La desesperación es de otro, el duque de la Moncloa, que auto bautizándose de izquierdas pide a la derecha sin ningún rubor que le ayude y le apoyen su investidura, porque no quiere dejar de se presidente, aunque sea en funciones.
Los pactos y coaliciones entre partidos de izquierda y derecha son algo normal en otros países europeos.