ClubSwan 50, cedido por el astillero Nautor Swan, y su padre patroneando el Bribón 6m, con el que en 2017 se proclamó campeón del mundo, y está adaptado a sus problemas de movilidad, pues lleva un asiento para evitar caídas. La organización de la Copa del Rey invitó este año a la clase 6M, amarrada en Sanxenxo, con el objetivo de que Don Juan Carlos regresara a una competición que abandonó hace nueve años por sus achaques de salud.
Algo que respondía a los deseos de Zarzuela de hacer una "puesta en escena" de armonía familiar, tras el encarcelamiento de Urdangarin, pues no hay mejor campaña para la Corona que esas entrañables imágenes de padre e hijo, de la familia real cenando en la isla, de Doña Sofía y Doña Letizia superado su rifirrafe, o de los Eméritos en Marivent. Imágenes casi olvidadas desde la abdicación de Don Juan Carlos, que no volvió a pisar Mallorca salvo fugazmente en 2016 por el 80 cumpleaños de su hermana Pilar.
PLANES DE VERANO
Este año, la Copa del Rey de Vela le obligará a permanecer una temporadita en Marivent. Según la fuente ya citada "tras la regata en Sanxenxo, el 23 de julio los veleros partirán hacia Palma. Está previsto que Don Juan Carlos participe en los entrenamientos previos, pues el lunes 30 se inicia oficialmente la competición". Así el emérito tendrá que recalar en Marivent como tarde el último fin de semana de julio, fecha en que se espera que esté ya instalada Doña Sofía, que suele reunir en esas fechas a todos sus nietos, los hermanos Urdangarin y los hijos de la infanta Elena. También esos días se espera al Rey Felipe, pues suele participar en los entrenamientos previos a la Copa del Rey.
Sin embargo, el escándalo de las grabaciones de Corinna ha supuesto un jarro de agua fría, que en puertas del verano regio, ha enrarecido de nuevo el ambiente. Es difícil adelantar si Zarzuela considerará oportuno que padre e hijo se prodiguen juntos, o que se escenifique la imagen de familia feliz. Se habló de que la Infanta Cristina, al estar Urdangarín en prisión, acudiría este año a Marivent con sus hijos.
Pero dada la sorprendente actitud de Doña Sofía, marcando distancias con sus nietos Urdangarin de los que siempre fue gran valedora, y su ausencia en la graduación de Pablo Nicolás, parece improbable. También para los Eméritos el panorama se ha ensombrecido, pese a que 2018 se presentaba como su año triunfal. Aunque entre ellos han limado asperezas, reveses, como la operación de rodilla de Don Juan Carlos que segó el protagonismo institucional que estaban teniendo, han sido inesperados mazazos. Como lo han sido el ingreso en prisión de Urdangarín, que parece haber distanciado aun más a la Infanta de su familia, y sobre todo el escándalo de las cintas de Corinna, que podría convertir un verano de sueño en una auténtica pesadilla.
CASA REAL
Emérito reaparecerá en Sanxenxo
El Rey Emérito en la regata Príncipe de Asturias, en 2016. GTRES
Los Wittgenstein desmontan el mito de Corinna como princesa
- CONSUELO FONT
El Rey Juan Carlos se encuentra "desaparecido del mapa" en una semana en la que se ha producido una "tormenta" por la publicación (por parte de El Español y OK Diario) de unas cintas donde Corinna, su antes amiga "entrañable", le acusa en 2015 ante el comisario Villarejo, actualmente en la cárcel por delito de organización criminal, de utilizarla como testaferro, y de tener cuentas en Suiza a nombre de un primo, entre otras imputaciones.
Pero no parece que la ausencia pública del Emérito tenga relación con este escándalo, ya que desde el 7 de junio (en que acudió a un acto de la fundación Cotec), no ha vuelto a la agenda institucional y tampoco está previsto que lo haga pronto. Algo que, según su entorno, se debe a que la recuperación de su operación de rodilla el pasado 7 de abril se está dilatando más de lo previsto.
