AMISTADES DE DISTINTA IDEOLOGÍA POLÍTICA

Depende lo que se diga. Una cosa es tener una ideologia contraria a la tuya en temas económicos, religiosos etc y otra cosa es que esa persona sea homófoba, racista, odiadora y perlas del estilo. TOLERANCIA CERO A TODO ESO POR MI PARTE. Puedes tener trato por lo que sea (trabajo etc) pero no ser amiga.
Completamente de acuerdo. No todas las opiniones son admisibles en democracia, lo siento. Si me vas a venir a decir que me vas a quitar derechos fundamentales logrados con la sangre de mis antepasados y me vas a devolver a las cavernas o que los negros no valen lo mismo que los blancos... No te voy a respetar y no voy a querer relacionarme contigo. No se puede ser tolerante con la intolerancia.
 
Yo estoy en el centro derecha aunque mi corazón tira más para la izquierda. El problema es que los partidos de izquierda de este país o realmente en la práctica no lo son o tiran para un extremo que no me gusta nada. Las dictaduras Comunistas me dan más miedo que la de Franco, y lo digo con total sinceridad. Otra cosa que no me gusta es que si amas tu país y su historia ya eres facha. Me dan envidia los patriotas de otros países, ya sean monarquias o repúblicas.
Claro, es que nuestro país tiene una idiosincrasia muy particular. En cuanto a patriotismo, me refiero. Yo soy española y a mí no me representa esa bandera ni esos sentimientos de los que se ha adueñado la derecha más rancia de este país.
Y por otra parte, no voy a entrar a debatir sobre Franco, pero miedo da, y mucho. Y asco también. Este es el único país de Europa donde no se condena una dictadura fascista porque oye, cada uno puede pensar lo que quiera. Hay hechos objetivos. No es cuestión de ideologías.
 
De acuerdo en todo, excepto en que aqui haya ningún partido que quiera una dictadura comunista. Lo que no hay son buenos políticos de izquierdas ( ni derechas) para explicar su programa. Tampoco ayuda que los contrarios inventen bulos sobre medidas o ideas sacadas de contexto para que lo parezca.
Lo del Coronavirus está siendo repugnante. Al dolor de la pandemia en si, hay que sumar lo rastrero de la clase política, que en lugar de unirse, se ponen verdes entre si con la única intención de sembrar odio, sin dar soluciones ni aportar nada.
Envidio a nuestros vecinos portugueses, con un gobierno parecido al nuestro ( coalición de izquierdas, incluidos comunistas) y una oposición que está para criticar lo que hacen mal (como es lógico y para eso está la oposición), pero que ante horrores como éste no dudan en unirse, aportar ideas y luchar juntos para avanzar. Así estaban saliendo de la horrible crisis que arrastramos y así saldrán de todo esto.
Sobre lo de ser patriota: lo que nos da rabia a la izquierda es que la derechona rancia y retrógrada ( no hablo de la gente de derechas normal, sino los exaltados) se haya apropiado de la bandera y otros símbolos como si fueran solo suyos. Me dirás si no es más "patriota" la gente que está luchando con uñas y dientes para ayudar en la pandemia ( sean médicos, camioneros etc o ciudadanos que se quedan en sus casas para ayudar a no "esparcir virus") con la boca bien cerrada sin tener que lucir ninguna bandera porque están a lo que están, que alguien a quien por seguridad y solidaridad con TODOS le piden unas normas para salir a la calle y no solo las incumple, sino que alardea de ello y pone fotos en plan "yo no soy un borrego". Eso si, la bandera que no falte.

Portugal y muchos otros paises, pero en España parece que eres menos si apoyas a la oposición y si piensas en los españoles antes que en tu ombligo.
Coincido contigo en que el nivel de los politicos es muy muy bajo, de todos los partidos, y es ahí donde empiezan los problemas.

Sobre lo que es ser patriota me quedo con la frase de "un modelo de sociedad en la que cabemos todos".
 
