Hallan los cuerpos sin vida de una pareja y sus dos hijas en Tenerife
- Autorchoqui
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Es una posibilidad mas, acabo de leer em prensa que no se descarta nada, incluso problemas economicos... Nada justifica estas muertes, pero quieren investigar cual ha sido el detonante
Lamentablemente Es muy común.
Un progenitor sufre depresion grave y decide no seguir en el mundo.En su mente cree que sus hijos están en un mundo donde serán terriblemente infelices y lo mejor es acabar todos juntos.
No es el caso de Breton por ejemplo.
Recuerdo en Girona una madre muy bien situada sin problemas económicos que primero tiro a sus hijas por la ventana un bebé y una de 10 o 12 , y despues se lanzó ella.
Terrible.
Pobres nenas con tantas cosas por vivir.
De la madre no digo nada porque se especulan aun mil cosas.
Ante todo hay que lamentar la muerte de la madre y las niñas,es un hecho terrible pero es muy delicado juzgar el comportamiento de este hombre posiblemente enfermo de depresión.
Esta enfermedad silenciosa hace ver las cosas distorsionadas,la realidad si hay problemas se ve muy negra y cuesta ver soluciones y salidas.
Pudiera ser que él quisiera lo mejor para ellas y no supiera gestionar la situación tanto a nivel material (económico) como a nivel moral/psicológico y finalmente se le fué de las manos.
Aunque lo veo abominable no me atrevo a juzgar a nadie,espero que Dios lo haga y que descansen todos en paz.
Muy lastimoso todo !!
Esta enfermedad silenciosa hace ver las cosas distorsionadas,la realidad si hay problemas se ve muy negra y cuesta ver soluciones y salidas.
Pudiera ser que él quisiera lo mejor para ellas y no supiera gestionar la situación tanto a nivel material (económico) como a nivel moral/psicológico y finalmente se le fué de las manos.
Aunque lo veo abominable no me atrevo a juzgar a nadie,espero que Dios lo haga y que descansen todos en paz.
Muy lastimoso todo !!
Hace unos años una amiga vivió un caso con unos vecinos de su escalera.
Era una familia con un hijo con importante discapacidad y dependencia.La madre enfermó de cáncer y tuvo una muerte bastante rápida.
El padre anunció que cuando muriera su mujer él se veía incapaz de seguir viviendo y no quería dejar a su hijo desamparado así que mataría primero al hijo y después se suicidaria.Lamentablemente lo cumplió en el cementerio donde estaba enterrada su mujer,primero disparó a su hijo y luego se disparó a si mismo.
Esa misma mañana paseó a su hijo en silla de ruedas como cada día y se fué despidiendo de conocidos diciendo que se iban de vacaciones al extranjero.
Fué un caso muy triste y muy sentido por todo el barrio donde vivían.
Era una familia con un hijo con importante discapacidad y dependencia.La madre enfermó de cáncer y tuvo una muerte bastante rápida.
El padre anunció que cuando muriera su mujer él se veía incapaz de seguir viviendo y no quería dejar a su hijo desamparado así que mataría primero al hijo y después se suicidaria.Lamentablemente lo cumplió en el cementerio donde estaba enterrada su mujer,primero disparó a su hijo y luego se disparó a si mismo.
Esa misma mañana paseó a su hijo en silla de ruedas como cada día y se fué despidiendo de conocidos diciendo que se iban de vacaciones al extranjero.
Fué un caso muy triste y muy sentido por todo el barrio donde vivían.
A si, una madre joven de clase acomodada dr Girona, paso antes de Navidad, fue algo horrible,eran tres ninyas pequenyas, el ninyo se salvo porque estaba fuera, decian que si la depre post parto...
Pues estas muertes de Comunidad canarias, seran por depresion o algo asi, brutal totalmente
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Si ahora cuando interrogen a la familia y las personas más cercanas a ellos no hay malos tratos pero problemas económicos si...Pues Igual el hombre esos problemas le causaron una depresión y eso le produce el no ver salida y la que encuentra es morir el y a matar a las personas que más quiere...és una enfermedad mental que el ha desarrollado por un motivo económico ...como la persona que se suicida ...
