BODAS: ¿número de cuenta en invitación? ¿las bodas son compromiso para los invitados?

En mi circulo lo normal es lista de bodas en un par de tienda, y ya. Todos nos casamos jovencito y las bodas las pagaron nuestros padres o de otra forma hubiera sido un picnic con platos de papel .
A mi me hizo mucha ilusion abrir los regalos y ver la cosas de mi lista, y desde que me case jamas compro un regalo de boda si no es de lo que han escogido los novios.

Tengo una amiga que la invitaron a una boda
No solo le llego con la invitacion la lista de bodas.. tambien le informaban lo que le habian asignado tenia que regalar.
Mi amiga acababa de llegar de otro pais y no daba credito, y andaba con la invitacion de arriba a abajo preguntando : y esto, es asi aqui siempre? nosotros le deciamos no, esta gente esta drogada
 
Como me alegro de vivir en el extranjero. Si algún día me invitan a alguna boda que no quiero ir, no tengo más que decir que me es imposible ir a España por esas fechas

También tengo suerte de ser poco sociable y tirando a antipática: sólo soy agradable con los que considero mis amigos, que no superan 10 personas en toda mi vida. Del resto los he ido descartando. Hace poco me invitaron a un grupo de wassap de mis antiguos compañeros de clase del instituto. Lo intenté, lo juro. Fui simpática, puse algún que otro comentario, algún que otro emoticono simpático, pero dos semanas después sólo me apetecía enviarles mierdas con ojos. Qué coj*nes hago yo en un grupo de gente que un mes antes me podían haber dicho que alguno se había muerto hacía 10 años y me hubiera dado igual? soy incapaz de sentir interés por gente que no sean amigos que considero de verdad.

De verdad, es un gusto no tener "amigos de la infancia" que no ves nunca, o amigas que se echaron un novio y no te llamaron en 5 años, o compañeros de trabajo que no soportas, a tu alrededor tratándote como una amiga de toda la vida a la que invitar a su boda. Quizá me pase de antisocial, pero lo disfruto.
 
Con una amiga de mi pueblo a la que yo consideraba amiga, hice desplazamiento hasta la capital para asistir a su boda, haciendo gastos varios... Volvi a moverme a la capital para conocer a su primer hijo... Cuando yo quise que conociera al mio, tb me desplaze pero hasta el pueblo que tenemos en comun y tuve que ir yo casi cobrador del frac a la puerta de su casa, la tipa salio a la puerta un minuto para verlo y agur. Al final del tiempo me he dado cuenta de que fui una canela. La excusa de amistad de la infancia viene de put* madre para cubrir huecos vacios en una boda. Me da risa.

Me imagino que a esa amiga la borrarías de la lista de amistades. Chascos con gente son inevitables, sobre todo con los que consideras amigos. Pero un chasco, no más.
 
Como me alegro de vivir en el extranjero. Si algún día me invitan a alguna boda que no quiero ir, no tengo más que decir que me es imposible ir a España por esas fechas

También tengo suerte de ser poco sociable y tirando a antipática: sólo soy agradable con los que considero mis amigos, que no superan 10 personas en toda mi vida. Del resto los he ido descartando. Hace poco me invitaron a un grupo de wassap de mis antiguos compañeros de clase del instituto. Lo intenté, lo juro. Fui simpática, puse algún que otro comentario, algún que otro emoticono simpático, pero dos semanas después sólo me apetecía enviarles mierdas con ojos. Qué coj*nes hago yo en un grupo de gente que un mes antes me podían haber dicho que alguno se había muerto hacía 10 años y me hubiera dado igual? soy incapaz de sentir interés por gente que no sean amigos que considero de verdad.

De verdad, es un gusto no tener "amigos de la infancia" que no ves nunca, o amigas que se echaron un novio y no te llamaron en 5 años, o compañeros de trabajo que no soportas, a tu alrededor tratándote como una amiga de toda la vida a la que invitar a su boda. Quizá me pase de antisocial, pero lo disfruto.

Diossss qué gusto leer este post¡¡¡¡¡¡¡ me identifico 100%
 
Qué lamentable!
Que un día tan bonito sea casi motivo de críticas (con razón) de toda índole con relación a los regalos
Me casé hace poco y en lo personal me vi en la disyuntiva de hacer una lista de regalos o sencillamente invitar nada más.
Al final con mi marido decidimos enviar las invitaciones sin listas de regalos sin nada, con la fecha, hora y dirección de la iglesia.
Casi al final de la misa, se repartió entre todos los asistentes las tarjetas y pulseras para la recepción.
Muchos pensaron que no había recepción, pero de esa forma, dimos la sorpresa.
De esa forma no pusimos a nadie en compromiso de nada.
Pero he de reconocer que si nos enviaron regalos a las direcciones de solteros que los amigos y familias conocieron.
Esos regalos son nuestro tesoro, los apreciamos mucho.
No los esperamos, pero fueron muy bien recibidos.
Ahora leo lo del No. de cuenta y pienso "que mal gusto"
Una boda es cariño, diversión, alegrías.....hay que mantener el orgullo y la dignidad y no pedir dinero ni pretender ser lo que no sé es y peor, presumir con dinero ajeno.
La gente ha perdido el oremus.
 
