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En el sitio donde vivo de vez en cuando hacen una paella enorme para todo el que quiera ir, solo diré que las abuelas se dan de hostias entre ellas, eso es un espectaculo de yayas reumáticas que se pelean encarnizadamente con prótesis y todo por ver quién estaba antes en la cola, a una señora una vez le arrancaron la dentadura, una vieja le metió la mano en la bocota y se la arranco como trofeo personal del arrastramiento de yayas anual, a algunas les tiene que llamar la atención el staff porque repiten tantas veces que hasta vomitan pero les da igual, siguen tragando como verdaderas alimañas poseidas, al día siguiente todo el ambulatorio oliendo a vejestorio chocho, todas ahí metidas porque se enferman tanto que no se pueden ni mover las avariciosas glotonas. Yo las llamo las chicas del oro, son mis ídolas, de mayor quiero ser como ellas, tener esa poca verguenza y que me importe todo un pimiento.
Jajajajaja:
Muelle uno: una especie de centro comercial al aire libre en el muelle de Málaga. Hay tiendas, restaurantes y bares, y uno de ellos es de Haagen dasz, la marca de helados. Te sirven tanto helados como brownies, crepes, batidos, batidos de fruta y alguna copa creo que también.
Yo me quedé loca esta cuarentena en el supermercado, la gente arrasaba literal. Incluso vi imágenes en los telediarios de "peleas".
La Nutella por Dios, la Nutella, solo conseguí pillar dos botes de 750gr en toda la cuarentena, menos mal que ya me desenganché, pero le dí muy fuerte.Yo flipaba cada vez que iba al super porque la gente se llevaba de todo, en especial en la sección de chocolate. El chocolate con almendras volaba, y la levadura y la harina.
Yo flipaba cada vez que iba al super porque la gente se llevaba de todo, en especial en la sección de chocolate. El chocolate con almendras volaba, y la levadura y la harina.
La Nutella por Dios, la Nutella, solo conseguí pillar dos botes de 750gr en toda la cuarentena, menos mal que ya me desenganché, pero le dí muy fuerte.
La gente de verdad que es una borrega, al principio de la cuarentena saquearon como buitres y les dió igual si los demás nos quedábamos sin nada, malditos covidiotas... se mueven por impulsos.Yo me aficioné a las palomitas. Pero no a las de microondas, sino a los granos de maíz que se hacen en una olla o sartén . Había veces que no había. De las de microondas todas las que quisieras, pero los granos de maíz, no ?
La gente de verdad que es una borrega, al principio de la cuarentena saquearon como buitres y les dió igual si los demás nos quedábamos sin nada, malditos covidiotas... se mueven por impulsos.
Yo flipaba cada vez que iba al super porque la gente se llevaba de todo, en especial en la sección de chocolate. El chocolate con almendras volaba, y la levadura y la harina.
Hace unos años fui monitora de campamento. Nosotros nos encargábamos entre muchas otras cosas de servirle las comidas a los niños.
Sus caritas de pena al ver los platos... me daba mucha pena. Judías, guisos poco apetecibles, pasta fría y sin sabor... etc. Se alimentaban básicamente de pan, el aceite de oliva era un lujo.
Yo era novata así que no podía decir ni quejarme mucho pero todas las noches al acabar de hacer la ronda de vigilancia sobre las 3 am, los monitores nos reuníamos en una sala a zampar un montón de comida: chocolates, galletas, papas, cereales, cola cao (en el desayuno no ponían), bollos...etc nos poníamos finos.
Solo recordarlo me siento mal
Como anécdota graciosa, en la tercera noche me picó un bicho al lado del ojo derecho y al despertarme a penas podía abrirlo, cuando pude verme en un espejo tenía casi media cara hinchada y deforme, horroroso. Pensé que no sería gran cosa y al rato fui a reunirme con los peques para decirle los buenos días, cuanto más me acercaba veía sus caras de terror, más de uno gritó y salió corriendo. Hasta que no se me bajó la reacción alérgica no se me acercaban mucho