“Instrucciones y reproches” en la nota hallada junto a la familia muerta en Tenerife
Los investigadores de la Guardia Civil mantienen abiertas todas las hipótesis pero sospechan que pudiera existir "un pacto en el matrimonio"
MIGUEL GONZÁLEZ
Madrid 17 JUL 2018 - 21:18 CEST
La nota hallada junto a la familia muerta en Santa Cruz de Tenerife —un matrimonio, sus dos hijas de tres y cinco años, y el perrito que tenían de mascota—, y escrita por el padre, contiene instrucciones precisas de qué hacer con los cuerpos de los fallecidos y un reguero de reproches a la familia de ella: “Por no ayudarles”, según fuentes próximas a la investigación. Todas las hipótesis siguen abiertas a falta de los resultados de las autopsias, pero para los investigadores, cobra fuerza la idea de “que el matrimonio lo hubiera pactado todo”. La Delegación del Gobierno para la Violencia de Género investiga el caso.
Cuando los agentes de la Guardia Civil entraron en la casa, un piso en el número 30 de la calle Cruz de los Martillos en La Orotava (Santa Cruz de Tenerife), encontraron en una habitación a un hombre colgado de una cuerda, “que formaba parte de un artilugio preparado al efecto y que parecía haber sido colocado de manera premeditada por él o por alguien que le hubiera ayudado”. En otra estancia, la matrimonial, estaba la mujer muerta con dos niñas de tres y cinco años, sus hijas, también muertas y tumbadas en la cama. “Ella en el centro y las pequeñas una a cada lado, perfectamente colocadas, sin signo alguno de violencia, como dormidas, cada una con su peluche y todas bien vestidas de calle”, cuentan fuentes próximas a la investigación.
En esa misma cama, a los pies, estaba también colocado y muerto, un perrito “de unos tres kilos”, la mascota de la joven familia. Los investigadores calculan que podían llevar muertos solo unas horas y esperan los resultados de la autopsia para poder desentrañar los hechos, que han conmocionado al vecindario y al pueblo entero. El ayuntamiento ha decretado tres días de luto
Junto a los cuerpos fue encontrada una nota escrita por el padre y que “contiene instrucciones precisas de qué hacer con los cuerpos y múltiples reproches a la familia de ella”, con la que parece ser que existían desavenencias. “Aluden a que no les ayudaban”, cuentan fuentes próximas a la investigación, que manifiestan su extrañeza porque no se percibe en esas letras “ni un ápice de rencor, ni justificación alguna sobre las muertes”.
Fue precisamente la madre de la mujer, quien fue a la comandancia a denunciar que su hija y sus nietas no respondían a sus llamadas, el lunes por la mañana. Horas antes habían estado todos juntos de celebración familiar. Los agentes, tras comprobar que el padre de la familia no había acudido a su trabajo, pidieron permiso al juzgado y accedieron a la vivienda por una ventana.
Él era Israel Rodríguez Miranda, un militar de 45 años, natural de Zamora, brigada del Ejército de Tierra, condecorado en 2009 por el Ministerio de Defensa con la Gran Cruz del Mérito Militar con distintivo rojo por su participación en acciones de combate contra los talibanes en Afganistán. Fuentes militares aseguran que era muy valorado por sus compañeros y que no hay constancia de que sufrieran trastornos psicológicos. Actualmente estaba en activo y trabajaba como técnico de mantenimiento en el Batallón de Helicópteros de Los Rodeos (Santa Cruz de Tenerife). Ella, Teresa, era una mujer canaria de 33 años. Las pequeñas, las hijas del matrimonio. Y los cuerpos de todos ellos se encuentran desde el lunes en el Instituto de Medicina Legal de Tenerife, donde se les está realizando “un minucioso estudio”, ante una de las posibilidades que baraja la Guardia Civil: “Que fuesen envenenadas”.
