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No eres culpable para nada. Él es infantil y se enfada cuando no quiere hablar de algo, lo que pasa que en vez de mostrar cabreo se hace la víctima para dar pena y que quedes tú de mala. Tú no utilizas su enfermedad, es él el que la utiliza. Esta historia me ha recordado a la situación de la forera @CarrieCricket, pero por ser totalmente la contraria. Esta prima sufrió depresión (creo recordar, si no es así me corregís), y tenía un “amigo” que era lo más manipulador e insoportable, era malo también... y cada vez que la prima le decía algo que le molestaba, él saltaba corriendo a dejarla de loca porque claro, “como ha tenido depresión...”. Pues en tu caso es todo lo contrario, es él el que saca su enfermedad y encima te echa la culpa a ti.Hola de nuevo, primas. Soy la prima que habló hace unos días de su historia de "amistad" con su ex; estoy con una cuenta nueva porque la otra me la borraron (aún no sé por qué...).
No sé si os acordaréis, la semana pasada la pasé entera intentando hablar con él un problema con el que topábamos siempre: cada vez que salía a flote algo que necesitaba ser hablado, él desaparecía bajo el pretexto de "no puedo", "me duele demasiado hablarlo", o cualquier otra excusa. Digo excusa porque yo le daba espacio y tiempo y le decía que cuando estuviera listo o más tranquilo lo hablábamos, pero que no podíamos ignorarlo, porque eso no era sano y también me dolía mucho a mí. Por primera vez en mi vida creo que puse límites y le dije que no podía huir siempre que se le pedía algún tipo de responsabilidad o se le decía algo que no iba bien. Obviamente a él eso no le pareció buena solución.
En fin, al final la cosa escaló. Empezó a reprocharme cosas, que siguiéramos con la conversación cuando me había dicho que paráramos (y cuando era él quien seguía hablando y hablando). Me dijo, literalmente, que cada vez que hablábamos de eso tenía ganas de abrir la ventana y saltar. Volvió a repetirme lo del su***dio con tono recriminatorio y ahí fue cuando yo me puse seria al fin y me harté. Le dije que no iba a permitir eso, que ya me lo habían hecho antes y que no era justo.
¿Su respuesta? Decirme que sabía muy bien lo que estaba intentando, que le estaba acusando de usar su enfermedad para chantajearme emocionalmente y que no iba a tolerar eso. Que antes pensaba que yo era muchísimo mejor persona que él, pero que después de esto ya no. Que ya no me vería nunca más igual, que no se iba a olvidar nunca de esto, y que no íbamos a hablar nunca más. Yo, porque soy idiota, aun le contesté y le dije que seguramente no era esa su intención (culpabilizarme, aunque ya no lo sé), y podría haberme expresado lo mal que se sentía de otra forma.
Desde entonces (4 días) no sé nada de él. Pasamos de hablar a diario y de decirme horas antes que no se me olvidara nunca que me quiere muchísimo, a este desprecio y este sentimiento de culpabilidad con el que me he quedado. Solo tengo ganas de llorar, hoy me costó horrores salir de la cama. No sé por qué me hace esto. ¿Tendrá algo que ver con que al final me pusiera firme e intentara marcar un límite?
No sé, a veces creo que se está dando cuenta de que estoy viendo la persona que es, y no le intereso ya en su vida. Mi cerebro está dividido en dos (la parte que empatiza y echa de menos y la que aún se tiene un poco de respeto) y es como un pulso con el que no puedo más... No sé por qué actúa así pero creo que nunca había llorado tanto y tanto en mi vida. Me siento hasta culpable de sus pensamientos suicidas, si es que se fue dejándome bien claro que soy una persona horrible.