Qué lamentable!
Que un día tan bonito sea casi motivo de críticas (con razón) de toda índole con relación a los regalos
Me casé hace poco y en lo personal me vi en la disyuntiva de hacer una lista de regalos o sencillamente invitar nada más.
Al final con mi marido decidimos enviar las invitaciones sin listas de regalos sin nada, con la fecha, hora y dirección de la iglesia.
Casi al final de la misa, se repartió entre todos los asistentes las tarjetas y pulseras para la recepción.
Muchos pensaron que no había recepción, pero de esa forma, dimos la sorpresa.
De esa forma no pusimos a nadie en compromiso de nada.
Pero he de reconocer que si nos enviaron regalos a las direcciones de solteros que los amigos y familias conocieron.
Esos regalos son nuestro tesoro, los apreciamos mucho.
No los esperamos, pero fueron muy bien recibidos.
Ahora leo lo del No. de cuenta y pienso "que mal gusto"
Una boda es cariño, diversión, alegrías.....hay que mantener el orgullo y la dignidad y no pedir dinero ni pretender ser lo que no sé es y peor, presumir con dinero ajeno.
La gente ha perdido el oremus.

Es que tu te casaste, y no sólo pensaste en tí, también pensaste en todos los amigos y familiares que invitabas. Lo cual dice mucho de como eres.
Mucha gente (por suerte cada vez menos) se casa pensando SÓLO en ellos. En SU DIA, SU VESTIDO, SUS FOTOS, SUS REGALOS, SU VIAJE DE NOVIOS, su su su....puro egocentrismo pagado por los amigos y familiares. Un asco.

Antes, cuando las bodas eran por la iglesia, el protagonista era dios. Y se les daba dinero y regalos a los novios porque empezaban un hogar. Y digo esto siendo atea perdida, pero era lo único bueno que tenía, que no te tenías que tragar la vida y milagros de los novios.
Ahora, las bodas (da igual si son por la iglesia o por lo civil) te HARTAN a fotos de los novios, a las historietas de como se conocieron, a su canción favorita, a todo su UNIVERSO que se hace infinito....es una sobredosis de YO YO YO YO...buf! y además lo tienes que pagar.
 
Antes, no se casaban pensando en el divorcio.

Tampoco llevaban la tira de años conviviendo, antes de la boda, o de novios modernos de fin de semana y vacaciones.

La gente se casaba joven, porque era su deber, y la gente de su entorno les ayudaba a empezar una vida juntos, con esos regalos y esa fiesta.
 
Antes, no se casaban pensando en el divorcio.

Tampoco llevaban la tira de años conviviendo, antes de la boda, o de novios modernos de fin de semana y vacaciones.

La gente se casaba joven, porque era su deber, y la gente de su entorno les ayudaba a empezar una vida juntos, con esos regalos y esa fiesta.

Por eso ahora las listas de boda no tienen sentido. Antes la gente salía de casa de sus padres para casarse y con la lista de bodas ponían la casa en común. Prácticamente en todas las bodas que yo he asistido los contrayentes ya vivían cierto tiempo juntos y tenían su casa, no tenía sentido ninguno regalarles una tostadora o una plancha.

Yo no soporto esas novias, generalmente son ellas, que quieren una boda por todo lo alto y piensan que son sus invitados quienes tienen que pagarla. Me recuerda a una amiga que organiza unas superfiesta de cumpleaños en un restaurante de lujo y a la hora de pagar la cuenta saca la calculadora y diivide entre los asistentes.

Muy bonito lo que cuentas @ROSA MARIA, y enhorabuena por tu matrimonio.
 
Yo soy antiboda total, me da repelus sólo de pensar que tengo que ir a una, pero, siempre respeto el gusto del que se casa.
¿que quiere dinero? pues se lo ingreso, ¿que no quiere nada? pues nada, regalito y ya está, pero ya digo, siempre que puede me escaqueo.
Lo de la lista es normal si tetienes que poner toda la casa, lógicamente no tienes de nada y todo te viene bien.
Si lleva ya años de convivencia, pues las perrillas no les vienen mal.
Ya digo, no me molesta ni una cosa ni la otra.
Yo no me he casado, ni pienso, y si lo hago no lo sabrá nadie.
Ay, que ahora me tengo que ir a currar, pero cuando vuelva, os cuento la historia del reloj del Michael jackson de mi hermana.
Ya lo he contado aquí, pero es que me lo ponéis a huevo para volver a contarlo.:ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO:
 