Ni en la casa ni en los contenedores de basura de la zona se ha encontrado resto alguno de veneno conocido, aseguran fuentes próximas a la investigación.
Todas las hipótesis
Todas las hipótesis sobre el móvil siguen abiertas: “Que él las envenenara y luego las asfixiara sin necesidad de ejercer violencia y después se suicidara”. “Que se ahorcase con ayuda y después la madre acabara con la vida de las hijas y se suicidara”. “Que la mujer se lo encontrara muerto y acabase con la vida de sus hijas, la del perro y la suya propia”. “Que fuese él quien las encontrase muertas y después se ahorcara, aunque ese artilugio tan bien montado en el techo apunta a cierta premeditación”, enumeran fuentes próximas a la investigación.
Los resultados de las autopsias, que previsiblemente se conocerán este miércoles por la mañana, arrojarán luz sobre tan dramático y extraño suceso. “Van a tener que afinar mucho los forenses en las horas de las muertes para poder aclarar lo ocurrido”, señalan las mimas fuentes, que tienden a pensar en “un pacto entre el matrimonio”.
Los investigadores de la Guardia Civil mantienen abiertas todas las hipótesis pero sospechan que pudiera existir "un pacto en el matrimonio"
MIGUEL GONZÁLEZ
Madrid 17 JUL 2018 - 21:18 CEST
La nota hallada junto a la familia muerta en Santa Cruz de Tenerife —un matrimonio, sus dos hijas de tres y cinco años, y el perrito que tenían de mascota—, y escrita por el padre, contiene instrucciones precisas de qué hacer con los cuerpos de los fallecidos y un reguero de reproches a la familia de ella: “Por no ayudarles”, según fuentes próximas a la investigación. Todas las hipótesis siguen abiertas a falta de los resultados de las autopsias, pero para los investigadores, cobra fuerza la idea de “que el matrimonio lo hubiera pactado todo”. La Delegación del Gobierno para la Violencia de Género investiga el caso.
Cuando los agentes de la Guardia Civil entraron en la casa, un piso en el número 30 de la calle Cruz de los Martillos en La Orotava (Santa Cruz de Tenerife), encontraron en una habitación a un hombre colgado de una cuerda, “que formaba parte de un artilugio preparado al efecto y que parecía haber sido colocado de manera premeditada por él o por alguien que le hubiera ayudado”. En otra estancia, la matrimonial, estaba la mujer muerta con dos niñas de tres y cinco años, sus hijas, también muertas y tumbadas en la cama. “Ella en el centro y las pequeñas una a cada lado, perfectamente colocadas, sin signo alguno de violencia, como dormidas, cada una con su peluche y todas bien vestidas de calle”, cuentan fuentes próximas a la investigación.
En esa misma cama, a los pies, estaba también colocado y muerto, un perrito “de unos tres kilos”, la mascota de la joven familia. Los investigadores calculan que podían llevar muertos solo unas horas y esperan los resultados de la autopsia para poder desentrañar los hechos, que han conmocionado al vecindario y al pueblo entero. El ayuntamiento ha decretado tres días de luto
Junto a los cuerpos fue encontrada una nota escrita por el padre y que “contiene instrucciones precisas de qué hacer con los cuerpos y múltiples reproches a la familia de ella”, con la que parece ser que existían desavenencias. “Aluden a que no les ayudaban”, cuentan fuentes próximas a la investigación, que manifiestan su extrañeza porque no se percibe en esas letras “ni un ápice de rencor, ni justificación alguna sobre las muertes”.
Fue precisamente la madre de la mujer, quien fue a la comandancia a denunciar que su hija y sus nietas no respondían a sus llamadas, el lunes por la mañana. Horas antes habían estado todos juntos de celebración familiar. Los agentes, tras comprobar que el padre de la familia no había acudido a su trabajo, pidieron permiso al juzgado y accedieron a la vivienda por una ventana.