Pese a ello, el 23 de junio regateó en Sanxenxo y una semana después, viajó a La Haya, para apoyar al equipo español en la Volvo Ocean Race. No se descarta que, a pesar de la que está cayendo, este fin de semana Don Juan Carlos se deje ver en Sanxenxo, según aseguró este viernes a LOC una fuente del Comité de Regatas 6m, clase en la que compite: "Su Majestad tiene previsto participar en la regata social que se celebra este sábado 14 y el domingo, 15 de julio, en aguas pontevedresas". Se trata de una prueba importante para el Bribón, que patronea Don Juan Carlos, pues servirá como entrenamiento de cara al importante compromiso que le espera dentro de dos semanas en Palma, en la Copa del Rey de Vela.
Este 2018 en que Zarzuela programó rendir homenaje al Emérito y a Doña Sofía por su 80 cumpleaños, uno de los platos fuertes era ver de nuevo a padre e hijo compitiendo en dicha regata, que se celebra del 30 de julio al 4 de agosto en aguas de Palma. Don Felipe, a la caña del velero ClubSwan 50, cedido por el astillero Nautor Swan, y su padre patroneando el Bribón 6m, con el que en 2017 se proclamó campeón del mundo, y está adaptado a sus problemas de movilidad, pues lleva un asiento para evitar caídas. La organización de la Copa del Rey invitó este año a la clase 6M, amarrada en Sanxenxo, con el objetivo de que Don Juan Carlos regresara a una competición que abandonó hace nueve años por sus achaques de salud.
Algo que respondía a los deseos de Zarzuela de hacer una "puesta en escena" de armonía familiar, tras el encarcelamiento de Urdangarin, pues no hay mejor campaña para la Corona que esas entrañables imágenes de padre e hijo, de la familia real cenando en la isla, de Doña Sofía y Doña Letizia superado su rifirrafe, o de los Eméritos en Marivent. Imágenes casi olvidadas desde la abdicación de Don Juan Carlos, que no volvió a pisar Mallorca salvo fugazmente en 2016 por el 80 cumpleaños de su hermana Pilar.
PLANES DE VERANO
Este año, la Copa del Rey de Vela le obligará a permanecer una temporadita en Marivent. Según la fuente ya citada "tras la regata en Sanxenxo, el 23 de julio los veleros partirán hacia Palma. Está previsto que Don Juan Carlos participe en los entrenamientos previos, pues el lunes 30 se inicia oficialmente la competición". Así el emérito tendrá que recalar en Marivent como tarde el último fin de semana de julio, fecha en que se espera que esté ya instalada Doña Sofía, que suele reunir en esas fechas a todos sus nietos, los hermanos Urdangarin y los hijos de la infanta Elena. También esos días se espera al Rey Felipe, pues suele participar en los entrenamientos previos a la Copa del Rey.
Sin embargo, el escándalo de las grabaciones de Corinna ha supuesto un jarro de agua fría, que en puertas del verano regio, ha enrarecido de nuevo el ambiente. Es difícil adelantar si Zarzuela considerará oportuno que padre e hijo se prodiguen juntos, o que se escenifique la imagen de familia feliz. Se habló de que la Infanta Cristina, al estar Urdangarín en prisión, acudiría este año a Marivent con sus hijos.
Pero dada la sorprendente actitud de Doña Sofía, marcando distancias con sus nietos Urdangarin de los que siempre fue gran valedora, y su ausencia en la graduación de Pablo Nicolás, parece improbable. También para los Eméritos el panorama se ha ensombrecido, pese a que 2018 se presentaba como su año triunfal. Aunque entre ellos han limado asperezas, reveses, como la operación de rodilla de Don Juan Carlos que segó el protagonismo institucional que estaban teniendo, han sido inesperados mazazos. Como lo han sido el ingreso en prisión de Urdangarín, que parece haber distanciado aun más a la Infanta de su familia, y sobre todo el escándalo de las cintas de Corinna, que podría convertir un verano de sueño en una auténtica pesadilla.