De acuerdo en todo, excepto en que aqui haya ningún partido que quiera una dictadura comunista. Lo que no hay son buenos políticos de izquierdas ( ni derechas) para explicar su programa. Tampoco ayuda que los contrarios inventen bulos sobre medidas o ideas sacadas de contexto para que lo parezca.
Lo del Coronavirus está siendo repugnante. Al dolor de la pandemia en si, hay que sumar lo rastrero de la clase política, que en lugar de unirse, se ponen verdes entre si con la única intención de sembrar odio, sin dar soluciones ni aportar nada.
Envidio a nuestros vecinos portugueses, con un gobierno parecido al nuestro ( coalición de izquierdas, incluidos comunistas) y una oposición que está para criticar lo que hacen mal (como es lógico y para eso está la oposición), pero que ante horrores como éste no dudan en unirse, aportar ideas y luchar juntos para avanzar. Así estaban saliendo de la horrible crisis que arrastramos y así saldrán de todo esto.
Sobre lo de ser patriota: lo que nos da rabia a la izquierda es que la derechona rancia y retrógrada ( no hablo de la gente de derechas normal, sino los exaltados) se haya apropiado de la bandera y otros símbolos como si fueran solo suyos. Me dirás si no es más "patriota" la gente que está luchando con uñas y dientes para ayudar en la pandemia ( sean médicos, camioneros etc o ciudadanos que se quedan en sus casas para ayudar a no "esparcir virus") con la boca bien cerrada sin tener que lucir ninguna bandera porque están a lo que están, que alguien a quien por seguridad y solidaridad con TODOS le piden unas normas para salir a la calle y no solo las incumple, sino que alardea de ello y pone fotos en plan "yo no soy un borrego". Eso si, la bandera que no falte.
Es que Portugal es MUY GRANDE.
 
Completamente de acuerdo. No todas las opiniones son admisibles en democracia, lo siento. Si me vas a venir a decir que me vas a quitar derechos fundamentales logrados con la sangre de mis antepasados y me vas a devolver a las cavernas o que los negros no valen lo mismo que los blancos... No te voy a respetar y no voy a querer relacionarme contigo. No se puede ser tolerante con la intolerancia.

A mi me cuesta entender como ni siquiera pueden debatirse determinadas cosas en la actualidad. Os lo digo de verdad y tonta no me considero precisamente, pero es que hay debates que me asombran y me duelen.
 
Me ha encantado el desarrollo que lleva este tema, porque he leído aportaciones en general muy pero muy reflexivas e interesantes. Os pondría un gigantesco "chapeau!" a todos y todas.

Yo soy de la opinión de que los lazos de afecto (la familia, los amigos, "mi gente" que diría Malú) están por encima, muy por encima, de las diferencias políticas, pero siempre que éstas diferencias se expresen con un respeto necesario entre todos. Una cosa es tener un debate apasionado, vehemente, pelín acalorado, y otra cosa es que el debate se vaya de las manos. El tema es cuando alguna gente pierde las formas por completo y se empeña en quedar por encima como el aceite, ahí ya se pueden torcer muchas cenas de Nochebuena/Nochevieja y enfriarse muchas amistades.

El valor de la tolerancia es importantísimo, con sólo una frontera: el respeto a los derechos humanos básicos. Yo sería incapaz de aguantarle a nadie un discurso justificando el gaseo de seis millones de personas, o el holodomor stalinista que diezmó a los ucranianos. Sería incapaz de aguantar justificaciones para el genocidio de los jemeres rojos o para la aberrante política del filipino Duterte. Hay cosas que no, me removerían por dentro demasiado asco. Pero si hablamos de diferencias entre izquierda/derecha, claro que se admite la discrepancia. Y es más...está la capacidad de ser crítico con todo, pero especialmente "con los de mi cuerda", y la capacidad para aprender también de los otros, del contrario, que a veces pasa. Nadie tiene la exclusiva de las buenas ideas, menos aún de la buena gente. Gente válida y capaz la hay en todos los partidos, y gente que no nos gusta o nos repele también la tenemos en todos los partidos.