Él era Israel Rodríguez Miranda, un militar de 45 años, natural de Zamora, brigada del Ejército de Tierra, condecorado en 2009 por el Ministerio de Defensa con la Gran Cruz del Mérito Militar con distintivo rojo por su participación en acciones de combate contra los talibanes en Afganistán. Fuentes militares aseguran que era muy valorado por sus compañeros y que no hay constancia de que sufrieran trastornos psicológicos. Actualmente estaba en activo y trabajaba como técnico de mantenimiento en el Batallón de Helicópteros de Los Rodeos (Santa Cruz de Tenerife). Ella, Teresa, era una mujer canaria de 33 años. Las pequeñas, las hijas del matrimonio. Y los cuerpos de todos ellos se encuentran desde el lunes en el Instituto de Medicina Legal de Tenerife, donde se les está realizando “un minucioso estudio”, ante una de las posibilidades que baraja la Guardia Civil: “Que fuesen envenenadas”.
Ni en la casa ni en los contenedores de basura de la zona se ha encontrado resto alguno de veneno conocido, aseguran fuentes próximas a la investigación.
Todas las hipótesis
Todas las hipótesis sobre el móvil siguen abiertas: “Que él las envenenara y luego las asfixiara sin necesidad de ejercer violencia y después se suicidara”. “Que se ahorcase con ayuda y después la madre acabara con la vida de las hijas y se suicidara”. “Que la mujer se lo encontrara muerto y acabase con la vida de sus hijas, la del perro y la suya propia”. “Que fuese él quien las encontrase muertas y después se ahorcara, aunque ese artilugio tan bien montado en el techo apunta a cierta premeditación”, enumeran fuentes próximas a la investigación.
Los resultados de las autopsias, que previsiblemente se conocerán este miércoles por la mañana, arrojarán luz sobre tan dramático y extraño suceso. “Van a tener que afinar mucho los forenses en las horas de las muertes para poder aclarar lo ocurrido”, señalan las mimas fuentes, que tienden a pensar en “un pacto entre el matrimonio”.
Última edición por un moderador:
He visto un vídeo de Telecinco que dice que el padre tenía las manos atadas. Lo publica alguien en Facebook y no me parece bien enlazarlo. Yo no lo he visto. Es todo rarisimo, ademas de atroz.
Pobres niñas.
Tambien dicen que habia otro menor, hijo de la madre de otra relación anterior, pero no sé si es verdad. Si fuera así, aun más terrible para ese niño. Condolencias.
Pobres niñas.
Tambien dicen que habia otro menor, hijo de la madre de otra relación anterior, pero no sé si es verdad. Si fuera así, aun más terrible para ese niño. Condolencias.
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Esa placidez de la esposa y las hijas tiene pinta de asfixia por monoxido de carbono.
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Que fuerte todo“Instrucciones y reproches” en la nota hallada junto a la familia muerta en Tenerife
Los investigadores de la Guardia Civil mantienen abiertas todas las hipótesis pero sospechan que pudiera existir "un pacto en el matrimonio"
MIGUEL GONZÁLEZ
Madrid 17 JUL 2018 - 21:18 CEST
La nota hallada junto a la familia muerta en Santa Cruz de Tenerife —un matrimonio, sus dos hijas de tres y cinco años, y el perrito que tenían de mascota—, y escrita por el padre, contiene instrucciones precisas de qué hacer con los cuerpos de los fallecidos y un reguero de reproches a la familia de ella: “Por no ayudarles”, según fuentes próximas a la investigación. Todas las hipótesis siguen abiertas a falta de los resultados de las autopsias, pero para los investigadores, cobra fuerza la idea de “que el matrimonio lo hubiera pactado todo”. La Delegación del Gobierno para la Violencia de Género investiga el caso.
