Es que a mucha gente que le gusta ir a la oficina a trabajar es precisamente para "no trabajar" y estar de cotilleo con unas y con otros, salir al café, al cigarro, otra vez chismorreo y ya se me hace la hora de irme.¿Os acordáis de que mi maravilloso jefe decía que en casa la productividad bajaba un 20%?
Bueno, pues hoy ha dicho que desde que estamos en la oficina y no paramos de entretenernos entre nosotros, la productividad ha vuelto a bajar.
PERO SEÑOR EN QUÉ QUEDAMOS.