Nuevo libro sobre Guillermo y Harry: "Batalla de hermanos" de Robert Lacey

Aqui hay mucho material que (siempre les escacea) para que las adordoras del duo dinamico Chuchex traten de justificar el comportamiento de Saint MeMa de la tiara, esa buena mujer que solo queria servir a la monarquia ? :ROFLMAO: y su consorte, ambos seguidores a rajatablas del protocolo solo eran victimas de la ira del malvado Willian y salieron despavoridos "buscando la libertad", lo que habra que leer:rolleyes:.
No sera esto es la secuela de esa ridiculez de "Fiding Freedon"?

:love::love::love::ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO: Querida prima, me has hecho el día imaginándome a las MeMa fans (y a MeMa) felices con el librito!!! Pobrecitas, tienen tan pocas y raras satisfacciones;).
Así me las imaginé:sneaky: :

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Intentan hundir a William y el que sale peor parado siempre es Harry. Lo dejan de inútil, de torpe, de ignorante, además de vicioso.

Yo estoy segura de que éste libro intenta dejar mal en general a la monarquía sin nombrar a la reina, y que como siempre, al que destapan es a Harry. Justo lo contrario de lo que pretenden.


Si, yo creo que esto directamente es disparar para "matar", es muy sucio. Si es cierto que ellos están detrás de esto (lo cual no sé, habrá que ver) es muy rastrero. Y además, no creo que les funcione porque por ahí aún no se han metido en la cabeza de que si alguno de los dos es rey será William, y que el otro puede ser el chico de la fiesta, pero el nombre que va a quedar en el libro de historia es el de su hermano, justa o injustamente. Eso si para aquella sigue la Monarquía. Si no es así, no estará ninguno de los dos.

Harry podría haber tenido la mejor vida de los dos con diferencia, es mas, aún puede tener la mejor vida de los dos. Si hubiese aprovechado las innumerables ventajas de su puesto, podría tener un trabajo muy bien remunerado -contactos para colocarlo no le iban a faltar- unos estudios mejores o peores pero estudios al fin y al cabo, una vida privada o semi-privada y seguiría gozando de una vida privilegiada. Además, estoy segura de que si realmente hubiese querido tener privacidad absoluta y desvincularse de las tareas reales y lo hubiese hecho bien y con respeto, nadie lo criticaría y estaría ahora en un país exótico viviendo a cuerpo de Rey, mejor que el hermano. Lo que hace la envidia y la soberbia.
 
Buhuuu, ahora resulta que William es el culpable, que tontería, los hermanos mayores no tienen la culpa de el desenvolvimiento de los menores. En el caso del traumado de Harry fué que lo mimaron demasiado le permitieron todo por ser el pobre bebe sin mamá, Harry no tiene sentido común porque no se lo inculcaron y lo que se ha revelado de él en los últimos meses es que siempre fue un resentido por ser el segundón.


ESto justamente pienso yo, por eso ahora como no tiene todo lo que quiere le echa la culpa a los demás, porque siempre se lo dieron todo hecho. Igual que al hermano si, pero al menos el hermano parece que lo entiende. Esto creo que también es un llamado de atención para la familia porque al final ellos lo consintieron y lo taparon y ahora está tan crecido que incluso carga en contra de ellos. A ver si William aprende y no hace lo mismo con los hijos.
 
El autor del libro le echa la culpa a William de que Harry fuera drogadicto y alcoholico, ¡hasta del traje nazi!
creo que tiene toda la razón, de seguro William le compro el traje y le dijo que era buena idea usarlo:rolleyes:o_O *sarcasmo*
 
Este libro es más de lo mismo, todo el mundo hace todo y son muy malos, mal menos H&M que son perfectos y lo hacen todo maravillosamente bien.
Un hermano, aunque sea mayor, no puede ser responsable de las acciones de un hermano pequeño, para eso están los padres.
 
Reafirmo que Harry siempre fue un lastre para William, esta bien apoyar al hermano, pero cuando el hermano ya tiene 20, 25, 30 y sigue dandote dolores de cabeza, si hasta cuando William estaba de novio con Kste y después de casados, era el 3ro en ese matrimonio, yo creo que Kate ya tenía pensado en adoptarlo y que fuese hermanito de Geroge hasta que apareció Mema y se lo llevó.
Oye es que William lo abandonaba! es más, debieron llevárselo a la luna de miel con ellos, ¿como se les ocurrió dejar al niño solo?! *sarcasmo*
Saludos afectuosos @Rayen
 
El libro me da dos confirmaciones: William tiene genio y Harry es un ser humano deplorable.

Que William no es perfecto, es humano ya lo suponía, que Harry tenia la expectativa de que todos se volcán a sí ad nauseam desconocía, hasta su hermano que era también nada más ni menos que un adolescente como el .