Cuando los agentes de la Guardia Civil entraron en la casa, un piso en el número 30 de la calle Cruz de los Martillos en La Orotava (Santa Cruz de Tenerife), encontraron en una habitación a un hombre colgado de una cuerda, “que formaba parte de un artilugio preparado al efecto y que parecía haber sido colocado de manera premeditada por él o por alguien que le hubiera ayudado”. En otra estancia, la matrimonial, estaba la mujer muerta con dos niñas de tres y cinco años, sus hijas, también muertas y tumbadas en la cama. “Ella en el centro y las pequeñas una a cada lado, perfectamente colocadas, sin signo alguno de violencia, como dormidas, cada una con su peluche y todas bien vestidas de calle”, cuentan fuentes próximas a la investigación.
La nota hallada con los cadáveres de la familia de La Orotava era del padre
En esa misma cama, a los pies, estaba también colocado y muerto, un perrito “de unos tres kilos”, la mascota de la joven familia. Los investigadores calculan que podían llevar muertos solo unas horas y esperan los resultados de la autopsia para poder desentrañar los hechos, que han conmocionado al vecindario y al pueblo entero. El ayuntamiento ha decretado tres días de luto
Junto a los cuerpos fue encontrada una nota escrita por el padre y que “contiene instrucciones precisas de qué hacer con los cuerpos y múltiples reproches a la familia de ella”, con la que parece ser que existían desavenencias. “Aluden a que no les ayudaban”, cuentan fuentes próximas a la investigación, que manifiestan su extrañeza porque no se percibe en esas letras “ni un ápice de rencor, ni justificación alguna sobre las muertes”.
Fue precisamente la madre de la mujer, quien fue a la comandancia a denunciar que su hija y sus nietas no respondían a sus llamadas, el lunes por la mañana. Horas antes habían estado todos juntos de celebración familiar. Los agentes, tras comprobar que el padre de la familia no había acudido a su trabajo, pidieron permiso al juzgado y accedieron a la vivienda por una ventana.
Él era Israel Rodríguez Miranda, un militar de 45 años, natural de Zamora, brigada del Ejército de Tierra, condecorado en 2009 por el Ministerio de Defensa con la Gran Cruz del Mérito Militar con distintivo rojo por su participación en acciones de combate contra los talibanes en Afganistán. Fuentes militares aseguran que era muy valorado por sus compañeros y que no hay constancia de que sufrieran trastornos psicológicos. Actualmente estaba en activo y trabajaba como técnico de mantenimiento en el Batallón de Helicópteros de Los Rodeos (Santa Cruz de Tenerife). Ella, Teresa, era una mujer canaria de 33 años. Las pequeñas, las hijas del matrimonio. Y los cuerpos de todos ellos se encuentran desde el lunes en el Instituto de Medicina Legal de Tenerife, donde se les está realizando “un minucioso estudio”, ante una de las posibilidades que baraja la Guardia Civil: “Que fuesen envenenadas”.
Ni en la casa ni en los contenedores de basura de la zona se ha encontrado resto alguno de veneno conocido, aseguran fuentes próximas a la investigación.
Todas las hipótesis
Todas las hipótesis sobre el móvil siguen abiertas: “Que él las envenenara y luego las asfixiara sin necesidad de ejercer violencia y después se suicidara”. “Que se ahorcase con ayuda y después la madre acabara con la vida de las hijas y se suicidara”. “Que la mujer se lo encontrara muerto y acabase con la vida de sus hijas, la del perro y la suya propia”. “Que fuese él quien las encontrase muertas y después se ahorcara, aunque ese artilugio tan bien montado en el techo apunta a cierta premeditación”, enumeran fuentes próximas a la investigación.
Los resultados de las autopsias, que previsiblemente se conocerán este miércoles por la mañana, arrojarán luz sobre tan dramático y extraño suceso. “Van a tener que afinar mucho los forenses en las horas de las muertes para poder aclarar lo ocurrido”, señalan las mimas fuentes, que tienden a pensar en “un pacto entre el matrimonio”.
La Guardia Civil investiga la muerte de cuatro miembros de una familia en Tenerife
La Guardia Civil investiga la muerte de cuatro miembros de una familia en Tenerife
