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En la casa de mi ex cada padre y hermano tenía coche propio. Cinco coches en principio. Yo al principio no tenía coche. Cuando me lo compré al poco el vendió el suyo para comprarse una moto que se le antojó, aún así disponía del resto de coches de su familia. Creo que le daba rabia que yo tuviera coche propio y el no.En serio, de verdad, no puedo, no puedo con las cosas que te leo. Por favor, tú te has quitado de encima una maldición gitana de lo menos siete generaciones, pero, ¿cómo podía ser ese cretino tan jodidamente subnormal?.
Una cosa que me llama la atención, el tema de coches, es que veo que a tu ex jaqueca y a la mía le molaban los coches: mi ex cáncer tenía dos, su padre dos, sus dos hermanos dos coches cada uno, algo que nunca entenderé, la pasta que se dejaban en esa familia en coches y garajes. Iban a un sitio con uno, cogían el otro para ir a otro sitio, escuchabas una conversación entre el padre (personaje de mucho cuidado) y mi ex y sus hermanos y era UN PUTÍSIMO MAREO, os lo puedo asegurar "Voy con el coche Javi a ver a los tíos aunque tengo los dos míos en el garaje, tú podrías ir con el coche de Carlos y luego cuando vayas a buscar a Beltane te llevas el tuyo o el Altea que lleva dos semanas sin moverse, pero es que hay que llevar el Citroen al taller que algo le pasó el día que fui a coger el Renault para ir a ver al primo Paco".
Ahí ya no se sabía qué coches poseía cada uno, directamente estaban todos en el mismo taller y ya los mencionaban por sus nombres "hoy cojo el Renault, mañana el Seat y pasado me pillo el Opel".
Sé que esto no tiene que ver con el tema que nos ocupa, pero por favor, tenía ganas de contar lo gilipollas que eran en esa familia con los putos coches y lo que se quejaban de los gastos que tenían pero cada miembro era dueño de dos putos coches menos la madre, que estaba muy harta por cierto del marido y los hijos. Un día se le ocurrió a la mujer coger uno para ir a ver al hermano que se había puesto malo y el pollo que se montó en esa casa fue colosal, porque como mi ex suegra conducía cada año bisiesto porque no le gustaba (pero la obligaron a sacarse el carnet, algo que no entenderé) pues las que se liaban si conducía eran muy muy tremendas.
Si la buena mujer conducía malo, si no lo hacía malo (y se metían con ella), y ahí donde se la veía que cogía el coche de pascuas a ramos nunca tuvo ningún problema, ni le daba miedo ni nada, sin más, no le gustaba, pero cuando lo hacía lo hacía bien. ¿Se adivina por qué le pasaba esto, exacto, mi ex suegro la metió miedo con los coches y he ahí toda la culpa.
Por cierto que a mi me dio la impresión siempre de que mi suegra era una víctima de malos tratos psicológicos por parte de mi ex suegro, luego podía yo entender las venganzas que ella sola se marcaba, porque se pasó media vida puteando al marido. Cuando yo no sabía de qué iba la cosa me daba medio pena por ese hombre, pero cuando le conocí a él y cuanto más la conocía a ella y por las que pasó, me partía el culo, porque con el tiempo tuvo ella la sartén por el mango y empezó a cobrarse todo por lo que la había hecho pasar ese subnormal de marido que tenía.
Con lo de liarlo todo yo no digo que sea necesariamente una actitud tóxica, pero molesta e inexplicable para mí, sí. De verdad poneos en situación. Es un poco exagerada, pero para que entendáis mi punto: Tengo que ir de A a B y existe un bus que va de A a B. Fácil, ¿no? Pues no. Como se enterara, ya empezaba,“mira nena, yo bajo, vamos de A a C en mi coche, en C cogemos un bus para ir a D, donde trabaja mi madre, de ahí nos llevamos su coche porque no sale hasta tarde y te llevo a B”. Lo vuelvo a preguntar, ¿porqué tenía que reliarlo todo tantísimo?, ¿qué tenía de malo mi plan? Pues al final acababa o llegando tarde a todos sitios por su put* culpa (cosa que me daba mucha rabia) o directamente no llegaba porque pasaba algo en medio, nos peleábamos o así y acababa diciéndome “mejor te llevo a tu casa”, y nada, allá que íbamos y mi plan a tomar por culo. Al final cuando tenía/quería ir a algún sitio no se lo decía, se lo decía una vez hubiera pasado o con muy poca antelación para que no pudiera empezar con su maldito lío de caminos y vehículos por el que para ir de Málaga a Sevilla pasaba por Pontevedra.