En un futuro muy próximo si Harry hace algún error, ya doy por seguro que va culpar sus sobrinos porque no le llaman, o lo que sea…

Siempre tuve una pena infinita de no tener hermanos, pero si era para tener un toxico, ególatra así, me doy todas las gracias al cielo !
No tienes hermanos pero tienes cotis ❤
 
El libro es todo lo contrario que dice el Daily Mail que esta echando leña al fuego.

Deja al nivel del betun a los Sussex. Pero bien mal y el autor tiene los mejores contactos porque fue el que aconsejo a Netflix en la serie The Crown. Conoce bien la Casa Windsor y al personal que trabaja alli. Dice que a los Sussex se le dio todas las facilidades desde el principio y que Harry simplemente todo se lo toma como una afrenta personal, incluso cuando querian ser royals a tiempo parcial se les iba a dejar hacerlo, que vivieran en Canada y viajaran representando a la Commonwealth, pero por impacientes, soberbios y egocentricos, rompieron la baraja. A ella la pinta como alguien que no entiende donde se ha metido y cual es su cometido. Pensaba que estaba reinventando la rueda y la cagaba cada 2x3.

De este libro no se recuperan. Ya se que sois todas haters de los Sussex pero leer antes el libro primero de poneros rabiosas.
 
Qué casualidad que el autor del libro trabaje para Netflix y ponga de mártir a Harry, no???
Ésto es un suma y sigue para dejar de malo a William, cosa que no van a conseguir en cuanto todos sepan que su autor trabaja para los mismos que los sussex.

Y éso de que "William dejó solo a Harry cuando el escándalo de las drogas y alcohol, viene de boca del mismo Harry.

Si siguen así, los sussex se irán ridiculizando cada vez más, porque reclaman una protección que no era obligatoria. Como si solo ellos fueran merecedores de un continuo cuidado y el resto no merecieran nada.

Aquí se olvidan que William también era un niño cuando murió su madre. Parece que él no tenía derecho a sufrir...
Quién debería estar "traumado", enojado, decepcionado con todos los eventos de la separación de sus padres, la reacción de la familia, la muerte de su madre sería William, pero el siguió adelante y a formado una hermosa y sólida familia. Don petas y señora son unos resentidos mimados
 
Yo me pregunto, alguien se ha detenido a pensar que William tiene 1 año y 9 meses más que Henry? Ahí lo dejo, a ver si espabilan. Uno tiene 38 años cumplidos en junio y el otro 36 cumplidos en setiembre.
Te puedo entender si se llevaran 10 años, pero con tan poca diferencia es insólito culparlo de los errores.

No puedo estar más de acuerdo contigo
 
De El Pais que lo cuenta mejor

Guillermo y Enrique de Inglaterra, dos hermanos enfrentados y una monarquía rota
El nuevo libro del historiador Robert Lacey desvela algunos de los motivos de la salida de los duques de Sussex de la familia real y sus múltiples enfrentamientos con Isabel II
De izquierda a derecha, Isabel II, Meghan Markle, Enrique y Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton, en un balcón del palacio de Buckingham, Londres, en julio de 2018.
De izquierda a derecha, Isabel II, Meghan Markle, Enrique y Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton, en un balcón del palacio de Buckingham, Londres, en julio de 2018.Max Mumby/Indigo /
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María Porcel
Madrid - 05 oct 2020 - 00:30 CEST
“Un análisis forense”. Es decir: la disección en profundidad de algo ya muerto. Con tales palabras describe la prensa británica la inminente y, como ya es habitual en los últimos tiempos, explosiva biografía de Guillermo y Enrique de Inglaterra. Battle of Brothers (literalmente “Batalla de hermanos”) es el nuevo libro que expone las diferencias, abundantes y profundas, entre los hijos de Carlos y Diana de Gales. Su autor es una fuente fiable, dentro de toda la maraña de biógrafos y cortesanos de los Windsor: Robert Lacey, autor y consultor en la serie The Crown.
La obra saldrá a la luz el 15 de octubre, pero la prensa británica ya se ha hecho con jugosos extractos. Pasajes que, esta vez, ponen en entredicho la versión de Enrique y Meghan Markle, en lo que se ve como un golpe de efecto contra Meghan y Harry: en libertad, la biografía supuestamente no autorizada de los Sussex que se lanzó en agosto.

