Quien se atribuye lo que no le pertenece se expone a verse despojado en el momento menos pensado. Este refrán se aplica también a los jactanciosos que presumen de méritos que no poseen.
AL QUE NO ESTÁ HECHO A BRAGAS, LAS COSTURAS LE HACEN LLAGAS
Quien no está familiarizado a refinamientos ni lujos no sabe apreciarlos e, incluso, llegan a molestarle los detalles más insignificantes. En un sentido más amplio, este refrán alude a la repugnancia y dificultad de quien no está acostumbrado a algunas cosas ni enseñado para hacerlo y se queja por ello.