Me definiría como socialdemocráta en un estilo clásico. Pero puedo admirar políticos de todos los pelajes, la verdad. Ana Pastor me parece de una excepcional talla política, una mujer con magnífica cabeza bien puesta encima de los hombros. En su mismo partido, Rafael Hernando me parece un bulldog innecesario que sólo genera hostilidad y rechazo. No me gusta el tono un tanto agresivo de Irene Montero y no trago a Pablo Echenique, en cambio me está sorprendiendo para bien Yolanda Díaz porque veo que trata de tener en cuenta todas las casuísticas de la realidad laboral española, tela marinera. Me gusta más Margarita Robles, Nadia Calviño o Salvador Illa de lo que nunca me gustará Alberto Garzón, y prefiero a Martínez Almeida diez millones de veces antes que a Cayetana Álvarez de Toledo. Y podría seguir horas poniendo ejemplos de distintos partidos. No trago a Ábalos, bien que lo siento, ni a Óscar Puente alcalde de Valladolid. O sea, que tengo para todos y para todas, jejejeje.

Creo que se puede tener relaciones cordiales con toda la gente, excepto con los hooligans de estos o de los otros que van siempre como los burros, mirando al frente y soltando el rebuzno a la mínima. Los hooligans son muy perniciosos. Además, es que no lo entiendo, porque si no comes ni vas a comer nunca de la política, carece de sentido ese nivel de "identificación absoluta".
 
Me ha encantado el desarrollo que lleva este tema, porque he leído aportaciones en general muy pero muy reflexivas e interesantes. Os pondría un gigantesco "chapeau!" a todos y todas.

Yo soy de la opinión de que los lazos de afecto (la familia, los amigos, "mi gente" que diría Malú) están por encima, muy por encima, de las diferencias políticas, pero siempre que éstas diferencias se expresen con un respeto necesario entre todos. Una cosa es tener un debate apasionado, vehemente, pelín acalorado, y otra cosa es que el debate se vaya de las manos. El tema es cuando alguna gente pierde las formas por completo y se empeña en quedar por encima como el aceite, ahí ya se pueden torcer muchas cenas de Nochebuena/Nochevieja y enfriarse muchas amistades.

El valor de la tolerancia es importantísimo, con sólo una frontera: el respeto a los derechos humanos básicos. Yo sería incapaz de aguantarle a nadie un discurso justificando el gaseo de seis millones de personas, o el holodomor stalinista que diezmó a los ucranianos. Sería incapaz de aguantar justificaciones para el genocidio de los jemeres rojos o para la aberrante política del filipino Duterte. Hay cosas que no, me removerían por dentro demasiado asco. Pero si hablamos de diferencias entre izquierda/derecha, claro que se admite la discrepancia. Y es más...está la capacidad de ser crítico con todo, pero especialmente "con los de mi cuerda", y la capacidad para aprender también de los otros, del contrario, que a veces pasa. Nadie tiene la exclusiva de las buenas ideas, menos aún de la buena gente. Gente válida y capaz la hay en todos los partidos, y gente que no nos gusta o nos repele también la tenemos en todos los partidos.

Me definiría como socialdemocráta en un estilo clásico. Pero puedo admirar políticos de todos los pelajes, la verdad. Ana Pastor me parece de una excepcional talla política, una mujer con magnífica cabeza bien puesta encima de los hombros. En su mismo partido, Rafael Hernando me parece un bulldog innecesario que sólo genera hostilidad y rechazo. No me gusta el tono un tanto agresivo de Irene Montero y no trago a Pablo Echenique, en cambio me está sorprendiendo para bien Yolanda Díaz porque veo que trata de tener en cuenta todas las casuísticas de la realidad laboral española, tela marinera. Me gusta más Margarita Robles, Nadia Calviño o Salvador Illa de lo que nunca me gustará Alberto Garzón, y prefiero a Martínez Almeida diez millones de veces antes que a Cayetana Álvarez de Toledo. Y podría seguir horas poniendo ejemplos de distintos partidos. No trago a Ábalos, bien que lo siento, ni a Óscar Puente alcalde de Valladolid. O sea, que tengo para todos y para todas, jejejeje.

Creo que se puede tener relaciones cordiales con toda la gente, excepto con los hooligans de estos o de los otros que van siempre como los burros, mirando al frente y soltando el rebuzno a la mínima. Los hooligans son muy perniciosos. Además, es que no lo entiendo, porque si no comes ni vas a comer nunca de la política, carece de sentido ese nivel de "identificación absoluta".

Necesito un botón/reacción de "TE APLAUDO HASTA CON LAS OREJAS", por favor.
 