La pareja no sale precisamente bien parada en esta obra, en la que Lacey llega a afirmar que Isabel II les calificaba de “erráticos e impulsivos”. Y eso es solo el principio: batallas entre hermanos, frialdad entre las cuñadas, enfados por parte de Carlos e Isabel II, asistentes de palacio implicados en sus problemas, el pequeño Archie como moneda de cambio, el trabajo de Markle puesto en duda, millones de libras esterlinas en juego... Más de 400 páginas calificadas por la prensa británica de “incisivas”, “de lectura compulsiva” y “de una profundidad y visión únicas”.
Las ricas fuentes de Lacey dejan clara una cosa: que el título del libro es definitorio. La batalla de hermanos se fraguó entre Guillermo y Enrique cuando, en otoño de 2016, el pequeño le presentó al mayor a Markle. Y no como una novia más, sino como la mujer con la que quería casarse, tras apenas unos meses saliendo. Pese a que Isabel II y el príncipe Carlos la aceptaron, el primogénito nunca lo tuvo claro.
Lejos de esa falsa batalla femenina que algunos quisieron ver, Kate Middleton no fue un problema: no es que ella y Markle fueran íntimas, pero eran trabajadoras, venían de otros mundos. Encajaban, había material. Pero Guillermo no entendía por qué él tuvo que esperar 10 años y su hermano no, no veía la prisa. Enrique se enfadó: veía un boicot de su hermano a su felicidad. El mayor trató de hacerle entrar en razón con una figura común: su tío Charles, el conde Spencer, hermano de Diana y un mentor para ambos. Pero aquello solo logró que Enrique se enfadara más todavía. Una división que con el tiempo también se convirtió en física, de oficinas, fundaciones e incluso viviendas.
La portada de 'Battle of Brothers', el libro de Robert Lacey.
La portada de 'Battle of Brothers', el libro de Robert Lacey.

Tras la boda llegaron los recelos de palacio hacia la pareja. No gustaron sus movimientos comerciales en la forma de gestionar su marca Sussex Royal, que se vio como un mercadeo con la corona. Porque una cosa es ginebra, galletas, paños de cocina o calendarios, pero otra son sesiones de coaching o mentorías. La reina, furiosa, fue la primera en oponerse, según desvela el Daily Mail en los adelantos publicados.

Las declaraciones y actos de la ya exduquesa tampoco se vieron bien entre los Windsor, siempre discretos, al borde a veces de la frialdad: como su entrevista a una única cadena de televisión en Sudáfrica, donde se mostró llorosa y dio las gracias al reportero por preguntarle cómo estaba. También en ese viaje demandaron a varios medios, sin informar a la muy enfadada familia real. Y por supuesto el número de Vogue que coordinó en septiembre de 2019, que no era igual que los que en su día protagonizaron Kate Middleton o Diana de Gales: era político, estaba lleno de entrevistas con trasfondo, y en su portada primaban las mujeres activistas y con mensaje. Tampoco gustaron mucho las declaraciones de la entonces duquesa sobre lo mucho que había trabajado en la publicación, siete meses, cuando en ese tiempo había llevado a cabo solo 22 actos oficiales. Como bien dice Lacey: “Dinero, poder y supervivencia eran los elementos fundamentales de la realeza, y eran demasiado importantes como para estar amenazados por unas cuantas tendencias controvertidas en una revista de brillante portada”.
La portada del número de septiembre de 2019 de 'Vogue UK' coordinado por Meghan Markle.
La portada del número de septiembre de 2019 de 'Vogue UK' coordinado por Meghan Markle.
El autor también desmenuza la salida de Enrique y Meghan de la familia real británica. Parecía claro que la pareja quería pasar tiempo fuera del país, e Isabel II incluso planteó que se marcharan unos años a Sudáfrica, una salida que le recordaba a su estancia en Malta antes de reinar.
Todo empezó cuando decidieron descansar unas semanas en Canadá. No habían ido a Balmoral en verano ni irían a Sandringham en invierno, pero la familia se lo tomó bien. También el paso más allá que, sin ser fácil, entonces decidieron dar: rebajar su nivel como miembros de la casa real, pero jamás marcharse. Su idea era asentarse en Canadá, hacer buena parte de su trabajo en ese país y también viajar, como una especie de embajadores en la Commonwealth pero volviendo a menudo al Reino Unido, aunque con menos presión política, real y mediática. Y así depender menos de las arcas británicas.

Todo saltó por los aires en Navidad. Cada detalle cuenta, y a Enrique le dolió que Isabel II no pusiera su foto, ni la de su hijo, en la mesa de su discurso anual. También le molestó la sesión de fotos navideña de la soberana y sus herederos. Lo que para algunos era pura lógica, con las imágenes de los descendientes directos en la sucesión al trono, para ellos fue una afrenta. El 6 de enero decidieron regresar a su país y plantear una cita para cerrar los detalles de ese paso atrás con la reina y el príncipe Carlos. Pero resultó que ambos tenían la agenda muy ocupada: no les daban cita hasta finales de mes.

Ese gesto fue el definitivo. En cuestión de horas tomaron la decisión de irse, pero ya sin regresar. La negociación pilló por sorpresa a Isabel II, Carlos y Guillermo, que en pocas horas decidieron reunirse, ya sin problemas de tiempo. Pero era demasiado tarde. Aquello acabó, cuenta el autor, en un durísimo tira y afloja contractual del que hubo que pautar cada punto. Y tras el que la imagen de Enrique tendrá muy difícil recuperarse.
 
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