Todavía andáis por aquí con lo de las bodas.
Un par de cosas que he visto en las bodas que también me ha sorprendido:
-entregar un sobre con dinero y el nombre pero sin un detalle más, una tarjetita, una nota con unas amables palabras. Niente, el sobre y con billetes viejos. Vi una vez a un matrimonio metiendo unos billetes en sobre y uno de los billetes estaba medio destrozado, de esos que preguntas en la tienda si te lo aceptan. No daba crédito. .
-novios que esa misma noche, en vez de disfrutarla, se han sentado con los padres para contar el dinero y despotricar contra los invitados. La madre de la novia diciendo, vamos a sair perdiendo ...
-invitadas que estaban pasando por una crisis que piden dinero prestado para comprarse ropa cuando tienen que ponerse en el armario. Le ofrecí ropa mía.
- Como se declina una invitación ya no se felicita a los novios, se ignora el acontecimiento. A todas las bodas que me han invitado y a las que no he ido (que no son pocas), he enviado siempre una felicitación y la mayoría de las veces un regalo pequeño. Mientras que en las bodas a las que me han invitado para hacer bolsa y he tenido que ir he regalado lo justo para no quedar mal.
@Mrs. Muir en cuanto a los cumpleaños ya me ha pasado dos veces y lo he escuchado comentar, todo indica que es la próxima moda, el sablazo de cumpleaños. Yo lo viví en una de las variantes más feroces. La cumpleañera había elegido el menú y los vinos por adelantado y el postre era la tarta de cumpleaños. Incluido en el precio. Eso sí, tuvo el detalle de ofrecer pagar si alguien no podía. Claro que lo dijo en voz alta mientras que los camareros andaban por la sala.
 
Es que tu te casaste, y no sólo pensaste en tí, también pensaste en todos los amigos y familiares que invitabas. Lo cual dice mucho de como eres.
Mucha gente (por suerte cada vez menos) se casa pensando SÓLO en ellos. En SU DIA, SU VESTIDO, SUS FOTOS, SUS REGALOS, SU VIAJE DE NOVIOS, su su su....puro egocentrismo pagado por los amigos y familiares. Un asco.

Antes, cuando las bodas eran por la iglesia, el protagonista era dios. Y se les daba dinero y regalos a los novios porque empezaban un hogar. Y digo esto siendo atea perdida, pero era lo único bueno que tenía, que no te tenías que tragar la vida y milagros de los novios.
Ahora, las bodas (da igual si son por la iglesia o por lo civil) te HARTAN a fotos de los novios, a las historietas de como se conocieron, a su canción favorita, a todo su UNIVERSO que se hace infinito....es una sobredosis de YO YO YO YO...buf! y además lo tienes que pagar.

Por eso ahora las listas de boda no tienen sentido. Antes la gente salía de casa de sus padres para casarse y con la lista de bodas ponían la casa en común. Prácticamente en todas las bodas que yo he asistido los contrayentes ya vivían cierto tiempo juntos y tenían su casa, no tenía sentido ninguno regalarles una tostadora o una plancha.

Yo no soporto esas novias, generalmente son ellas, que quieren una boda por todo lo alto y piensan que son sus invitados quienes tienen que pagarla. Me recuerda a una amiga que organiza unas superfiesta de cumpleaños en un restaurante de lujo y a la hora de pagar la cuenta saca la calculadora y diivide entre los asistentes.

Muy bonito lo que cuentas @ROSA MARIA, y enhorabuena por tu matrimonio.


Muchas gracias por tomarse unas palabras para mí.
En serio, pensé que sería una soltera empedernida, pero me llegó y hasta hoy, vamos bien, es difícil la convivencia, pero llevadera cuando hay voluntad de hacer las cosas bien.
Muchas gracias,
 
Todavía andáis por aquí con lo de las bodas.
Un par de cosas que he visto en las bodas que también me ha sorprendido:
-entregar un sobre con dinero y el nombre pero sin un detalle más, una tarjetita, una nota con unas amables palabras. Niente, el sobre y con billetes viejos. Vi una vez a un matrimonio metiendo unos billetes en sobre y uno de los billetes estaba medio destrozado, de esos que preguntas en la tienda si te lo aceptan. No daba crédito. .
-novios que esa misma noche, en vez de disfrutarla, se han sentado con los padres para contar el dinero y despotricar contra los invitados. La madre de la novia diciendo, vamos a sair perdiendo ...
-invitadas que estaban pasando por una crisis que piden dinero prestado para comprarse ropa cuando tienen que ponerse en el armario. Le ofrecí ropa mía.
- Como se declina una invitación ya no se felicita a los novios, se ignora el acontecimiento. A todas las bodas que me han invitado y a las que no he ido (que no son pocas), he enviado siempre una felicitación y la mayoría de las veces un regalo pequeño. Mientras que en las bodas a las que me han invitado para hacer bolsa y he tenido que ir he regalado lo justo para no quedar mal.
@Mrs. Muir en cuanto a los cumpleaños ya me ha pasado dos veces y lo he escuchado comentar, todo indica que es la próxima moda, el sablazo de cumpleaños. Yo lo viví en una de las variantes más feroces. La cumpleañera había elegido el menú y los vinos por adelantado y el postre era la tarta de cumpleaños. Incluido en el precio. Eso sí, tuvo el detalle de ofrecer pagar si alguien no podía. Claro que lo dijo en voz alta mientras que los camareros andaban por la sala.


Qué feo eso de contar el dinero, de los billetes viejos.
Qué mal gusto, pero para todos hay.
 

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