Portugal y muchos otros paises, pero en España parece que eres menos si apoyas a la oposición y si piensas en los españoles antes que en tu ombligo.
Coincido contigo en que el nivel de los politicos es muy muy bajo, de todos los partidos, y es ahí donde empiezan los problemas.

Sobre lo que es ser patriota me quedo con la frase de "un modelo de sociedad en la que cabemos todos".

Los problemas de muchos países como España radica en que cuando sales o vives en una Dictadura la sociedad ya nace, crece y se desarrolla polarizada, las Dictaduras existen porque hay gente muchas veces mayoría que las apoya, partiendo de esa base YA NO CABEN TODOS!!
Muchas heridas abiertas o cerradas en falso y esto es lo que se ve tanto en España, Chile, Cuba etc....La diferencia ?, los personajes megalómanos que las promueven su culto a la personalidad y la ideología con la que someten a la gente.
Recuerdo una chica que no me creía cuando le decía que Singapur es una Dictadura, me decía que eso es imposible y le digo si yo vivo en Singapur intermitentemente y te digo que lo es, por poco le explota la cabeza. Pero claro la gente solo ve que es un sitio "guay" con muchos millonarios, con muchos chiringuitos financieros y muy multicultural y creen que es más Dictadura Venezuela que Singapur. Hay más oposición y voces discordantes en Venezuela y en Singapur NO HAY ninguna, bueno es que está prohibido, literalmente, es decir alli hay una dinastia (si como en Corea del Norte) y ahora gobierna el hijo del anterior..sin contar algunas de sus asombrosas leyes (es un capítulo aparte)
Pero como los medios ni te hablan de esto tu asumes literamente que Singapur es un paraíso por su piscina instagrameable y que Venezuela es el infierno (más allá de temas culturales, etc etc. Por cierto aviso que NO estoy defendiendo ninguna dictadura solo estoy poniendo ejemplos para que vean las cosas que desconocemos y que por CULPA de los bombardeos diarios de los medios de comunicación asumimos como reales sin cuestionarnos que hay detrás.

Hay un documental o trabajo de investigación del periodista Jalis de la Serna (no es un periodista de izquierda precisamente) que hizo en Singapur, yo no salí en pantalla pero tengo conocidos que sí, os animos a verlo si lo encuentro os paso link, está muy interesante.
 
pues imaginaos en Cataluña con nacionalista o no, yo durante los días del referéndum creía que nos mataríamos, pensaba que familiares o amigos dejaban de serlo para siempre, depende a quién le decías que no ibas a votar, se montaba un drama, ni punto de comparación con ahora, en el trabajo no hablaban de otra cosa, los no referendum callados y mordiéndonos la lengua para no liarla, bueno se fue pasando y ya está, pero fue horrible de verdad.

Algo parecido iba a decir...

con tema referido a izquierda o derecha nunca he tenido ningun roce.

En mi caso me veo que, siendo igual o mas catalana que ellos, pero viviendo fuera, no estando sometida al lavado de cerebro, a veces hago comentarios que los indepes se toman fatal...
y no hay manera de hablar tranquilamente. Todo es un ataque.

Que yo soy la primera que reacciona mal a ataques a mi lengua y cultura. Somos una minoria, y debemos conservar nuestra cultura. Pero esa fe infinita en los politicos-trileros es inexplicable.

No me ha costado ninguna amistad. Pero mi madre, por ejemplo, lo lleva fatal. No quiere ver mas alla de Puigdemont y Torra. Se ofende personalmente y me considera una traidora a mi patria. Yo diria que traidor es cualquier voto a corruptos y embusteros...pero no. Traidor es no tragar ;)
 
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Me ha encantado el desarrollo que lleva este tema, porque he leído aportaciones en general muy pero muy reflexivas e interesantes. Os pondría un gigantesco "chapeau!" a todos y todas.

Yo soy de la opinión de que los lazos de afecto (la familia, los amigos, "mi gente" que diría Malú) están por encima, muy por encima, de las diferencias políticas, pero siempre que éstas diferencias se expresen con un respeto necesario entre todos. Una cosa es tener un debate apasionado, vehemente, pelín acalorado, y otra cosa es que el debate se vaya de las manos. El tema es cuando alguna gente pierde las formas por completo y se empeña en quedar por encima como el aceite, ahí ya se pueden torcer muchas cenas de Nochebuena/Nochevieja y enfriarse muchas amistades.

El valor de la tolerancia es importantísimo, con sólo una frontera: el respeto a los derechos humanos básicos. Yo sería incapaz de aguantarle a nadie un discurso justificando el gaseo de seis millones de personas, o el holodomor stalinista que diezmó a los ucranianos. Sería incapaz de aguantar justificaciones para el genocidio de los jemeres rojos o para la aberrante política del filipino Duterte. Hay cosas que no, me removerían por dentro demasiado asco. Pero si hablamos de diferencias entre izquierda/derecha, claro que se admite la discrepancia. Y es más...está la capacidad de ser crítico con todo, pero especialmente "con los de mi cuerda", y la capacidad para aprender también de los otros, del contrario, que a veces pasa. Nadie tiene la exclusiva de las buenas ideas, menos aún de la buena gente. Gente válida y capaz la hay en todos los partidos, y gente que no nos gusta o nos repele también la tenemos en todos los partidos.

Me definiría como socialdemocráta en un estilo clásico. Pero puedo admirar políticos de todos los pelajes, la verdad. Ana Pastor me parece de una excepcional talla política, una mujer con magnífica cabeza bien puesta encima de los hombros. En su mismo partido, Rafael Hernando me parece un bulldog innecesario que sólo genera hostilidad y rechazo. No me gusta el tono un tanto agresivo de Irene Montero y no trago a Pablo Echenique, en cambio me está sorprendiendo para bien Yolanda Díaz porque veo que trata de tener en cuenta todas las casuísticas de la realidad laboral española, tela marinera. Me gusta más Margarita Robles, Nadia Calviño o Salvador Illa de lo que nunca me gustará Alberto Garzón, y prefiero a Martínez Almeida diez millones de veces antes que a Cayetana Álvarez de Toledo. Y podría seguir horas poniendo ejemplos de distintos partidos. No trago a Ábalos, bien que lo siento, ni a Óscar Puente alcalde de Valladolid. O sea, que tengo para todos y para todas, jejejeje.

Creo que se puede tener relaciones cordiales con toda la gente, excepto con los hooligans de estos o de los otros que van siempre como los burros, mirando al frente y soltando el rebuzno a la mínima. Los hooligans son muy perniciosos. Además, es que no lo entiendo, porque si no comes ni vas a comer nunca de la política, carece de sentido ese nivel de "identificación absoluta".

Muy acertada! Puedo entender más o menos definición política, afinidad y simpatía con partidos pero los hooligans de los partidos, para mi es de estudio (mi madre es fanática de un partido concreto, sin raciocinio, sin castigo alguno a la mala gestión, con justificaciones como quien disculpa a un familiar, increíble). Es que conozco gente para quienes un partido es lo mismo que una religión o un equipo de fútbol y no tiene sentido, más con lo variables que son según quienes lo encabecen o el sector que lo domine en el momento...
 
Algo parecido iba a decir...

con tema referido a izquierda o derecha nunca he tenido ningun roce.

En mi caso me veo que, siendo igual o mas catalana que ellos, pero viviendo fuera, no estando sometida al lavado de cerebro, a veces hago comentarios que los indepes se toman fatal...
y no hay manera de hablar tranquilamente. Todo es un ataque.

Que yo soy la primera que reacciona mal a ataques a mi lengua y cultura. Somos una minoria, y debemos conservar nuestra cultura. Pero esa fe infinita en los politicos-trileros es inexplicable.

No me ha costado ninguna amistad. Pero mi madre, por ejemplo, lo lleva fatal. No quiere ver mas alla de Puigdemont y Torra. Se ofende personalmente y me considera una traidora a mi patria. Yo diria que traidor es cualquier voto a corruptos y embusteros...pero no. Traidor es no tragar ;)
es como hablarle a una pared, por mucho que digas que no lo han hecho bien, solo ven ataques, hasta si hablas mal de Pujol te dicen que los otras más ladrones, son fanáticos, yo intento cambiar de tema, pero ni caso, siguen.
 

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